El elfo comenzó a descender lentamente de la montaña hasta llegar nuevamente a los prados. En donde empezó a camina hacia el este ya que el creía que por ese camino se llegaba a la casaca de hielo. Sin embargo cuando el tricolor llego a la mitad del recorrido se encontró con un letrero que indicaba que hacia el norte estaba el rancho de Mana, en dirección al sur estaban los bosques, hacia el este el desierto y en dirección al oeste se encantaba la casaca de hielo.
Cuando Yami se dio cuenta de que había tomado el camino equivocado, suspiro molesto por un par de segundos para después devolverse a donde había comenzado a caminar. El recorrido hacia ese sitio fue tranquilo hasta que el ojirojo se percato que estaba empezando a anochecer por lo que comenzó a correr con todas sus fuerzas hasta llegar a la montaña, la cual solo subió un poco para evitar encontrarse con esos molestos zombis.
Después que el tricolor recuperara el aliento perdido por aquella carrera, comenzó a buscar con la mirada alguna cueva en la cual pudiera pasar esa noche para no dormir a la intemperie. Luego de varios minutos de búsqueda por fin Yami pudo encontrar una pequeña caverna, a la cual ingreso a la vez que se sentaba en el suelo y abre su bolsa de comida al mismo tiempo que comenzaba a comer hasta satisfacerse. Después de haberse alimentado, se recuesta en el piso a la vez que se queda profundamente dormido por el cansancio acumulado.
Al otro día
El tricolor baja nuevamente de la montaña hasta llegar a los prados, en donde esta vez toma el camino del oeste por el cual camina tranquilamente dado que habían le aparecido ningún clase de enemigo. Cuando de la nada salieron tres agilas come humanos que se dirigirán a atacar al ojirojo pero como el ya sabía cómo vencerlas, saco su bolsa de shurikens de su cinturón, saco seis de estas armas y les tiro dos a cada a una de las aves, las cuales cayeron muertas al suelo.
Luego de que el elfo terminara con esos monstros, continuo con su recorrido hasta que llego a un rio el cual no podía cruzar por lo que comenzó a caminar por el camino que ahí al lado del rio, el cual era un verdadero laberinto dado que al comienzo el tricolor solo tuvo que subir hasta que llego una parte donde tuvo que ir por la izquierda, luego a la derecha, después bajar y otra vez a la izquierda hasta que nuevamente le toco subir y ahí se terminaba el camino.
Después que Yami llegara a la cima, comenzó a buscar con la mirada la cascada de hielo hasta que la encontró. Luego de haberlo hecho, el ojirojo se acerco a la catarata congelada buscando la forma de ingresar en pero no encontraba nada hasta que se afirmo en una de las paredes la cual se abrió dejando ver un camino oculto.
El tricolor al verlo en un principio se sorprendió dado que no esperaba ver algo como eso pero después de unos minutos ya no le dio importancia y se metió en el túnel. El cual en un principio no estaba nada mal, sin embargo cuando el elfo cruzo la mitad de este corredor comenzó a sentir que se le congelaban hasta los huesos, aun así Yami siguió caminado por este frio pasillo hasta salir de este.
Después que el ojirojo saliera de aquel túnel, se dio cuenta de que había llegado un campo de hielo por el cual comenzó a caminar con mucho para evitar caídas incensarías. El elfo continúo su recorrido tranquilamente hasta que en medio de la nada encontró un iglú pero no un común y corriente si no uno más grande de lo normal.
Yami al verlo pensó que dentro de ese extraña casa de hielo podría estar la última joya por lo que no lo pensó dos veces e ingreso en esta vivienda. Al entrar en ella, saca su espada y con ella en sus comienza a caminar esperando que aparezca el comité de bienvenida, sin embargo por más que avanzaba nada sucedía hasta que llego al centro del salón, en donde había tres puertas de escarcha solida.
El tricolor ingresa por la primera puerta y tan solo ingresar aquella habitación, el techo comienza a caerse sobre el piso por lo que al ojirojo no le quedo más remedio que salir de ahí y entrar en la segunda puerta pero en esta no había una trampa sino una manda da pingüinos congela humano, quienes comenzaron a tirar nieve por la boca la cual congelaba todo lo que esta tocara. El elfo al ver lo que hacia ese poder, no se quedo atrás y comenzó a atacarlos con su espada antes de que sus enemigos lo convirtieran en una estatua de hielo.
Luego de acabar con ellos, sale de esta recamara y pasa a la siguiente en la cual había una escalera que llevaba a un cuarto con plantas carnívoras de hielo, las cuales venció fácilmente. Yami estaba por salir hasta que en una equina vio un cofre el cual abrió encontrados con un cinturón que teína huecos en los cuales venían unas dagas de fuego.
El tricolor, se pone aquel cinturón debajo del suyo para salir de esta habitación por la puerta, la cual lleva a un salón más grande con otras dos puertas más. El ojirojo entro por la primera encontrándose con dos osos polares que a pesar de su altura eran bastante agiles por lo que al comienzo el elfo solo se podía defender hasta que puedo contraatacar sacando su nueva arma y lanzándoselas al corazón de ambos enemigos, los cuales al sentir el impacto, murieron de forma instantánea.
Después que Yami los eliminara, regreso aquel salón y en entro en la otra puerta, en esta recamara había un cofre al final de la habitación pero para llegar a él, el tricolor empezó a caminar por un camino tan delegado que si llegase a perder el equilibrio caería en un pozo sin fondo. Así que el ojirojo camino los cuidadoso que pudo hasta llegar al cofre y al abrirlo encontró una llave de oro con ella en mano salió de esa peligrosa recamara y comenzó a buscar aquella puerta.
Sin embargo por más que el elfo buscara y buscara nada encontraba, entonces pensó que tal vez la puerta estaba afuera por lo que salió del iglú a la vez que comenzaba a caminar un poco más arriba de donde estaba hasta que encontró un triangulo de hielo el cual tenía la puerta con el candado.
Yami al ver la puerta, la abre y entra en la recamara encontrándose con un lobo polar enorme quien comienza a atacar al tricolor con sus garras pero el ojirojo alcanza a defenderse hasta que el enemigo deja atacarlo para reponer energías en ese momento. El elfo no lo duda dos veces, saca sus dagas de fuego y se las tira al monstro en sus patas provocando que este se caiga boca arriba, lo cual no pasa desapercibido por Yami quien toma su espada corre hacia donde está el enemigo y de un salto le entierra la espada en el corazón provocando la muerte de aquel lobo.
Luego de que el tricolor terminara con él, se aleja del cadáver a la vez que busca la última joya y la encuentra en el fondo de la habitación, con ella en sus manos, sale de ese lugar para dirigirse a la ciudad central.
CONTINUARA
EXTRA PROXIMO CAPITULO
- Lo eh estado esperando joven héroe
- ¿Quién eres tú?
- Yo soy….