-------advertencia, contenido violento--------
Seungri se dio la vuelta para encontrarse con el cañón de una pistola apuntándole en la frente.
- Tu fiebre es muy alta, necesitas antibióticos o empeoraras.
Dragón intentaba mantener la mirada rígida, su cuerpo temblaba debido a la fiebre hasta que se desplomo entre los brazos de Seungri. Seungri lo levanto en brazos hasta llevarlo a la cama.
- Si sales de aquí te matare- decía cansadamente, mientras jadeaba un poco.
- Descansa un poco iré a la farmacia.
Seungri lo miraba compasivamente, quizá era una persona que merecía eso y mucho más, pero para a los ojos del pequeño, era una persona que necesitaba su ayuda y de acuerdo con lo que le enseño su padre debía brindársela.
Salió de casa y corrió a una pequeña farmacia de 24 horas que se encontraba cerca, todo se encontraba completamente silencioso, como antes de una tormenta. Entro a la farmacia, y compro los medicamentos, algo en esa noche tan oscura no le daba buena espina, volvió rápidamente a casa y al entrar vio que dragón nuevamente se había quedado profundamente dormido. Murmuraba en vos baja algunas cosa debido a la alta fiebre que sufría.
- El pequeño…. De mirada ojerosa…es lindo.
El escuchar esto el cuerpo de Seungri se tensó un poco aunque pensando que era simplemente debido a la fiebre decidió dejarlo pasar. Le dio el medicamento sosteniendo levemente su cabeza entre sus brazos para que este pudiera beber el agua y así tomar la pastilla. Lo observaba detenidamente sentado desde una silla cerca de la cama.
- Valla que es bello- murmuro para sí mismo. Hasta que sueño también lo hiso preso.
El despertador sonó muy temprano, seungri abrió poco a poco los ojos, inmediatamente dirigió su mirada hacia la cama, esta se encontraba vacía. Con el silencio de la madrugada Dragón se marchó son siquiera dar las gracias.
….
Dragón entraba en una enorme bodega abandonada, el lugar se encontraba iluminado solo por algunas lámparas amarillentas, la pintura era vieja y desgastada, el lugar tenía la mayoría de las ventanas rotas. Dentro del lugar se encontraban alrededor de 30-40 personas, casa quien en su respectivo asunto, algunos bebiendo, otros jugando cartas, algunos charlando y unas cuantas parejas besándose al fondo del lugar.
- Dragón por fin llegas, estaba a punto de salir a buscarte
- ¿Dónde se encuentra nuestro invitado?- Dragón caminaba de frente sin observar a su compañero
- Espera Bro estás herido.- dijo tomándolo del brazo deteniendo el paso e este.
- No te preocupes- Dragón levanto un poco su polera dejando ver la gasa que cubría si herida- está solucionado.
- Valla es una curación bastante buena, ¿acaso fuiste al hospital o algo así?
- No, una persona me ayudo- Dragón sonrió al decir esto.
- Este chico ¿qué hare contigo?- decía sol mientras golpeaba levemente el hombro de Dragón.
- Bueno ya- Dragón cambio si expresión por una más seria- no tenemos tiempo, pronto amanecerá y tenernos que terminar con ese bastardo.
- Oh, sí, está en el cuarto del fondo.
Dragón camino por un pequeño pasillo hasta dar con una puerta metálica. Al abrir esta puedo ver a una persona sentaba en medio de un cuarto completamente vacío, sin ventanas y con un solo foco que se tambaleaba en el techo. La sangre escurría por el cuerpo de esta persona, tenía múltiples moretones y heridas en todo el cuerpo.
- Hola Tablo ¿disfrutas tu estancia?- sonreía con aires de superioridad Dragón
- Aléjate maldito- decía ya casi sin fuerzas, salpicaba un poco de sangre.
- Vamos, deberías mostrar un poco más de respeto, incluso pedir piedad- tomo un arma que lleva en el cinturón, y apuntándole a la cabeza jalo el gatillo- BANG! – rio fuertemente, el arma no tenía balas.- no te preocupes, tengo planes más interesantes para ti.
*en la guarida de los Choi*
Top se encontraba en el piso abrazando sus piernas mientras escondía su cara entre sus rodillas sus sollozos eran desgarradores y podían escucharse en todo el lugar, a un lado de él se encontraba Seven caminando de un lado a otro con un arma entre las manos, se notaba la desesperación en su rostro.
