3020 por JhSkellington

Baekhyun estaba harto.

Harto de ser la oveja negra de la familia, de ser el chico raro de la escuela y que de todos los lugares a los que le pudieran llevar en sábado, le hubieran obligado ir a la iglesia. En realidad no entendía por que su madre se esforzaba en llevarlo si en aquél lugar la mayoría de las personas le odiaban, especialmente los chicos de su edad.

Aislándolo, obligandolo a quedarse siempre dentro del edificio de la iglesia cuando se trataban de actividades que implicaban mas que nada socializar.

Y aquél sábado especialmente, le obligarían a estar todo el día en dicho lugar. Con la excusa de que los jóvenes tendrían que unirse más, tch. Baekhyun sabía bien que sólo decían ésa mierda para que la iglesia no se quedara vacía. 

Así que como siempre, se recostó sobre una de las tantas bancas vacías. Los otros jóvenes se encontraban jugando al baloncesto en el patio trasero del edificio, siquiera le habían visto llegar. Y como siempre, terminaba encerrado en aquél lugar, sólo, sin hacer nada, sin hablar con nadie, jugando con su celular o escuchando música, por que éso ya era costumbre para el pelirubio. 

Y por eso para Baekhyun era como un castigo ir a la iglesia, por que a pesar de estar solo tenía que soportar las miradas de rechazo y asco. Ni siquiera le daban una oportunidad y ya le estaban rechazando, realmente pensaba que era insoportable estar en aquél lugar.

Así que decidió matar el tiempo escuchando un poco de música, Se colocó los audífonos y cerró los ojos, pensando en una y tantas cosas , soñando con la libertad que pronto conseguiría pues faltaban unos cuantos días para su cumpleaños, y así, entre pensamientos y sueños se quedó completamente dormido. 

Y aunque se había rendido ante el mundo de los sueños, Baekhyun podía sentir los pequeños rayos de sol alumbrar su rostro, colándose por las grandes ventanas, avisándole que el día apenas estaba comenzando. 

Y cuando volvió a abrir los ojos no había nadie. Lo que le habían parecido sólo unos segundos se habían convertido en horas. La noche había llegado y la luz de la luna ahora se encargaba de alumbrar aquél tétrico lugar. Baekhyun nunca se había quedado tan tarde dentro de aquél lugar, así que para él era algo nuevo, y sin embargo, cuando abrió los ojos sintió un gran sentimiento de pesadez sobre su pecho. 

El lugar estaba completamente oscuro, con un aspecto un tanto tenebroso que hasta parecía diferente. ¿Le habían secuestrado y llevado a otro lugar? pensó por unos segundos, sin embargo al verificar bien y confirmar que era el mismo sitio volvió a respirar. Lentamente se reincorporó y estiró su cuerpo, bostezando, ¿Cuantas horas había dormido?...

Y por un momento pensó que lo más extraño de todo es que no había nadie, ¿Tanto le odiaban como para dejarlo encerrado en aquél lugar? 

Se levantó del asiento de madera, haciéndolo crujir por la pérdida de peso y cuando estuvo de pie se dirigió hacia la puerta, la cual estaba abierta y hasta parecía algo dañada de la cerradura, ¿Que coño había sucedido mientras dormía?, una vez se hizo camino hacia la parte trasera del lugar se detuvo, buscó su celular dentro del bolsillo trasero de su pantalón y al sacarlo pudo descubrir que no tenía señal alguna.

“¿Mhm...? Que mierd....” Se detuvo cuando levantó la vista, encontrándose con la imagen del patio trasero destruido, y del otro lado de la reja una calle completamente destrozada, escombros pertenecientes a edificios yacían sobre el camino y bloqueaban una de las avenidas principales. 

Baekhyun estaba confundido, ¿Acaso estaba soñando? 

Rápidamente cerró los ojos, llevando ambas manos hacia sus sienes, acariciándolas con fervor. 

