Detective Haruna Yamamoto
Capítulo 10: Protección
Cuatro meses después, Haruna seguía sin poder descubrir mucho sobre la pandilla que lideraba Ikki, y no había podido sacar nada de Ikki porque lo único que Ikki le decía era que había dejado a Shun solo porque el hecho de ver a Seiya y a Shun juntos fue demasiado para él. Mas aparte, si eso no era suficiente, Tomoko intentaba seguirla a la estación pero Haruna siempre la perdía de vista en el metro, era algo simple en realidad, Haruna solo se ponía una peluca color negra y ya se perdía entre la multitud.
Sobre el trato que había hecho con el desconocido en el teléfono, tenia de sospechoso al gerente del lugar, pero no tenía suficientes pruebas para afirmarlo, aun así el muchacho decidió dejar a Haruna en el puesto y ni Yuta ni Ayuka tuvieron problemas con eso, ofrecieron ayudarle a Haruna pero ella dijo que se encargaría. Ya había reportado el hecho de que no la decía nada sobre la pandilla, solo sobre su vida personal que no era tan relevante como para publicar.
El día de hoy el gerente, Watanabe Hiroshi, casualmente mientras hablaba con Haruna le dijo que no había suficientes meseras, que una se había enfermado o que no se sentía muy bien.
-Yo puedo ser mesera por una noche- dijo Haruna –vine también por trabajo de mesera-.
Hiroshi no estaba muy convencido, pero después de pensarlo un poco accedió, no antes sin advertirle a Haruna.
-Pueden solicitar a las meseras, aunque si empiezan a ser muy lascivos entonces simplemente avisas y se les prohíbe entrar aquí otra vez- dijo seriamente –nosotros cuidamos a nuestras chicas.
Los uniformes de meseras eran completamente diferentes al de cantinera, el de cantinera consistía en una camisa de polo abrochada con un chaleco corto y una minifalda, pero el de mesera era una blusita que nada más cubría el pecho y una minifalda más corta que la de cantinera sin mencionar unas botas largas, y que el conjunto era de cuero y color negro. Después de conseguirse un uniforme que le quedara levemente ajustado en vez de completamente ajustado como veía que muchas chicas lo traían salió con una gran vergüenza de los bastidores para empezar a trabajar.
-Buenas noches, soy Katsuhara Anri y seré su mesera esta noche- se introdujo Haruna y se alisto para tomar una orden.
-Me gustaría solicitar a la mesera- dijo Ikki que estaba en la mesa.
Haruna se sorprendió y trago saliva pero era una orden así que le hizo una indicación para que la siguiera. ¿Recuerdan las puertas que mencione la primera vez que describí el bar? Las puertas se podían ver desde las mesas. Haruna le indico un cuarto a Ikki y después Ikki cerró la puerta.
Sintió miedo cuando la puerta se cerró porque probablemente Ikki había descubierto quien era y esa habitación seria su tumba pero en vez de que Ikki le levantara su puno beso a Haruna en los labios y sin despegarse la acostó en la cama.
Ikki despego sus labios de Haruna y dijo –sabes como a plástico- y empezó a acariciarle el rostro como buscando algo, luego encontró una pequeña anomalía en la cara de Haruna, esa anomalía era la mascarilla que traía puesta para ocultar sus pecas, y levanto la mascarilla para revelar la pecosa cara de Haruna.
Ikki se veía levemente molesto y luego le quito la peluca a Haruna, y revelo su hermoso cabello naranja.
-¿Por qué?- empezó a decirse a sí mismo -¡¿Por qué me tuve que enamorar de la persona que más odiaba?!-.
Haruna se confundió mucho, ¿cómo que “enamorarme de la persona que más odiaba”?
-Te odio por lo que hiciste, juntar a mi hermano y a Seiya- dijo sin querer voltear a verla –pero llegaste como Katsuhara Anri y… me vengo enterando que eres tú. ¡¡Lárgate!!- le grito Ikki.