- ¡Cállate maldita sea, no me dejas pensar!- le gritaba a su hermano el cual se mantenía llorando
- Se lo llevaron, se lo llevaron – repetía una y otra vez entre sus lloriqueos.- hay que ir por él.
- ¿Eres estúpido?, como se te ocurre que nos iremos a meter donde los Kwon, sería un suicidio, tenemos muchos hombres heridos.
- ¡No lo podemos dejar con ellos, lo van a matar!- grito desesperado Top
- Esperemos hasta que salga el sol. Después iremos a buscar a ese malnacido de Dragón
*en la plaza principal*
- llegamos- decía aliviado Ángel mientras dejaba caer el bulto que llevaba en el hombro- heyy, despierta aún queda algo de diversión- decía golpeando levemente el rostro de Tablo, el cual aún no recuperaba el conocimiento.- Sol, no quiere despertar.
Sol saco su arma y le dio un disparo en la pierna, Tablo soltó un fuerte grito, llevando inmediatamente sus manos hacia su pierna herida.
- Ya despertó.- dijo triunfante Sol- ¿y ahora Dragón?
- Ahora- decía rascando su cabeza- traigan los tubos que les pedí.
Ambos se dirigieron al auto mientras dragón se quedaba mirando a Tablo.
- Lo siento, no es algo personal
- Eres un hijo de puta- grito con las pocas fuerzas que le quedaban.
- Aquí están Dragón- le entregaron los tubos metálico, con puntas afiladas.
- Bueno…- le clavo uno en la pierna- el dolor no durara mucho, lo prometo.- le entrego nuevamente los tubos a Sol y sacó su arma. Un disparo certero en la frente le arrebato la vida en un instante- bien ahora termínenlo.
Dragón se retiró y entro en su auto. Una vez adentro limpio sus manos que se habían manchado con la sangre de Tablo, frotaba fuertemente con un trozo de tela mientras que de sus ojos salían un par de lágrimas
- Lo siento- susurro secando sus lágrimas.
Después de eso solo se limitó a mirar hacia otro lado en lo que sus compañeros terminaba de clavar aquellos tubos en el cuerpo inerte que ya tenía un enorme charco de sangre a su alrededor. Minutos después sus compañeros entraron en el auto.
- Listo hermano.
- Buen vámonos.
El camino de regreso fue silencioso para los tres.
*en casa de Seungri*
- ¿Hijo ya te encuentras despierto?
- Si padre, estaba a punto de irme a la escuela.- contesto el pequeño desde su habitación
- Ahh… estoy muy cansado me iré a dormir. ¿No ocurrió nada malo anoche?- Seungri bajo las escaleras abotonando su camisa
- No padre….fue una noche tranquila.
- Muy bien hijo que te valla bien.
Seungri salió de su hogar camino algunas calles hasta pasar por la plaza principal, nuevamente pudo observar a una gran cantidad de gente reunida, se abrió paso entre la multitud y lo que observo lo dejo un poco asqueado, un cuerpo yacía inerte en el suelo, este era travesado por varios tubos de metal bastantes gruesos, se notaba que el cuerpo había sido dejado ahí hace apenas unas horas, al acercarse un poco más pudo darse cuenta que era Tablo uno de los más importantes dentro de los Choi.
Seungri se hiso algunos pasos hacia atrás, en cuanto llego al nivel de la multitud, todos comenzaron a abrir paso a Seven y Top que venían caminado. Al llegar al frente ambos miraron la escena.
- ¿QUE ESTAN VEINDO TODOS?-grito Seven a todos los que estaban observando- vallase de aquí, esto no es un espectáculo.
Poco a poco la multitud se fue alejando mientras este retiraba cada uno de los tubos que su compañero tenía en el cuerpo. Las lágrimas se mantenían retenidas en sus ojos, no podía mostrarse débil, aguantaba su llanto lo más que podía; a pesar de que siempre peleaban este realmente apreciaba a tablo, después de todo fue el único que lo apoyo cuando todo el negocio quedo a su cargo tras la muerte de su padre.
En el preciso instante en el que Top vio la escena se quedó en Shock, solo observaba, inclusive cuando su hermano comenzó agitar no aparto la mirada de aquel cuerpo. Tablo siempre había sido un protector para él, su amigo, la única persona que no le exigía ser cruel, él se había convertido en un refugio para el Top desde que era muy joven y lo veía de esta manera, asesinado y su cuerpos expuesto de manera tan humillante.
