Una habitación, un par de cuerpos sudados danzando al compás de las caricias y embestidas, un castaño y un rubio gimiendo, disfrutando del placer de los deliciosos espasmos que recorren su cuerpo, sintiendo como su orgasmo esta cerca.
Un fuerte gemido logra salir de los labios del castaño al sentir al fin tan ansiado orgasmo y sentir que su rubio amigo lo hizo también, ahora lo único que desea es que se quede a su lado, que lo abrace y le diga que lo hizo bien.
Pero este no es el caso del castaño, aquel rubio sale de él, se coloca su ropa para luego abandonar la habitación, dejando al castaño abrazado a una almohada deseando con todo su corazón que esa almohada sea su rubio que tanto ama, pero él está consciente que no lo es.
Acaso la vida podría ser más dura con él, se ha enamorado de la persona incorrecta –si el rubio es Hetero- y solo acepta acostarse con el porqué es consciente que está en un internado solo para hombres y lo prefiere a el por suficientes razones.
Una: es su amigo de la infancia, dos: prefiere hacerlo con él, pues es consciente de que él fue el primer beso, la primera caricia, la primera vez y el primer amor del castaño y sigue siendo así.
El rubio se siente tan seguro al hacerlo con él, porque sabe que nunca buscara a otro que no sea él, que no mirara a nadie que no sea él, tal vez sea egoísta de su parte, pero el castaño tampoco se queja verdad?
Y ahora el rubio se encuentra en una de las bancas del instituto, con sus codos apoyados sobre sus piernas, con su teléfono en mano, contemplando si debe responder el mensaje de su novia, o caminar directamente a la habitación del castaño, correr las sábanas, retirar el pequeño mechón de cabello que cae sobre la frente del castaño después de terminar dentro suyo, para luego besarlo y hacer que se recueste en su pecho, dormir ambos sintiendo el calor del otro.
Al final termina optando por la primera opción y responde al mensaje de su novia, “hablamos mañana” fue lo único que escribió, enviado el mensaje, se levanta de su puesto y se dirige hasta la habitación, le da una rápida mirada al castaño durmiendo en la cama contraria para luego ir a la suya propia y pronto quedar completamente dormido, con un sentimiento de vacío que aun no logra explicarse el porqué.
“sueño”
-hola- escuchó
El rubio dio una vuelta de 80 grados hacia la voz que le habló, sus labios se estiran, esbozando una enorme sonrisa.
-Hola- ese hola decía: “como estas”, “Te extrañe”, “en serio te extrañe”, “no te vuelvas a ir”, pero solo salió ese hola nomas.
El chico castaño más bajo que el, corrió y acortó la distancia entre ambos, para luego saltar a los brazos de su amado rubio, quien sin dudarlo lo atrapa en un fuerte abrazo dejando ahí salir lo que no pudo decir antes.
Al alejarse del abrazo, la sonrisa en el rostro de ambos no desapareció, al menos no hasta que en ese mismo momento el rubio vio como el castaño se alejaba y alzaba la mano diciendo adiós, el trató de correr, gritar un no te vayas, pero ni su voz ni su cuerpo respondieron a su mandato y lo único que pudo hacer fue caer de rodillas, sintiendo sus ojos escocer y pronto sus lágrimas caer, con un dolor muy fuerte en su corazón.
“fin del Sueño”
El rubio despertó con lágrimas en su ojos y la misma opresión en su pecho, pero con una mano extra en su rostro, abrió rápidamente los ojos, encontrándose con el rostro del ser más hermoso, el que hace que su corazón lata de una manera que ni el mismo puede explicar, la persona que ha estado metiéndose en sus sueños desde hace ya varias noches.
Se sienta sobre la cama dejándose acariciar por el castaño.
Qu.. que haces aquí –pregunta aun adormilado- e.. es que al parecer tenias una pesadilla , te he escuchado llorar, al principio pensé que habías peleado con tu novia pero después me di cuenta que llorabas dormido.
El rubio en contra de su propia voluntad, tomo la mano del castaño y la alejo de su rostro diciendo un “ya estoy bien, vuelve a la cama”, la manera en la que lo dijo le pareció bastante fría hasta para el.
El castaño asintió levantándose, dejándolo ahí con ganas de tomarlo, halarlo para que se recueste con él y abrazarlo para así tal vez poder calmar a sus pesadillas y de paso a su corazón dolido.
