Era el día... el día de los enamorados... de san Valentín... el día del amor y la amistad... las personas cargaban con regalos en las manos, se amontonaban en las pastelerías, en las florerías, comprando los más grandes arreglos de rosas, las joyerías sufrían porque todo los novios o esposos elegían los mejores anillos, entre mas grandes mas amor... quizás un collar de oro o de perlas en su lugar era también signo de cuanto se amaban las parejas.
Acomodó su bolso atravesando su pecho bien formado, sacudió su cabello aun húmedo por la ducha reciente, mientras veía como un chico paseaba con su novia feliz por la calle. suspiro y continuo caminando tranquilamente por el centro. Su ropa totalmente descuidada era probablemente la peor ropa que podía haber escogido para usar un día como ese. pero al salir tan rápido del hospital apenas tuvo tiempo para pensar en que ponerse
Se detuvo en aquel edificio que tanto conocía, ese edificio en el que viva hace algún tiempo. respiro decidido cuando se planto frente a la puerta, acerco sus dedos con toda la calma que tenía para tocar el timbre. dudaba si hacerlo o no. movió la cabeza de un lado a otro, relajando los músculos del cuello y dispuesto a afrontar lo que viniera. que sabia no seria fácil.
El sonido del timbre se escucho dentro de la casa. Jonghyun podía escuchar los pasos apresurados hacia la puerta. mordió su labio inferior ansioso. nervioso sobre todo.
Y ahí estaba él. perfecto como siempre. vio una sonrisa en su rostro. una perfecta sonrisa llena de brillo... brillo que no tardo en transformarse en un aura asesina. le miro desde la punta de los pies, mirando las horribles zapatillas que llevaba puesta, esas que tanto le había dicho que no usara porque las odiaba. miro sus pantalones y se detuvo en aquel orificio que dejaba ver su piel claramente. su camiseta... esa que le había regalado hace bastantes años y que ya no debería usar porque no era negra como se suponía que era originalmente, pero que Jonghyun todavía usaba por que le gustaba, porque kibum se la había regalado... que importaba si ya tenía tres o cuatro años? era su camiseta preferida de todo el mundo. levantó una ceja mirándole con esos ojos felinos que le hacían querer esconderse hasta debajo de la tierra.
- puedo pasar? - pregunto mientras acomodaba su bolso nuevamente. esperando que el rubio dijera algo... algo no tan malo
Abrió más la puerta, dejándole espacio para que pudiera entrar, pero antes de hacerlo puso una mano en su pecho. dirigió una mirada rápida a sus pies para que se quitara las zapatillas.
Rodó los ojos, no le iba a discutir. solo se limitó a quitárselos lo más rápido posible. acomodándolas en la entrada.
kibum camino hasta la cocina. la mesa estaba perfectamente arreglada. Jonghyun se acercó hasta él. sonrió mientras se quedaba detrás suyo, pegando su pecho a la espalda del rubio, envolviendo con sus brazos la pequeña cintura. deposito un suave beso en su cuello y después afirmo su mentón en el hombro del otro.
Terminó servir los platos. soltó un suspiro mientras dejo caer sus manos a los lados. no quería preguntar, no estaba seguro de hacerlo, aunque la respuesta la sabia... o por lo menos la sospechaba ¿qué tan diferente seria esta año?
- entonces...
Hizo una pausa esperando que el otro respondiera, cuando Jonghyun le envolvió aun mas fuerte lo supo.
