Los amigos son algo con lo que supones siempre podrás contar, con los que puedes estar triste o feliz pero siempre estarán contigo, apoyándote, llorando o simplemente estando al lado tuyo. Y no es que lo exijas porque no es un contrato donde las partes se comprometen a algo, solo nace de forma natural, una conexión que no puede explicarse y antes de que te des cuenta sucede.
¿Pero cómo dar el primer paso? Como hace una persona para pasar a ser de un completo desconocido a alguien tan importante en tu vida que llegas a dar por segura que nunca te hará falta? Por qué siempre hay un primer paso para todo, sea bueno o malo, siempre es ese primer paso el que determinara que es lo que sigue, y cuyas consecuencias formaran parte de lo que llamamos vida.
Tenía alrededor de 8 años. Una edad inocente donde lo principal era jugar y divertirse. Para nada. Era aburrido, todo era tan aburrido que creí que podía morir en ese instante y no le afectaría en lo más mínimo, las clases eran aburridas. Sus compañeros no lo entretenían para nada y mucho menos su maestra que estaba hace horas hablando de algo a lo que suponía debía poner atención y ni hablar de su mejor amigo, él estaba sentado al otro lado del salón, nada podía ser peor que eso.
Kim kibum nunca se preocupó mucho por agradarle a alguien. Nunca. Su mejor amigo le entendía, compartían cosas y eso le bastaba, estudiaba porque según él era un deber hacerlo, sus padres nunca le dijeron que tenía que hacer porque él lo hacía antes de que se lo pidieran. Y ayudaba a quien le pidiera ayuda porque no era una mala persona. Quizás porque le gustaba sentir que podía hacer cosas que a los demás les costaba trabajo hacer, un sentimiento de superioridad quizás. Aunque sabía que su mejor amigo, siwon destacaba mucho más que él. Eso nunca le molesto. Solo por eso, por ser su mejor amigo. Y le quería, incluso para considerarlo un hermano más.
Las clases comenzaban y él no podía ir a por que se había enfermado, le hubiera gustado poder ir y elegir un asiento junto a su mejor amigo, pero ya que estaba en cama eso no era posible, el maldito resfriado lo tenía hace dos días acostado no podía ni levantarse por que no se le permitía hacerlo y en su casa, en el colegio o donde fuera las cosas eran horriblemente aburrido.
Cuando por fin pudo levantarse de su cama ya mejor, tenía que ir a clases. Maldita sea su suerte. Apenas llego y tarde para variar, le informaron donde tenía que sentarse, y no precisamente donde le hubiera gustado, no con su amigo, ni siquiera con un compañero con el que pelear, sino con un chico nuevo. Ahora tendría que sentarse al lado de alguien que no conocía, y sinceramente no le interesaba hacerlo, ni siquiera le miro lo suficiente, solo se dirigió a su lugar a poner atención o intentar hacerlo. Las relaciones sociales no eran del todo agradables, si no era con siwon prefería estar solo.
¿Cómo fue que hablaron la primera vez? No lo recuerda. Ni siquiera las primeras palabras que se dijeron, o la cara que puso, quien fue el primero en preguntar algo y quien en responder. Pero de algo estaba seguro, le agradaba, le agradaba estar con él, su mirada era tranquila, no era como sus demás compañeros, no jugaba con ellos con autos de juguete o a la pelota, hablaba con ellos, pero nunca pareció realmente interesado. No sabe cómo fue el primer contacto, solo sabía que ahora compartían mucho más que una mesa en las clases.
Jonghyun era algo así como un ser extraño. En muy poco tiempo logro transformar su personalidad callada y aparentemente tranquila. Incluso sorprendía a todos cuando dejo de ser el ejemplo de la clase para pasar a ser el regañado por no guardar silencio mientras la maestra intentaba explicar algo, provocando la risa de todos. De todos menos de uno.
De repente ya no era molesto estar allí, ni estar todo el día ocupado. No le importaba salir a oscuras y llegar a dormir a casa cansado. De repente las cosas se hacían más agradables. Las clases eran divertidas y es que todo era un pretexto para reírse, incluyendo las canciones que les hacían en las clases de canto por que las letras eran ridículas o cursis. Después de todo para los niños esas cosas no son agradables. Las amenazas con sentarlos separados les hacían calmarse por unos minutos hasta que jonghyun le hacía alguna cara extraña o un comentario divertido y la risa explotaba de nuevo. Finalmente el castigado era kibum, quien se descargaba dándole golpes durante los recreos en venganza. Hasta que se hicieron algo habitual y el pobre de jonghyun terminaba golpeado casi por todo. Porque lo hacía? Ni idea. Le gustaba hacerlo. Nunca le dijo que le quería o que era un buen amigo. No, el no hacia esas cosas cursis, solo le daba golpes. No sabía cómo expresar cariño sin avergonzarse y esa era una manera efectiva de huir ante eso. Y él lo sabía, aunque los golpes no eran agradables sabía que lo hacía porque no podía expresar cariño de otra forma, y hasta cierto punto era feliz porque era el único a quien le hacía eso, los demás no eran tan importantes como para que gastara sus fuerzas tratándolos mal como a él. Algo masoquista tal vez, pero eran niños y no le importaba.