Extrañamente esta vez sí lo hizo, tomo a penas la mano del castaño haciendo que este lo mirara expectante.
-du.. duerme conmigo, solo esta noche- aclara.
El castaño sentía inmensas ganas de sonreír pero solo se limito a asentir y deslizarse dentro de las sábanas y el espacio que el rubio le dio, mirando al techo sin mover un solo músculo.
Lo que el castaño no se esperaba era la mano del rubio tomándolo del brazo hasta acercarlo a él y pasar un brazo bajo su cabeza y colocando la cabeza del castaño sobre su pecho mientras con la otra mano rodeaba su cintura pegándolo más a él.
El castaño podía escuchar a su corazón latir desbocado, insinuando con salirse en cualquier momento, pero por su bien prefería conservarlo en su lugar.
Mantuvo sus manos inmóviles, una parte suya quería abrazarlo, esconder sus rostro en el hueco entre el cuello y la clavícula del rubio, pero no lo hizo, por miedo a arruinarlo todo.
Pero el rubio parecía que leía mentes, pues al no sentirse satisfecho, tomo el brazo del castaño y lo llevo hasta su cuello disfrutando de ese abrazo, de esa posición, ya hacía tiempo deseaba dormir así con el castaño pero jamás había tenido el valor de hacerlo.
Los pocos rayos del sol que lograban entrar, dieron al rubio a entender que ya era de mañana, abrió pesadamente sus ojos y pudo observar el rostro del chico que no se había ni un solo centímetro de donde lo dejo, se dedico a admirar su rostro, solo un poco –antes lo hacía pero él en su cama y el otro en la suya- pero esta vista para él era mejor, aunque no pensaba decirlo a nadie, sentirse así por su amigo lo confundía y mucho y el solo se pensaba que es amor de amigos.
Agradecía que la compañía del chico le ayudase a al fin dormir por varias horas seguidas, pues días anteriores despertaba a cada tanto con el mismo sueño y ni el mismo se explicaba el porqué de ese sueño, deposito un suave beso sobre la frente del castaño, preguntándose luego el porqué lo había hecho.
Quiso salirse de la cama y dejarlo ahí solo, pero opto por sentir un poco más de su calor y compañía, igual era sábado, no tendrían clases, pero si tendrían que ir a casa por todo el fin de semana y por algo eso lo hacía sentirse triste, no vería al castaño hasta el Lunes, apretó el cuerpo contrario al suyo e inconscientemente deposito otro beso ahora en su nariz para luego dormirse de nueva cuenta.
El castaño despertó con la agradable sensación de tener el cálido cuerpo de su amado junto al suyo, pero sabía que eso no le duraría mas, con esfuerzo miro el reloj que tenía en su muñeca dando casi un salto de la cama de no ser porque aun estaba rodeado por los brazos de su rubio, sonrió pero con pesadez y lentamente retiro los brazos de su rubio para así poder levantarse y ducharse.
El rubio despertó una segunda vez, pero esta vez no se sentía igual, se sentía vacío, sentía que algo le hacía falta, estiro su brazo en busca del castaño pero no lo encontró, el recuerdo de que el chico debía irse a su casa lo abordo y se sentó rápidamente en su cama, a lo lejos escucho el agua caer en el baño cayendo en cuenta que el castaño estaba tomando una ducha.
Se levantó y camino hasta el baño, retiro su ropa quedando solo en bóxer y como lo suponía el chico no puso seguro a la puerta, entró silenciosamente encontrándose con un asustado chico quien pegó tremendo salto al sentir como alguien lo abrazaba por detrás, pues el rubio jamás hizo cosas como estas.
No, el rubio nunca durmió con el después de una sesión de sexo, jamás desayuno junto a él, nunca se ducho al mismo tiempo y en el mismo espacio que él, esto le alegraba pero a la vez lo asustaba, no sabía exactamente qué es lo que el rubio pensaba hacer y eso en una parte le aterraba.
Se dejo acariciar por las fuertes y grandes manos del rubio, mientras el agua ahora recorría por el cuerpo de ambos, el rubio comenzó a enjabonarle el cabello y cuerpo, y luego el repitió esa acción hacia el rubio.
La ducha fue silenciosa pero no incomoda, solo habían miradas e inconscientes caricias de parte del rubio, pues lo que si tenía claro el castaño era, jamás tener la iniciativa en nada, ya había recibido suficientes rechazos de parte del rubio y no quería salir herido hasta en ese punto.
