Capítulo XLI: Invitado
Base de la familia Millefiore, 10 años en el futuro.
Tsuna se encontraba en presencia de dos hombres desconocidos.
— Sawada Tsunayoshi.
Tsuna de inmediato sintió un escalofrío al ver a aquel hombre que lo había nombrado. El rostro del desconocido parecía jovial y sumamente alegre, le recordó por alguna extraña razón a los zorros que en leyendas son seres inteligentes y engañosos.
« ¿Que te dice tu intuición? », escucho la voz en su mente del gran cielo de Vongola.
En cuanto vio el rostro de aquel, miro por un momento los ojos rasgados de color violeta de aquel individuo no le infundía nada de confianza. No confiaba en él, quería salir de ese lugar de inmediato.
De pronto el de cabellos plateados se acercó a él.
— ¿Quieres un malvavisco? —preguntó mientras le ofrecía la bolsa.
— ¿Donde estoy?
— Oh, es verdad. Joven Sawada Tsunayoshi, tu no nos conoces, pero yo se todo de tí. Mi nombre es Byakuran Gesso.
— Quiero hablar con Reborn —pidió el castaño.
— No estés tan tenso, Tsunayoshi —sonrió él hombre—, mucho menos cuando estas en calidad de invitado de la familia Millefiore.
***
Base de la familia Vongola, 10 años en el futuro.
Era la primera vez que viajaba en la bazooka de los diez años, escuchó una voz que le preguntaba cómo es que había llegado ahí, su prioridad era Juudaime. Rápidamente Gokudera Hayato se puso de pie.
— ¿Donde esta Juudaime?
Observó su entorno, parecía ser que estaba en viendo a las versiones adultas del idiota del beisbol, la piña, el boxeador y una mujer a la que no conocía en lo absoluto.
— Calmate, Gokudera. Estamos en una de las bases de Vongola —comunicó Yamamoto.
Gokudera intentó tranquilizarse, pero no podía. Todo lo que había ocurrido previamente era muy raro.
— ¿Donde está Juudaime de esta época? —pregunto Gokudera, posiblemente el sujeto que los atacó era un impostor.
De pronto vio como los guardianes del futuro guardaban silencio.
— Tsuna, está desaparecido —dijo Yamamoto.
De pronto se despertó Lambo.
— Al parecer todo fue un sueño —dijo Lambo—, fue raro soñar que un Tsuna adulto nos atacaba, seguro que cuando se lo cuente a Tsuna le va a dar risa.
La atención de inmediato se concentró en el joven guardián del trueno.
— Vaca —Rokudo por primera vez habló—, ¿explica los que acabas de decir?
El menor abrió los ojos, este sueño se estaba tornando cada vez más bizarro.
— Vaca idiota no es un sueño, estamos en el futuro —bufo Gokudera sumamente molesto.
— Pero Tsuna, no llegaría e intentaría atacarnos —se defendió el Bovino.
Lambo se detuvo a ver su alrededor, de inmediato se dio cuenta de que no era un sueño.
— Ahodera.
— ¿QUE? —gruño fastidiado el menor.
— ¿porque estamos en el futuro?
— Cuando el infame imitador de Juudaime apareció frente a nosotros te dejo noqueado y te quito la bazooka, primero te disparo a tí, y después a mí, me preocupa Juudaime. Y ustedes adultos inútiles, deberían estar buscando a su Juudaime.
***
Base se Millefiore, 10 años en el futuro.
— ¿Invitado? —dijo dubitativo Tsuna.
— Así es —dijo Byakuran sin dejar de sonreír, de momento porque no descansas un poco.
— ¿Pero?
— No te preocupes, joven Vongola… O ya se, Yuni será una excelente compañia para tí en lo que llegan tus guardianes. Cervello —llamo Byakuran.
De inmediato aparecieron dos mujeres, eran idénticas a las que iniciaron como jueces en la batalla de los anillos.
— ¿Que se le ofrece Byakuran-sama? —dijeron las dos mujeres al unísono.
— Podrían escoltar a nuestro invitado a la habitación de Yuni, en un momento los alcanzaré, ya casi es la hora del té.
— Como usted, desee —respondieron las mujeres—, siganos Tsunayoshi-sama.
Se retiraron de la habitación ambas mujeres, mientras escoltaban a Tsuna. “¿Se supone que Cervello es aliado de Vongola?”, sin embargo recordó los hechos ocurridos en la batallas de los anillos.
Byakuran se quedó a solas con Souchi en la habitación.
— Por cierto Shou-chan, ¿que ocurrió con el Sawada Tsunayoshi de esta época?
