Aquí les traigo la segunda y ultima parte de No me odien... Gracias por los comentarios... Dedicado a Dama Oscura de Piscis.
CAPITULO 2: Solos hasta el fin.
Ikki fue hospitalizado con todos los lujos... A simple vista no necesitaba nada... A simple vista, pues a pesar de tener todas las comodidades las ausencias de sus seres queridos hacia carecer de importancia el resto de las cosas, del mundo. Pero incondicionalmente, contra viento y marea estaba a su lado su rubio... Padeciendo el mismo mal, pero se mantenía tan fuerte y quizás mas que él, que daba envidia. Su fortaleza la encontraba en el amor hacia el Phoenix. Y si bien la enfermedad era mas pasajera en compañía, los esquives de la sociedad conseguían convertirla en un gran peso... Como si ellos fueran los culpables, como si con tan solo portar la enfermedad no fuera suficiente que tenían que tolerar la mirada desaprobadora de los demás.
En un cuarto de hospital, Shaka derramaba lagrimas sin poder contenerlas... Debía hacer algo por Ikki, comprendía el porque de su situación... Debía hacer algo antes de que la enfermedad y la tristeza (Combinación nefasta) lo arrancaran de su lado... Pero ¿Que?. Ikki no era tonto... Habían pasado dos semanas y en esas semanas solo Shiryu había ido a llevar un par de cosas personales del peliazul.
Al ver que su koibito despertaba, seco sus lagrimas rápidamente, guardando compostura se obligo a sonreír... Sin embargo, como siempre, Ikki lo descubrió:
--Shaka... Tranquilo... Estoy bien...
--Lo se... Descansa...
--¿Has?... ¿Has tenido noticias de Shun?
Cuanto le dolió a Shaka tener que responderle.
--No... Aun no... Pero es cuestión de tiempo, ya vendrá...
Ikki sonrió tristemente e interrumpió a su novio.
--Aun sigue enojado conmigo...
--No... No lo creo... —Corrigió Virgo, dándose cuenta que él era el problema –Esta enojado conmigo.
Recién ahí, el rubio recapacito... Lo que mas necesitaba Ikki era la presencia de Shun... Y él era el problema... Debía encontrar la forma de convencerlo, aun si eso significara irse del lado del Phoenix
--¿En que piensas amor?—Pregunto el peliazul aun con los ojos cerrados, al ver que su chico negó con la cabeza indicando que todo estaba bien continuo hablando –Shaka... ¿Has comido algo?... Has estado todo este tiempo aquí... ¿No tienes cosas que hacer?
--¿Me estas echando?—Pregunto Shaka aunque sabia que esa no era la intención
--Sabes que no... —Respondió Ikki sentándose con dificultan en la cama, su espalda apoyada en el respaldar –Pero... Ni siquiera has salido a tomar un poco de aire, el encierro te hará mal...
--Mi lugar es a tu lado Ikki... No me eches... —Virgo le dedico una sonrisa.
--No te echo... Lo que mas quiero yo es tenerte, pero no es justo.
El rubio bien sabia que si se iba Ikki quedaría solo... Pero hallando una respuesta a su pregunta, comprendió que tal vez debía aceptar la propuesta de su novio.
--Tienes razón... —Sentencio sorpresivamente poniéndose de pie --¿Estarás bien?... No me iré por mas de dos horas... ¿Quieres algo?
--Un beso quiero... —Respondió el Phoenix ignorando el repentino cambio en su rubio.
Shaka accedió al pedido posando sus labios en la boca del peliazul, dándole un beso que durase en su alma el tiempo necesario hasta su regreso.
***
Shaka camino hasta la única cura del Phoenix. Frente a la amplia puerta de la Mansión dudo en golpear, pero la figura de Ikki en su mente le obligo a vencer sus temores, además, el no tenia nada que perder.
