CAPÍTULO 1: CONFUSIÓN
En general, ese había sido un día de lo más tranquilo ya que Takano-san anduvo casi todo el día en una junta muy importante y no había molestado para nada a Onodera- "Como que al fin mis plegarias fueron escuchadas", agradecía el castaño- "Mejor termino rápido mi trabajo, sino me obligará a cenar con él y luego ... " "¡No,no, no, mejor me apuro!" - pensó Onodera sacudiendo la cabeza negativamente.
- ¿Qué sucede Rit-chan? - Preguntó Kisa
- Oh, no es nada realmente, solo pensaba que hoy debería regresar temprano a casa.
- ¿Tienes algo que hacer?
- No, no es eso. Solo que después del periodo aún no he tomado un descanso apropiado
- Ya veo, que tal si antes de- Kisa se detuvo al oír su celular. Al parecer era una mensaje porque se detuvo a ver la pantalla por un rato, de pronto su rostro se tornó algo rojizo.
"Al fin terminé, hora de ir a casa", pensó aliviado el ojiverde
- Me voy retirando, siento irme antes- Dijo después de un rato haciendo una reverencia ante sus colegas
- Eso es muy conveniente, yo también me retiro- Dijo Takano-san que acababa de entrar a la oficina. La piel se le erizó y no pudo evitar gritar un ¡Eek!, "Mierda"
Ahora se encontraba en el ascensor con su editor en jefe (Aura incómoda). "Es como siempre, silencio, no puedo entablar una conversación apropiada con Takano-san", no pudo evitar compararse con Yokozawa-san, "Bueno, es lógico, fueron compañeros en la universidad después de todo...". Mientras divagaba entre sus pensamientos de pronto sintió como la persona que estaba a su lado lo tomaba de la mano, no pudo evitar sonrojarse y tratar de zafarse, lo cual no logró.
- Sabes, siempre he deseado tener una buena charla contigo, pero por alguna razón, cada vez que te tengo cerca no puedo evitar ponerme nervioso.
- E- Eso no es cierto, tú eres el que actúa siempre serenamente en todo- Dijo mirando hacia un lado
- ¿Es así?- Dijo Takano-san con una leve sonsisa, la cual no podia definirse si emanaba alegría o tristeza, quizá ambas.
- Yo...yo en verdad...- No pudo continuar ya que habían llegado al primer piso
- Bueno, nos vemos... - dijo Onodera alejándose rápidamente
- ¿A dónde crees que vas? Dijimos que comerías una vez al día conmigo, en la tarde estuve ocupado, lo siento por no haber almorzado contigo.
- Mm, yo entiendo, pero en serio, no debes preocuparte, ¡Además ya estoy mucho mejor! - Mencionó mientras corría hacia la salida
- ¡Idiota! ¡¿Tú no sabes lo preocupado que estaba cuando colapsaste?!. Sentí como si todo el mundo se me viniera encima. No me arriesgaré a que colapses otra vez. ¡Ten mas en cuenta los sentimientos de los demás!
No supo cómo ni cúando, pero ya se encontraba en el interior de auto de su editor en jefe.
- Onodera, ¿Ya tienes una respuesta?. "¿Cómo rayos suponía el tipo que tuvieramos una conversación apropiada si empezaba con una pregunta como esa?". Hace unos días, Takano-san le preguntó "oficialmente" si quería salir con él, "No puedo creer que estuve a punto de cofesarle mi amor por segunda vez" Y si tenía una respuesta... Takano dejó de ver al frente mientras conducía para mirarlo a los ojos, el castaño se encontraba muy nervioso, no sabía que expresión tenía en ese momento, pero esta pareció preocupar a Takano-san.
-Como dije... No importa cuantos meses o años me tome, esperaré por ti, entiendo si aún no tienes una respuesta- Dijo con una triste expresión- Solo, -prosiguió- recuerda que te amo y siempre lo haré.
El corazón del ojiverde empezó a latir agitadamente, todo lo ocurrido aquel día vino a su mente y se sintió exactamente igual.
- No... nosotros de todos modos es... como si ya estuvieramos... - Takano lo miró con ojos de asombro y sencillamente se acercó hacia él para fundirse en un beso, el cual rompieron por falta de aire.
- Te amo Ritsu, no quiero que esto se preste a malinterpretar, así que, ¿Cuál es tu respuesta? - preguntó acariciando el cabello de la persona que más amaba en el mundo.
- Mi... Mi... - La vergüenza lo invadía, pero sabía que si lo hacía, se quitaría un gran peso de encima y al fin las cosas podrían fluir en el orden apropiado
- Es... ¡Espera Takano, el semafo-! - Fue lo último que alcancé a decir estando conciente. Takano había estado esperando con ansias su respuesta, que se olvidó completamente de que iba conduciendo, no se había dado cuenta que el semáforo estaba en rojo y que la avenida en la que estaban cruzaba en forma de cruz a otra.
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//Ha habido un choque entre dos automóviles particulares, ya andan haciendo los primeros auxilios, por favor envíen un par de ambulancias....//
- Los del otro auto parece que frenaron a tiempo, sino, hubiese sido realmente lamentable, vaya suerte.
