Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Besos en el closet por Sr Dark

[Reviews - 22]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Diversos retos, un poco de estos dos no hace mal.

Notas del capitulo:

Espero les guste como este llevando a cabo este proyecto. He iniciado con el mismo ejemplo que use al explicarme en el grupo,  sin más

¡Disfruten! 

Besos en el closet

1 Reto: Dulce

Chocolate + Oficina + Café

Se acomodó en su asiento reclinable con pereza y frustración, ayer había sido el día de san Valentine, no se sorprendió encontrar su escritorio lleno de chocolates y cartas de amor, sin embargo ninguno de esos regalos era de esa persona especial, es más, fue él quien le regalo un gran chocolate para aquel chico quien lo recibió alegremente con esa típica sonrisa enorme y encantadora que siempre tiene pegada al rostro, y eso no fue el culpable de su mal humor, lo que en verdad le molesto fue el hecho de que el mayor tomo su chocolate como un simple regalo de amistad y nada más. Él podía admirar, querer, amar a Jinki tanto como se podía, eso no quitaba el hecho de que el Lee fuera un completo despistado a tal punto  de no ver las múltiples señales que él mismo le daba para que notara sus sentimientos.

La primera vez que se le insinuó le había sido en una noche cuando acompañaba a Jinki a tomar un taxi  ya que en esos tiempos aun no tenía un auto para llevarle ni él tampoco, velozmente le dio una sutil indirecta, simple y fácil de comprender.

—Ya quiero que amanezca para podernos encontrar otra vez—

En el momento que se lo decía no se despegó de la mirada del más bajo y este al escucharlo le miro con una sonrisa tímida mientras se pasaba su mano por sus cabellos castaños, por un momento pensó que él le iba a pedir explicaciones al ser descubierto sin embargo el momento de tensión algo romántica se quebró al momento que Jinki abrió la boca.

—Lo mismo digo, después de todo tu gastaras el pollo ¿Cierto? —

Recordó que al momento de escucharlo fue como un golpe bajo, en todo su orgullo, si bien no se acordaba de dicha promesa y para colmo el mayor traía esa sonrisa estúpida cada vez que hablaban de pollo lo cual le pareció tremendamente adorable y por ende solo pudo asentir pisoteando su ego.

Seguía atormentándose con recuerdos de fallidos intentos de declaraciones e indirectas hasta que la voz cantarina y alegre de su tormento le llama robando toda su atención al instante.

—Minho, es nuestro receso, vamos a mi oficina—  El castaño de ojos rasgados y sinceros le sugiere y él como todo enamorado pudo mal interpretar, no,  más bien imaginar tantas cosas con respecto a “vamos a mi oficina” que un pervertido de primera se quedaría corto. Cuantas escenas comprometedoras no paseo por su cabeza ante dicha petición, eran tan apasionas que sentía que en cualquier momento su amiguito se despertaría — Minho — salto un poco al sentir el caliente aliento de su hyung en su oído provocando que una descarga recorriera toda su espina dorsal y consigo se erizara a una gran magnitud ¿Estas bien? — pregunto aun en una distancia mínima que si no fuera porque estaba petrificado por la deliciosa sensación la acortaría.

—Sí, solo…estaba pensando en algo— trago saliva al pronunciar dichas palabras ya que la cercanía del más bajo era casi nula sin mencionar esos ojos oscuros observándolo; evaluando su reacción, Jinki sonrió como si no hubiera violado su espacio personal y se encamino  a su oficina. Se sacudió las ropas, aspiro una gran bocanada de aire para tranquilizar ese loco corazón suyo que por poco y se le explota.

En el camino pararon en la típica máquina de capuchinos, el bajo tomo uno descafeinado y con mucha espuma y él, bueno solo tomo un café.  Ya luego de unos instantes ambos llegaron a la oficina del mayor que si bien era mucho más grande y con más mobiliaria y fina sobre todo, por algo Jinki era algo así como el “jefe” de dicha sección en la que él trabajaba. El castaño se lanzó literalmente al primer mueble que vio mientras estiraba sus piernas y daba unos cuantos sorbos de su capuchino dejando que la espuma quedara atrapada en los alrededores de esa pequeña boca formando un lindo bigote que le quedaba jodidamente bien.

“Qué pasaría si yo…”

Su mente empezó a maquinar nuevos encuentros y declaraciones con esa imagen de Onew con bigote de espuma y sintió una enorme tentación en recorrer esa boca con su lengua quitando los rastros de espuma lentamente… “Minho, calma, no es momento para este tipo de pensamientos” se dijo así mismo dando un gran trago a su café desviando la mirada del mayor que disfrutaba ese descafeinado.