El rubio solo deseaba juntar sus labios con los del mas bajo pero se limito a acariciarlo y admirarlo sin que el otro se diera cuenta, la ducha finalizo y ambos salieron para así poder vestirse, vio como el castaño salió del baño para dejarlo a él vestirse cómodamente pero el simplemente lo siguió.
Se encontró con el castaño colocándose el bóxer, acción seguida se acerco a él y con un beso en el cuello, lo ayudo a terminar de subirse el bóxer, el castaño dio un pequeño respingo al sentir las manos y los labios de su rubio en su cuerpo, pero no hizo nada más que eso, se vio dado de vuelta por las manos del rubio antes de sentir sus labios contra los suyos, abriendo tanto sus ojos que sentía que si los abría mas saldrían de sus orbes.
El beso surgió lento y suave siendo dirigido por los labios del más alto, se separaron luego de unos segundos y el castaño solo decidió terminar de cambiarse.
El más alto no dijo palabra alguna, camino hasta donde tenía su ropa y luego se vistió ahí mismo, quiso decir algo al más bajo pero se dio cuenta que ya no se encontraba en la habitación.
Corrió bastante, su cabello aun escurría algo de agua, ni siquiera lo peinó y su ropa no estaba correctamente colocada en su cuerpo, poco le importo, quería despedirse del moreno, se sentía mal porque el siempre se despedía de él, pero porque esta vez se fue sin decir adiós?
Llegó tarde, el castaño ya había entrado al carro y este iba en marcha, sintió un fuerte dolor en el pecho, no sabía el porqué, pero lo sentía, trato de marcar a su celular pero al iniciar la llamada lo único que obtuvo como respuesta fue un “esta línea se encuentra fuera de servicio, por favor intente más tarde”.
Resignado y con la cabeza gacha, volvió al departamento, tomo sus cosas y salió dejando con seguro la puerta, ya lo esperaban y debía llegar temprano a casa, sus padres y novia lo esperaban, pero él no quería ver a sus padres, no quería ver a su novia, él quería estar con el castaño, lo necesitaba a su lado, jamás había sentido eso, o no había querido darse cuenta.
El quería escuchar la hermosa risa del chico, ver como sus ojos se achican de una manera tan tierna cada vez que ríe, quiere abrazarlo, decirle que no se vaya, que este fin lo pasen juntos en ese internado, como si no han pasado toda esta semana juntos, subió el carro el cual le llevo hasta su casa horas más tarde.
El fin de semana se pasó demasiado lento para su gusto, pero al final pasó, esta vez no lo paso con su novia, la mayoría del tiempo la paso en su habitación, con la laptop sobre sus piernas observando fotos de su castaño favorito y tener al menos una videollamada con el castaño, obteniendo así el porqué de su no despedida, eso le hizo sentirse mejor pero necesitaba ya estar cerca de él.
La mañana del día Lunes ya con sus cosas arregladas se despidió de sus padres, no quiso esperar hasta que su novia llegara, él quería solo irse ya, subió al auto y durmió un poco durante el camino.
Al bajar del auto lo primero que hizo fue casi correr hasta su habitación en busca del castaño pero lo único con lo que se encontró fue con una vacía habitación, busco por las cosas del castaño pensando que tal vez había dado una vuelta, pero no encontró nada. Pánico sentía, eso, el chico jamás llegaba tarde, siempre estaba puntual era él quien llegaba tarde y encontraba al castaño con todas sus cosas arregladas.
El día fue un desastre, la paso todo el tiempo aburrido, las clases no eran su interés en este momento, el castaño no se presento, trato de llamar pero nuevamente la estúpida contestadora respondió, se sentía herido en cierta forma pues apenas ayer hablo con el chico y el no le dijo que no iría a estudiar esta semana, lo noto raro pero tampoco quiso prestar atención a eso, ahora se golpea mentalmente porque no pregunto porque la manera extraña de actuar ayer.
La semana fue demasiado para el chico rubio, pero al menos agradece que fue bastante atareada que no tuvo demasiado tiempo en extrañar al castaño, ya tenía planes para su fin de semana, iría a casa de su amigo, de todas formas ya hacía mucho tiempo que no lo visitaba, exactamente desde que se mudaron, lo único por lo que seguían siendo amigos fue porque los padres decidieron ponerlos en el mismo internado.
