Ya se acercaban las fechas, si, aquellas fechas donde vendría lo más esperado por las Kiss Me de América Latina, en dónde los chicos realizarían su primera gira por los países de Perú, Colombia y México ¡Sí! era definitivo sería la mejor experiencia para las Kiss Me afortunadas que podrían asistir a este gran evento que se haría presente en…tan pocos días…
Los planes ya se encontraban armados, los chicos cantarían en español, harían bailes sexys y en su mayor parte, se comunicarían con las y los Kiss Me en español ¿Qué más se podía pedir?
Los chicos ya comenzaban a sentir la emoción por aquel viaje, se encontraban alistando sus maletas, despidiéndose de sus seres queridos y arreglando los últimos detalles ya listos para emprender este nuevo viaje, a un nuevo ambiente…
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~Días después~
Afortunadamente el viaje salió bien ¡Los chicos ya se encontraban en América Latina! La emoción que sentían era incomparable además que, el día siguiente sería su primera presentación, su primer concierto, quizás en un país que ya habían conocido el año pasado, pero eso no cambiaba la emoción y los nervios que comenzaban a tener. La llegada al hotel fue fácil, las habitaciones ya se encontraban separadas en los tres países además que fueron muy bien recibidos, pero eso no cambiaba el hecho de que se encontraran agotados por tan largo viaje; en las habitaciones de la gira quedaron distribuidos de la siguiente manera:
En la primera habitación quedaron Kiseop y Kevin, de esos dos ya se conocía lo ‘’cercanos’’ que eran, así que ¿Para qué negarles el gusto? En la segunda quedaron los tres raperos Eli, AJ y Dongho, y por último en la tercera Soohyun y Hoon, otros que al parecer también eran ‘’cercanos’’ pero que todavía no hacían muy público que tan cercanos eran a diferencia de lo que ya era conocido como el VinSeop.
Ya cada grupo en su habitación prosiguieron a desempacar y organizarse un poco:
- ¡Aigo! Esto de acostumbrase a un nuevo lugar después de cada viaje es difícil -. Dijo el joven Kevin, un chico castaño de piel blanca, suave y tersa como la seda, ojos alargados y delicados escondidos bajo unas cejas de un tono más oscuro que el de sus cabellos con unos labios de entre los cuales se echaban de ver como cada una de las perlas blancas de sus dientes que resaltaban aquella sonrisa tan pura que volvía loco al joven al que en esos momentos dirigió la anterior frase.
- Lo sé, pero después de tantos años creo que ya me he acostumbrado-. Le respondió el compañero de habitación del joven castaño esbozando una pequeña sonrisa al mismo tiempo que se le iluminaban los ojos como cada vez que sonreía, aquella sonrisa entre un tanto tímida y sencilla con la que siempre acostumbraba responder considerando que no hablaba mucho o al menos en el exterior siempre se mostraba como un chico un tanto callado y tímido, pero que en realidad era alguien cálido y que sabía escuchar a la gente.
- Jum tienes razón, además lo mejor de todo esto es que me ha tocado contigo-. Replico Kevin abrazando por detrás a su compañero de cabello negro, haciendo que este tomara un tono rosado y cálido en sus mejillas para después así agarrar aquellas manos delicadas que lo rodeaban y acercarlas a sus labios para besarlas.
- ¡HEY!~ ¡Chicos…!- Se escuchó tras el sonido de la puerta que se abría de golpe. - ¡Hay mucha América Latina por conocer y muy poco tiempo!-. Era AJ, que entraba con aquella alegría que lo caracterizaba, haciendo que la pareja se distanciara por el impacto de la puerta.
- ¡AJ! Parece que aún no te han enseñado a tocar antes de entrar...- Dijo el castaño con una pequeña sonrisa mientras recuperaba un poco la calma y retomaba el contacto con Kiseop pero esta vez solo recargando su mentón sobre el hombro.
- ¡Ya!~ ¡Ya!~ Ya habrá momentos después para que tengan sus momentos cursis, por ahora… ¡Vamos a disfrutar! ¿Shim? –Dijo AJ dibujando en sus labios una de esas pequeñas sonrisas de gato que hacían que cualquiera dijera que si a lo que pidiera.
- Va~ Pero primero organízate, acomoda tus cosas y en un rato estaremos ya en la sala esperándote para salir-. Le respondió el joven de cabello negro volviendo a agarrar las manos delgadas y finas del castaño y rodeándose entre ellas por su cintura.
