El hospital era un lugar frio y triste. Yo no quería estar ahí, había tenido muchas experiencias traumantes en otros hospitales y estos no me parecían nada bonitos. Cuando entramos, una enfermera se ofreció a ayudarme, parecía de muy mal ánimo y también que solo me estaba ayudando porque ese era su trabajo, no porque yo le cayera bien. Me senté en una banca y la enfermera me preguntó si necesitaba algo, yo le respondí que un vaso con agua, no se demoró casi nada en traerlo. Primero, me hicieron como un millón de análisis para ver que tenía. Después de terminar con todo eso, nos dijeron que teníamos que esperar dos horas para que nos dijesen cuales eran los resultados. Cuando estuvieron listos, mi madre habló con los doctores… no lucía nada feliz.
-Kang Minhyuk… -mi madre dijo mi nombre completo… eso es malo, muy malo.
-¿Ah? –me paré en frente ella.
-¿Por qué? Te di la vida Minhyuk… ¿Y tú me pagas de esta forma? –mi madre pasó de estar molesta a estar casi llorando.
-¿De qué me hablas?
-¿Por qué te haces el desentendido?
-Porque en realidad no entiendo de que me hablas. –pasaron unos segundos después de que terminé de decir la oración y recibí una cachetada de parte de mi madre. No dije nada solo acaricie mi rostro…
-Llama al imbécil que te embarazó en estos mismos instantes…
-¿Qué? ¿Quién me embarazó? ¿De qué estás hablando?
-Estás embarazado Minhyuk…
-¿Eso es posible?
-Sí es posible y ahora lo estás.
-Yo no sabía que podía quedar embarazado…
-¡Eso no es ninguna excusa! ¿Por qué te acostaste con alguien? ¡Sólo tienes 15 años, Minhyuk! ¿Te creíste lo suficientemente maduro como para hacerlo?
-No me creí nada… sólo… pasaron las cosas…
-¿Quién fue?
-Mi novio…
-¿Cómo se llama?
- Yonghwa.
-¿Cuántos años tiene?
-Tiene 17. Estaba esperando el momento indicado para presentártelo… él es un muy buen chico, mamá. Estoy segurísimo que el ayudará con esto, sé que no es muy buena la noticia… pero si nos comportamos como padres responsables, podremos salir adelante y todo estará bien…
-¿Todo estará bien? ¡Tú aún eres un niño!
-Se que no soy mayor… y que no tengo la edad como para cuidar a un bebé pero… todo estará bien… Estás molesta ¿Verdad?
-En realidad, sí… No me molestaba en lo absoluto que te gustaran los chicos, pero no pensé esto de ti… ¡¿No pudiste esperar a cuando seas más grande?! ¡¿Sabes lo duro que es tener un hijo a temprana edad?! ¡Pues ahora lo descubrirás! Vas a dejar la escuela ¿Me oíste? Y apenas nazca ese engendro del demonio, tú vas a cuidarlo muy bien y el mocoso que te embarazó se buscará un muy buen empleo para mantenerte a ti y a tu hijo, ¿Sabes por qué? ¡Porque no te pienso ayudar! –me di cuenta que todo lo que decía ella era cierto… me di cuenta que cometí un error gravísimo… ni siquiera yo me creía el cuento de que podría llevar esto bien…
-Lo lamento… -fue lo único que pude decir…- lo lamento demasiado… -y rompí en llanto.