Había empacado todo lo necesario y salió decidido en ir y pasar el fin de semana en casa de su “amigo”, un tiempo después de mantener relaciones así de íntimas, le sonaba algo raro llamarlo amigo, pero eso eran no? El chico estaba enamorado de él, pero en ningún momento se declararon mutuamente, convirtiéndolos en solo “amigos con derecho” nomas.
Su corazón se aceleró cuando se vio de pie frente a la puerta de la casa del chico, toco el timbre y espero a que abrieran la puerta, salió una de las muchas del servicio que al nomas verlo lo reconoció, pregunto por Suho pero la muchacha le dijo que no se encontraba que había ido con unos chicos a pasear.
Su corazón se detuvo ahí mismo, la sangre se le subió a la cara, enojo, si eso sentía o eran celos? No, estaba claro que solo era enojo, porque el chico prefirió a unos amigos y no pasar la semana con él.
Forzó su mejor sonrisa mientras le pedía a la muchacha pasar para poder esperarlo ahí, ella acepto rápidamente y le dejo entrar, la madre de Suho salió con una hermosa sonrisa al encontrarse con Wu Fan, hacia mucho que no veía al chico y a sus padres, llego cerca de él y le dio un fuerte y apretado abrazo, de esos que a Fan le gustaban mucho.
-Se separaron y se sonrieron- nos has tomado por sorpresa Fan, me imagino has extrañado a nuestro hijo verdad –dijo la señora sonriendo- el te ha extrañado también, pero ha venido su primo de visita y ha tenido que quedarse además viene con un amigo y no quiso ser descortés. Tu ya lo conoces no?
Wu Fan solo asintió sonriendo a la señora, negar que le quería mucho no podía, esa señora a sido como su segunda madre, desde que Suho y él están en pre kínder, ha sido una persona amable y cariñosa y los trata a ambos como hijos, aunque en el fondo la señora hubiese querido que Fan corresponda a los sentimientos de su hijo –si ellos se enteraron que su hijo le gustan los hombres- bueno, no los hombres, se enamoró de Fan desde que tenía unos 14 más o menos-.
La señora Kim pidió a una de las muchachas acomodara las cosas de Fan en el cuarto de huéspedes y le informo a Fan donde Suho se encontraba, agradeciendo Fan tomo su camino al encuentro con su amigo.
Camino más o menos unos 10 minutos, pues cerca de ahí había un pequeño riachuelo de agua cristalina, donde las personas les gustaba ir en tiempos de máximo calor, como lo es en estos días, a lo lejos logro ver 3 siluetas pero hubiese mejor preferido quedarse en casa que ir a buscarle.
Sus manos se encontraban cerradas en puños con sus nudillos casi blancos por la fuerte presión, su cara ardía al igual que sus ojos y podía jurar que quería matar al estúpido chico que estaba a punto de besar a Suho, quien le dio el permiso, el es SUYO y de nadie más.
Camino a grandes zancadas hasta llegar cerca de la “parejita” tomo el brazo del chico y de un fuerte tirón lo mando lejos de lo que es suyo, Suho, tomo su mano y empezó a caminar con el chico tratando de seguirle el paso, asustado a la vez, nunca había visto de esta manera a Fan, lo había visto así, pero no contra él, Fan aunque era frío y todo, jamás se portó así de enojado con él.
Estando ya bastante lejos, la espalda de Suho hizo un hueco sonido cuando fue topada a uno de los arbustos, Fan tenía una mano en sus caderas y la otra en sus mejillas y para peor, lo miraba enojado, la rabia podía verse chispear fuera de sus ojos, Suho tragó saliva y entrecerró sus ojos.
-Fa.. Fan que haces aquí- dijo tratando de sonreír, pero a quien le iba a mentir el chico sentía miedo, Fan no respondió a su pregunta, en cambio solo recibió los labios de Wu Fan sobre los suyos, besándole de una manera demandante pero no violenta, sus labios empezaron a moverse en respuesta del beso de Fan, a decir verdad ya extrañaba esos labios y si el chico lo había iniciado porque tendría el que pararlo.
Jadeantes se separaron buscando por un poco de aire –tu.. tu eres mío de acuerdo- dijo no dándole chance a responder ´porque sus labios volvieron a atrapar los de Suho, esta vez el beso era más lento y la mano que Fan tenía en su cintura ahora se encontraba acariciando su abdomen, haciendo que sus piernas temblaran ante tan poco tacto.