Ya un rato después, cuando habían terminado de ser trasladados, en la sala de espera se encontraban: la madre de Ritsu, An-chan y nada más y nada menos que Yokozawa, al parecer habían sido capaces de contactar a los familiares gracias a los celulares que lograron rescatar. Después de 1 hora, el doctor a cargo salió.
- ¿Cómo está doctor? - Dijeron poniendose de pie los 3 al unísono
- ¿Familiares de Takano Masamune y Onodera Ritsu?
- Sí- volvieron a responder al mismo tiempo
- Afortunadamente el accidente no fue tan serio, no recibieron más que golpes, yo diría que en una semana estarán completamente recuperados.
- ¿Cuándo los dan de alta Dr. ? - preguntó la angustiada madre de Ritsu.
- Bueno, aún no despiertan por la impresión, yo diría que en unas horas, como ya mencioné antes, no fue para nada serio
- Oh, Gracias a dios- Dijo Ann-chan con lágrimas en los ojos
- ¿Y qué tipo de cuidados son necesarios? - Preguntó al fin Yokozawa, ya que las damas ya había hecho las preguntas que el iba a hacer
- Solo reposo en casa, no podrán ir a trabajar aún- Concluyó con serenidad el médico- Eso sería todo, con su permiso - Dijo haciendo un movimiento de cabeza, el cual fue correspondido por los presentes
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- Ugh, me duele mucho la cabeza...¿Qué pasó..? - Se preguntaba Ritsu frotandose con la mano- ¡! - De pronto todo lo ocurrido pasó como un flash por su mente. Recordaba que hubo un choque, despertó en el hospital y luego...- Los recuerdos se hicieron borrosos- Alguien lo llevó a casa(al menos eso parecía) y se echó a dormir.
- Oh, al fin despiertas Masamune.
- ¡! - Onodera no lo podía creer, "¿Qué hace Yokozawa aquí?, un momento... ¡¿Cómo es que me llamó?! ¡Es- Este no es mi departamento!"
- Oi, ¿Estás bien?, debí haber insistido en dejarte en el hospital hasta mañana...-Dijo un preocupado amigo
- Jeje, Yokozawa-san, ¿Qué hago aquí? y ¿Dónde está Takano-san? - Preguntó nervioso el castaño. Yokozawa lo miró con incredulidad y se atrevió a decir
- ¡Para de bromear!, Sabes, mejor duérmete otra vez, tu cabeza debe estar confundida aún
- Eh, emm, tienes razón - Dijo el "castaño" envolviéndose entre las sábanas. "Esto debe ser otro de mis locos sueños, sí, eso debe ser, ¡Mañana despertaré y todo será como se supone que es!", oía que Yokozawa le decía algo, pero prefería no escucharlo y solo concentrarse en dormir para salir de ese horrible sueño. A la mañana siguiente pudo sentir como los débiles rayos de sol alumbraban su rostro.
- Mmm, ya amaneció... ¡Mierda! ¡Voy tarde al trabajo! - Dijo esto levantándose de la cama en un brinco pero luego un intenso dolor lo hizo retorcerse
- Ahh, ¿Qué rayos? dijo sobándo su rodilla- ¡¿Hm?! - Echó un vistazo a su alredor viendo que se encontraba increíblemente en el departamento de su editor en jefe
- ¡Takano-san-! - Cesó de gritar cuando notó que su voz era diferente
- Oh no...Oh no... Fue corriendo hacia el baño, y se topó con el espejo cuando...
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Luego de ser dado de alta, "Ritsu" fue llevado a casa de sus padres para tener un cuidado adecuado.
- Hm, ¿Qué hora es..? - Decía el "pelinegro" mientras abría lentamente sus ojos. Se quedó extrañada al estar en un lugar en el que nunca antes había estado. "¿Qué paso..?", "En que momento yo-", fue interrumpido por una voz que ya conocía:
- Hola Rit-chan, al fin te levantas, estaba tan preocupada...tuvimos que traerte dormido porque no despertabas con nada.
- Tú... ¿Estás bromeando verdad..? - preguntó el editor al verse en una situación totalmente fuera de lugar
- ¿Eh? ¿Qué sucede Rit-chan? - Dijo la castaña con cierto tono de tristeza
- No... - "Esto debe ser una broma, en unos momentos seguro sale Ritsu, que idiota hacer una broma de este tipo. Es cierto... pero ayer..."
- Te traje el desayuno, cariño - Anunció una amorosa madre, que parecía no saber cocinar porque las tostadas que traía estaban todas quemadas- Te quedarás aquí una semana, ya llamamos a tu trabajo, así que tus faltas estan justificadas, no te preocupes- Concluyó. Takano tomó el azafate el cual la madre de Ritsu había puesto a su lado, pero cuando iba a dar un sorbo a su bebida, pudo ver su reflejo en el agua y...!
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En casa de Takano.
Onodera quedó perplejo al ver que el rostro que el espejo le mostraba, no era el suyo, sino el de su primer amor, Takano Masamune.