- lo siento... lo olvidé
Como cada año desde que estaban juntos. Jonghyun estaba fielmente confirmando que no podía recordar una simple fecha. aun si esa fecha era anunciada en la televisión, o en la radio cada 5 minutos con una semana de anticipación. aun si las flores y corazones decoraban cada calle y lugar por el que el caminara. lo hacía a propósito? realmente podía olvidar esa fecha? pero ya no podía culparlo, aunque al principio eso les hubiera hecho pelear y enojarse, ya no podía simplemente hacer eso.
y sería fácil para él hacer lo que hacían muchos. comprar un regalo de último minuto... pero era mejor no recordar la pelea que tuvieron cuando hizo eso mismo hace algunos años. cuando llego a casa con un peluche gigante que compro apresuradamente, una mezcla extraña entre sapo y perro... que tenía un cuerno... una cosa completamente horrible pero que en defensa de Jonghyun era adorable, cuando lo dejo en su habitación tuvo pesadillas, sin mencionar las flores que le produjeron alergia
Jonghyun no tuvo problemas en dormir por una semana en la sala con el peluche.
No, a kibum ya no parecía molestarle que su novio tuviera la peor memoria del mundo. aprendió que no podía luchar contra eso. aunque le gustaría recibir un regalo en ese día, un regalo con amor, como cualquier pareja normal. pero Jonghyun lo amaba, estaba tan seguro de eso, que no era necesario que se lo demostrara con un regalo una vez al año, no cuando lo hacía sentir especial siempre.
- no importa... vamos a cenar.
Porque sí. kibum sí lo recordaba. kibum esperaba la fecha con una cena en la cual pasaba toda la tarde cocinando. eligiendo un perfume, un vino, el mejor vino. su ropa y maquillaje. todo para verse bien. para verse lindo y perfecto para Jonghyun. y él... él vestía como si compitiera con vagabundos para ver quién se vestía peor. Sin dudas Jonghyun les ganaría a todos. y no porque fuera pobre, no... Jonghyun se vestía así por que odiaba vestirse formal, odiaba ir a las tiendas a comprar ropa, y a probársela mientras una señorita esperaba a que se cambiara. eran polos totalmente opuestos. si le hubieran dicho que ellos serian pareja alguna vez habría ahorcado al que se hubiera atrevido a decirlo.
Pero ahí estaba el. ahí estaban ellos... cenando en su departamento, ese que compartían hace algunos años. y del que Jonghyun siempre perdía las llaves, hasta que dejo de darle una copia y solo opto por estar el antes en casa para recibirlo. lo que no era difícil ya que Jonghyun salía tarde del hospital donde trabajaba. al menos disfrutaba cuando lo veía con su delantal impecable, atendiendo pacientes, posiblemente era la única vez que lo veía vestido decentemente.
- esta delicioso
Jonghyun le regalo una hermosa sonrisa, acerco su mano para acariciar la mano de kibum sobre la mesa. kibum podía estar molesto con él. pero en cuanto lo miraba así, era imposible que estuviera enojado con él. le sonrió también
sirvió dos copas de vino. ese vino que casi le arranco a una mujer mientras intentaba comprarlo en el supermercado. porque era el ultimo. el mejor.
- hagamos un brindis
propuso feliz . levanto la copa, le miro intensamente, le quemaba con la mirada.
- por nosotros
- no... - corrigió Jonghyun - por ti... por ser el mejor... por ser tan bello, por estar conmigo a pesar de ser tan distintos, y hacerme el hombre más feliz del mundo...
se sonrojo hasta las orejas, Jonghyun hablaba en serio. no estaba jugando para nada, sus ojos le penetraban de tal modo que hacían que el calor entrara en su cuerpo. amaba tanto a Jonghyun. tanto que no tenía forma de medir su amor por él.
se levanto y le tomo de la mano. lo llevo hasta la sala. sentándolo en el sofá. bebieron de sus copas que aun sostenían y cuando terminó, dejo las copas sobre la mesita de centro. se sentó a horcajadas sobre él. sus piernas aprisionaron su cuerpo, envolviéndolo. dejo su rostro pegado al otro, mesclando sus respiraciones, juntando sus frentes mientras se miraban mutuamente, compitiendo por no pestañear. Jonghyun llevo sus manos a sus caderas, acercándolo más a su cuerpo. kibum llevo sus manos a sus mejillas y las acaricio. Jonghyun era perfecto. aun con su memoria de mierda
kibum junto sus labios. le beso intensamente. Jonghyun se dejaba mientras apretaba las caderas del rubio fuertemente. podía sentir el sabor del vino en su boca, tan delicioso. su lengua recorría su boca. era un beso caliente y que le mareaba como nada. Jonghyun sabia besar, malditamente bien.