—Hey, Minho ahora que me acuerdo me comeré ese chocolate que me diste ayer— aviso el mayor levantándose de ese cómodo mueble y dando grandes zancadas hasta el escritorio para buscar dicho dulce en alguno de esos cajones. Observo detenidamente cada movimiento del castaño y noto esos pantalones de ceda color crema un poco ceñidos a sus largas y sensuales piernas junto con una camisa de manga larga color azul cielo con los tres primero botones sueltos y la corbata tirada por algún lugar. Claro él no quería tener pensamientos indecentes con su hyung sin embargo ese despistado de Jinki “Me lo pones tan difícil”  trato de mira a otra parte pero siempre su mirada terminaba clavada en el bien formado trasero del Lee que estaba en una muy buena posición de admirar ya que se había agachado a recoger unos papeles dejando su trasero en todo su esplendor con ese pantalón ceñido.

Sintió una punzada en su vientre bajo, era obvio que su amiguito se estaba empezando a poner duro y en ese momento no era nada bueno — ¡Lo encontré! — Onew levanto victorioso la enorme barra de chocolate negro y blanco con nueces en sus manos mientras hacia un gracioso gesto de victoria, Minho rio disimuladamente apoyando cada antebrazo en una de su piernas para así tapar esa montañita que se había formado en sus pantalones. El mayor le sonrió felizmente, se volvió a sentar en el mismo mueble en frente suyo y destapo aquel manjar dándole el primer mordico haciendo una expresión tan orgásmica que podría jurar que era como si estuviera comiendo pollo y aquello solo lo éxito más.

“Mierda…”

— ¿Quieres un poco Minho? —  le pregunto amablemente mientras extendía la barra hacia su dirección lo cual el moreno se negó rápidamente —No gracias, sabes que no me gusta mucho el dulce, Jinki— el de ojos rasgados asintió y siguió devorando dicha barra con ansias y gula. El más alto empezó a hiperventilar; no sabía hasta en que momento soportaría esa imagen de Onew comiendo chocolate con varios pedacitos de ellos pegados alrededor de esa boca rosa que tanto quería probar. Apretó el vaso de café que había dejado de lado y dio otra trago para luego volver a observar en silencio al mayor y entonces… le entro una idea.

Sonrió perversamente.

—Sabes Jinki hyung…— pronuncio de manera mordaz casi seductora provocando que el nombrado dejara de tragar el chocolate y le prestara atención — ¿Si…?— le incito a continuar lo que hizo que su sonrisa se ensanchara más si era posible —Dicen que el chocolate combinado con la cafeína es mil veces mejor que los dos separados— hablo mientras se acercaba al mayor que le miraba sin entender de amucho, Jinki sonrió ingenuo — ¿Me vas a dar de tu café? — Pregunto con una adorable gesto y el pelinegro no soporto más y tomo de los hombros al mayor —Si tú quieres…— el castaño aun sin entender asintió ante la invitación y Minho no pudo ensanchar más su sonrisa porque si lo hiciera sería una ya inhumana.

Rápidamente elevo el vaso de café haciendo el amague de que se lo daría al mayor quien abrió la boca y velozmente lo desvió bebiendo una considerable cantidad y finalmente unió su boca con la del mayor, Jinki abrió enormemente los ojos más no lo alejo solo se quedó ahí preso del chock. El alto aprovecho de que la boca de su hyung estaba entre abierta para adentrar su hambrienta lengua pasando el líquido del café al de Jinki, Minho se apegó más a Onew atrayéndolo con su brazo por la cintura haciendo aún más profundo el beso, Jinki poco a poco empezó a corresponder torpemente pero lo hacia lo que incitaba al más alto a seguir comiendo esa cavidad bucal que lo traía loco desde hace un buen tiempo. Recorrió cada parte con su lengua saboreando el dulce sabor del chocolate mezclado con la cafeína y en efecto sabía mucho mejor juntas que separadas y eso que él no le gustaba el dulce, sin embargo, viniendo de la boca de Onew se podría acostumbrar.

Seguía devorando esos labios dando leves mordiscos a su alrededor haciendo que el mayor jadeara, ambas lenguas se entregaban a una danza precisa y salvaje, los temblorosos brazos del mayor se posaron en el largo cuello del pelinegro acariciando levemente los cortos cabellos del moreno. Muy a sus pesares se tuvieron que separar por falta del sagrado oxígeno, ambos jadeaban, el alto contemplo el fino hilillo de saliva que unía sus bocas y sonrió con satisfacción al ver la cara totalmente roja del amante del pollo, Jinki lentamente abrió los ojos encontrándose con la penetrante mirada de Minho e in mediatamente se volvió a sonrojar hasta las orejas, el de ojos grandes dejo escapar una risita mientras llenaba ese angelical rostro de besos castos y húmedos, la nariz, las mejillas, la frente, los labios, los ojos, toda. 