- ¡AHHHHHH! - "¡Esto no puede... No, de ninguna maldita manera!", "Bien... ¡Ahora si voy a despertar!" . El castaño retrocedió un poco y luego se autoestrelló contra la pared, quedando completamente aturdido, pero no inconciente.
- ¡¿Estás demente?! Aún no estás recuperado, ¡Ve inmediatamente a tu habitación mientras yo traigo el botiquín!- Gritó Yokozawa con un aura asesina, tan fuerte era la energía que emanaba que Onodera no dudó en acatar inmediatamente las ordenes que este le había dado. "No... aún si insisto... ¡Nadie me creería! Nadie creería, que yo, Onodera Ritsu ahora, por solo dios sabe que circunstancia, me encuentro en el cuerpo de nada más y nada menos de Takano"
- A ver, déjame verte- Dijo tomándolo de la barbilla y alzando su rostro para poder ver el gran chinchón que "Takano" se había provocado.
- ¿Cómo es que pasó? Oí que ibas con Onodera...- preguntó Yokozawa esta vez con una voz que Onodera nunca antes había escuchado, era un tono muy gentil y comprensivo, aunque notó que al mencionar su nombre lo hizo con cierto desprecio.
- Ehh...- "Será mejor que no inteactué demasiado con este sujeto, además nunca me creería", sí, Yokozawa Takafumi, esceptico número uno.
- No me di cuenta... cuando vino el auto del otro sentido... No recordemos eso, por cierto, ¿No tienes que ir a trabajar?. Yokozawa frunció el ceño indignado y respondió:
- ¿Crees que iría a trabajar teniendo a mi mejor amigo en este estado? Idiota- Dijo la última palabra con una leve sonrisa, pero muy leve. "Quién diría que Yokozawa-san tendría un lado amable, ¡Oh!, no digo que no lo tenga, solo que nunca nadie lo ha visto así"
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En casa de la familia Onodera
Masamune dejó caer el vaso empapando la cama en la que se encontraba recostado
- ¡Lo- Lo siento mucho! - Dijo temblando por la impresión. "Esto no puede ser posible... debo estar imaginando cosas, lo mejor será seguir la corriente, quizá esto solo sea un sue-!" - Detuvo sus pensamientos cuando la Sra.Onodera jalaba con brusquedad las sábanas provocándole un intenso dolor en el área abdominal.
- ¡Discúlpame hijo!, ya sabes que nunca he sido buena en este tipo de cosas...- "¡¿Dios mío, qué tipo de crianza tuvo Ritsu?!, ya veo a quien heredó lo descuidado y torpe, aunque esos lindos ojos también los heredó de ella..."
- No se- reformuló la oración- No te preocupes, solo, ¿me permiten hacer una llamada?
- Claro, aquí tienes Rit-chan - Respondió la castaña mientras le entregaba el teléfono de Ritsu. De inmediato Takano se dispuso a buscar entre los contactos. "Ann-chan, Mamá, joder, ¡¿Haitani?!, se detuvo justamente ahí y borró y bloqueó las llamadas de este; ¡Aquí está!, Masamune". Ritsu siempre se había negado a llamarlo por su nombre, pero he aquí en su lista de contactos lo había anotado como "Masamune",esto hizo que Takano diera una sonrisa y seguidamente presionará el botón llamar.
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En casa de Takano
"Ya vete, ya vete, ya vete,..." se encontraba pensando Onodera cuando de pronto oyó la melodía del celular de Takano-san
- Eh, Yokozawa, por favor me...- Tenía el presentimiento de que quien lo llamaba era Takano-san. El oso de Marukawa miró la pantalla del teléfono y:
- ¿Hola? ¿Qué se te ofrece Onodera? - Contestó algo irritado
- ¡Pásame el teléfono! - se atrevió a decir el "castaño", luego de oír eso Yokozawa le entregó el teléfono susurrando- Qué masoquista... "Takano" se fue al baño para hablar lejos de los oídos de Yokozawa.
- ¿Hola? ¿Takano-san? ¿Dónde estás? - Preguntó alterado el ojiverde
- Estoy en casa de tus padres - Dijo en un susurro que apenas pudo ser oído
- Esto... Lo que está sucediendo, ¡no puede ser real!
- Sea real o no, solo nos queda fingir hasta que nos dejen en paz, seguramente Yokozawa está contigo, sé cuidadoso ya que él es bastante perceptivo. Mientras tanto yo convenceré a tu madre para que me deje regresar a tu departamento- Dijo todo esto velozmente ya que al fondo se oía la voz de Ann-chan y la madre del castaño haciéndole preguntas.
- Está bien, ¿Pero como debo lidiar con Yoko- La línea se cortó en ese instante. "Eto...¿hola?". "¡¡MALDITO TAKANO, SIEMPRE ME DEJA EN SITUACIONES DIFÍCILES!!"
Y así Onodera Ritsu, tendrá que lidiar con el oso gruñón de Marukawa y hacer que este no note nada extraño, el castaño deseaba con todo su corazón que todo lo narrado fuese solo un sueño, pero jamás iría a imaginarse como Takano sacaría provecho de todo esto.
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