Dave
-No puedo creer que vayamos a hacer algo así- me quejaba sentado en el sillón de la sala de mi humilde morada. Se preguntaran ¿Oh por qué nuestro gran sex symbol, Dave Strider, está refunfuñando y frunciendo su ceño? Fácil. Por culpa de ese estúpido de ojos azules que tengo como mejor amigo. Lleva 2 meses desde su regreso a Estados Unidos, 2 meses donde mi presión se ha subido tanto que ya me siento un diabético. Porque ¿Quién ha sido el que se preocupa por él cuando no vuelve temprano a casa del trabajo o no responde después de 5 llamadas? ¡Exacto! ¡Solo yo! Y lo peor es que todo es culpa de su maldita compañera de cuarto que siento que me odia porque siempre aleja a mi pequeño John de mi lado. ¿Mi pequeño John? Ya hasta estoy delirando por la frustración.
Resumiendo todo, de alguna forma Karen convenció a John de llevarlo a…¡A UN MALDITO ANTRO! ¿Acaso no sabe los peligros que puede tener esa pequeña bola de cabello negro desordenado? Capaz y algún sucio raboverde viola a John aprovechándose de él o tiene una orgia gay en el baño del bar.
-John estará bien Dave- interrumpió Kanaya el hilo de mis pensamientos suspirando. Vestía una falda roja hasta las rodillas, tacones verdes, una blusa verde tipo strapless con algunos brillos en ella y maquillada ligeramente.
-Ni te esfuerces Kanaya, Dave es como la madre sobreprotectora de John- Apareció Rose junto con Jade con una sonrisa altanera. Las habíamos estado esperando para poder irnos juntos al antro donde veríamos a Karen y John. Rose usaba un vestido corto y pegado al cuerpo color morado que haría caer de un infarto a cualquier padre al ver a su hija vestida así, tenia algunos adornos negros en la parte del top y unos tacones negros que la hacían más alta. Y Jade, oh mi esposa usaba su hermoso vestido al que llamaba 3 AM pero hasta las rodillas con tacones verdes, absolutamente hermosa.
-Simplemente Dave es como un hermano mayor sobreprotector con John-me defendió mientras se acercaba a abrazarme con una sonrisa en su rostro.
-Un hermano demasiado molesto. Como sea hay que irnos o llegaremos tarde- Tras decir eso todos fuimos a mi auto para dirigirnos a un antro llamado Trickster.
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John
Derrotado miraba la ropa tirada en el piso de mi habitación, ¡no tenía nada que ponerme que no luciera virgen o como un aburrido nerd! Estaba vestido con un shorts de pijama corto y una camiseta blanca, mi cabello seguía mojado ya que hace poco había salido de la ducha pero no encontraba nada para vestirme apropiadamente.
-Simplemente no debería ir…además de seguro me la pasaría sentado solo en una mesa cuidando las cosas mientras los demás bailan y se divierten- Nunca me había considerado atractivo o interesante, no era el tipo de chico que todos amaban y podía enganchar a un montón de chicos guapos con solo una mirada. Yo soy solo un pequeño chico de cabello revuelto que parece tan joven que siempre debe mostrar su identificación cuando conduce.
Sali de mi habitación dispuesto a hablar con Karen sobre que no iría cuando alguien toco la puerta del departamento, probablemente era Karkat ya que le había llamado para ver si podía cuidar a Janey esta noche. Corrí a abrir la puerta porque Karkat se desespera fácilmente y prefería evitar que los vecinos llamaran a la policía ya que creerían que el Vantas me estaría asesinando.
-Hey KK- abrí y entro murmurando un enfurecido “Ya era hora Egbert”, junto a él iba Nepeta, la había conocido hace unas semanas. Era compañera de piso y amiga de Karkat.
-¿Dónde está la pequeña…y por qué aun no estás listo?- alzo una ceja mirándome fijamente, algo nervioso y temeroso desvié la mirada con una leve sonrisa.
-Jane está tomando un baño y…bueno no creo que vaya a ir-
-¿Cómo chingados que no vas a ir?- me grito/pregunto Karkat yo le mire y avergonzado decidí decirle, después de todos somos amigos.
-No tengo ropa para la ocasión, me siento tonto y se que será un completo desastre- El rostro de Karkat se relajó y me miro un poco más calmado.
-No pensé que tu nivel de estupidez fuera tan grande. John no pienses negativo, sé que te ira bien y solo debes concentrarte en divertirte un rato con tus amigos. Las cosas llegaran a su tiempo- Me sorprendió un poco, Karkat puede ser un refunfuñón amargado pero es un buen amigo que siempre tiene como hacerme sentir bien.
-Pero ¿y mi ropa?-
-Oh eso es fácil, déjamelo todo a mí- Interrumpió Nepeta con una sonrisa en su rostro, fuimos a mi habitación y estuvo revisando mi ropa un rato. No se cómo rayos consiguió hacerme un buen conjunto, quizás es una gatita mágica.