“Despierta, joder.” Murmuró varias veces, aún con los ojos cerrados, cuando de pronto escuchó un grito proveniente de la parte frontal. “¿Eh..? N-No me jodas.” Tembló.

Baekhyun sabía bien que había algo extraño y debía huir de aquél lugar, su intuición nunca fallaba, así que para no arriesgarse decidió no revisar de donde provenía aquél grito, el cual después fue acompañado de algunos sonidos extraños, algo así como...¿Lasers?, ¿Disparos? No sabía exactamente lo que era y no quería descubrirlo, así que se colgó de la reja negra que protegía el viejo edificio de la iglesia y la brincó sin problema alguna. 

Y fue entonces cuando pudo observar bien que aquél edificio del que había escapado se encontraba en condiciones precarias, casi destruido al igual que los edificios que bien recordaba estaban del otro lado de la acera. 

¿Realmente era un sueño?, o algo así como una pesadilla....

Baekhyun sabía que debía buscar a alguien lo más rápido que pudiera, así que sin pensarlo corrió hacia la única dirección que sabía de memoria, ¡Gracias al cielo que su casa estaba a unas cuantas cuadras!, pensó, y comenzó a seguir el camino de prisa, casi volando. Pero después de unos minutos aquella esperanza que de pronto había crecido al pensar en su hogar se desvaneció debido a la soledad de las calles y la oscuridad que las invadía, también por el hecho de que la mayoría de los edificios y casas estaban destruidos y abandonados. Incluso había visto que los carros parecían destruidos, como si hubiese pasado un gran lapso de tiempo desde que habían sido usados. Los vidrios estaban todos rotos en la mayoría de los carros y un poco de hierva salía en forma de ramas desde el interior. ¿Qué estaba sucediendo?, aquella mañana había pasado por el lugar y todo estaba perfectamente en su lugar, los viejos vecindarios estaban llenos de niños alegres y las casas decoradas de diferentes colores, dándole una alegría única al lugar, y ahora, justo horas después todo parecía viejo y destruido. Y lo peor de todo es que parecía tan real, podía sentir su corazón casi salirse de su pecho mientras avanzaba y no encontraba alguna señal de vida. 

Después de haber pasado algunas cuadras , se detuvo de golpe, y fue cuando de pronto se encontró de pie, estático al ver que el lugar que llamaba hogar estaba hecho ruinas de la misma forma que los otros edificios y construcciones adyacentes. 

¿Donde estaba su madre?, ¿Qué había pasado con su perro, con sus vecinos?, Baekhyun se giró, buscaba algo que le dijera que nada de ésto era real, y de repente sus ojos se llenaron de lágrimas. 

Si aquello era una pesadilla quería despertarse ya. 

Y entonces pudo escuchar algo, ¡Al fin!, pensó mientras limpiaba sus lagrimas, podía ver que una luz se acercaba hacia él a toda velocidad, parecía un oficial por las luces del vehículo en el que venía con la única y original mezcla de colores “rojo con azul” y el uniforme que resplandecía por la iluminación de la motocicleta. Sin embargo, cuando estuvo lo suficientemente cerca pudo ver que sus facciones estaban realmente lejos de ser humanas, sus ojos brillaban con un rojo intenso y el rostro le brillaba como si estuviese hecho de metal, aquella figura humana venía montada sobre una motocicleta que parecía flotar debido a la velocidad, ¿Acaso estaba alucinando? 

“¡D-Disculpe!” Gritó con la voz quebrada, sonrojándose al darse cuenta del fallo en su voz. 

Pero pronto el sonrojo se desvaneció cuando sintió algo quemar su brazo, ¿Acaso le había disparado? 
Baekhyun retrocedió un paso, aún en shock mientras aquella figura endemoniada se acercaba, empuñando lo que parecía un arma. Hacía algunos segundos que aquella cosa se había detenido de golpe frente al menor, dejando su vehículo atrás para poder acercarse al joven humano con una velocidad inigualable.