Succionó su labio y su lengua, kibum estaba flotando en una nube de éxtasis. solo Jonghyun podía hacerle sentir así. tan bien.
deslizo una de sus manos por dentro de la camiseta del rubio, acaricio la piel, subiendo lentamente hasta su pecho, acariciando uno de sus pezones con la yema de sus dedos, poniéndolo duro. bajó su boca besando su cuello, dejando marcas. kibum gruñó cuando le mordió la clavícula. pego su cuerpo aun mas, sintiendo como el rose le provocaba una erección , sintiendo la de Jonghyun también.
- eres... tan... hermoso...
susurro sin separar sus labios de su pecho. le quito la camiseta velozmente. arrojándola en alguna parte de la sala. mientras sus manos recorrían su cuerpo, su abdomen, delineando las costillas.
hecho la cabeza para atrás, mientras la lengua cálida de Jonghyun lo recorría. ¿cuántas veces le había hecho lo mismo y aun así se retorcía nada mas con sentirlo? agarro la camiseta de Jonghyun con mala cara. se la quito y no hizo ningún esfuerzo en contener su sonrisa al dejarla caer al piso. admirando el torso moreno, lo recorrió con sus manos, mordiéndose el labio inferior. Jonghyun podía ver ese brillo en los ojos del rubio, esa mirada de deseo y que el también tenía porque no había nada más que el deseara tanto como a kibum.
se fundieron en un beso, ferozmente, se devoraban el uno al otro, ahogando suspiros y gemidos. Jonghyun no espero mucho mas. recorrió sus piernas atreves del pantalón ajustado de kibum. el rubio comenzó a mecerse en las piernas de Jonghyun, provocándole, haciéndolo sufrir por que la ropa en ese momento le parecía estorbosa. kibum aprovecho de meter sus dedos por la abertura del pantalón, haciéndole cosquillas en la piel de su muslo. una sonrisa malvada apareció en sus labios. con fuerza suficiente tiro de él. rompiendo el pantalón completamente. Jonghyun miro sorprendido. la risa de kibum lo dejó atónito.
- los rompiste... - miró arrugando el ceño aun sin creérselo
- me estorbaban - dijo divertido - te comprare unos nuevos
iba a reclamarle pero kibum lo beso rápidamente para después ir hasta su oreja y morder su lóbulo, lo chupo mientras acariciaba su pierna a través del orificio que había hecho en su ropa. Jonghyun no se quejo mas. prefirió vengarse y desabrocho el pantalón de kibum. metió la mano para acariciar su miembro lenta y dolorosamente. kibum gimió al sentir su mano mientras lo tocaba. lo besaba sin romper contacto. comenzó a moverse sobre la mano de Jonghyun, sus manos rodearon su cuello arrastrándolo fuertemente para no separarse ni un milímetro.
- a...agh...
se quejo mientras Jonghyun se acomodaba, recostándolo sobre el sofá de la sala. bajó una mano hasta sus pantalones y los desabrocho hábilmente, intentando quitárselos de una vez por todas. Jonghyun lo ayudo, fue fácil hacerlo y quedar completamente desnudo ante la atenta mirada del rubio. la piel brillaba y tenía ese aspecto que hacía que babeara, literalmente. las manos firmes del moreno recorrieron la espalda de kibum, acariciándola, dando algunos pellizcos, que lo enloquecían, torció la espalda cuando Jonghyun comenzó a acariciar su trasero. le encantaba, desde que lo vio modelando unos ajustados jeans negros. lo apretaba, kibum jadeaba fuete al sentir su entrepierna rosar con la de Jonghyun, necesitaba sentirlo. pronto. el moreno sonrió al ver Como el modelo estaba comenzando a desesperarse. se separo de el levantándose del sofá, dejando a kibum sin entender que pasaba.
