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Recuerdos perdidos. por Daymin VIP

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Notas del capitulo:

¡I´m back! Sí, sí...realmente volví a las andadas (?)
Sé que tardé muuuuuucho, pero como siempre, Daymin regresa a serguir con sus cosas xD

Muchas gracias por esperar y no perder la fé en mi (?) xD Y por tanto amor y amenazas que me dan ♥ 

Recuerdos Perdidos

Gtop

Tus manos quemaban y profanaban mi cuerpo, me acariciaste y corrompiste cada parte de mí, tan fuerte y de manera única, que era imposible olvidar esas grandes manos sobre mí.

**

El sonido lejano de un estridente timbre sonar hizo que el hombre que yacía dormido en su habitación despertara. No se molestó en mirar si quiera la hora, bastante tardía, cuando comenzó a caminar a la salida de su casa. No lucía ni un poco preocupado por la oscuridad que rodeaba su largo jardín cuando intentó mirar algo, tan sólo volvió a escuchar el timbre sonar y, aun con pasos torpes y con la vista nublada, caminó hasta la puerta y abrió sin más.

Su nariz se respingó ante el prominente olor a licor, y negó para sí mismo, mientras intentaba abrigarse un poco más con la delgada bata de dormir que vestía. Sus labios se movieron, sin emitir sonido alguno, haciendo que el otro sonriera, no podía verle con claridad, pero sabía que así era.

El dueño de la casa volvió a mover los labios, y con fuerza obligó al otro a entrar. El evidente ebrio hombre vestía unos elegantes zapatos y ropa refinada de gala, que con esfuerzo el anfitrión logró llevarle al sofá más cercano.

La imagen de ambos se distorsionaba, como si de una cinta fílmica antigua se tratase, pero a color sin audio. Ambos hombres se movían energéticamente sus brazos y el dueño de la casa parecía estar gritando al otro, que permanecía en un extraño cuadro negro de luz.

La imagen se distorsionó y cobró color en instantes, otra habitación de la casa, mucho más oscura, era difícil distinguir ambos cuerpos. Los labios del propietario de la casa se movieron dudosos, se movían de manera extraña, era evidente que estaba nervioso, y sus pequeños ojos revelaban duda e incertidumbre, pero cuando sus labios se sintieron tocados por los del otro hombre todo se distorsionó de nuevo, y me di cuenta de que ese hombre debajo del elegante hombre era yo, Ji Yong.

Cerré los ojos con fuerza, pero al abrirlos de nuevo seguía sintiendo ese cuerpo sobre mí, sus labios bajando a través de mi cuerpo. Estaba asustado, y a pesar de que intenté alejarme no me movía ni un poco, si quería hablar mis labios no se movían ni un poco, mis dedos tan sólo se aferraban al otro y cuando quise ver su rostro todo se oscureció de nuevo.

“¡Aléjate!

¿Quién eres tú?

¿Por qué hago esto? …”

 — ¡Ji Yong! —La mirada de Seung Hyun fue lo primero que pude ver al abrir los ojos, sus dedos se clavaban en mis brazos con fuerza, provocándome dolor, lográndome despertar. —Ji… ¿Estás bien? —Su voz se volvió más dulce cuando logré sentarme.

Ignorando sus preguntas, miré a mí alrededor, estaba bien, todo lucía igual. Estaba en la habitación de Seung Hyun, y él estaba ahí, y yo no estaba con ningún extraño. ¿Entonces por qué no dejo de llorar?

—S-Seung…

—Ji Yong… ¿Qué ocurre? De repente comenzaste a gritar y moverte demasiado…creí que te estaba dando un ataque…Ji ¿Estás bien?

Un sueño, sólo un sueño. Repetía mi cabeza, mientras mi cuerpo entero temblaba y seguía sintiendo aquellas grandes y frías manos sobre mi cuerpo.

Negué lentamente. Si había sido un sueño, ¿Entonces por qué se sentía tan real?

—Ji…—Volvió a llamarme, pero en el momento en que sus manos me tocaron me alejé de inmediato, estaba muy nervioso.

—Yo…Tengo…Quiero ir a casa, Seung…Quiero ir a mi casa…—Sollocé, sin poder tranquilizarme.

Mi pecho dolía, un sinfín de emociones se amontonaba y agolpaban mi cabeza sin dejarme pensar.

—Ji… ¿Ahora? Son las cuatro y cuarto de la mañana, deberías volver a dormir, mañana…

— ¡No, no! Quiero ir ahora…Necesito ir. —Murmuré, poniéndome de pie, mientras salía en camino a mi habitación a tomar unos zapatos y abrigo.

Escuché los pasos apresurados de Seung detrás de mí, seguramente observándome angustiado, por lo que intenté mantenerme un poco relajado, sin embargo mi reflejo en el espejo de la habitación revelaba la expresión de un verdadero demente.

— ¿Realmente es necesario? —Murmuró, recargado en el marco de la puerta. Yo tan  sólo asentí, intentando contener mis lágrimas. Él suspiró. —Te llevaré…Pero después tendrás que ir con el medico Park…esto no me agrada Ji Yong.

Yo tan sólo asentí y caminé detrás de él en camino a uno de los automóviles.

Durante todo el transcurso del departamento a mi casa me sentí impaciente. Sabía que Seung Hyun estaba preocupado por mi estado y nerviosismo, no tenía que afrontarle para sentir su mirada preocupada a mi costado. Por ese motivo decidí mirar por la ventanilla todo el tiempo, aunque a esa hora no se viera gran cosa. Debía tranquilizarme y pensar las cosas.

