Prov. Ichiru
El tiempo pasó demasiado rápido, antes de que siquiera pudiera darme cuenta ya íbamos camino al hospital para recibir a nuestra pequeña; sé que al principio estaba sumamente tranquilo y preparado para cuando esto ocurriera pero no puedo evitar pensar que esto pasó muy rápido.
Zero llamó a papá y a Yuuki para avisarles lo que ocurría, yo por mi parte se lo dije a Takuma. Todos están emocionados por la noticia y, según lo que me explicó Zero, papá llegaría tan pronto como le fuera posible y Yuuki y Takuma dijeron que en cuanto pudieran vendrían.
-Relájate, por favor-le dije a Zero al ver su expresión en su rostro-El médico dijo que era sumamente probable que la recibiéramos en estos días y que no había razón para preocuparse... Aunque el dolor es constante puedo soportarlo y también me explicó que hacer así que puedes estar tranquilo .
-Y estoy tranquilo, querido... Solo es que estoy emocionado, sabía que esto podía pasar y que nuestra pequeña podía llegar en uno de estos días pero esto fue antes de lo que me imaginé y...-me miró fijamente-Lo lamento, tengo muchas emociones juntas y cada que eso pasa reacciono así.
Me limité a sonreírle y besarlo en la mejilla; siendo sincero, también tenía muchas emociones y estaba mucho menos tranquilo de lo que aparentaba pero debía seguir mostrándome relajado para que él también lo estuviera.
A llegar caminamos hasta la recepción y Zero le explicó mi situación a quien lo atendió; unos minutos después llegó una enfermera y tras hacerme varias preguntas confirmo que nuestra hija estaba a punto de nacer; le dio algunas instrucciones a Zero y me pidió que la acompañara. Al despedirme de él volví a pedirle que no se preocupara, que muy pronto estaríamos con él y me respondió "Los estaré esperando".
Prov. Zero
Apenas habían pasado cinco minutos desde que Ichiru partió con la enfermera y ya había perdido los nervios: daba vueltas de un lado a otro, sacudió mi cabello, miraba el reloj casi a cada minuto y sentía un vació en el estómago.
-En verdad no estoy listo para ser padre...-suspiré pesadamente-Si esto es ahora no quiero ni imaginar como serán las cosas cuando me digan que ambos salieron pero tengo que esperar para verlos...
-¡Y eso no es lo peor de todo!-escuché la voz de papá a mi espalda-Lo más difícil será cuando llegue a la adolescencia y vaya a su primer fiesta... Serán más de las nueve y ella aún no los llamará para que vayan a recogerla-continuó acercándose a mí-Y lo que definitivamente no podrás soportar es que a unos meses de haber cumplido la mayoría de edad diga que quiere vivir sola.
-No creí que llegaras tan pronto...-respondí intentando ignorar todo lo que había dicho-Pensé que vendría por la tarde o el fin de semana igual que Yuuki... Dijiste que estarías trabajando y que por eso no podrías estar desde temprano.
-Y era lo que iba a hacer pero alguien sugirió que era bueno que tuvieras compañía durante la espera, pedí permiso en el trabajo y me lo dieron así que no tienes porque preocuparte-me sonrió frotando mi espalda intentando tranquilizarme-Intenté mandar a su madre pero no quiso hacerlo... Ya sabes, sigue insistiendo con eso de que no es el momento adecuado y de que no sabría que hacer o decir si se quedaba a solas contigo.
-En realidad estoy bien, no era necesario que se molestaran en eso... Por lo que dijo el médico serán un par de horas antes de que pueda entrar a verlos así que lo único que podemos hacer es esperar hasta que pase el tiempo.
-No te veías muy bien cuando llegué...-me dijo incrédulo-Entiendo que la situación ha sido difícil para ambos y sobre todo para ti, sé que incluso después de que haya crecido y veas como resultaron las cosas seguirás preguntándote si fuiste el padre adecuado. Es una respuesta que nadie podrá darte, sólo haz lo que creas necesario y deja de preocuparte tanto por eso.
Las palabras de papá lograron tranquilizarme, definitivamente no encontraría la respuesta a la pregunta que me hice en cuanto supe que tendríamos una hija hasta después de verla crecer; este no era el momento indicado para preocuparme por eso, lo mejor era dejar que las cosas pasaran y afrontar lo que viniera sin importar lo difícil que parezca.
Después de un rato el médico salió a avisarnos que tanto Ichiru como la pequeña estaban en perfectas condiciones y que apenas Ichiru despertara de la anestesia y terminara de hacerle unas cuantas pruebas a nuestra hija, papá y yo podríamos entrar a verlos.
-Le llamaré a tu madre para darle las buenas noticias-me dijo para después abrazarme-Estoy seguro de que le alegrará saber que su nieta ya nació. Preferiría que estuviera aquí para que lo escuchara por si misma pero no hay nada que podamos hacer... No tardaré...
-Si lo desea puede ver a su pequeña antes de que le hagamos las revisiones de rutina-me dijo el médico cuando papá salió-Por el momento está en la incubadora así que sólo podrá verla a través del cristal y no podrá cargarla pero será una forma de conocerla y a la mayoría de los padres les gusta hacerlo antes de poder estar con el bebé... Si quiere hacerlo vaya por ese pasillo-señaló la dirección que debía seguir.