Sus pulmones volvieron a quedarse sin aire haciendo que se separen de nuevo, sus labios sonaron algo fuerte cuando se separaron, Suho miraba con sorpresa a Wu Fan mientras este en el transcurso de los besos había apaciguado su rostro y ahora lo miraba con una media sonrisa.
Sin decir nada Fan tomo la mano del chico y entrelazo sus dedos haciéndolo caminar nuevamente a donde estaba su primo y el chico ese que por poco y lo besa, al estar frente a ese chico su rostro se volvió a contraer en uno de molestia pero no hizo ni dijo nada, pero tampoco soltó la mano de Suho.
Ehh, chicos les presento a Wu Fan mi –novio, soy su novio- interrumpió Fan, ganándose la cara de sorpresa de Suho y su primo y la de un Oh que mal del otro chico que también es rubio. El chico solo asintió y repitió las palabras que habían salido de su “novio”(?).
Después de un corto silencio incómodo, decidieron volver a casa de Suho por su puesto Fan no soltaba la mano de su “amigo”, pero tampoco dejaba de preguntarse, porque se presento como su novio? Porque sintió esos celos y las grandes ganas de besar a Suho? Y lo más importante, porque le había dolido ver el casi beso que ese chico le iba a dar a Suho?.
Entraron a la casa y a Fan se le olvido completamente que agarraba la mano de Suho, recibiendo una sorprendida mirada de parte de la señora Kim, pero ella no hizo comentario alguno al respecto,
El almuerzo fue bastante agradable, Fan hizo a Suho sentarse a su lado, muy lejos del chico rubio que ahora sabe que se llama Oh Sehun, la comida estaba deliciosa, ya hacía mucho tiempo que no comía algo preparado por las manos de la señora Kim y el realmente amaba su comida.
El resto del tiempo se lo pasaron viendo tv, la señora Kim tuvo que salir así que ahora Fan se encontraba recostado en uno de los sillones largos con Suho recostado sobre su pecho, las manos de Fan acariciaban suavemente el cabello de Suho, mientras este se preguntaba a que venía todo esto, era solo porque Fan quería que supieran que era suyo? O podía darse al menos la esperanza de pensar que Fan al fin correspondía a sus sentimientos?
Decidió alejar las preguntas de su mente y dedicarse solo a disfrutar del cariño tan deseado que tenia de parte de su rubio, Fan aunque no lo demostraba de verdad estaba disfrutando de todo esto, no es que fuera la primera vez que estaban de esa manera pero ya había pasado mucho desde que no lo hacían.
Fan estaba casi seguro que lo suyo con Suho podría ser amor, pero no lo dirá, no hasta que esté completamente seguro, no quiere dar falsas esperanzas a su castaño favorito, y tampoco es que el sea gay y le gusten los hombres, claro que no, a él le gusta solo Suho, el quiere solo a Suho, los otros chicos no causan absolutamente nada en el.
Aunque también a veces se detiene a pensar en que no ha tenido relaciones con su novia desde ya hace bastante tiempo, pero que pude hacer, la última vez que intentaron tener intimidad a Fan su amiguito ahí abajo no le quiso obedecer y pues nada, no hubo nada al final.
Eso también lo hace preguntarse, que ha hecho Suho para que con el si funcione y lo peor, despierta con tan solo un pequeño roce.
No se dio cuenta que se había dormido hasta que escucho la voz baja de Suho llamándole, al parecer el padre del chico llego, pero no lo despertaba por eso, sino que lo despertaba porque al parecer aun dormido Fan lo abrazo tan fuerte que no lo soltó en ningún momento, y tampoco es que a su padre le moleste eso, pues esta no es la primera vez que los encuentra de esta manera, simplemente se ha acostumbrado.
Fan reacciona al fin y suelta lentamente el cuerpo de Suho y a cómo puede se sienta en el sofá y se restriega un poco los ojos, ya completamente despierto se para y sonríe al padre de Suho haciendo una reverencia y recibiendo un abrazo de parte del señor Kim.
-sí que has crecido muchacho- dice el señor Kim una vez lo suelta del abrazo, los otros solo observan expectantes, todos menos Suho quien está acostumbrado a verlos así, el señor Kim dice que debe cambiarse de ropas y se dirige a la habitación de arriba, dejando solos a los cuatro nuevamente.
A la hora de la cena Fan se va dormir temprano diciendo que no tiene apetito, sube al cuarto que le asignaron viendo que esta frente al cuarto de Suho, se adentra en la habitación y se deja caer sobre la cama, no se pone una pijama porque está demasiado cansado como para buscarla y despojarse de la ropa que lleva puesta y ponerse otra, el viajar 3 horas no es para nada bonito.