Shiryu lo recibió visiblemente asombrado, mientras que Seiya lo saludo a lo lejos e Hyoga subió raudamente las escaleras rumbo a su cuarto. Cuando Virgo dijo que había ido para hablar con Shun, el Dragón dudo unos instantes. Pero no hizo falta decidir nada, pues por las escaleras bajaba un furioso Andrómeda.
--¿Qué quieres aquí?...—Pregunto el peliverde sin ánimos de entablar una amena charla.
Shiryu, indeciso opto por retirarse y dejarlos solos, se quedaría cerca por si las cosas tomaban un giro violento.
--Vine a hablar de tu niisan
--Yo no tengo nada que hablar contigo...
--Shun... Comprendo que todo esto te enoja... No te pido que seamos amigos... Tan solo seria bueno... Que vayas a verlo...
--¿Para que? Mi presencia no la necesita... Ya me ha demostrado que prefiere tu compañía.
--No digas eso Shun... —Reprocho el rubio aun parado en medio de la sala.—Tu niisan te necesita...
--De ser así, no se hubiera comportado conmigo de aquella forma... Ahora vete... No tengo ganas de dialogar contigo y menos de mi niisan... Lo conozco hace mucho mas tiempo que tu... Y el no me necesita a su lado...
Antes de que Shun desapareciera de su vista, en un intento desesperado por convencerlo le dijo:
--Shun, tu niisan esta muriendo... Por favor... —Pero Shaka no recibió respuesta pues Andrómeda ya se había ido.
Sin mas opciones, Virgo camino solo hasta la entrada y abrió la puerta dando un ultimo vistazo a las escaleras, para después atravesar la puerta y dirigirse al hospital, junto a su amor. En unos de los cuartos, el peliverde lloraba desconsoladamente frente a la idea de perder a su niisan.
***
Los días, y las semanas transcurrieron agonizantes en aquel hospital... Cada segundo de ausencia que pasaba, Ikki empeoraba notablemente... Como todos sabemos, uno no muere de S.I.D.A... Si no de cualquier otra cosa, a causa de las defensas bajas... Inclusive un simple resfriado puede ser fatal Fue así, que mientras Virgo bajaba a buscar su décimo café que al subir al cuarto los médicos trataban de revivir a un agonizante Phoenix sin conseguirlo. Ikki murió prácticamente solo, sin poder decirle a su otouto todo lo que sentía y pensaba.
Shaka se sentó en los bancos fuera del cuarto y rompió a llorar... Su peliazul se había ido... De repente se sintió solo, demasiado solo... Miro a su alrededor y por donde mirase todo era pena y dolor... Nunca había prestado atención a eso durante su estancia en el hospital. Recomponiéndose, comprendió que había muchas cosas por hacer... Llamo a Saori y le comunico el fallecimiento de Ikki...
Todo fue demasiado rápido... El Phoenix tuvo una ceremonia sencilla y fría... Enterrado al estilo Cristiano... Como sus padres.
Shaka ya se encontraba en el lugar... Vio a Shun acercándose vestido de traje junto al Cisne, y detrás de ellos dos a Seiya y Shiryu... Saori bajo de una limousine negra y se unió al grupo... poco a poco el lugar empezó a llenarse de Santos y demás personas... Jugando al juego macabro de la hipocresía... Todos simulaban interés por el fallecido y dolor por su partida, de seguro que esa noche dormirían lo mas bien... mientras Virgo agonizaba frente a semejante escena... Cuanta falsedad. Debido a esto y a la mirada de desprecio de algunos y sus intentos de esquive (Pues claro, no olvidaba que el también estaba enfermo) decidió alejarse un poco de aquel lugar, apoyando su espalda en un frondoso árbol.
Pasada una hora todos se retiraron... Los últimos fueron los cuatro Santos de Bronce. Shaka escondió su mirada cuando Andrómeda paso a su lado, pero sin embargo sus ojos se encontraron... En la mirada del peliverde no había enojo ni odio... Solo dolor y arrepentimiento.