Aquello era un robot, como los que había visto en tantas películas y llevaba puesto un uniforme de oficial con las siglas “ TDS” , Baekhyun tembló, sabía que algo andaba mal, y lo pudo confirmar cuando su brazo fue jalado con brusquedad por el aterrorizante androide. 

“Violación del código 1,3 y 6. Sin registros , Fuera durante el toque de queda e Intromición a un área restringida.” El androide murmuró alto, su voz robótica haciendo eco debido a la soledad de aquél lugar, haciendo estremecer al menor. Jamás en su vida había visto algo así, y en aquél momento no necesitaba que le pellizcaran, el agarre de aquél ser era lo suficientemente fuerte como para saber que no estaba soñando.

“¿Q-Qué?” 

“Estás arrestado.” 

Baekhyun parpadeó varias veces, aún en shock, cuando sintió unas chispas saltar contra su rostro, quemandolo un poco, haciéndolo chillar. Y de pronto el agarre en su brazo se soltó, los ojos del androide comenzaban a parpadear, vacilando entre rojo y negro, como si algo estuviese fallando y fue entonces cuando se dió cuenta de que no estaban solos, una figura que parecía humana, completamente cubierta por prendas negras apareció frente a él, agarrándolo gentilmente de la mano y obligandolo a seguirle, el androide yacía tirado en el suelo, su brazo desprendido del cuerpo, aquella persona se había encargado de cortarlo con un especie de láser por lo que había logrado ver, y sin haberse dado cuenta se encontraba sobre el vehículo de aquél ser de metal, abrazado fuertemente a la cintura de su salvador anónimo. 

Todo había pasado tan rápido y Baekhyun estaba tan confundido, sumergido en su mundo de pensamientos mientras dejaban atrás la oscuridad de aquellas calles, acercándose lentamente a un lugar más luminoso y pequeño. Al parecer a donde se dirigían sí había vida y también un enorme contraste entre edificios derrumbados y pequeños locales resplandeciendo debido a la luz de las lámparas que había en las aceras. 

“Un chico rebelde, ¿huh?” Pudo escuchar una voz seductora tras aquella máscara negra, confirmando que de hecho sí era un hombre el que le había salvado de aquél robot. 

“Y-Yo no sé que sucede.” Baekhyun confesó asustado, aferrándose aún más a la cintura del hombre mientras aceleraban por las estrechas calles de aquél lugar, Baekhyun en su vida había estado ahí a pesar de que solía caminar largos tramos para todo, especialmente para ir a la escuela , y por un momento pensó que tal vez era más peligroso estar con aquél desconocido que con el robot. 

“Aham, Y entonces dime, ¿Donde consigues las drogas?” Pudo detectar el tono de broma que había usado aquél hombre y de pronto se sintió irritado. 

“¡De qué estás hablando!” Gritó a pesar de que no tenía las fuerzas suficientes, se sentía mareado, cansado y confundido y aquella persona no lo ayudaba cuando se ponía a jugar sobre la moto, acelerando y después bajando la velocidad repentinamente, moviéndose de un lado al otro en las pequeñas calles del lugar. Baekhyun sólo quería bajarse y huir lo más lejos, buscar a su madre y después dormir por un largo rato. 

“Sólo bromeaba, no tienes por que exaltarte...” Y cuando el desconocido susurró aquello, Baekhyun pudo sentir que le sonreía, incluso aunque no podía verle el rostro por la posición en la que se encontraban y agregándo el hecho de que llevaba una máscara de tela negra, la cual resaltaba con todo el conjunto de pantalones negros y la playera de mangas largas, junto con unos guantes que podía ver llevaban patrones de calaveras. ¡Que divertido! Seguramente era algún freak que se sentía rudo al hacer aquello, pero cuando se bajaran del vehículo se aseguraría de darle una buena paliza, pensó, y de alguna extraña forma se abrazó aún más a él, hundiendo el rostro en la espalda de éste. 