-¡Me has salvadooo! Muchas gracias Nep –me abalance hacia ella abrazándola con una gran sonrisa, ella río y me correspondió. Así estábamos cuando de repente algo (o alguien) nos separó repentinamente.
-Demasiado abrazo, se te hará tarde- me mando Karkat a cambiar mientras el y Nepeta salían del cuarto para darle de cenar a Janey.
Mientras me cambiaba pensaba en lo enamorado que debía estar Karkat de esa chica como para ponerse así de celoso. Él sabe que soy homose…es decir que le voy más a los chicos que a las chicas así que no hay riesgo conmigo.
La puerta se abrió repentinamente y cual chica asustada me lleve las manos a mi pecho intentando cerrarme la camiseta de botones. La causante de mi casi paro cardiaco era nada más y nada menos que mi loca compañera de piso Karen. Estaba parada en la entrada de mi habitación con una gran sonrisa en sus labios pintados de rojo, vestía un pantalón negro tipo skinny, una blusa colorida de manga tres cuartos que ajustaba sus atributos y unos zapatos de tacón, tenía las manos en su cintura viéndome con sorpresa.
-Dios John, sino te gustara el pepino yo si te diera duro contra el muro- río entrando a mi habitación halagándome con ese comentario indecente ocasionando que mis mejillas se sonrojaran.
-Toda esa oración esta errada- tome mi collar de Time poniéndomelo mientras ella alzaba los hombros sin darle importancia.
-Espera ¿usaras eso?- señalo el collar que me había terminado de poner.
-No le llames eso, es importante para mí- le explique, era cierto ya que era de…Dave y él me lo había regalado así que era uno de mis tesoros.
-Ni pienses en usarlo- me miro seriamente cruzándose de brazos.
-¿Por qué? ¿Qué tiene de malo?- lo mire sosteniéndolo entre mis dedos.
-Es como salir a ligar chicos usando una camiseta de la cara de tu exnovio. Al final de la noche terminaras usando a Manuela para quitarte la necesidad porque no pudiste llevarte a ningún chico a casa por acordarte de tu exnovio-
-Pero es diferente, además me gusta usarlo así que fin de la discusión- algo enojado me senté en la cama intentando calmarme. Sabía que ella tenía razón, no podía seguir con este estúpido amor hacia Dave. Ya han pasado tantos años y me he vuelto un adulto, debo dejar de aferrarme a él.
-John, se que es difícil pero sinceramente debes dejarlo y comenzar a vivir tú vida sin tenerlo siempre presente en tu mente- me miro preocupada suspirando- Pero no te obligare a nada, después de todo es tu decisión y yo debo respetarla por más tonta que sea- Toque nuevamente el dije pensando que debía hacer, yo realmente no quería seguir viviendo asi por lo que…podría intentarlo por hoy.
-Está bien, lo hare- me quite el collar guardándolo en una cajita en mi buro.-Tienes razón, él ya ha hecho su vida y se que no lo cambiaría por mi- Sonreí tristemente limpiando una lagrima rebelde que resbalaba por mi mejilla. Sentí como Karen me abrazaba con cariño apoyando su frente en mi hombro.-No me dejes solo en esto-
-No lo hare John, eres como un hermano menor para mí- Ambos nos separamos sonriendo ligeramente- Ahora quita esas lagrimas que solo ocasionaras qu todos quieran violarte- tras decir eso salió corriendo y yo la seguí molesto pero algo divertido en el fondo.
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-¡Maldición por que esta fila no avanza!-me queje por enésima vez, y no es para más ya que llevaba 30 minutos esperando en la jodida fila del estúpido antro Trickster que por fuera no era mas que un edificio rectangular pintado de rosa y con detalles blancos y algunos dulces dibujados como si fuera una dulcería. Habia solo 4 personas que nos separaban de la entrada donde un guarura de esos super altos y musculosos que siempre aparecen en las películas y para colmo aun no llegaban ese par de maestros de kínder.
-Gritando no resolveras nada- se quejo Rose abrazandose a Kanaya quien acariciaba sus cabellos rubios con cariño- Supongo que debemos usar las típicas tácticas para entrar a antros-
-¿Tipicas tácticas?¿Te refieres a coquetear con el guardia?-pregunto Jade quien abrazaba mi brazo.
-Claro aunque eso seria raro y creo que ninguno de nosotros lo haríamos-
-¡Hey chicos que hacen ahí!- grito una voz femenina acercándose a nosotros.
-Vaya hasta que llegan- saludo Kanaya riendo a ver a los faltantes.
Karen había llegado con un moreno sexy, ojos azules sin esos lentes que le hacían ver más adorable, camiseta blanca de botones con los primeros desabrochados descuidadamente y un ajustado chaleco casual de botones, pantalón negro pegado. ¿Acaso quería que lo tomaran y lo violaran?
-Llevamos 30 minutos en la fila- se quejó Jade mientras John nos saludaba con la mano y una sonrisa.
