Prov. Zero
Esa mañana Sakurai salió temprano de casa y al parecer no tenía intenciones de volver ese día. En cuanto Ichiru se dio cuenta tomó al pequeña caja de crayones que había comprado hace poco y una libreta que tenía guardad en un cajón.
Salimos de la casa y caminamos hacia el parque, Ichiru tenía una sonrisa de satisfacción que no entendía a que se debía. Decidí no preguntar y lo miraba esperando que en algún momento lo dijera.
En cuanto llegamos Luka se acercó a nosotros e Ichiru se puso a su altura. Se abrazaron por unos segundos y después sacudió su cabello, yo me limité a sonreírle tiernamente acomodando su cabello.
-¿Y cómo has estado?-le preguntó Ichiru, él se limitó a sonreír de forma apagada-¿Todo está bien?-Luka asintió-¿Seguro?
-Mm... Sí-agachó la mirada-Estoy bien, no tienes porqué preocuparte...
-De acuerdo-Ichiru sonrió de medio lado-Quita esa cara triste-acarició suavemente su mejilla-Sé que te gusta dibujar, así que como Sakurai no vino hoy pensé que podíamos dibujar juntos ¿Te parece?-le extendió los crayones y la libreta.
Luka sonrió con su típica sonrisa y tomó la mano de Ichiru. Caminamos hasta una banca que estaba cerca de ahí y Luka intentó subir a ella para después poder sentarse pues, aunque la banca no era muy alta y él no es tan pequeño, no alcanzaba a sentarse.
Prov. Ichiru
-Anda, déjame ayudarte...-Zero lo cargó y lo sentó en la banca-Esto es mucho más fácil que intentar escalarla-rió ligeramente.
-Sí, gracias-Luka sonrió dulcemente-¿Y qué puedo dibujar?-abrió la libreta y la caja de crayones.
-No lo sé, cualquier cosa que te guste-me senté a su lado izquierdo-Podrías dibujar dientes de león o a ti jugando en el parque... ¿No crees Zero?-ambos lo miramos.
-Supongo que sí, a Ichiru le gusta mucho lo que dibujas y lo que sea que decidas estoy seguro de que le gustara-le sonrió sentándose del otro lado.
-Tengo una idea...-Luka apoyó la libreta sobre sus rodillas y vació los crayones sobre ella-Mamá siempre dice que es bueno dibujar cosas que te hagan feliz-tomó el crayón verde y coloreó la parte inferior de la hoja-El día que fuimos a los columpios y después jugamos con los dientes de león estaba muy divertido y cuando regresé a casa iba muy feliz. Quiero dibujar eso, los momentos felices que paso a su lado-nos sonrió con un tono rosado en sus mejillas.
Correspondí su sonrisa y una sensación diferente recorrió mi cuerpo; definitivamente mientras más tiempo pasaba con Luka más me daba cuenta de que esto es lo que quiero: tener a alguien a quien cuidar, a quien hacer feliz, con quien pasar todo el tiempo y tener momentos felices.
Aunque es algo que puedo hacer con Zero y Sakurai sé que es diferente porque lo que siento con cada uno de ellos, aunque en esencia es lo mismo, lo expreso de otra forma y el hacerlo me causa emociones que no siento con los demás.
Miré a Zero y parecía distante, con la mirada clavada en un punto fijo y como si todo a su alrededor fuera ajeno a su mundo pero sabía que él también estaba feliz pues en sus labios se dibujaba una casi invisible sonrisa, con la que demostraba que la situación le agradaba tanto como a mi.
Luka mecía sus pies y movía su cabeza hacia los lados al mismo tiempo que dibujaba y una gran sonrisa se apreciaba en su rostro. Al verlo de esa manera un sentimiento muy fuerte me invadió y no pude evitar pellizcar suavemente su mejilla y besarlo en la frente.
-¡Te quiero Ichiru...!-me abrazó dulcemente y se recargó en mi pecho.
-También te quiero Luka-correspondí su abrazo y sonreí ampliamente, al separarnos nos dedicamos una sonrisa y continuó con su dibujo.