Fueron unos cuantos minutos más sobre la moto, y se detuvieron justo en frente de una casa color marrón. Las luces estaban apagadas, pero aquél vecindario repleto de casas iguales se veía más amigable que el suyo anteriormente, si es que realmente era su vecindario. 

“Bueno, puedes bajar primero.” Escuchó al otro decir, la motocicleta seguía estacionada frente a la pequeña casa después de haber pasado unos minutos de su llegada y ni uno de los dos se había atrevido a separarse o levantarse siquiera de aquél vehículo. Baekhyun parpadeó varias veces mientras sentía el rostro hervir, y rápidamente se separó del agarre que tenía sobre el otro, avergonzado por haberse quedado abrazado al otro.

Con cuidado colocó primero su pierna derecha sobre el suelo, sintiéndose aún más mareado que antes al hacer aquello, seguidamente colocó su otra pierna y aún agarrándose del asiento de la moto esperó a que aquella sensación de mareo desapareciera, esperando que la suave briza nocturna le ayudara a revertrlo más rápido. 

Y fue entonces que se dió cuenta de algo...

Y es que aquél desconocido se había desecho de la máscara hacía algunos minutos, y su piel oscura brillaba de una forma atrayente bajo la luz de las lámparas, Baekhyun realmente confirmó que le sonreía cuando el otro se giró hacia él y le guiñó el ojo, haciendo al más bajo sonrojarse como nunca antes lo había hecho. 

“Y-Yo-” 

“De nada.” El otro susurró, interrumpiéndolo mientras se bajaba de la moto. Y entonces fue cuando Baekhyun pudo darse cuenta de lo alto que era comparado consigo, algo que le hacía sentir de una forma extraña, haciéndole sentir sumiso. 

“¡¿Donde coño habías estado, Eh?!” Baekhyun se sobresaltó cuando escuchó una puerta abrirse de golpe y una voz desconocida hizo aparición en forma de gritos, mostrando una pequeña silueta salir del lugar, un joven de piel pálida y cabello castaño, un poco más bajo que él y con unos ojos saltones bastante especiales. Parecía al borde de un ataque nervioso, y también pudo ver que le seguía otra persona un poco más alta, el moreno sólo sonrió ladino, girándose para poder encarar al otro desconocido. 

“Estaba haciendo la acción del día, como puedes ver.” El más alto apuntó hacia Baekhyun, quien se quedó helado al ver varios ojos sobre sí. 

El más bajo arqueó una ceja, observándolo con desprecio antes de volver dentro del lugar, dejando la puerta abierta para que ambos se adentraran mientras la otra persona se recargaba al marco de ésta. 

“¿No crees que te has pasado un poco, Kai?” Preguntó el joven de cabello rosado, haciendo una mueca, y el moreno sólo gruñó. 

“No podía dejarlo morir, ¿Sabes?, además he conseguido ésto.” Baekhyun se sentía un poco fuera de lugar mientras el moreno apuntaba hacia el vehículo que habían robado anteriormente al robot malvado, aquellas personas se habían olvidado por completo de que estaba ahí mientras hablaban de aquello, y al parecer no se encontraba cerca de su hogar, ¿En donde pasaría la noche? Se preguntó, perdiéndose de la conversación que tenían los otros desconocidos, y aunque había logrado escuchar un nombre entre algunos comentarios , en realidad no quería entrometerse, lo único que quería era ver a su madre.

Y mientras pensaba en ello, se encontró a si mismo soltando algunas lágrimas, sollozando fuertemente y atrayendo la atención de los otros dos. 

El moreno dejó de sonreír y se acercó lentamente a él, agachándose un poco para poder estar a su altura.

“¿Ocurre algo, enano?” Preguntó juguetón mientras que el pelirosa se acercaba de igual forma, Baekhyun ocultó su rostro entre las palmas de sus manos, se sentía avergonzado por haber reaccionado de aquella forma, pero de alguna forma también se sentía seguro, y de pronto aquél sentimiento de desconfianza hacia el más alto se había esfumado, Baekhyun eliminó toda distancia del cuerpo del moreno y le abrazó con fuerza, llorando aún más fuerte. 