—M-Minho p-por q-qué t-tú…—  Onew fue cortado por otro beso de parte del menor solo que este era más cariñoso y tierno —Jinki ¿No crees que ya esta claro? — el castaño negó la cabeza rápidamente demostrando toda su confusión, Minho rodo los ojos divertido por la acción tan infantil del otro —Estúpido hyung, te bese porque me gustas, te amo— declaro finalmente de la manera más directa que haya planeado en su vida, Onew abrió enormemente sus rasgados ojos, trago saliva y bajo la mirada —Y-yo, t-tú, y-yo — repetía torpemente jugueteando con sus dedos y Minho le miraba divertido — ¿Yo qué? — pregunto levantando una de sus cejas y una clara sonrisa se formó en sus labios gruesos, Jinki solo pudo sonrojarse más si eso era posible, el mayor  dio un gran bocanada de aire y levanto el rostro hacia el pelinegro que le miraba expectante, se armó de valor y abrió la boca —Tu también me gustas, también te amo— respondió fuerte y claro provocando que el alto riera.

— ¿P-por q-qué t-te r-ríes? ¡N-no es gracioso! — reprocho inflando sus cachetes, frunciendo el ceño y cruzándose de brazos mirando al alto, retándolo —Lo siento, es solo que te vez tan lindo que…— hablo entre risas y sonrisas bobas aun observando los gestos de enojo del mayor — ¿Qué…? — Onew le miraba atentamente aun molesto; aparentemente —Que podría comerte—  hablo apretando las blancas mejillas del otro que empezaban a adquirir color a medida que las pellizcaba —Literalmente— completo volviendo a besar los labios del mayor y este correspondió gustoso aunque no se esperaba ciertas manos intrusas debajo de su camisa, gimió al sentir una de esas dos manos adentrándose debajo del pantalón de ceda.

 — ¿M-Minho? — pronuncio entre cortadamente ya que los labios del moreno seguían pegados a los suyos —mph…— gruño dentro del beso y Jinki tuvo que hacer fuerza para separarse de esa lengua hambrienta —F-faltan 15 m-minutos p-para q-que el r-receso t-termine—  informo jadeando fuertemente con las mejillas encendidas, Choi no hizo caso y siguió acariciando esa piel blanca y suave que tanto le gustaba, apretó una de las rosadas tetillas del mayor provocando que este gimiera fuertemente, con la otra mano busco el miembro ya despierto del castaño dándole fieras caricias por encima de la tela, Jinki solo se retorcía de placer debajo del bien formado cuerpo del moreno. Minho besaba y mordía descaradamente la blanca piel del cuello del más bajo, degustaba esa manzana de Adam que tantas veces observaba subir y bajar, fue subiendo hasta llegar a una de las orejas que mordisqueo a su antojo y también le dio unas cuantas lamidas  y en ella susurro sensualmente.

—15 minutos es suficiente para devorarte — Onew solo suspiro ante lo dicho y luego empezó a temblar al sentir la mano del alto masturbando su entrepierna —P-pero… ¿Y si v-viene a-alguien? —  a duras penas pronuncio para luego gemir muy audiblemente ante las caricias impuestas del Choi. El alto seguía dejando marcas por toda la extensión del cuello del mayor, subió de nuevo al oído del otro—Hyung ~ tu provocaste esto — le dijo tomando la delgada mano del castaño y dirigiéndola a la propia entrepierna del pelinegro rozando peligrosamente su miembro, Jinki se sonrojo al sentir lo despierto que estaba y por instintito le empezó a masajear provocando leves gruñidos de placer por parte de Minho —A-así q-que es tu responsabilidad en hacerla desaparecer — termino la oración finalmente jadeante de placer y gimiendo aún más audible al sentir esa mano subir y bajar debajo de las telas del pantalón y el bóxer.

 Onew seguía entretenido en masturbar la gran extensión de su amante sorprendiéndose de lo grande y caliente que estaba —De todas formas yo le puse pestillo a la puerta— dijo el Choi al instante en que se lazaba a devorar de nuevo la cavidad bucal del mayor volviendo a sentir el sabor del chocolate acompañado de la cafeína, y tuvo que aceptar que sabía endemoniadamente bien a pesar de que no le gustaba mucho lo azucarado sin embargo…viniendo de los labios de Jinki podría volverse adicto a ese sabor dulce. 

Notas finales:

Bien eso es todo por ahora y estoy segura que a más de una se quedó con las ganas de lemmon, disculpen ese detalle es solo que no tengo cabeza ahora en ello por ende la continuación se las dejo a su imaginación, ya veré en otro momento si le continúe con lemmon en algún futuro, siempre y cuando surja inspiración.

Les recuerdo que si quieren mandarme un reto dejen solo las palabras claves, por ejemplo:

Restaurante + Caída+ Baño

En fin, solo les pido sus comentarios para seguir con la lluvia de retos, ahí abajo esta ese sensual cuadrito para que dejen R.W  y ¿Saben que es lo mejor?

¡Es gratis!

Saludos~


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).