El problema es que no solo jonghyun existía en su mundo. Siwon era su mejor amigo y parecía no recordarlo. Quizás porque con él nunca se sintió de esa forma y no porque no le quisiera, pero era un cariño diferente. No sabía exactamente cuál era la deferencia pero la había. Y eso no le agradaba mucho a su mejor amigo, quizás se sentía desplazado, un poco de celos, quizás nunca le cayó bien jonghyun, y por eso no era del todo agradable con él.
Y kibum nunca pudo hacer que ellos lograran agradarse, era casi una competición pero que sabía quién ganaba. Una pequeña extorción de parte de siwon para que jonghyun hiciera algo, y solo si lo hacía podía andar con ellos durante los recreos. Era algo infantil, a veces solo le pedía comida, a veces lo dejaban esperando todo el recreo de pie mientras ellos estaban en otro lugar escondiéndose. La risa y cara de satisfacción del mayor era total, y contrastaba con la de un kibum apenado que no entendía porque su mejor amigo le hacía eso, pero que de todos modos él no se atrevía a contradecirle, quería reclamarle por hacerle eso, por tratarlo indiferente, después de todo jonghyun era diferente, era calmado y amable, pero no se atrevía porque no quería que su mejor amigo se enojara con él. Son bromas. Era todo lo que obtenía cuando kibum le miraba algo enojado por su actitud. Quería disculparse con jonghyun por hacerle eso, pero no sabía cómo hacerlo, y solo le daba una sonrisa, esa misma que le era devuelta sin importar cuan mal le tratasen.
Había llegado hace unos meses y su amistad crecía cada vez más. Era de otra ciudad y se habían mudado por el trabajo de su padre. Vivian a un par de cuadras del colegio en un edificio color rosa pálido en un tercer piso. Nunca había entrado pero le acompañaba hasta allí. Caminaban juntos, uno al lado de otro, y kibum se sentía feliz por ese simple hecho. Salían casi a las 8 de la noche del colegio, a esa hora las calles apenas se iluminaban por las luces y la calle por sonde pasaban no tenía mucha iluminación, pero no sentía miedo a pesar de ser pequeños, jonghyun siempre le transmitió tanta paz que no podía pensar más que en cosas agradables estando con él. Conversaban hasta que era el momento de despedirse. Un simple hasta mañana y el cruzaba la calle para luego entrar al edificio donde vivía, después iría a tomar el bus que lo llevaría hasta su casa, él no tenía la suerte de vivir a 5 minutos de escuela como jonghyun.
Los días pasaban y con ellos las semanas parecían volar. Y las relaciones parecían avanzar y retroceder. ¿En qué momento ya no soportaba a su mejor amigo? Y es que el mal trato o las simples miradas poco agradables hacia jonghyun no le agradaban. A pesar de que él le pegaba y lo retaba más que a nadie en el mundo, sentía que solo él podía hacerlo. Nadie más tenía ese derecho. Y en el fondo sabía que era porque no lo hacía con la intención de hacerlo sentir mal, era porque le gustaba pelear son el, sacarlo de sus casillas como nadie más podía hacer, mostrando su forma calmada interrumpida, dejando ver un rostro algo enojado que nadie había visto excepto el, Kim kibum, y nadie más.
En tan poco tiempo había llegado a conocerlo mejor que a sí mismo, ni siquiera siwon era capaz de hacerlo sentir así, y no se explicaba el porqué, ¿cuál era la diferencia?
Y los celos aumentaban, ¿porque lo dejaba de lado? ¿Porque jonghyun hacia que kibum se olvidara de él? Incluso le miraba enojado cuando intentaba que se separaran un momento y kibum jamás lo había mirado así. Su relación era perfecta desde que se conocieron en el jardín, kibum siempre estuvo con él, hacia todo lo que le pedía, y de un momento a otro ya no estaba para él.
Era hijo único, y sus padres siempre le daban todo lo que le pedían. Su mundo era perfecto por decirlo de alguna forma. Quizás era porque estaba muy consentido, acostumbrado a ser el centro de atención siempre, excepto ahora, por primera vez ya no se sentía así. Su mejor amigo estaba con alguien más, su mirada era para otro y no lo soportaba.
Niños o no, eso ya no era un juego.
Estaba tan acostumbrado a su compañía que nunca imagino que estar separados sería algo que no podría soportar. Jonghyun ahora formaba parte de su vida. Una parte que tendría que dar por pérdida. Y sentir culpa por ello era lo menos que odia hacer por ser tan estúpido.