- ¡Si!~ Pero más les vale que sea verdad…-Dijo el rubio saliendo lentamente de espaldas por la misma puerta que hacía unos minutos había abierto con tanta fuerza, y señalándolos con dos dedos y una mirada de sospecha acompañada de una sonrisa juguetona.- Los estoy vigilando- Agrego para ya cerrar la puerta totalmente.
- Y… ¿Entonces en qué nos quedamos?-. Dijo Kevin después de unos minutos de haber sido cerrada la puerta.
- En que tú me ibas a regalar un beso…-. Dijo Kiseop volteando y agarrándolo suavemente del mentón quedando con la frente unida a la de su compañero y comenzando a repartir pequeños besos por su rostro, empezando por su frente pasando por sus mejillas acercándose lentamente a la punta de la nariz y depositando lentamente otro beso en la punta de esta y por consiguiente ir bajando un poco su cabeza y quedando a unos mínimos centímetros de los labios de su compañero el cual simplemente disfrutaba de aquellas caricias que le brindaban con aquellos labios tan suaves y dulces, los mínimos centímetros en pocos segundos se convirtieron en centímetro, después en milímetros y por ultimo lo único que los separaba era la respiración un poco agitada del joven castaño el cual comenzaba a anhelar los labios de su compañero, quien en menos de unos cuantos segundos ya se encontraba con su fin, depositando finalmente un beso suave, lento y cálido en aquellos labios dispuestos a recibir ese beso tan esperado, respondiendo al beso y saboreando cada milímetro de ellos; ambos querían proseguir con aquel beso, entrelazar su lenguas y que su sabor se volviera uno pero, lastimosamente ambos sabían que si proseguían ambos no podrían controlarse a lo cual el mayor ya se estaba adelantando, pasando aquellas caricias con sus labios por la línea de su mandíbula y prosiguiendo a su cuello haciendo que el castaño se estremeciera al sentir sus labios en uno de esos puntos tan sensibles…
- ¡AJ!-. Dijo el castaño haciendo que Kiseop se separara rápidamente y se le quedara viendo un poco asombrado. – Le prometiste que iríamos con él…-. Agrego, haciendo que su compañero recapacitara y agachara su mirada acompañado de una pequeña lamida de labios.
- Esta bien, pero me quedas debiendo algo- Respondió el joven de cabello negro volviendo a levantar la cabeza y mirar a su compañero con unos ojos y sonrisa picaronas.
- Todo lo que quieras-. Dijo Kevin correspondiendo también con una mirada picarona y empinándose un poco para alcanzar su frente y depositar un beso suave. – Ahora, vámonos que AJ ya nos debe estar esperando.
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Era hoy ya el tan primer esperado primer concierto de la gira, los chicos tenían nervios de punta y faltaban ya unos cuantos minutos para que comenzara la presentación, Kiseop tenía agarrado de la mano a Kevin y estos simplemente podían sentir la tensión que se trasmitían uno al otro…
-¡Ya salgan ya!- Se escuchó decir para los chicos. Los cuales prosiguieron.
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Toda la presentación fue un éxito, y se realizó lo planeado a la perfección, el hecho de hablar en español volvía loca a las Kiss Me, Dear my friend en español y los bailes sexys fueron el ¡Boom! De la presentación, especialmente los bailes sexys ya que Hoon se levantó la camisa y Kiseop cogió una rosa y la regalo a una Kiss Me del público. De hecho, todas las presentaciones en cada uno de los países fueron perfectas a su modo ¿A su modo? Si, a su modo, ya que cada uno de los integrantes tuvo su experiencia especial en cada país, en este caso Kiseop y Kevin en Colombia. El día del concierto en Bogotá los chicos realizaban el concierto como se tenía planeado, hasta que llegó el momento de los bailes sexys, cada uno realizo lo que tenía planeado hasta que llegó el turno de Kiseop el cual dejo con la boca abierta a las Kiss Me cuando se tiró al piso y comenzó a mover la pelvis de esa forma tan sexy que lo sabía hacer, haciéndolo el ganador por segunda vez como el más sexy del grupo, esa noche prácticamente había violado todo, el piso, los bafles hasta a…Kevin…
’’Mi chico me debe algo’’ pensó cuando salieron del escenario finalmente; todos los integrantes pasaron a los camerinos se limpiaron el sudor y prosiguieron a cambiarse rápidamente dirigiéndose a las camionetas y partiendo al hotel, la primera de las camionetas que salió llevaba a Kevin, Soohyun y Dongho mientras que la otra quedaron el resto de los integrantes, el camino no fue muy largo pero si se encontraron con un poco de congestión en las vías, así que las dos camionetas se distanciaron atrasando la que llevaba a AJ, Eli, Hoon y Kiseop.