Cuando Virgo se quedo solo, se acerco hasta la tumba de Ikki y se sentó a su costado... Intentaba contenerse pero la soledad que sentía en su corazón lo obligaban a llorar... Hablo por mas de dos horas con lo que seria solo la carcasa de Ikki, solo una vestimenta... Eso lo sabia, pero necesitaba decirle tantas cosas.
***
Shaka también debió ser hospitalizado... La soledad y la tristeza parecían combinarse en algo fatal, mismo destino que el Phoenix. Paso la mayoría de los días solo... Era un problema el echo de no tener familiares o amigos que lo cuidasen, pues las enfermeras tenían demasiados pacientes y no podían vigilarlo correctamente... Algún que otro sobresalto pero nada grave... Parecía que su alma, a pesar de ya estar entregada, se aferraba a esta Tierra en busca de algo...
La visita mas inesperada para virgo llego una tarde lluviosa... El joven golpeo la puerta y luego de que el rubio diese el permiso ingreso.
--Hola... —Saludo Shun con su campera en la mano.
--Shun... —Fue lo único que un sombrado Shaka pudo pronunciar.
--Te sorprende ¿Verdad?...—Dijo Andrómeda sonriendo tristemente.
--Cómo no te das una idea... —Respondió Shaka con la poca fuerza que tenia.—Siéntate... ¿Te quedaras mucho tiempo?
--Si no te molesta... —Andrómeda se sintió incomodo y culpable –He venido para quedarme a la noche... Las enfermeras me agarraron en el pasillo cuando les dije que venia a verte y prácticamente me arrojaron aquí adentro.
Virgo rompió a reír, pobres mujeres, con pacientes abandonados como el, tenían el doble de trabajo, ante la presencia de algún familiar se desesperaban por que se quedara cumpliendo las funciones de ellas: Dar de comer, bañar, controlar que todo estaba perfecto, pero por sobre todo... Contencion emocional.
--No tienes obligación, si no quieres... —Pronuncio el rubio.
--No me molesta... —Corrigió el peliverde.
Un silencio sepulcral se instalo en el cuarto, ambos Santos se sintieron muy incómodos por el inusual cambio, hasta que Shaka quebró ese silencio:
--Dime Shun ¿A que has venido?
Era inevitable, Shun lo supo y tuvo que responder:
--Se que... Se que me he comportado como un cretino... —Le costo horrores a Andrómeda hablar de aquel tema –Y que por mi comportamiento he perdido a mi niisan... —Una lagrima rebelde se escurrió por su mejilla, Virgo también creía lo mismo pero por nada del mundo se lo diría.
--Tranquilo Shun, tu niisan, donde quiera que este esta mejor, de eso estoy seguro... También estoy seguro de que sabe lo que quieres decirle...
--Yo... He... —El peliverde trataba de contenerse para poder hablar –El murió y... Hubo tantas cosas que no le dije y...
--Shs... Tranquilo... No hace falta...
--Se que no es tu culpa... Ni tampoco fue culpa de el... De echo tu estuviste a su lado cuando me hubiera gustado acompañarlo yo en su... Enfermedad... —Shun buscaba la compostura --¡Dioses! Estaba tan celoso, soy un pendejo... Me comporte...
--Shun... Ya... No tiene sentido... Es bueno que lo reconozcas...
--Lo se, no tiene sentido por que el ya no esta... —Interrumpió Andrómeda.
--No... No quise decir eso, digo que no tiene sentido que te castigues, con que hayas reconocido... —Virgo no quería decirlo –Con que hayas reconocido que estuviste mal, es suficiente... Te puedo asegurar que el lo sabe...