- que haces?
Preguntó mientras Jonghyun caminaba en busca de sus pantalones. sacando un condón, mostrándoselo a kibum.
- mm... apúrate
Obedientemente se acerco nuevamente hasta el rubio que lo esperaba impaciente. fue hasta sus pies y le quito los zapatos, los calcetines y de un tirón le bajo los pantalones. se mojo los labios con su propia lengua. tenía la imagen perfecta de kibum acostado en el sofá, solo con bóxer, con las mejillas rojas y el cabello totalmente un desastre. era lo más sexy que podía existir en el mundo entero. los ojos delineados perfectamente lo atravesaban con urgencia y sensualidad. Jonghyun se puso el condón rápidamente antes de acostarse sobre él. kibum le rodeo las caderas con sus piernas. apretándolo.
Uno de sus dedos se deslizo hasta su entrada, acariciándola por debajo de su ropa interior. hacia círculos alrededor de ella. kibum sentía sus dedos moverse pero aun sin penetrarle, se estaba vengando por lo de sus pantalones, estaba seguro. pero si Jonghyun quería hacerlo sufrir el también podía hacerlo, valla que si podía. con su mano comenzó a acariciar su entrepierna. con la yema de sus dedos acaricio con cuidado, para después apretarle fuertemente, provocando que el moreno soltara un gemido ronco. Jonghyun tomo la mano de kibum, retirándola de su entrepierna, pasándola por encima de su cabeza, para que no pudiera moverse, pero kibum sonrió aun mas cuando comenzó a frotar sus cuerpos
- te estás pasando kibum
Le dijo Jonghyun mientras su mirada era amenazante. pero kibum solo saco la lengua y la paso por los labios de su novio, haciendo que Jonghyun como respuesta introdujera un dedo fuertemente en su entrada.
- aahhh...
Gimió cuando pudo sentir la invasión dentro de su cuerpo, Jonghyun comenzó a envestirle, dilatando su entrada, escuchando los resoplos del rubio, seco el dedo y esta vez metió tres dedos de una vez. kibum arqueó su espalda por el placer y dolor que eso le produjo
- eres un bruto Jonghyun!
Le reclamó. pero el otro no se molesto en contestarle nada porque sabía que por dentro lo disfrutaba tanto como él. le quito el bóxer, dejándolo desnudo completamente.
- date la vuelta
kibum no tuvo problemas en hacerlo. se giro quedando de espaldas a Jonghyun. a pesar de haberlo hacho tantas veces no podía evitar que su rostro se sonrojara. se posicionó en su entrada y comenzó a entrar lentamente, moviéndose para no lastimarlo. El rubio se sostenía con sus manos apuñando el cojín del sofá. le separo las piernas para poder entrar con facilidad y termino de entrar de una sola vez. espero a que se acostumbrara mientras se inclinaba hasta chocar su pecho con la blanca espalda de su kibum. Con una mano sujeto la cadera, el rubio comenzó a moverse y Jonghyun empezó a embestir con fuerza.
- ahh.. jong... ma.. mas...
Los jadeos inundaban toda la sala, chocaban en las paredes, poco importaba que los vecinos se quejaran al da siguiente... porque sí, ya lo habían hecho antes. beso su espalda, aumento el ritmo, mientras que el sudor cubría sus pieles. Jonghyun salió y lo giro, subiendo una pierna de kibum a su hombro para mayor acceso, continuo con movimientos fijos, cuando supo que faltaba poco para llegar a su límite, comenzó a masturbar a kibum, bombeando al ritmo de las embestidas.
Un grito se escuchó, y los dos se liberaron. se dejo caer encima del cuerpo frágil de kibum, su pecho subía y bajaba por el esfuerzo físico. El moreno siempre lo llevaba al límite.
