Prométeme que vas a estar aquí cuando me vaya, espero que sigas allá, mi corazón es tuyo te lo prometí recuerdas? Ya ha pasado varios años que no te veo, ni un video ni una foto ni una carta pero en mi mente sigues vigente, tu nombre y apellido siguen en mi mente pues mi corazón tú lo tienes. Tomo entre mis manos ese foto de mi familia mis lágrimas quieren hacerse presentes. Siete años y los veré de nuevo, he estado muy incomunicada con mí alrededor, mi vida estos cinco años ha sido estudiar y los otros dos trabajar sin descansar ahora soy la dueña de una compañía reconocida con solo veinticuatro años de edad, a pesar de que tengo todo lo que me propuse con el paso de los años me falta esa familia por la que tanto espere en su momento y recién se hace presente este sentir de soledad. Me pregunto si aún tienes el mismo estilo de cabello, tendrás la misma sonrisa soñadora que me encantaba, o creciste no lose, solo sé que quiero verte de nuevo quiero que estés presente en mi vida como lo estuviste hace unos años, sé que es mucho pedir que vuelvas a mi vida. Siempre fuiste una chica muy social, muy hermosa con esa sonrisa perfecta con el castaño cabello, con los ojos color almendra que hipnotizaban a cualquiera especialmente a mí y esa piel blanca como la porcelana, de solo volverte a ver mi sonrisa se agiganta. Todavía sigue presente el último día que te vi Alanís.
FLASH BACK:
Estábamos acostadas en mi cama, ella estaba rozando su mano con la mía como si quisiera acariciarla, me mandaba miradas cómplices, yo tome su mano entrelazándola con la mía, esos ojos que me enamoran. Te inclinaste hacia mi podía sentir tu aliento sobre mí, tu sonrisa seductora, estaba hipnotizada completamente en ti, te acercabas apunto de rosar mis labios y luego te alejabas tentativamente, así estábamos unos minutos hasta que me canse tome su cuello y uní mis labios con los tuyos, era un beso tierno y suave al momento que nos faltó la respiración antes de separarnos te mordí pero no muy fuerte.
-auch y eso porque- ella estaba sobre mí con nuestras frentes unidas
-porque me hiciste esperar, y eso no se hace- le dije dándole un pequeño beso, cuando se tornaba más pasional me aleje de ella
-oye! – se quejó, yo le mande una sonrisa malvada- ves que se siente- le dije burlonamente, me senté y ella beso mi hombro, entrelazo su mano con la mía.
-no puedo creerlo- me dijo, yo estoy apoyada a su hombro, me separe un poco
-qué cosa no crees?- le pregunte confundida y seguí en la misma posición de antes- que mis sentimientos sean correspondidos, pensaba que no sentías nada por mí, que siempre sería una amiga en tu vida y no algo más, yo… yo te amo – gire su rostro hacia mí y la calle con un beso.
-te amo no lo olvides, nunca lo olvides, te amo desde esa ves que te vi con esa lonchera de estrellas y corazones, tu sonrisa, tus ojos, tus labios, tu tacto, tu piel, tus actos- la bese otra vez, ella sonríe de forma soñadora. Se aleja de mí y se sienta en mi escritorio yo me pongo un poco nerviosa.
-ven- le digo para que se valla de ese escritorio- hay que descansar un poco Alanís- ella noto mi tono de voz, se acerca a mí y me mira algo extrañada
-que me ocultas Anali?- me pregunto algo molesta, yo baje mi mirada.- dímelo por favor- me pidió, yo la bese pero me aparto. Yo le negué con la cabeza.
-es algo que debí decírtelo hace un tiempo… yo… yo… - no quería terminar la frase pero ella comenzaba a desesperarse.
-tu qué? Dímelo- me pidió
-hace un tiempo, yo estaba llenando varios formulario y fue la vez que me entere de la beca ¿lo recuerdas? – le pregunte y ella asintió
-ese día discutimos y bueno yo… te dije que no iría pero te engañe, el día que peleamos yo acepte la beca, no voy a ir a la universidad contigo, me voy al extranjero- le dije acercándome a Alanís pero me alejo.