Caminé hasta donde estaba la pequeña y me quedé observándola, apenas la vi una sensación extraña recorrió mi cuerpo, ni siquiera con Ichiru había experimentado algo así pero el sólo verla me hizo querer tenerla junto a mí, esa conexión entre nosotros que no sentí durante los meses que estuvimos esperándola apareció en ese momento. Me acerqué tanto como pude hasta el cristal y coloqué mi mano sobre de él como si quisiera tocarla.
-Bienvenida, cariño...-susurré dulcemente-Ya estás con nosotros y pronto podremos vernos...-me pareció verla sonreír-También estoy feliz de que vayamos a conocernos,estás preciosa y ni te imaginas como deseaba que llegara este momento.
-Sólo te hacía falta verla para amarla ¿No?-preguntó papá tocando mi hombro-En verdad es preciosa-me sonrió-Ichiru debe estar preparado porque es evidente que le dará batalla...-rió divertido-Peleando por el amor de papá y por ver quien recibe más muestras de cariño de parte suya... Espero que también estés preparado, Zero, no va a ser fácil controlar a estos dos-sacudió mi cabello.
Prov. Ichiru
Pasaron unos cuantos minutos desde que me llevaron a mi habitación hasta que me dijeron que Zero entraría a visitarme y que me llevarían a la pequeña. No estoy seguro de cuanto tiempo ha pasado desde que entré al quirófano pero espero que esté tranquilo y no se haya preocupado. Mientras esperaba que pasara el efecto de la anestesia lo estuve pensando mucho y por fin me decidí a decirle como quiero que llamemos a la pequeña, pensé su nombre casi desde que supe que la esperábamos pero quería esperar un poco antes de hablar con él para asegurarme de que era lo que quería.
Una enfermera entró a mi habitación y me dejo a la pequeña, recién terminaban de hacerle la revisión de rutina y estaba lista para que la conociera. Me la entregó y sonrió apenas me vio, también le sonreí y acaricié suavemente su rostro.
-Hola, pequeña... Me alegra tanto poder verte...-estiró su mano y tocó la mía-Papá va a venir a conocerte, también quieres verlo ¿No es así?-Zero entró y caminó hacia mí-Mira Zero... Es hermosa ¿No crees? Ve con papá, cariño-la separé de mí y la acerqué a él para que la cargara.
-Definitivamente es hermosa...-la miró con dulzura y besó su frente-Apenas puedo creer que estés con nosotros...-acercó uno de sus dedos a su rostro y ella lo tomó entre sus manos provocando que se sorprendiera y después le sonriera.
-¿De qué me perdí?-preguntó papá entrando a la habitación-Mira a quien tenemos aquí...-caminó hacia Zero-Eres idéntica a estos dos, ni como negar que eres hija suya... Soy tu abuelo y estoy encantado de conocerte... Por cierto... ¿Ya eligieron su nombre?
-En realidad de eso mismo quería hablarles...-dije con seguridad-Lo pensé desde hace mucho y realmente me gustaría llamarla Luka, ese nombre tiene un gran significado para mí y creo que sobra explicarlo, por eso creí que es buena idea.
-Parece que le agrada el nombre y ya que también significa mucho para mí creo que es la mejor elección-me dijo Zero sonriendo.
-¡Entonces queda decidido!-dijo papá con alegría-Se llamará Luka y no hay más que decir... Felicidades a ambos, necesitamos conservar este recuerdo así que les tomaré una fotografía ¡Acérquense y sonrían...!
Prov. Narradora
-¡No puedo creer que ya haya nacido!-gritó la mujer corriendo hacia su esposo-Debe ser preciosa y adorable... Me hubiera encantado conocerla...-susurró con tristeza-Nuestra primer nieta... No sé si piensan tener otro hijo pero la idea de ser abuela me hace muy feliz, imaginar un pequeño corriendo de nuevo por la casa es agradable...
-Debiste ver a Zero en cuanto la tuvo entre sus brazos-le respondió abrazándola-No creería que es el mismo quien ni siquiera sabía como reaccionar en cuanto lo supo... Tiene apenas unas horas de nacida y ya acaparó su atención-rió ligeramente-Mientras estuvo con nosotros no se separó de ella ni un minuto, parece que después de todo Ichiru y ella si van a competir por el amor de Zero... ¿Quieres verla? Tengo una foto de los tres...-se la mostró.
-Es hermosa...-miró con dulzura la fotografía-Parece más su hermana que su hija, puede verse que la aman y que están felices por tenerla... Viéndolos así recuerdo cuando ellos nacieron, tan pequeños e indefensos... ¿Quién diría que un día habría alguien tan parecido a ellos? Lo verdaderamente increíble es que haya intentado impedirlo...-susurró con algunas lágrimas brotando de sus ojos-Me alegra que no obedecieran lo que les impuse, es mejor de ese modo.
-Es suficiente, querida ¿No lo crees?-la mujer lo miró confundida-¿Qué caso tiene que sigan sufriendo por la distancia? Tus ojos indican que deseas ver a tu nieta e Ichiru de verdad tenía ganas de verte ahí... A Zero también le hubiera gustado que estuvieras ahí, y sobre todo, estoy seguro de que a la pequeña le hubiera gustado conocer a su abuela.
-¿Sabes algo? En verdad no voy a continuar con esto, necesito ver de nuevo a mis hijos, disculparme por lo que hice e intentar arreglarlo, quiero felicitarlos y acabar de una vez por todas con eso, demostrarles lo que realmente siento por ellos y ser sincera. Cuando vayas a verlos iré contigo y no voy a seguir retrasándolo-afirmó con seguridad.