Acomodó su rostro en el pecho de Jonghyun. respirando su aroma natural. mientras éste lo abrazaba por la cintura y le miraba a los ojos. se quedaron así un momento mientras se recuperaban, tranquilizando sus cuerpos.
- vamos a dormir
Jonghyun asintió y agregó
- iré a darme una ducha primero... a menos que te quieras bañar conmigo
Le miro sugestivamente, la idea no era del todo mala, pero sabía que Jonghyun debía estar cansado, había trabajado todo el día en el hospital y prefería que descansara, total... su día libre era mañana y podrían aprovecharlo mejor si descansaban bien, así que con un poco de pesar se tuvo que negar.
El moreno besó la frente del rubio antes de ponerse de pie y salir en dirección al baño, kibum se acomodo en el sofá para verlo caminar desnudo hasta el baño, observando su trasero bien formado.
Se le formo una sonrisa al pensar que después de todo si había sido un buen día.
Un ruido inundo la sala. identifico el ruido como el teléfono de Jonghyun. dejo que sonara, a él no le gustaba contestar porque se arriesgaba a que fuera el hermano de Jonghyun... y tenía suficiente con aguantarlo en el trabajo.. porque si... el hermano de jonghyun era su jefe... lo unico que le agradecia es que por el se conocieron, pero de ahi a que le callera bien habia una gran diferencia.
Sin embargo el sonido no se detuvo y kibum se vio en la necesidad de levantarse a contestar. no sabía que odiaba mas... si la voz de su cuñado o la maldita canción que tenia Jonghyun para las llamadas. tomo el bolso que había quedado en la entrada del departamento. abrió el cierre para poder encontrar el maldito aparato.
pero el teléfono y la llamada pasaron a asegundo plano cuando vio una carpeta. podían ser papeles importantes de pacientes... pero Jonghyun nunca llevaba eso a casa. la curiosidad fue mayor al ver que era de color rosado... y era claro que a Jonghyun no le gustaba ese color. miro por el pasillo... Jonghyun no aparecía y él se tomo la libertad de abrir y mirar un poco. sus ojos se abrieron tanto como pudo. leyó y leyó hasta que sus ojos se humedecieron. se limpio las lagrimas que caían por sus mejillas para no mojar los documentos. se puso de pie al sentir como Jonghyun se aclaraba la garganta.
Lo vio de pie en el pasillo. estaba mojado por la ducha que había tomado. envuelto en una toalla blanca alrededor de su cintura, apoyado cruzado de brazos a la pared y con una sonrisa perfectamente brillante.
- esto...
señalo la carpeta entre sus manos temblorosas
- feliz aniversario kibum... quería darte la sorpresa pero te adelantaste
kibum corrió para abrazarlo, hundiendo su rostro en su pecho. quizás no era tan malo después de todo que su aniversario de novios fuera el mismo que el de san Valentín. quizás Jonghyun no era tan idiota después de todo. o quizás si pero estaba mejorando
- como la conseguiste? era muy cara y...
- tu querías esa casa... y a mí me pareció perfecta para formar una familia
lo aparto un poco para besarlo tiernamente. lo sujeto de las mejillas para mirarlo a los ojos, kibum dejaba las lagrimas caer de emoción. prácticamente se había olvidado de aquella casa tan hermosa que había visto hace algún tiempo, y ahora Jonghyun aparecía con el contrato de compra de ésta
- te amo kibum... te amo tanto que haría y daría todo por ti
kibum asintió cerrando los ojos y dejando caer mas lagrimas
- también te amo Jonghyun...
un gran beso que termino por llevarlos a la cama. abrazados juntos. kibum observo la carpeta con los documentos. no podía contener toda la felicidad que le recorría el cuerpo y que aceleraban su corazón, todo por culpa de ese moreno que le acariciaba el cabello mientras se dejaba llevar por los sueños.