“¡No tengo idea!” Gritó entre el llanto, 

“¡Baja la voz!” El otro joven que les acompañaba susurró, y el moreno asintió, empujando a Baekhyun hacia la pequeña casa marrón. “Voy a esconder la moto, vengo en unos instantes.” Fue lo que Baekhyun pudo escuchar antes de que la puerta se cerrara tras de sí y el moreno lo guiara por el lugar hasta llegar hacia un sillón de piel color negro. El lugar era pequeño y tenía carencias, sin embargo, lograba irradiar un calor que hacía sentir mejor al menor. 

“Estaba en la iglesia hace algunas horas, tu sabes...me quedé dormido y cuando desperté todo estaba extraño, las casas estaban destruídas y ésa cosa...ésa cosa...” Baekhyun volvió a sollozar y el moreno lo veía con ambas cejas erguidas, como si no comprendiera nada de lo que le decía. 

“¿Tienes código?” Preguntó frío, examinándolo, como si buscara algo sobre los brazos de Baekhyun, y se quedó helado cuando observó que sangraba justamente del izquierdo. 

“¿C-Código?” Baekhyun tampoco entendía nada. 

“Mhm, Código, como todos aquí.” El moreno extendió su brazo izquierdo y levantó un poco la tela que cubría su muñeca, mostrando un pequeño tatuaje que consistía en unos cuantos dígitos: 40234. “Todos tienen un código por que el gobierno lo ha hecho obligatorio, ¿Donde has estado todo éste tiempo? , ¿O acaso estás jugando conmigo?” Baekhyun pudo notar que el moreno se estaba exaltando. 

“N-No sé de lo que hablas.” Confesó el menor, aún incrédulo mientras examinaba aquél tatuaje y con cuidado levantó su brazo lastimado, mostrando que estaba libre de algún tatuaje. 

“Tch, que chaval mas raro, ése tatuaje se lo ponen a los recién nacidos, ni idea del por qué no tiene uno.” Pudo escuchar de nuevo al pelirosa hablar, acercándose pesadamente hacia donde estaban sentados. 

“Tal vez es hijo de algún rico. Escuché rumores de que ellos no llevan una mierda.” El moreno susurró, con el rostro completamente serio.

“No lo creo, Sólo míralo a la cara.” El pelirosa sonrió ladino cuando el chico de ojos saltones apareció de nuevo tras una puerta, su rostro completamente serio. 

“Deja de joder, Kyungsoo.” El moreno respondió cortante mientras tomaba el brazo herido de Baekhyun. “Tráeme el botiquín.” Y fue así que aquél joven llamado Kyungsoo volvió a desaparecer por unos momentos, antes de volver con un pequeño maletín blanco, entregándoselo al moreno con recelo. 

“La próxima vez que traigas a cualquier vagabundo encárgate tú de atenderlo.” Fue lo último que susurró antes de salir de aquél lugar furioso, desapareciendo bajo unas escaleras profundas que seguramente llevaban a algún tipo de piso subterráneo. 

“Ignóralo, Jongin, sólo está celoso.” Fue lo que el otro chico le dijo, aún sonriendo.

“Debe de parar, Luhan, yo no le debo nada.” El moreno respondió mientras remojaba un pedazo de algodón con un poco de alcohol, luego dirigió su mirada hacia Baekhyun, quien le veía confundido, su llanto había desaparecido hacía unos momentos. Y por unos instantes el moreno sonrió, mostrando su perfecta y blanca dentadura. 