— Byakuran-sama, al parecer la teoría en la que si dos individuos, en este caso el Sawada Tsunayoshi del futuro se encontró con su yo joven en “el pasado”, lo que ocasionó que el tiempo espacio eliminará la anomalía, en este caso el Sawada Tsunayoshi adulto —explico el pelirrojo.
— Bueno, solo era cuestión de suerte, cuando enviamos a Genkishi no desapareció.
— Eso fue, porque no se encontró con su yo del pasado. En cualquier caso, Byakuran-sama, debido a sus poderes también no lo enviamos a usted al pasado, ya que usted de inmediato se sincronizará con sus yo del pasado.
— uhmmm. Hubiera sido más fácil destruir a la décima generación joven —meditó el mayor—, pero es divertido ver como se desesperan —una sonrisa se dibujó en los labios del mayor—. De momento nos concentramos en los anillos que faltan, en esta época deben estar otros dos anillos más.
— Si, pero al usar la bazooka de los diez años, fueron cambiados con su yo del futuro.
***
Tsuna. Aun no entendía la acciones de su yo del futuro, pero lo único que sabía es que debía salir de ese lugar. Los largos pasillos de aquel lugar le provocaba escalofríos.
— ¿Por qué sigo en este lugar?, ya debería haber vuelto a mi época.
— Hemos llegado, Tsunayoshi-sama —anunció una de las mujeres—, de momento será recibido por Yuni-sama, la líder de “BLACK SPELL”.
— No era la familia Millefiore —cuestionó el menor.
— La familia Millefiore se compone de dos familias, Black Spell, es la facción bajo las órdenes de Yuni-sama, y White Spell está bajo órdenes directas de Byakuran-sama.
La puerta que se mostró frente a él, era de color negro ebano, y tenia la insignia de una flor que reconoció como “Caléndula*1”.
***
Byakuran observó de reojo a Shouchi.
— Byakuran-sama, ¿por que no se deshizo de una buena vez de Sawada Tsunayoshi?
— Shou-chan a veces eres más cruel que yo. Pero te falta ser más calculador, recuerda que aún faltan los demás anillos, sería más fácil atraer a una trampa a los Vongola.
Byakuran, sonrió.
— Shou-chan. Te encargaré de la captura de la familia Vongola.
— Cuente conmigo Byakuran-sama.
— O por cierto, debes llevarte a Genkishi en tus filas.
— De hecho, me gustaría que también fueran otros dos miembros de las coronas funerarias.
— No es demasiado —dijo Byakuran mientras sonreía.
— Es solo para asegurar el éxito de la misión —enfatizó el pelirrojo.
***
Ciudad de Kokuyo, tiempo presente.
Reborn alzó la bazooka de los diez años. Sin duda alguna las personas que aparecieron en el lugar de Lambo y Gokudera eran las versiones adultas de Lambo y Gokudera. De inmediato la vaca se le fue encima y no lo dejaba de abrazar.
— Reborn-san, ¿podría explicarnos qué ocurrió? —pidió de forma tranquila la tormenta de Vongola.
— Me gustaría, si me quitas a la vaca de encima —pidió el arcobaleno al no poder deshacer el abrazo de oso de la Vaca.
— Lambo, compórtate —dijo Gokudera—, estamos en el pasado.
— Lo siento, Reborn. Es que bueno, ya sabes…
— Ni una solo palabra más Lambo —gruño Gokudera fastidiado—, Reborn-san, ¿podría explicar lo que ocurrió?
— Si, ibamos a las escuela, cuando llego, Tsuna. Pero había algo raro en el dame-Tsuna del futuro, llegó y de inmediato nos atacó y les apuntó con la bazooka de los diez años a ustedes dos y a su versión joven. ¿Qué está pasando en el futuro? —interrogó el arcobaleno.
— Reborn-san, debe haber algún error. Juudaime no sería capaz, pero usted tampoco mentiría en algo tan serio.
— Y, bien ¿qué diablos está ocurriendo en el futuro?
— Es un tema complicado, y preferiría que lo tratáramos con todos los guardianes presentes.
— Haz madurado, Gokudera.
— Debería, después de todo soy la mano derecha de Juudaime.
***
Base de la familia Vongola, 10 años en el futuro.
— Yare —dijo Lambo—, se supone que nosotros ya deberíamos haber regresado a nuestra época.
— Todo es la culpa de tu estúpida bazooka.
— Yo no fui el que la disparo —se quejo Bovino.
— En verdad Vaca, punk dejen de pelear —dijo fastidiado Mukuro—, Lambo tu deberías saber algo de la bazooka, después de todo fu tu problemática familia la que la creó. Mientras saldré a buscar a Tsunayoshi-kun.
Pero antes de que Mukuro saliera del lugar se prendió de forma automática el proyector que tenían en la sala.