-Si vuelves a venir a este bar te matare- le dijo, Haruna entonces tomo su peluca, se la puso y salió de la habitación y de ahí le aviso al gerente lo que había pasado (en parte).
-Katsuhara-san, ve a casa, te avisare cuando sea buen momento volver- dijo Hiroshi.
-No, vendré mañana disfrazada, cuando entre le avisaré que soy yo- le respondió Haruna, después de una pequeña charla para acordar detalles de una historia en caso de que Ikki preguntara decidió volver a la mansión Kiddo.
Al llegar en vez de dormir en el sofá, subió a donde estaba su cuarto, abrió la puerta y encontró a Tomoko dormida en su cama. Ella solo sonrió y sin hacer ruido se quitó sus zapatos y los calcetines para sentarse en la cama suavemente y después acostarse, al darse vuelta para acomodarse se dio cuenta de que estaba cara a cara con Tomoko, observo a su compañera por un momento y después decidió cerrar los ojos para intentar dormir.
La compañera había escuchado entrar a Haruna a su habitación, pero aun así decidió fingir que estaba dormida, cuando Haruna ya había cerrado sus ojos Watami abrió los suyos para mirar por un momento a su mejor amiga, al parecer ella se había dormido rápido ya que con el dedo índice rozo suavemente su labio superior y Haruna no reacciono en absoluto. Ahí Tomo deicidio también cerrar sus ojos e irse a dormir.
En la mañana cuando Tomoko despertó, vio a Haruna todavía en cama volteando para su lado aunque estaba despierta mirando hacia la almohada.
-Haruna, ¿Por qué regrésate temprano?- pregunto Tomoko.
Haruna volteó a verla dándose cuenta de que estaba despierta –me dieron el resto del día- mintió rápido.
-No te creo- le respondió Watami.
Unas horas después mientras ellas dos desayunaban en el comedor Watami miro a Haruna y viceversa y entonces dijo –Iré contigo el día de hoy, no me importa lo que digas- al escuchar esto, la pelirroja no se opuso en lo absoluto ya que sabía que una vez que Tomoko se decidía nadie podía cambiar de opinión.
Haruna le dijo que era un burlesque que tenía algo extraño, Watami pregunto que era.
-Lo sabrás cuando lleguemos- dijo.
Esta vez, Haruna opto esta vez por ponerse una peluca de pelo más largo que el suyo de color negro, no se puso pupilentes y se puso una mascarilla para ocultar sus pecas.
Después de más de media hora de andar por el metro finalmente llegaron al burlesque. Haruna abrió las puertas para que Watami pudiera pasar y lo que hizo fue mirar alrededor del lugar mientras ella buscaba a Hiroshi.
-Watanabe-san, llegue, Katsuhara Anri- dijo asomándose a su oficina.
-Ah sí, ya veo, ¿algo un poco más común no?- respondió Hiroshi mientras veía su pelo negro.
-Sí, algo más común y menos llamativo- dijo acariciando la peluca –ahora voy a ir a la barra del bar- señalo.
-Oh, sí, como quieras- Haruna entonces cerró la puerta tras de ella.
Cuando llego a la barra del bar encontró a Tomoko sentada en la barra, hablando con un muchacho bien vestido, se preocupó un poco ya que básicamente estaba hablando con un hombre en un burlesque, por eso se acercó con paso apresurado y cuando Watami la vio dijo –Hola Haruka- dijo y se levantó para abrazarla, en eso Tomoko le susurró al oído –sígueme la corriente-.
-Así que ella es tu pareja- dijo el hombre.
-¿¡Eh!?- Haruna entonces comprendió– ¿¡le dijiste que estamos saliendo!? Sabes que no mucha gente acepta eso- dijo tapándose la cara.
