Recuerdos Perdidos
Gtop
Hay cosas que la mente olvida…sin embargo el corazón jamás las borra.
Mis pasos lentos resonaban en aquel amplio lugar, todo parecía estar estratégicamente acomodadas para cinco personas…cinco sillas en el comedor, cinco lugares en el sofá, incluso cinco percheros…
—Ah~ Se siente bien volver a casa juntos. —Comentó Seung Ri, llegando hasta a mí, pasando uno de sus brazos sobre mis hombros con seguridad.
Todos pasaron con rapidez al apartamento, era tan grande que nuestros pasos y voces hacían eco. Los chicos parecían igual de sorprendidos que yo, admiraban todo con sumo detalle, en completo silencio.
—Vamos, Ji Yong, te mostraré tu habitación. —La fuerte voz de TOP me sacó de la ensoñación. Sólo asentí y le seguí como pude, a un paso mucho más lento, aun me causara dolor el esfuerzo.
Pasamos por lo que era la sala, el comedor y la cocina, después seguimos por un largo pasillo que tenía varias puertas, supuse que eran habitaciones.
Seung Hyun se detuvo frente a una larga fila de escaleras, de sólo imaginar subir por ahí sentí vértigo.
—Tú habitación está arriba… ¿Crees poder subir? —Me preguntó mirándome apenas de reojo. Tragué grueso. —…Si quieres puedo ayudarte y…
— ¡No es necesario! —Me apresuré a decir, aunque debido a la velocidad pareció como si estuviera enojado, pero era todo lo contrario, me sentía apenado, no quería ser una carga ahora sabiendo que TOP estaba molesto. — Yo puedo subir…aunque será lento…—Advertí. Seung no dijo nada, sólo espero a que comenzara a subir.
Miré la larga fila de escaleras, y puse mi pie derecho en el primer escalón, tuve que agarrarme del largo y rustico barandal para poder sostenerme con fuerza e impulsarme hacia adelante. Definitivamente iba a ser una tortura…
No supe cuando tiempo llevaba subiendo las escaleras, pero no había avanzado precisamente mucho, cada escalón hacia que mi cuerpo doliera horrores, además sentir los pesados pasos de Seung Hyun detrás de mí no era agradable, su presencia me ponía nervioso, incluso el sentir su mirada clavada en mi me provocaba ansiedad.
—Seung…puedes subir rápido, yo llegaré algún día. —Comenté con gracia, al menos lo intenté, la verdad quería llorar, ya me dolía todo, absolutamente todo, incluso el cabello comenzaba a pesarme, por ridículo que pareciera, ahora me parecía una estupidez el haberme negado a tomar analgésicos.
Escuché resoplar a Seung y luego unos pasos más rápidos, sin embargo nunca me pasó de largo, no, se colocó a mi costado. Deslizó una de sus manos en mi cintura y con la otra tomó mi brazo y lo pasó sobre sus hombros, poco después me sujetó con fuerza y me levantó del suelo, avanzando con rapidez por las escaleras.
La sorpresa no cabía en mí, estaba totalmente sorprendido ¡Me estaba cargando prácticamente! Sentí mis mejillas enrojecer, que vergüenza. Con una rapidez increíble llegamos hasta el segundo piso, Seung no se veía nada agitado y yo estaba completamente a salvo. Me depositó en el suelo nuevamente con delicadeza.
…¿Cómo explicar la sensación que se apoderó de mi cuerpo? Sus manos me habían tocado apenas unos instantes…pero era como si de una eternidad se tratará, yo conocía la sensación de sus manos sobre mi…
—S-Seung…no era necesario. —Dije muy apenado, mirando el suelo, intentando calmar mi repentino déjà vu.
—No es la primera vez que lo hago. —Dijo de repente, le miré, pero él ya avanzaba hacia una de las dos puertas que había ahí.
¿A qué se refería? Sin darme cuenta comencé a sonreír, quizá el recordarlo era una señal de que mi mente quería regresar.
—Esta es tu habitación. —Me dijo cuándo logré alcanzarle, después de muchos pasos lentos. Seung me abrió paso en la rustica puerta para que pudiera pasar…a mi habitación.
Era amplia, rustica…la verdad no había mucho que ver. Una cama grande, un sofá, varios muebles con cosas sobre ellos, un estante con libros y otras cosas que no me detuve a ver, y dos grande puertas más.
— ¿Qué hay aquí? —Pregunté, ya adentro, palmeando las puertas misteriosas.
—Una es el baño…y la otra tú armario. —Detecté la diversión en su voz, por lo que giré para verle. —Tuvimos que ampliarlo para que cupiera tu ropa de ahora…—Sonrió ampliamente, parecía divertido. Abrí la puerta que había dicho que era mi armario, quería ver cuál era mi estilo.
Al abrirlo se reveló un pasillo largo, extenso y atiborrado de ropa ante mis ojos. Me quedé boquiabierto, era demasiado. A penas y pude dar unos pasos…parecía un sueño.
—Todo esto… ¿Es mío? —Costaba creerlo. Seung asintió aun divertido.
—Ven, debes descansar, te conozco…eres capaz de quedarte una semana entera ahí adentro. —Él tomó mi brazo y me ayudo a salir de ese mar de ropa. Caminamos hasta el sofá, donde me senté agotado. Eso de no caminar durante algunas semanas y luego hacerlo lesionado, dolía mucho.
Repentinamente nos quedamos en silencio, no sabía que decir, todo era completamente nuevo.