Cuando Kiseop por fin llego a la habitación, simplemente abrió la puerta y se encontró con todo apagado ‘’Kevin ya debe estar dormido’’ pensó para sí, pero esto no era así, cuando se escuchó la puerta cerrase, una luz se encendió a espaldas del joven de cabello negro y se encontró con una figura muy particular que simplemente hizo saltar de alegría el corazón del joven ¡Era Kevin!...
- ¡Mi sexy bailarín!~ Felicidades por tu segunda victoria-. Se escuchó decir por el castaño quien se encontraba sentado en una silla cercana a la puerta de entrada.
- …-Kiseop se limitó a decir algo cuando ya había agarrado al menor y se encontraba a centímetros de su amante agarrado por la cintura y besándole con tanta fuerza que este a duras penas podía respirar sintiendo como las manos de este lo invadían y rápidamente le iban sacando la camisa metida entre los pantalones, un frío le recorrió el cuerpo cuando sintió las manos frías del joven peli negro acariciar su espalda explorando cada centímetro meticulosamente y delicadamente como si fuera la figura más valiosa de este mundo, en pocos minutos aquellas manos que acariciaban la espalda del castaño pasaron a desabrochar el cinturón los botones de la camisa mientras el beso continuaba con tanta pasión como si fuera la primera vez en tanto tiempo que no hubieran tenido la oportunidad de saborear los labios de cada uno, el castaño en medio de su emoción quería también comenzar a desbrochar los botones de la camisa de su compañero, lo cual le fue imposible ya que cuando este iba a realizar su jugada sintió como rápidamente fue empujado a una mesa alrededor de unos 60cm de alta cercana a la silla de donde se encontraban parados, la mesa estaba fría pero este no lo sintió debido a que aún tenía la espalda cubierta por la camisa que aún no le había sido quitada del todo, los besos del peli negro embistieron con más fuerza al castaño, pero esta vez no fue solo en sus labios sino que comenzó a bajar rápidamente por su cuello el cual mordía y lamía haciendo que la respiración del menor se agitara aún más y a duras penas intentara no soltar algún gemido, el peli negro al ver que sus besos no lo hacía gritar aun, siguió bajando con la misma intensidad, mordidas y lamidas por su cuello, lamiendo sus clavículas para después llegar a sus pezones los cuales comenzó a lamer y saborear escuchando los primeros gemidos de sus compañero que al sentir las mordidas arqueo la espalda y llevo una de sus manos a la espalda del peli negro rasguñándolo un poco.
La danza con la lengua traviesa del peli negro prosiguió hasta que llego al abdomen del menor llegando hasta el pantalón de este y desabrochándolo y bajándole la cremallera con la boca encontrándose con el miembro ya despierto del castaño. – Te dije que me habías quedado debiendo algo-. Respondió por fin el peli negro mirando fijamente el rostro bellamente dibujado de su compañero con las mejillas ya rodeadas de un color rosado y soltando uno que otro gemido pequeño entre su respiración agitada.
El menor se limitó de responder mientras que Kiseop siguió con su juego acariciando cada parte del cuerpo del castaño apretando con una de sus manos uno de los pezones y con la otra pasándola de arriba abajo por el resto de su pecho mientras daba unas ultimas lamidas y besos por los alrededores del abdomen del menor, hasta que le comenzó a bajar los pantalones y ropa interior al mismo tiempo, dejando ver el miembro despierto que no había sido posible visualizar complemente debido a las prendas que impedían lamer con más comodidad, este por fin sintió el frío de la mesa, lo cual hizo que se estremeciera aún más y volviera a arquear la espada, la desesperación lo comenzaba a invadir, anhelaba tener ya a Kiseop dentro suyo, de poder sentir entrar y salir de él al mismo tiempo que sentir como se venía dentro de él, su miembro estaba completamente duro y caliente en espera de alguna caricia u atención por parte del peli negro…
- Tócame-. Se escuchó decir por el castaño mientras se le terminaban de arrebatar los pantalones.