Prov. Zero
Realmente no estaba poniendo mucha atención a lo que pasaba a mi alrededor pero pude notar la reacción de Ichiru al ver de esa manera a Luka. Para ser sincero a mi también me daba mucha ternura aunque dudo mucho que hubiera hecho algo tan impulsivo como lo que hizo Ichiru.
Me dediqué a observar a Luka y pude percatarme de que su sonrisa y su aura eran distintas a las de costumbre, aunque cuando recién llegamos el parecía estar triste o preocupado su semblante había cambiado drásticamente: se veía mucho más feliz y tenía una especie de brillo que nunca antes había notado en él.
Su dibujo iba tomando forma poco a poco, tras colorear lo que era el césped dibujo a tres personas, una más pequeña que las otras dos y que la tomaban de la mano, evidentemente eramos Ichiru y yo; poco después dibujó los columpios, la silueta de algunas nubes y el sol, para terminar coloreando con al crayón azul más claro el cielo.
-¡Terminé!-sonrió y levantó la libreta-Somos nosotros, él es Zero, este soy yo y este eres tu ¿Lo ves?-preguntó acercándola a Ichiru.
-¿Y como sabes quien de los dos es Zero en tu dibujo? ¿No podrías confundirte?
-No... Tu cabello es un poco más largo que el de Zero-nos miró a ambos y después señaló el dibujo-Aunque casi no se ve eres más pequeño y por eso cuando abrazo a Zero tengo que estirarme un poco más... Es por eso que no me dejas abrazarte ¿Cierto?-volteó a mirarme-No quieres que tenga que estirarme demasiado y pueda lastirmarme.
Prov. Ichiru
-¡N... No es eso...!-tartamudeó Zero nervioso-Es sólo que no estoy muy acostumbrado a los abrazos más que en ocasiones especiales...
-Pero algún día seré más alto y entonces podré abrazarte sin problemas ¿Cierto?-Luka sonrió dulcemente.
-¿Eh...? Bueno... Yo... Supongo que sí-correspondió su sonrisa y se rascó la cabeza.
-Definitivamente podrás abrazarlo tantas veces como quieras ¿No Zero?-lo miré y estaba ligeramente sonrojado-Mientras ese momento llega hay otras formas de solucionar ese problema-Luka me miró extrañado-Levántate Zero-hizo lo que le pedí-Ven acá-cargué a Luka y con él en brazos me acerqué a Zero-Abrázalo.
-¡Te quiero Zero!-lo abrazó tímidamente.
-También te quiero Luka-le dedicó una sonrisa sincera y sacudió su cabello.
Mientras Luka y Zero seguían abrazándose yo me acerqué aún más a ellos, apoyé mi frente sobre la de Zero y le di un pequeño beso en la mejilla. El abrazo no duró mucho pero hizo que mi corazón latiera con la misma intensidad que lo hizo la primera vez que besé a Zero; cada vez esta emoción al estar con Luka era más intensa y sabía que llegaría un momento en que no podría seguir ocultándolo.
Bajé a Luka y volvimos a sentarnos en la banca, siguió dibujando un rato más hasta que su madre lo llamó pues era hora de irse.
-Nos vemos la próxima semana ¿De acuerdo? Podemos seguir haciendo dibujos o jugar con Sakurai-nos sonrió dulcemente.
-Sí, podemos hacer lo que quieras-me puse a su altura y correspondí su sonrisa-Cuídate, nos vemos la próxima semana.
Caminó hasta donde estaba su madre, ella nos sonrió y tomó la mano de Luka. Los vi alejarse hasta que desaparecieron del camino y una sonrisa un tanto nostálgica se dibujó en mis labios.
-Quita esa cara-Zero se acercó a mi-Pareciera como si nunca lo fueras a ver-me dijo en tono burlón.
-¡Oye...!-le reproché-No lo digas así... No me gusta la idea de separarme de él para siempre-agaché la mirada.
-Anda ya, eso no va a pasar...-me rodeó por los hombros-También debemos irnos, deja de preocuparte sin sentido-besó dulcemente mi mejilla; tomamos las cosas y caminamos a casa.