Esta acostado boca arriba, con su brazo derecho sobre sus ojos, aun no tiene sueño pero igual se siente cansado, siente como el colchón se hunde levemente pero él no se molesta en ver de quien se trata pues ya sabe quién es.
Sus labios se ensanchan en una sonrisa para luego hablar –ya has cenado- pregunta, -eh si, los demás aun no terminan- dijo Suho sonriendo y aunque el rubio no podía verlo bien sabia que el castaño sonreía.
Estiro su brazo hasta donde la voz provenía y halo el brazo de Suho haciendo que la mitad de su cuerpo quedara bajo el cuerpo del castaño, llevo sus brazos hasta la fina cintura de Suho y lo apretó fuerte a su cuerpo, una risita salió de los labios de Suho al sentir los labios de Fan rozando en su cuello.
-te extrañe- esto salió inconscientemente de los labios de Fan, y para Suho fue lo más lindo que ha escuchado en el día, aunque no le parece extraño pues Fan a actuado así todo el día, Suho solo se limito a asentir y espera haber si Fan decía algo más.
-me has dejado solo toda la semana- hablo de nuevo, -y te extrañe-, sonríe, -y tú me extrañaste a mi- pregunta nostálgico, -cla.. claro que te extrañe- dijo Suho tratando de ocultar su enorme emoción, (aunque por dentro estaba gritando, Me extraño!, Me extraño!), decidió reservarlo solo para él.
Afuera un par de padres escuchaban atentos a dicha conversación, no era porque eran chismosos o algo así, pero la madre de Suho le contó a su marido, que antes del almuerzo Fan traía de la mano a Suho y le han preguntado a los chicos y al final terminaron contando que de la mismísima boca de Fan había salido que eran novios, no de Suho sino de Fan, los padres al escuchar tal noticia por poco y se ponen a saltar de felices, pues no querían a otra persona que no sea Fan para que comparta una vida con su hijo.
Para los Kim Fan es un chico, responsable, justo, de buen corazón, capaz de cuidarse y cuidar de su hijo y por eso antes no podían evitar sentirse tristes de saber que eso no pasaría, pero ahora estaban que gritaban de emoción porque finalmente su hijo era correspondido y por quien menos lo esperaban.
Decidieron que era suficiente lo que habían escuchado y con sumo silencio se alejaron de ahí, al parecer acomodar a Fan cerca del cuarto de Suho y alejado de todos los demás había sido una excelente idea.
El cuerpo de Suho se estremecía cada vez que las manos de Fan recorrían su ahora desnuda espalda, en algún momento los besos aumentaron de tono y no pudieron contenerse, aunque quien lo haría si tenían 5 días y 18 horas de no intimar.
Los brazos de Suho se encontraban alrededor del cuello de Fan mientras sus piernas a los costados de la cintura de este, ahora los dedos traviesos de Fan jugaban con el botón de su pantalón para así abrirlo luego, las caricias cada vez eran más placenteras y excitantes, y para Fan era como estar en el cielo cada vez que sus manos tocaban la suave y delicada piel de su castaño.
Instantes más tarde ambos se encontraban completamente desnudos, en algún momento Fan se levanto a poner seguro a la puerta y se encargo de deshacerse de la ropa de ambos antes de volver a la posición anterior, Suho movía sus caderas sobre Fan haciendo fricción para que sus miembros se rozaran deliciosamente, nunca antes Suho había tomado iniciativa en algo y ya que Fan le dio puerta libre a sus instintos lo estaba aprovechando.
No es que a Fan esto le molestara, al contrario le encantaba esta fase de Suho, pensó en que debió dejarlo hacer esto antes, algunos gemidos eran ahogados por los labios del otro, no queriendo alertar a los demás de lo que ahí dentro pasara, no es que para ellos los señores Kim supieran lo que pasaba con ellos.
Los labios de Suho ahora se encontraban, lamiendo y succionando el cuello de fan, deleitándose con los bajos pero excitantes gemidos que desprendían los labios de Fan, mientras las manos de este no perdían el tiempo acariciando y apretando levemente sus glúteos, era la primera vez que ambos actuaban y eso les gustaba aunque ninguno lo decía.