Solo basto que el castaño dijera eso para que el mayor comenzara a embestir el miembro de este, primero con una mano para después comenzar a lamer la extensión que se le presentaba llegando a la punta y por consiguiente adentrando gran parte del miembro en su boca, saboreando y examinando con su lengua cada milímetro del miembro del castaño, el cual simplemente ya no podía controlarse y gritaba sin piedad moviendo y arqueando su espalda por las caricias tanto como de las manos como de la boca del peli negro, no sabía cuánto más podría resistir hasta que de un momento a otro dejo de sentir las apasionadas caricias pero que a cambio de eso recibió de nuevo un pequeño estilo de empujón o acomode, dejándolo boca abajo, sintiendo el frio de la mesa y viendo como la mesa se empañaba con su respiración agitada, mientras se le era terminada de quitar la camisa.
Todo esto, era un completo deleite para el mayor el cual rápidamente se deshizo de sus pantalones y ropa interior dejando su miembro completamente duro y caliente ya dispuesto a meterse en la entrada que se mostraba ante él, la camisa en este hombre salió aún más rápido que sus pantalones dejándolo por fin completamente al desnudo igual que el castaño, que se encontraba moviendo un poco sus caderas en espera de algún contacto por su compañero, no sabía cuánto más podría aguantar teniendo en cuenta que la posición en la que ahora había quedado hacía que su miembro rosara un poco con la mesa…
- ¡Métemelo de una buena vez ya! -. Dijo el castaño con el corazón a mil y sin saber cuánto más resistiría sin poder tener al peli negro dentro de él.
El peli negro a pesar de querer metérselo con todas las fuerzas que tuviera en esos momentos, se contuvo y callo rápidamente al castaño metiéndole tres de los dedos en la boca los cuales no duraron mucho tiempo cuando ya estaba el primero en su entrada, abriéndose espacio entrando y saliendo pasando rápidamente a un segundo dedo y haciendo unas tijeras dentro. El castaño gritaba y se comenzaba a desesperar, no quería más de los dedos del peli negro, lo quería todo de él, sus miembro, su esencia, sentir como se venía dentro de él y como llegaban juntos al éxtasis; así que comenzó a mover sus caderas hacia adelante y hacia atrás en señal de que quería más, el mayor se contenía con todas su fuerzas, no quería hacerle daño, pero ya al meterle el tercer dedo y ver como este se movía en ellos comenzó a masturbarse, haciendo que comenzara a mover los dedos al mismo ritmo que las caderas del castaño; los gemidos se comenzaron a escuchar por ambos, hasta que el peli negro comenzó a sentir que la entrada del castaño estaba completamente dilatada, por lo que saco rápidamente los dedos y prosiguió a meterle con todas las fuerzas del mundo su miembro, haciendo que el castaño se arqueara y quedara recargado sobre sus antebrazos al mismo tiempo que se le dibujaba una sonrisa de placer y comenzaba a moverse con aun más fuerza y rapidez, volviendo loco al mayor y moviendo sus caderas mientras lo sostenía de estas, las estocadas subían y subían de ritmo casi al mismo tiempo que las palpitaciones de sus corazones. El peli negro sentía como la tensión seguían subiendo así que prosiguió a coger el miembro del castaño y comenzarlo a masturbar con tanta fuerza que veía como se desesperaba de la excitación que tenía en esos momentos rasguñando la mesa y mordiendo la camisa que hacía un rato se le había sido arrebatada, los gemidos no paraban en la habitación y las estocadas cada vez se volvían más cortas y rápidas, hasta que por fin Kiseop dejo expulsar su esencia dentro de Kevin, mientras que este por otro lado se vino al mismo tiempo cayendo completamente rendido en la mesa y Kiseop también cayendo sobre su espalda, con el corazón tan agitado peor que como si hubieran corrido una media maratón, sus respiraciones eran incontrolables pero un cierto alivio y éxtasis esquicito les invadió todo el cuerpo, relajando cada centímetro de sus cuerpos los cuales hacía unos momentos se encontraban tan tensionados.
Segundos después cuando por fin recuperaron un poco la fuerza, Kiseop salió de Kevin dejando salir unas cuantas gotas de su esencia y haciendo que el castaño soltara un pequeño gemido casi inescuchable por el peli negro quien paso sus manos por alrededor de la cintura del menor y lo halo hacía el piso, quedando los dos abrazados, uno abrazando al otro por la espalda y aprovechando que el suelo era de alfombra y la calefacción había quedado encendida, ambos quedaron dormidos en un sueño profundo con las respiraciones ya un poco más calmadas, soltando uno que otro suspiro mientras se encontraban disfrutando del éxtasis, el sueño y la alegría de por fin haber dejado saldado lo prometido.