“No me he presentado, ¿Verdad?, Me llamo Jongin, pero puedes decirme Kai....” Fue lo que susurró antes de colocar el algodón sobre el brazo de Baekhhyun, quien sollozó un poco ante el leve ardor. Sabía que aquella herida no era tan grave, pero aún así era bueno prevenir alguna infección. Y más aún cuando el menor había estado expuesto al toque de aquél androide, pues el metal del que estaba hecho solía oxidarse fácilmente, y aunque el gobierno invertía bastante dinero en aquellos “guardias”, sabía bien que no eran tan peligrosos, por lo menos los que resguardaban las calles. 

“Y-Yo soy Baekhyun.” Respondió tembloroso, evitando la mirada del moreno. 

“Y yo soy Luhan.” Interrumpió el chico de cabellos rosados. “Y el otro chico era Kyungsoo, ¿A que es agradable, verdad?” 

Baekhyun asintió, aún con la vista hacia abajo. Realmente estaba confundido, nadie le había aclarado nada y cada vez que escuchaba a los desconocidos hablar terminaba aún más confundido, ¿Qué era éso del código?, ¿Acaso había viajado en el tiempo y se encontraba en el futuro?, Baekhyun tembló al considerar la idea y levantó la vista, sintiéndose sumiso ante los ojos penetrantes de quien se hacía llamar Jongin. 

“¿En que año estamos..?” Fue lo que el rubio preguntó, mordiéndose el labio inferior, y fue cuando escuchó la respuesta de Luhan que sintió sudar frío. 

“3020, ¿Por qué?” 

“¿Estás bromeando?” Baekhyun volvió a preguntar, incrédulo, ¿Alguien les había pagado para que dijeran aquello?, pero entonces; ¿Y el androide?....y todos los edificios destruidos, y los códigos....

“¿Por qué deberíamos?” Ésta vez fue Jongin quien respondió, con el rostro serio. 

“Por que antes de dormirme yo estaba en el año 2014.” Fue lo que contestó, desolado, de nuevo aquél sentimiento de miedo se apoderaba de su cuerpo. 

“¡No puede ser!, ¿Acaso es como ésas leyendas que nos contaba Soo Man?, De personas que viajaban en el tiempo por culpa de su “yo” futuro?” Luhan abrió los ojos como platos al exponer aquella idea y Jongin asintió, rodando los ojos, parecía aburrido. Baekhyun arqueó una ceja. “¡¿Qué?!” Preguntó asustado, encogiéndose sobre el colchón. 
“ Hace algunos años, el anciano que nos salvó de las calles nos contó una historia, él juraba que en verdad ocurrían casos como éstos,” Luhan hizo una pausa para relamerse los labios. “Se dice que existen varias réplicas de nuestros cuerpos en diferentes tiempos, en el pasado, en el presente y en el futuro, y hay veces en las que cuando un cuerpo muere y se encuentra en el futuro, puede atraer a otro de los cuerpos que se encuentran en el pasado si se llegan a conectar, generalmente suele pasar cuando la persona muere y al mismo instante el otro cuerpo se encuentra descansando. No hay muchas posibilidades de que alguien esté durmiendo mientras que una réplica en el futuro muere. Pero él decía que cuando sucedía ése cuerpo suele trasladarse hacia el futuro para poder vivir lo que el otro tenía pendiente....” Luhan veía a Baekhyun a los ojos, mientras que Jongin jugaba con sus dedos. 

“Entonces...estoy en el lugar de otra persona, ¿A éso te refieres..?” Baekhyun se sorprendió a si mismo cuando reaccionó tranquilamente ante tal afirmación. 

“Sí, algo así....Magnífico, ¿No lo crees, Kai?” Luhan sonrió ampliamente, sus ojos brillaban con algo que parecía emoción y por otro lado el moreno parecía completamente indiferente. Baekhyun se sorprendió con el contraste de personalidades.

“El viejo estaba loco, no creo en ello.” Jongin respondió mientras se levantaba de su lugar y jalaba a Baekhyun del brazo derecho, llevándolo consigo. “Si me permites, iré a descansar, será mejor que vallas a entretener a Sehunnie, tal vez él sí crea en ello.” Jongin sonrió malicioso al decir aquello y Luhan se sonrojó. El moreno desapareció dentro de una puerta con Baekhyun detrás de él como si se tratase de un cachorro perdido. 