Seungri miraba la escena ya un poco más alejado, Seven levanto el cuerpo en brazos y camino a un lado de Top.
- Vámonos Top- top se quedó un segundo estático en su lugar para después acercarse a su hermano.
- ¿para que llevas esa porquería?, deberías dejarlo ahí, solo es un estorbo.
- ¿top? ¿Te sientes bien?- Seven miraba confundido a Top.
- Si y dame tu arma, sabes que odio andar por ahí desprotegido- top tomo el arma de seven de su cinto y se adelantó a entrar en el auto- Rápido, antes de que te obligue a tirar ese bulto inservible.
Seungri miraba la escena incrédulo, ese no era el chico que siempre se escondía. Llamado “la oveja negra de los Choi” debido a que siempre huía a las peleas y nunca portaba armas. Era difícil creer que se atrevería a hablarle de esa manera a su hermano mayor, aun pensando en ello camino hasta el colegio.
El auto Top conducía rápidamente mientras en el asiento trasero se mantenía Seven en silencio. Rápidamente llegaron a la bodega donde Vivian, esta no era muy distinta en la que vivían los Kwon. Al entrar algunos ayudaron a Seven con el cuerpo que cargaba.
Top saco nuevamente su arma y apuntando al cielo dio tres disparos atrayendo la atención de todos los presente.
- Bien…ahora que ya tengo su atención, les informo que ahora todo acerca del negocio será informado a mí- todos lo miraba sin poder creer que realmente el estaría diciendo eso- y por favor ya saquen ese asqueroso muerto de aquí.
Miro al fondo de la habitación y ahí se encontraba una chica rubia, de tez blanca bastante bella, se acercó lentamente a ella, acaricio su rostro con la punta de su pistola.
- Te quiero en mi habitación en 10 minutos.
- Aléjate de Dara- uno voz masculina se escuchó en el lugar, Top solo la ignoro.
- ¿Qué pasa si no voy?- pregunto Dara un tanto temerosa.
Top apunto su arma hacia el chico que acababa de defender a Dara y con un solo tiro le atravesó el corazón.
- Te quedo claro- dijo tomándola fuertemente de la barbilla- ¿o quieres que mate a alguien más?
Pasaron algunas horas dentro de la habitación de Top ni los gritos ni las suplicas había evitado que este tomara el cuerpo de Dara para satisfacerse físicamente.
Ambos se encontraban desnudos en la mama Dara intentaba cubrirse con una manta, se entraba arrinconada entre la cama y la pared sollozando, des su labio escurría un poco de sangre y tenía un par de moretones, su cuerpo temblaba levemente, Top estaba recostado al otro lado de la cama mientras fumaba.
- Por favor deja de llorar, arruinas mi cigarrillo, no estuve tan mal- soltó una fuerte carcajada.
Top se levantó de la cama y comenzó a vestirse.
- Bien preciosa me voy- la tomo del mentón y la beso a la fuerza.
Top salió de la habitación colocándose unos pantalones, unos minutos después entre Seven miro a la chica y le dio algo de ropa.
- Tranquila- le dijo mientras acariciaba levemente su rostro.
- ¿Por qué? – pregunto ella con lágrimas en los ojos.
Después de que Dara se calmó ella y Seven hablaron por largo tiempo, ella le hablo sobre la razón por la que había decidido unirse a los Choi y este en cambio le hablo sobre los problemas emocionales de su hermano.
- Hace un par de años Tablo y yo nos encontrábamos rodeados por bastantes hombres de los Kwon, nos tenía contra la pared, era nuestro fin. De la nada un auto se estaciono tras de los hombre de Dragón, con una puntería impresionante Top acabo con cada uno de ellos, los acribilló, la mirada en su rostro era temible, realmente parecía gozar ver como los cuerpos se deshacían debido a la fuerza de las balas. Hiso esto hasta que Tablo pude acercarse a él y lo tranquilizo. Es como un mecanismo de autodefensa, cuando estamos en peligro él se transforma en una persona fría y cruel, aunque nunca había llegado al extremo de matar a uno de los nuestros o peor hacer algo como lo que hiso a ti.
Dara lo escuchaba atenta, los problemas tan solo comenzaban.
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