-cómo pudiste?, yo te entiendo en parte no podría desaprovechar una beca pero tenías muchas semanas para que me dijeras sobre la beca y yo entendería- me dijo como queriendo llorar. Me acerqué a ella y la abrace en contra su voluntad pero luego comenzó a llorar en mi hombro. – No quiero que te vayas- Le acariciaba su cabello intentando tranquilizarla, le decía que siempre iba a estar con ella, que nunca la dejaría, que mi corazón le pertenece a ella y con los minutos se fue calmando. Tomo mi rostros con sus dos manos me beso como si fuera el último que me diera en esos momentos no sabía que sería uno de los últimos, me llevo a mi cama y se puso sobre mí. Ese día hicimos el amor, ella me abrazaba la cintura posesivamente como si me fuera a ir, giré mi rostro para encontrarme con ella.
-te amo- dije mientras acariciaba su rostro, me beso y hundió su cabeza en mi cuello.
-me encantas, me encantan tus ojos verdes, tu piel blanca, tu cabello castaño, tus labios, tus manos, amo que me ames y odio que te alejes- dijo con una lagrima, yo solo la acariciaba. Mi corazón se oprimió con el solo hecho de que ella no este junto a mí.
-siempre voy a estar contigo porque mi corazón te pertenece- le dije con una débil sonrisa, estuvimos así abrazadas en la misma posición hasta que anocheció. Ya era tarde pero tenía que irse a su casa la quise acompañar a su casa pero ella no me dejo, la abracé creo que duraron años ese abrazo la bese como si fuera la última vez en ese momento pensé que la vería mañana y otros días hasta que me fuera de viaje. La bese y tomo un taxi y se fue. Me sentía tan sola, sonó el timbre de mi casa.
-que haces aquí?- le pregunte exaltada, ella estaba mojada, empapada y no sabía si eran lagrimas o gotas, la quise hacer entrar a mi casa pero a cambio recibí una cachetada que me volteo el rostro me dejo anonada, me quede un momento en shock, luego se acercó a mí y me beso yo seguía en la misma posición sin moverme, pero ella se alejó y se fue corriendo mi única acción fue perseguirla y la detuve. Nos encontrábamos a unos metros de mi casa.
-¿Qué fue eso Jesica?- le pregunte con la voz neutra, ella me miraba con rencor. Yo le seguía sujetando su brazo pero sin mucha presión para no lastimarla.
-como me puedes preguntar eso, tú sabes lo que vivimos juntas- me dijo con el dolor en su voz
-pero de qué me hablas? – le pregunte exaltada
-si como no- dijo haciendo caras raras- primero me tratas muy bien, me enamoras, me besas y luego haces como si no pasó nada entre nosotras y para matar te vas. – Dijo con las lágrimas en el rostro.
-te bese?- yo la bese? En qué momento? En mi mente solo intentaba recordar si yo la bese, pero estoy segura que no, porque mi corazón le pertenece a Alanís. Yo no le seria infiel aunque al parecer en este momento le he sido infiel. Ella solo asintió, pero escuche un sollozo detrás de mí, al girarme vi a Alanís, no porque justo ahora escucha esta conversación, me maldije por lo bajo.
-mi vida no es lo que parece- me acerqué a ella pero me empujo muy fuerte que caí al suelo, sus ojos estaban con lágrimas.
-no vuelvas a acercarte a mi si alguna vez me quisiste- me dijo en un tono demasiado frío
-no es lo que parece- le dije desesperada
-ya vi suficiente como para que me des explicaciones- con el mismo tono de voz, yo me levante de nuevo intente acercarme a ella pero se alejó corriendo la seguí pero cuando tomo el taxi la perdí de mi vista.
FIN FLASH BACK
Esa fue la última vez que la vi, la busque pero no la encontré, habían pasado dos semanas intentando conectarme con ella, creo que le deje demasiados mensajes de texto así mismo como de voz, el último fue un mensaje de voz donde me despedía, fue cuando me fui de viaje y bueno aún sigo aquí en Brasil esperando ese viaje que llevara hasta Alanís.