¿Cuánta era la probabilidad de que me acostara con alguien? Con un hombre ebrio…

Tan sólo recordarlo me provocó escalofríos. ¿Acaso ese era mi pecado? Si resultaba real, no sólo había mantenido relaciones sexuales con alguien de mi mismo sexo, sino que había sido oficialmente infiel a Sun Hi…Una cosa era tener un amor platónico, y uno muy distinto el engaño.

Negué con confianza, no debía olvidar que podría ser un simple sueño también, idea que me parecía fantástica.

—Bueno, estamos aquí. —Seung bajó rápidamente del auto y abrió la puerta para mí. Su rostro de preocupación no había disminuido ni un poco.

Bajé y observé alrededor. Era un lugar lujoso, sin duda, era evidente que era caro, pero no reconocía nada, eso estaba bien por el momento. Caminamos por la acera, hasta llegar a una gran reja igual de lujosa.

—Ji…como sabrás, nosotros no fuimos muy cercanos antes de tu accidente…yo no…—Murmuró, señalando el sistema de seguridad de la casa. Al parecer debía introducirse una clave.

Mis fríos dedos viajaron al aparato lleno de luces e introduje una serie de números, no los medité, tan sólo tecleé, y la puerta se abrió.

—Funcionó…—Solté realmente sorprendido.

—Ji…—Comenzó Seung, posicionándose a mi lado. — ¡Lo recordaste, hombre! Eso es magnífico.

—Sí, sí. —Asentí feliz y mucho más tranquilo.

Cada día recordaba más cosas, estaba mejorando.

—Vamos, estar aquí parece ayudarte. —Ante sus palabras asentí y le seguí a lo largo del inmenso jardín.

El césped y flores seguían en todo su esplendor, seguramente alguien cuidaba de ellos.

—He traído las llaves, tu madre las ha dejado por si querías venir…No creí que fuera necesario.

—Déjame hacerlo. —Pedí, tomando las llaves y abriendo la puerta. Con duda recorrí la puerta todo lo que se podía, y me atreví a mirar adentro. —No puede ser…—Murmuré, sintiendo ahogarme. Era idéntico a mi “sueño” —No…No es verdad…—Comencé a llorar.

—Ji ¿Qué ocurre? ¿Estás bien? —Nuevamente intentó confortarme, pero no lo logró. —Vámonos de aquí.

—No, no…! …Déjame hacerlo solo…yo…sólo quiero estar aquí.

Sus ojos me miraron con temor, era más que evidente que algo ocurría, pero Seung Hyun sabía perfectamente que no le diría nada, por lo que sólo suspiró y asintió resignado.

—Estaré en el auto esperándote.

—Gracias. —Asentí, mirándole marchar.

Intenté controlar mi respiración agitada y despejar mi mente. El cuerpo comenzaba a dolerme. Aun podía ser un simple sueño, no debía alarmarme.

Avancé a lo largo de la estancia principal, era tan fresca y casual, me resultaba familiar y extremadamente acogedora, sin duda era mi casa, a medida que iba avanzando encontraba cosas mías, fotografías, pinturas, esculturas…un sinfín de cosas que marcaban mis gustos y esencia.

Me sentí bien. Resultaba tranquilo.

—Acabemos con esto. —Susurré, sintiendo el frío matinal colarse por debajo de mi ropa. Suspiré una vez más e intenté recordar cómo llegar a mi habitación, en vano, claro está.

Avancé escaleras arriba, hasta llegar a un largo pasillo de lo que parecían habitaciones.

—Bueno…mi habitación debe ser la principal…—Caminé hasta ella, y abrí con rapidez.

La habitación era un desorden, tanto que dudé unos instantes que realmente fuese mi habitación, pero parecía estar en el estado en que la dejé. Las cortinas estaban cerradas, la cama desordenada y había varios pares de zapatos y ropa distribuida por el suelo.

Un tanto ansioso avancé hasta la cama y me senté, para después recostarme.

—Mmmh…—Solté, sintiendo la comodidad. La cama era grande y muy cómoda, todo iba bien, hasta que percaté un extraño olor. — ¿Qué es eso? —Murmuré, sentándome de nuevo. —El olor cada vez se hacía más fuerte. Era el olor de un perfume y alcohol.

Temblé.

Me sentí nuevamente sucio, no había necesidad de saber más. Yo realmente me había acostado con ese hombre. Comencé a llorar, lloraría tanto como pudiese, no quería desmoronarme frente a Seung, después iría con el medico Park, él debía poder ayudarme a entenderlo todo.

No supe cuánto tiempo transcurrió, pero cuando me moví, mi cuerpo, que se había mantenido tenso, se sintió adolorido. Los primeros rayos de la luz del sol se colaban por la ventana, debía estar amaneciendo ya.

—Es hora de irme…—Susurré con voz ronca, poniéndome de pie.

Miré una vez más a mí alrededor, intentando recordar algo, pero nada. A cambio noté una nota arrugada en el buró que yacía a un costado de la cama. Me acerqué rápidamente.

“Lo siento” —Decía.

¿Qué era eso? Llevé mis manos a mi cabeza, tan sólo para llorar más.

Esa nota estaba firmada por mí.

 

Tus manos quemaban y profanaban mi cuerpo, me acariciaste y corrompiste cada parte de mí, tan fuerte y de manera única, que era imposible olvidar esas grandes manos sobre mí. 

Notas finales:

¿Quédó corto? Tal vez...¡Pero actualicé! xD

No demoraré tanto para la siguiente actualización, pues a este fic ya le quedan pocos capitulos, y quiero terminarlo para seguir con los demás y publicar otros trabajos.

Gracias por leer ♥ 


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