-Es mi culpa, con razón no querías decirme quien era, se pone muy nerviosa- dijo el hombre –aunque, si son pareja ¿por qué no se besaron?-. Haruna se quitó las manos de la cara para ponérselas otra vez –ah, sí, pregunta estúpida, es muy nerviosa ¿no?- Watami sonrió de manera inocente y le dijo al señor –más que nada con desconocidos- Haruna se quitó las manos de la cara, el hombre se despidió y las dejo solas.
-No le podía decir que tenía novio porque no me iba a creer- dijo Watami en su defensa.
-De todas maneras esta en Estados Unidos, no creo que importe si vez a alguien más, al menos una vez- dijo Haruna instalándose en el bar.
En ese momento entro Ikki, pero Haruna estaba poniendo mucha atención a Tomoko como para darse cuenta de eso. Ikki, para empeorar las cosas traía a unos cuantos de sus hombres con él, cada una con una pistola calibre .45, Ikki tomo paso apresurado para la barra del bar y cuando estuvo suficientemente cerca grito.
– ¡¡Te dije que no volvieras!!- alzo el arma que tenía el haciendo que el público, las bailarinas y los músicos que estaban tocando voltearan hacia el asustados.
–Quiero que todos se vayan de aquí, excepto estas dos, y con todos, me refiero a TODOS- grito la última palabra y tiro del gatillo otra vez haciendo que todos corrieran hacia las puertas de salida.
Después de que todos se habían ido Ikki dijo en un tono más calmado a Haruna –quítate la peluca-.
-¿Peluca? ¿De que estas hablando?- cuestiono Haruna.
-¡NO ME MIENTAS!- le grito, tomo aire para calmarse y repitió con un tono calmado –quítate la peluca-.
Haruna se empujó la peluca hacia atrás y se quitó las dos mascarillas que se habían puesto para ponerse pecas y las dejo tiradas en el piso. -¿Cómo supiste?- pregunto Haruna.
-No consiguen a alguien tan rápido, aparte supe que eras tú desde el minuto en el que te vi, ahora quiero la verdad, ¿Quién eres y que haces aquí?- pregunto Ikki apuntando ahora su pistola a Watami -¿y quién es ella?-.
Haruna se mordió los labios al saber que no podía hacer nada por el momento más que decir la verdad y solo lo iba a hacer si apuntaban el arma a Watami –ella… es… mi mejor amiga… Watami Tomoko…- empezó con eso.
-Mi verdadero nombre es Yamamoto Haruna, soy una reportera/detective, conseguí trabajo aproximadamente hace seis meses, como primera asignación me mandaron acá, para investigar a los “Desterrados” y me encontré contigo- aclaro la pelirroja.
-Eso quiere decir que estabas escribiendo un artículo de lo que yo te decía- pregunto Ikki.
-Si- contesto Haruna.
-De acuerdo- dijo Ikki poniéndole seguro a su arma –hagamos un trato- dijo. –Tú renuncias a tu trabajo, borras tu documento permanentemente y a cambio…- aquí Ikki se interrumpió agarro a Watami de su brazo –te devolveré a tu amiguita- dijo apuntándole un arma a su cabeza.
-¡No! Déjala fuera de esto, ella no tiene razón alguna para que le hagas esto, ella no merece quedar metida entre nuestro fugo cruzado, tu solo tienes que preocuparte por mí, no por ella ¿¿¿entiendes???- le rogo Haruna.
-Si de verdad la quieres de vuelta entonces haz lo que te dije, prometo no dejar que le hagan nada indebido, yo misma la estaré cuidando, mañana iremos a la mansión Kiddo, a media noche solo para devolvértela, te estaremos vigilando, así que no se te ocurra nada- dijo Ikki con la voz más fría que Haruna había escuchado salir de él.
-Haruna, estaré bien- dijo Watami antes de que salieran del bar.
Acto seguido uno de los hombres de Ikki cerró las puertas del bar dejando a Haruna sola, en el desolado burlesque.
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