A Fan le pareció algo lento pero le gusto, disfrutaba mucho y eso era lo que importaba, en un movimiento y con ayuda de sus manos dio vuelta quedando ahora Suho debajo de el, sus labios empezaron a devorar inmediatamente su cuello, recorriendo con su lengua cada porción de piel hasta llegar a los pezones ya erectos de Suho, tomó uno entre sus labios y lo apretó levemente para luego jugarlo con su lengua.
Siguió bajando delineando un camino con su lengua hasta llegar al miembro erecto de Suho y se lo introdujo de una sola estocada, Suho apretó fuertemente las sábanas y tuvo que morderse su mano para no gritar por el placer que el acto de Fan le había causado.
Las succiones eran rápidas y deliciosas, Fan tenía una boca de los dioses y lo extasiaba de sobremanera, sintió como casi se venía y tomo el rostro de Fan obligándolo a dejar su miembro y atrayéndolo para besarlo.
Fan busco a tientas el lubricante en su mochila que estaba al costado de la cama y una vez encontrado lo abrió como pudo y esparció un poco sobre la entrada de Suho y un poco en sus dedos, sin dejar de besarlo introdujo un dedo moviéndolo inmediatamente en círculos abriéndose paso para ingresar un segundo ahora moviéndolos como tijeras y luego un tercero.
A este punto Suho movía sus caderas instintivamente y sus gemidos habían aumentado, el nombre de Fan venia a cada gemido, Fan decidió que ya era suficiente y saco los dedos de su interior, colocando un poco mas de lubricante sobre su miembro y abriendo un poco las nalgas de Suho introdujo solo la punta de su miembro.
Al sentir la presión Suho no atino más que a apretar mucho mas fuerte las sábanas y ahogar un gemido en los labios de Fan, el caliente y grande miembro de Fan entraba de apoco tratando de no lastimarlo, y por Dios el hecho de no hacerlo en esos días, hacia que Suho estuviera aun más estrecho y eso de verdad que se sentía delicioso.
Estando completamente dentro Fan comenzó a repartir besos en las mejillas, nariz, boca y cuello de Suho masajeando lentamente el miembro de Suho haciéndolo que se acostumbre a él para así poder acabar con la tortura y poder moverse ya.
Las caderas de Suho empezaron a empujar haciendo soltar un gemido de sorpresa en Fan pero no dejando de embestirlo al principio lento pero poco mas después rápido y fuerte, ambos callaban sus gemidos entre besos, mientras sentían lo delicioso que era todo esto.
Es como si fuera la primera vez de ambos, pero bien saben que no lo es, lo han hecho tantas veces que ya no recuerdan cuantas, pero sí que están amando demasiado esta vez.
Fan entraba y Salía de Suho cada vez más rápido y fuerte, sintiendo como la adrenalina y el placer recorrían cada particular de su cuerpo, y aunque ahora Suho apretaba fuertemente sus hombros no le importaba, el lo estaba disfrutando demasiado.
Los gemidos se agudizaron aun más cuando Fan logro tocar aquel punto que a Suho lo volvió loco de placer más de una vez, ya no importaba tanto si los demás escuchaban ambos gemían desmedidamente, sintiendo cargas eléctricas recorrer sus cuerpos al sentir el orgasmo cerca.
Fan empezó a masajear más rápido y fuerte el miembro de su castaño para así poder llegar rápidamente al orgasmo, orgasmo que los hizo gritar del puro placer cuando llego.
Ahora ambos se encontraban jadeando, manchados por la semilla de Suho y el otro escurriendo la de Fan dentro suyo sin que este saliera aun de él, nunca fue así, siempre que llegaban al orgasmo Fan salía inmediatamente de el, y se alejaba pero esta vez fue diferente, Fan se quedo y lo ayudo a limpiarse, se acostó junto a él, lo abrazo, lo beso, le dijo que estuvo increíble y se durmió junto a él, para Suho este fue el regalo más hermoso que podía obtener y aunque Fan no le dijo que lo ama, le dijo que lo quiere, y ese es un comienzo no?
La mañana llego y para Suho fue el mejor despertar Fan no se había ido de su lado y eso le alegraba mucho, demasiado se diría, al despertarse se porto muy tierno con él, se ducharon nuevamente juntos, bajaron a desayunar y se sentaron juntos.
Salieron a pasear a solas y disfrutaron del día como si fuesen en realidad una pareja, todo iba saliendo bien a la vista de Suho, ya se encontraban cenando pero eso no importaba porque eso quería decir que volverían a dormir juntos y que mañana irán a estudiar juntos y algo le dice que la semana y el resto de los días serán mejores.