— ¡Hola! —saludo el de cabellos plateados, mientras tomaba un malvavisco y se lo metía a la boca.
Los adultos de inmediato reconocieron el rostros del líder de Millefiore.
— ¿Byakuran? —gruñeron con desprecio los mayores.
— Buenas tardes, Byakuran-san —saludo Nagi tratando de mantener la calma.
— Oh, Nagi-chan, tu eres el reemplazo de Mammon —dijo de forma despreocupada.
— ¿A qué se debe el motivo de su llamada? —dijo tratando de no perder los estribos, en contra de la persona que asesinó a su maestro.
— Habla de una vez —gruño Hibari—, no creo que solo sea un simple saludo amistoso Gesso Byakuran.
— Siempre tan agresivo, nube de Vongola. Sí, de hecho solo es para avisarles que tengo algo que les pertenece.
Mukuro se dio cuenta de lo que quería decir ese demente.
— ¿Donde está Tsunayoshi? —cuestiono el de ojos heterocromaticos.
— Oh, no te preocupes él y el bebé están muy bien.
Los ojos de los guardianes se ampliaron de sorpresa. Su jefe aun no les había dicho nada.
— Por cierto, felicidades Mukuro-kun —felicito Byakuran.
— Déjate de rodeos, ¿donde esta Tsuna? —hablo Yamamoto mientras afilaba su mirada.
— Devuelvenos a Sawada —ordenó Ryohei.
— Ya les dije, que esta muy bien atendidos en mi humilde hogar —aseguro Byakuran—, al parecer veo rostros jóvenes.
— No luces muy sorprendido —aseguró Mukuro.
— Nop —aseguró el albino—, bueno si quieren recuperar a su cielo. Entregando los anillos Vongola que poseen.
— No existe esos anillos —gruño Mukuro.
— Lo sé, él mismo Sawada Tsunayoshi los destruyó, pero hay dos anillos en su base.
— No se quien seas, imbécil —gruño la joven tormenta—, pero si Juudaime no te quiso entregar los anillos, yo confiaré en él.
— Aun si significa sacrificar la vida de tu jefe —dijo Byakuran mientras sonreía—. Bueno no soy muy paciente los dejaré meditar su respuesta, no excedan mi paciencia.
La pantalla se apagó.
— Si es para salvar a Juudaime —susurro la tormenta.
— Escucha, Gokudera. No se puede confiar en Byakura —aseguro Yamamoto.
— ¿Pero?
— Pensaremos en algo —aseguró Ryohei.
Caléndula*1: La Caléndula, contrariamente a lo que puede esperarse, no tiene un significado alegre en el lenguaje de las flores.
Su origen está ligado a una antigua leyenda griega: Afrodita, intensamente triste por la muerte de su amante Adonis, empezó a llorar y cuando sus lágrimas tocaron tierra, se transformaron en caléndulas.
De aquí el sentido ligado al dolor, a la pena y a las penas de amor, de la Caléndula.
************************************************Bonus Chapter:
Cuidad de Namimori.
Tsuna caminaba de regreso a casa, cuando se encontró con Lambo, a decir verdad le costaba ver a Lambo como un niño.
— Lambo.
— Tsuna-nii —dijo emocionado el menor.
— ¿Que estas haciendo?
— Quiero ir a comprar dulces, pero…perdí el dinero —dijo el menor completamente triste.
Esto era malo, el menor iba a comenzar a llorar.
— ¿Por qué no vamos por dulces de uva? —sugirió el castaño.
— Es en serio Tsuna —exclamó el menor esperanzado.
— Sí.
***
Cuidad de Kokuyo.
Tsuna caminaba de regreso a casa, cuando se encontró con Lambo-adulto, a decir verdad le costaba ver a Lambo adulto, a pesar de que algunas veces el menor terminaba usando la bazooka de los diez años.
— Lambo.
— Tsuna —dijo emocionado el mayor—, Reborn me regaló algunos dulces.
“Reborn me regaló algunos dulces”, por que esa frase sonaba mal, a pesar de que Lambo sonreía de oreja a oreja, por lo general Reborn siempre aseguraba, que la supervivencia en la mesa era del primero en comer.
— ¿Reborn?
— Sí. Es raro, de vez en cuando deja de ser un sádico para comportarse como una persona.
— Sí, no suena como Reborn —dijo el castaño—, es bueno ver que no pelean tanto.
— Pues, creo que me maltrata menos desde que salimos.
El rostro de Tsuna se puso completamente rojo.
— ¿Tu y Reborn salen?
— Sí.
— Pero es un sádico.
— No es tan malo —aseguro Lambo.
— Pero… pero, ¿qué fue lo que le viste?—inquirió desconcertado.