Ambos Santos se quedaron toda la noche dialogando sobre lo que fue, lo que era y lo que podría haber sido... Muchas palabras sinceras y de corazón. Shun descubrió el profundo lazo y el amor de Virgo para con su niisan, y este a su vez le contó lo mucho que su hermano lo quería... Shun lloraba cuando el rubio le contó todo lo que había echo el Phoenix por el sin que se enterase, así como todas las cosas que había dicho. Shaka descubrió que Andrómeda era un niño aun, que toda la situación lo había desbordado, la idea de perder a su único familiar, el único ser que tenia en esta Tierra... No se dio cuenta que de todos modos lo perdería, así que Virgo intento situarse en el lugar del peliverde y comprendió que su sufrimiento no tenia comparación con el de Shun.
Las palabras siguieron, sincerándose mutuamente...
--Shaka... Dime... ¿Tienes miedo?... Digo ¿Miedo de morir?
--Pues no Shun... La muerte es un descanso... A lo único que siempre le temí es a la idea de morir solo... Pero llegado a este punto, ya no le temo... Pues quiero cuanto antes reunirme con tu niisan—Shaka comprendió que la presencia de Shun era para sublimar su ausencia con su niisan... Eso, Virgo, lo agradeció enormemente.
--Yo... No he estado junto a mi niisan pero... Me gustaría estar contigo...
El rubio lo interrumpió:
--No tienes nada que “pagar” Shun, entiendo si quedándote a mi lado te hace sentir mejor...
--Tienes razón... No estuve con mi niisan y esto no cambiara las cosas... El se murió sin que yo le pudiera decir...
--Shun...—Interrumpió Shaka –Nuevamente me estas malinterpretando. Escúchame, tu niisan...—Pero se censuró al comprender el temor del niño –Hagamos una cosa... ¿Quieres que le diga cuando lo vea todo lo que me dijiste?
Shun comenzó a derramar lagrimas asintiendo con su cabeza.
--Dile... Dile...—Las lagrimas no lo dejaban hablar –Dile que lo quiero mucho, que... Le agradezco todo lo que hizo por mi... Que siempre lo recordare y que... Que me perdone...
El peliverde hundió su cara en la cama, Shaka aprovechó para acariciar sus mechones, recordando su enfermedad, retiro su mano... Quizás Shun no quisiese que lo tocaran, sin embargo Andrómeda lo sorprendió cuando levanto su vista y se acomodo tomándole la mano fuertemente.
--Shun...
--Dile también que yo no estoy enojado con el, que nunca tuve vergüenza de el... Que siempre me sentí orgulloso de ser el hermano del Phoenix, aun así todos hablasen pestes de el por su... Enfermedad... Aun así todos se horrorizasen frente a la relación de ustedes dos... No hubo un solo segundo en el que no me sentí orgulloso de ser su hermano...—El peliverde aferró aun mas la mano.
--Shun... Se lo diré, aunque se que ya lo sabe... Cuando lo vea se lo diré...
--Y por favor dale un beso de mi parte...—Shun se acerco hasta el rubio y deposito el beso mas dulce en su frente... Shaka comprendió que ese beso, le pertenecía por entero al Phoenix... Así lo sintió, pues solo un beso con aquel amor podía pertenecer a Andrómeda y ser dueño a la vez, de su niisan.
Virgo comenzó a llorar sintiendo que por lo menos aun no era tarde, que si bien Ikki había fallecido sin verlo por ultima vez a su otouto, este había demostrado sus sentimientos... Su alma se tranquilizo, ante la idea de que no había fallado, en cierta forma había conseguido unir a los hermanos... Pues el mensaje se lo daría cuando llegase a su lado.
Con el corazón repleto de emociones, y el alma tranquila, en compañía de Shun... Shaka decidió que ya no tenia nada que hacer en el mundo, y fue junto al Phoenix a llevarle el mensaje de su otouto. De seguro Ikki se alegraría al escuchar aquellas palabras.
FIN *_*
Gracias por leer y comentar... Dudas o criticas... Espero sus mensajes.
22/08/2005 3:23:54 Hs.
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