Sabe muy bien que en el internado deben guardar las apariencias y para eso son unos expertos pues han estado juntos en esa clase de “relación” por mas o menos ya dos años, dos años donde Suho no ha visto a nadie más que no sea Fan y aunque Suho no lo sabe desde que Fan y él están juntos de esta manera, Fan ya no es el mismo con su novia, es mas ya ni siquiera sabe si lo que siente por ella es amor o simple cariño.
Pensar en Fan y su novia hizo que un dolor diera justo en su corazón y no pudo evitar sentirse triste, y aunque Fan no estaba viéndolo directamente se fijo en eso, estaban recostados en la cama, Suho sobre el pecho de Fan ambos desnudos pues acababan de tener sexo, pero cuando Suho pensó en la novia de Fan la sonrisa se le borró instantáneamente.
-Y cu.. cuando veras a tu novia- preguntó de la nada, ahora Fan estaba captando el repentino cambio de humor de su castaño, un nudo se formo en su garganta al volver el también a la realidad, estaba ya planeando una vida junto al castaño en su cabeza que había olvidado que tenía una novia para empezar.
-hmm no lo sé, creo que iré a verla mañana- respondió vagamente, el corazón de Suho dolió un poco más que antes, acaban de hacer el amor (?) y ya mañana iría a ver a su novia, y que pasa con el internado?
-Eh pensado en dejarle- soltó de una, Suho iba a responder pero ya no pudo.
-no sé cómo lo tome, pero creo que ya no le quiero, ahora quiero a alguien más- dijo besando la frente de Suho, llenando de miles de ilusiones al castaño quien lo miro sorprendido pero feliz a la vez.
-y quien es la afortunada- dijo sonriendo
-hmm afortunado diría yo- dijo besando ahora sus labios, pero solo fue un leve roce
-ohh en serio?, y quien es- volvió a preguntar emocionado
Hmmm, es más bajo que yo, cabello castaño, de ojos lindos y brillantes que se achican graciosamente cuando sonríe, tiene unos labios muy hermosos y una piel blanca suave, que me encanta tocar y besar, un cuerpo que en verdad me mata, porque me encanta en todos puntos y posiciones y su nombre empieza con J –dijo con una sonrisa de oreja a oreja-
Hmm John, Justin, Javier, o será….
No pudo continuar porque sintió los labios del rubio sobre los suyos callando y acabando su pequeño juego, Junmyeon –dijo al terminar de besarlo- Kim Junmyeon, le conoces –pregunto burlón-
-hmm pues creo que no le conozco- dijo dejando salir una fuerte carcajada que mínimo se escucho por toda la casa.
A la mañana siguiente regresaron al internado o al menos Suho pero por la tarde el rubio se apareció con la noticia que había terminado con su novia y que al parecer lo tomo bien porque ella también quería terminar con él, al parecer encontró un chico y hace tiempo se había enamorado.
Eso borró cualquier rastro de remordimiento de Suho y esa misma tarde Fan le pidió a Suho que fuese su novio, por su puesto Suho no espero a una segunda proposición y acepto fascinado.
Era una tarde de otoño, las hojas caían y las risas se podían percibir, la Familia Wu y la Familia Kim estaban tomando un almuerzo bajo uno de los árboles del jardín de los Kim, después de que Fan y Suho se hicieron novios lo informaron formalmente a sus respectivos padres, quienes resultaron más felices que los novios propios.
Las vacaciones al fin habían llegado y podían disfrutar de todo ese mes de descanso como huéspedes en casa de los Kim, los chicos se graduaron ese año y planearon vivir juntos en un apartamento junto a su universidad, verían menos a sus padres pero en algún momento de la vida debían separarse no?
Fan finalmente pudo descubrir el porqué de su pesadilla, poco después de hacerse novio de Suho se entero que el planeaba irse al extranjero al nomas graduarse, quería dejar a Fan atrás para más adelante no sufrir y si Fan no hubiese actuado a tiempo ahora ambos se encontrarían llorando y no celebrando, pero qué bueno que todo termino bien.
Ahora ambos estaban juntos, disfrutando de su compañía y haciendo planes de su futuro juntos, Fan estudiaría diseño y Suho Literatura y Lenguaje el amaba enseñar y amaba aun más la historia, ambos sabían donde estudiarían y de hecho y para su suerte ambas carreras estaban en la misma universidad.
Fin…….