—Ji Yong…—Me llamó una vez más, sentándose a mi lado, lucía nervioso. Le miré indicándole que siguiera. —Debo decirte algo…quiero que lo sepas de mí y no de…otra persona. —Ahora sonaba fastidiado. Le miré extrañado, eso no era muy normal.
— ¿Qué ocurre? …¿Estas bien? —No pude evitar preguntar, estaba comenzando a ponerme nervioso. Ya eran demasiadas emociones últimamente, se podría decir que mi mente no estaba en su mejor estado.
—Hoy…el día de hoy por la mañana, fui al departamento de Sun Hi. —Le escuché, intentando comprender sus palabras. Tardé en comprender que se refería a mi…prometida. —Tenía que hablar con ella…yo…—Miró la habitación frustrado, se veía la impotencia en sus ojos. —yo…fui a pedirle que…—Todo comenzaba a ser confuso, me estaba preocupando.
— ¿Seung Hyun…estas bien? — Volví a preguntarle, comenzaba a dudar que fuese verdad.
—Le dije a Sun Hi…le pedí que terminara su compromiso contigo…que cancelara la boda. —Aquella confesión me dejó pasmado. ¿Qué el que? Despegué mi vista de él, parpadeando varias veces… ¿estaba alucinando? Miré mi alrededor, todo parecía muy real… ¿Entonces por qué…? —Discutimos…ella se negó a hacerlo, a pesar de tu condición y…
— ¿Cómo te atreviste? —Pregunté repentinamente enojado…sin saber el porqué. —Ella…era natural que se negara… ¡Eres un estúpido! —Comencé a gritar. No quería hacerlo…sin embargo no pude evitarlo.
—Yo sólo quería ayudarte…—Pronunció molesto, seguramente por mi enojo repentino.
— ¿Ayudarme? …¿A qué, Seung Hyun? ¿Ha arruinar mi vida? —Exploté, reflejando mi miedo…miedo a perder lo que ni siquiera sabía si era mío o no. —Ella…ella es una chica ¿y aun así te atreviste a decirle eso? …¿Imaginas cómo se sintió cuando se lo dijiste? Ella…—Las palabras se atoraba en mi garganta de sólo pensarlo. — ¿Imaginas cómo se siente al saber que su futuro esposo ni siquiera la recuerda? ¡Eso no está bien! Sun Hi debe ser feliz…así que…si yo al escogí para casarme, debe ser por algo. —Estaba enloqueciendo ya.
— ¡Has lo que se te dé la gana! —Pronunció molesto, poniéndose de pie.
— ¡Entonces deja de meterte! —La impotencia que sintió mi cuerpo fue inexplicable, y se incrementó cuando TOP salió de mi habitación.
Golpeé el sofá con fuerza, estaba furioso, asustado…
No era precisamente por Sun Hi, no…a ella yo ni le conocía en ese momento…sin embargo, no quería que toda la situación me llevara a arruinar mi vida, si ella había sido la elegida antes…lo seguirá siendo…
…
—Ji…Ji Yong…—La recién llegada comenzó a llorar, provocando que su maquillaje se corriera. Caminó a paso lento, hasta sentarse a mi lado, mientras yo permanecía acostado en la cama reposando. —Soy yo, Lee Chae Rin, CL. —El nudo en su garganta apenas hacía audible su voz.
Le miré apenado, mirando ese anhelo de que la recordar en sus ojos…comenzaba a hartarme de esa mirada en todas las personas. Seguí mirándola, cada detalle de ella que me diera algún indicio de que si le conocía, pasé mis ojos por su largo y rubio cabello, luego su rostro triste…no pude recordar nada, ni siquiera su figura delgada me dijo algo.
—Todo estará bien…yo…soy tu amiga. —Limpió sus lágrimas y comprendió que no le recordaba al no decir nada. —Me alegra mucho que estés bien, nos has dado un buen susto. —Intentó sonreír, sin embargo todo quedó en un intento.
—Chae…—La otra joven que había venido con ella se acercó al fin. Desde que Daesung me había dicho que tenía visitas, ella se había quedado a un lado de él, mirándome de lejos, parecía como si observara cada gesto que hacía.— Ji…Soy yo, Park Bom. —Su tono de voz era mucho más seguro que el de Chae Rin, parecía segura de lo que decía, me recordaba a TOP, incluso su cabello era tan negro como el de él…
Y como por arte de magia, Seung Hyun entró a la habitación, seguido de Seung Ri y Taeyang. Se saludaron entre si todos, me limité a mirarles.
—Seung Hyun…—Pronunció Bom, caminando de inmediato hacia él, saludándole amistosamente. Taeyang se acercó a mí y comenzó a charlar con CL sobre mi condición.
Al parecer ellas era compañeras de la empresa a la que pertenecíamos, por así decirlo…comenzaba a asustarme más, ellas eran igual de extravagantes que los chicos ¿Es acaso que no conozco personas normales? Suspiré temiendo que no fuera así.
Seguí conversando con la rubia, mientras ella me contaba cosas de la empresa y lo preocupados que han estado todos respecto a mi accidente, del cual no sabía nada. Le escuchaba mientras miraba a los demás, pude ver como Bom abrazaba a TOP con fuerza y luego salían de la habitación…será que ellos…
¿Ellos serán pareja?
Deje la duda en el aire, no me parecía adecuado preguntarlo ahora, así que sólo seguía escuchando a todos hablar, después tendría tiempo para averiguar todo lo que quisiera…
Mi mente ha olvidado cosas…pero mi corazón me esta obligando a recordarlas…