-Pues entraremos ahora mismo, salgan de la fila- algo confundidos nos miramos y salimos de la fila siguiendo al par de amigos que se acercaron al guarura que no nos dejaba pasar.-John como te enseñe- El pequeño de ojos azules asintió y se acercó más al hombre con una sonrisa inocente en su rostro hablándole de sabrá Dios que cosa porque no alcanzaba a oír desde donde estaba pero mi sangre se calentaba al ver al estúpido gorila sonreírle de forma tan coqueta a John. La mano del pequeño acariciaba los bíceps que marcaba la camiseta negra de manga corta del trabajador, después el hombre quito la cadena dejándonos pasar a todos pero mirándole el trasero a John descaradamente.
Una vez adentro nos adueñamos de una mesa para descansar un poco y comenzar a pedir las bebidas. Sentía que esta sería una noche larga y sobre todo fastidiosa.
-Vaya nunca había visto las tácticas de coqueteo Egbert- Con una sonrisa maliciosa Rose me miro alzando una ceja mientras John nervioso se sonrojaba.
-La verdad no crei que funcionaria- Admitio John riendo mientras Karen hacia señas de victoria.
-Oh claro que funciono, el gorila miraba tu trasero y te comía con la mirada- Solté el comentario algo enfadado pero sentí un pisotón proveniente de Rose. Mi consejo, nunca hagan enfadar a las chicas cuando usen tacones. Esas cosas son mortales.
-Bueno hay que ver que tomaremos para que alguien vaya.- Cambio Kanaya de tema mientras todos nombraban cocteles, yo simplemente pedí una cerveza pero cuando fue el turno de John nos soltó que casi nunca tomaba así que no tenía idea de los tragos por lo que Rose le dijo que probara la Copa de nada. Y como saben que mi mala suerte compite con la de Karkat me toco a mí pedir los tragos.
-Dame una cerveza, una copa de nada, una media de seda, Garibaldi y dos margaritas- pedí sentándome en una silla alta en lo que esperaba a que me entregaran las bebidas.
-¿Dave que haces aquí?- voltee a un lado y me encontré con nada más y nada menos que mi hermano mayor, Dirk Strider con un vaso con tequila y jugo de naranja.
-Hey Bro- Nos saludamos con un choque de puños, hace tiempo que no hablaba con él.-Vengo con unos amigos- señale la mesa donde estaban todos hablando y haciendo estupideces y el solo asintió riendo- ¿Y tú?-
-Oh bueno saliendo un rato a divertirme, además la música de este lugar es sensacional- Admitía que el DJ era absolutamente bueno pero nada como los grandes Strider.
-Sabes nunca hablamos sobre lo de…English- Oh no, ya puso esa cara de que esta incomodo.-Esta bien si no quieres hablar de eso-
-No es eso solo…necesito alejarme de él y todo. Por eso no te había visitado, la chica Harley me recuerda mucho a él. Por cierto lo vi por aquí así que si pregunta por mí no le digas que me viste-
-No lo haría Bro- sonreí y en eso me entregaron mis bebidas- Nos vemos luego-
-Cuídate lil’man- se despidió con una sonrisa mientras caminaba a la mesa.
Después de eso no se en que momento me quede yo solo en la mesa tomando mi cerveza, frente a mi estaba la pista de baile y los veía a todos bailar. Rose y Kanaya juntas, Karen no lograba ver bien ya que estaba casi hasta la otra punta pero creo que con un moreno y John y Jade bailaban juntos riendo. Al parecer no había de que preocuparme así que me decidí por tomar algo un poco más fuerte como vodka.
Me acerque a la pista bailando con Jade, reíamos y nos besábamos. A lo lejos podía ver a John bailando con varios chicos que no estaban nada mal pero me enojaba verlo así. Seguí bailando con Jade pero vigilando de cerca al pequeño Egbert quien ignoraba la situación y se divertía bailando.
No sé como pero comenzamos un estúpido concurso de quien aguantaba más alcohol. John ya estaba sentado apoyando su cabeza contra la mesa junto con Jade mientras que Kanaya, Rose, Karen quien parecía que pronto se retiraría de la competencia y yo bebíamos vodka, whisky y ron. Karen dejo su trago y se fue a seguir bailando mientras yo seguía tomando.
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Desperté con dolor, me sentía mareado y mi cabeza dolía a horrores no volvería a tomar en toda mi vida. Me levante de la cama quedándome sentado bostezando, por alguna razón me encontraba desnudo y con muchas marcas en mi pecho por lo que alcanzaba a ver. Seguramente Jade y yo habíamos tenido una noche muy prendida, lástima que no la recordara.
Bostece nuevamente y voltee, debo decir que lo que vi me quito hasta la cruda. Descansando en mi cama y por lo que alcanzaba a ver desnudo se encontraba nada mas y nada menos que John Egbert, con su cabello despeinado y durmiendo boca abajo dejando ver marcas en su espalda.
Maldición, ¿qué había hecho?.