Y Baekhyun le seguía mientras caminaban por un pasillo estrecho, pensaba que aunque aquella casa parecía pequeña por fuera, realmente era grande por dentro, hacía que Baekhyun se preguntara si todas las casas estaban conectadas debido a lo pequeñas que eran. Jongin caminaba lento mientras guiaba al más bajo. 

“¿Me explicarás lo que sucede...? Baekhyun preguntó casi en un susurro y el moreno asintió mientras abría una de las tantas puertas que había en el lugar, se adentró un paso en aquella habitación y encendió una lámpara, dándole así a Baekhyun una buena imagen del lugar, un cuarto pequeño pero completamente personalizado, sonrió para sí mismo mientras se adentraba tras el mayor, quien cerró la puerta mientras Baekhyun observaba una de las paredes, la cual estaba llena de dibujos e imágenes, una de ellas de Jongin con aquél chico gruñón de los ojos grandes, Baekhyun sintió algo en el pecho al observar lo unidos que se veían, completamente diferente a lo que había visto en persona algunos momentos atrás. 

“Hace cincuenta años se implementó una nueva ley, es lo de siempre, Baek. ¿Puedo decirte así?” Preguntó mientras se echaba sobre la cama, Baekhyun asintió, escuchándolo atentamente. 

“Los pobres intentando pelear contra los ricos, sólo que ahora ellos cuentan con la tecnología suficiente para controlar a las masas, sí, Baek, robots, androides. Lo que te atacó hace unas horas era un androide guardián, trabaja para “TDS”, o mejor conocidos como Tecnología De Seguridad. Hay varias organizaciones de androides que han suplantado a los humanos, por ejemplo a los policías, a los soldados o guardias....también a los asistentes, y a las personas de limpieza....¡Y hasta a los científicos, sus creadores!” Jongin sonrió irónico. “Pero ellos no son realmente el peligro...” 

Baekhyun parpadeó varias veces. 

“Solo unos cuantos tienen poder y dinero, y ellos son el verdadero peligro...y el principal es el Presidente Cole. Él fue quien hace 50 años ordenó que a todos los recién nacidos se les marcara con un código, y éste código es tu identificación ante el gobierno, cualquier persona que no lleve uno es asesinada, ¿Me entiendes?, con armas.” El moreno se levantó de la cama y se acercó lentamente hacia Baekhyun, acortando la distancia entre sus cuerpos mientras el otro lo veía incrédulo, y sonriéndole levantó la diestra para poder picar una de sus mejillas. “Si no hubiese salido tarde del trabajo, entonces ya no estarías aquí, así que sí, gracias a mi sigues vivo.” 

Baekhyun se sonrojó ante la cercanía del moreno y retrocedió un poco, recargándose contra la pared, y se sorprendió al ver que el moreno le seguía, acorralándolo. “O-Oye...” 

“Nosotros somos un grupo de rebeldes, ¿Entiendes?, y ahora que estás con nosotros tendrás que ayudar.” Baekhyun se quedó en shock, y tardó en reaccionar cuando los labios del moreno rozaron suavemente los suyos. “Y quiero que, de hecho, seas mi novio, por que, escucha bien....” Volvió a rozar sus labios, Baekhyun cerró los ojos de golpe, podía sentir el rostro hervir. “Me gustaste desde que te ví con ése androide.” 

Baekhyun lo empujó con una fuerza que desconocía, 

“¡¿Qué estás diciendo?!, ¡¿Acaso vas besando a todas las personas que recién conoces?!” Baekhyun gritó fuertemente antes de salir del lugar, Jongin sonrió ladino. 

“Justo como me gustan, neuróticos.” Susurró para sí mismo mientras veía al menor desaparecer por aquella puerta.