Disclaimer: KHR!, no es de mi propiedad. Los personajes son producto, imaginación y creación de Akira Amano-sensei.
Paring: 6927
Agradecimientos: muchas gracias a todas las personas que siguen este humilde fic.
Advertencias: pues ya a estas alturas creo que ninguna.
Tiempo de actualización: INDEFINIDO a lo mucho me puedo ir de parranda 3 meses.
.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.
Capítulo 72. Festival cultural (parte IX).
“No vayas”, escucho la voz proveniente del anillo que colgaba de su cuello. La ensoñación en la que estuvo se disipo. Para empezar –¿A dónde se dirigía?– Vio a Hibari frenar el ataque de Mukuro.
Las cosas con ese par estaban poniéndose violentas. Debía hacer algo para separarlos, aunque temía sufrir la furia de ese par.
– Hibari-san, Mukuro. ¡Deténganse!
Por supuesto que fue ignorado de forma olímpica por ambos guardianes. Los alrededores de la pelea comenzaban a sufrir daños. Si Reborn estuviera presente sin duda alguna ya lo habría obligado a enfrentarse a ese par. Se colocó los X-gloves mientras estos se iluminaban con el cálido tono de la llama del cielo–Zero point breakthrough– no serviría contra ese par en estos momentos. Fue entonces cuando una de las tonfas de Hibari Salió volando del lugar, sin pensar mucho se lanzó a atrapar el objeto metálico. Contra ese par solo serviría un ataque directo. Impulso o lo que fuera no dudo a la hora de usar sus llamas. Los guardianes solo fueron capaces de escapar por poco del ataque. Una nube de polvo se formó en el lugar.
– He dicho que dejen de pelear –grito Sawada.
– Kufufu planeabas rostizarnos con tus llamas, Tsunayoshi-kun.
– Herbívoro.
En cuanto los tres tuvieron mejor visibilidad vieron el hueco que género el ataque del Décimo.
– Hiiiiiii –musito Sawada al ver el daño que causo. Que el supiera sus llamas no eran tan fuertes. Por un segundo vislumbro la posibilidad de habar herido a dos personas de forma grave. – Yo lo siento –musito Sawada mientras se alejaba corriendo del lugar.
Asesinar… y para el colmo él estaba en el medio del ojo del huracán. En el pleno centro de la mafia. La palabra lo atemorizo, su respiración era errática. Intento calmarse pero al parecer no era capaz. “Casi los mato” la sensación era abrumadora. En cuanto llego a su casa subió a su habitación y se encerró.
Necesitaba calmarse.
.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.
La niebla y la nube dejaron su enfrentamiento. Mukuro miraba la enorme brecha que dejo Sawada. Sabía perfectamente cuál era el temor del castaño. –Una vez que cruzabas esa fina línea no había regreso–. Fue durante los últimos segundos cuando aún no había aparecido de forma impertinente la Alondra, noto que alguien los seguía. Se estremeció al darse cuenta de quién era el objetivo: el décimo Vongola.
El castaño no pudo haber sido más oportuno al alejarse del lugar. Saco su celular y marco el número de Kakimoto.
– Necesito a Ken, dile que encuentre a Sawada.
Era ridículo que Sawada fuera capaz de ocultar su presencia, de momento fue una presencia brillante y cegadora y ahora simplemente no era capaz de ubicarlo.
.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.
Aclaraciones:
Con respecto al ataque de Tsuna, pese a que este no recuerda nada del futuro su poder termino siendo liberado.
Notas finales: me preguntaron por el malvado de este arco, solo puedo decir que pronto aparecerá kufufu.
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español