El galo lleva noches trasnochado de tanta concupiscencia que le cuerpo fornido de leo le daba tres veces al día, le dejaba dormir lo suficiente para reponerse de esa voracidad sexual que desprende apenas asoma su figura en el marco de la puerta; su candenciosidad resaltaba esos felinos ojos verdes llenos de fuego de pasión, labios que te hacen sucumbir a sus deseos, manos fuertes que saben adentrarte al placer , palabras que quebrantan tu voluntad , y un arma tan poderosa y grande que te lleva a tocar el cielo y el infierno por caer en los pecados capitales, tres de ellos destacan:
Envidia: no poder soportar que otros deseen su cuerpo, solo él puede desearlo, solo él puede tocarlo.
Ira: los celos y un cólera le invaden cuando lo ve “socialmente” charlando con otros en especial con Shaka, las viseras se le revuelven de como el indú ve el prodigioso cuerpo de su amante.
Lujuria: el no contener sus precarios instintos de ver al semi dios denudo pavoneandose en su esplendor y no dejar de tenerle hambre, devorarlo en toda la extensión de la palabra, con su boca engullendo su carne, devorando su labios; con la mirada excitándose cada vez que le oye gemir por su causa; con el olfato embriagando sus fosas con masculino aroma; con el tacto al pasar sus manos por su trabajada figura y poder apretar con mucho gusto sus glúteos y por último con los oídos al sentirse mas deseoso con cada gemido que salen de sus bocas.
Despertó de golpe sobresaltado , con el cuerpo caliente, excitado, solo evocar esos recuerdos le bastan para tener un orgasmo, pero cual era su deplorable realidad: Capturado.
Aioria no lo había soltado desde ese día, seguía atado a la cama con las cadenas; una captura muy provechosa. No pasa día sin que despierte con la entrepierna hinchada, la fisonomía sudorosa e intranquila, precisaba de atención bravía.
-No se quitará nunca lo mezquino, verdad mon amour – ese gesto de propensión sexual en el griego le invita; era verdad, Camus era un puto mezquino al pensar las suciedades que harían en el lecho pese a vivirlas en la periocidad.
-Hazlo ya…. Cabrón miserable- pidió imperioso , sus manos y pies se crispaban , le urgía ser tocado con avidez.
Increíble la desfachatez de Aioria de verle sufrir, de rogar por placer e inaudito de que aún no lo toca y estar ASÍ al borde del delirio tras evocar recuerdos o fantasías.
-Muy bien mon amour, ya no te haré sufrir mas,- se sienta en el borde para besar esos labios sedientos- eres mi preciada captura.
Le advirtió que el perdón iba a costarle caro, muy caro.
#22 Quizás 391 Palabras
Durante la enfermedad de Aioria, Camus se permitió conocer mas al pequeño santo, que para aburrimiento del griego el pequeño cultivó su mente en esas dos semanas de sufriente gripa o resfriado, el de ojos esmeralda ya se había aprendido bien los números y hasta dividir gracias a que le galo no le dejaba de formar su mente de acuerdo a lo que un santo dorado debe de saber, incluso había ahuyentado a sus amigos a excepción de Aioros que le prestaba atención a Camus.
Aioria maldecía a su hermano porque eso le sacaba ánimos y sonrisas motivando al acuario a regresar con mas lecturas , con mas sabiduría cuando lo que él quiere es destruir piedras, jugar con milo, ir a nadar etc.
Gracias a los Dioses su martirio terminó, porque si no… quien sabe que haría.
-Aioria, Hola veo que ya has mejorado
-Eh..e..Ca..Camus hola que tal- saluda un poco nervioso y aumenta cuando ve al niño cargar un enorme y pesado libro –Que traes ahí Camie- se iba a arrepentir de preguntar.
-Es el libro del quijote, lo traje para leerte en lo que seguías en cama, pero mira ya estás mejor Leo.- fue su sincera respuesta
-S-Si.. me repuse rápido, es normal, soy el aprendiz de leo, un resfriado no me puede detener Jaajajaja- destiló orgullo
-Bueno te parece si quizás algún día de estos leamos el Quijote?
-S-Si.. quizás algún día – so pequeño yo interno execraba sus palabras, pero ver esa
carita de entusiasmo en camus que no deja asomarse a diario le hace aceptar, además que amplió si vocabulario desde su cercanía.
-Gracias Aioria- el niño abrazó su libro, sabe de sobra que su nuevo amiguito abominaba ese tipo de cosas, pero que por él hace el intento de interesarse mas en sus gustos.
-No las des, a mi me sirve para comprender mejor tus gustos- el galo cogió la mano de Aioria para salir corriendo al campo y con la otra mano sostenía el libro sonriente, las lindas palabras de del leo le llenaron de calidez.
La inocencia y destello ambos los unía cada vez más conforme pasan los días.
Quizás no era malo claudicar de vez en cuando a la lectura.
Quizás no esté de más aprender.
Quizás no sea malo sentirse cómodo al tomar la mano de otro niño.
#14 Libro 500 Palabras
En cuanto terminaron de divertirse y entrenar los pequeños aprendices el galo no pierde su tiempo para que Aioria prometa que juntos leerían el libro, pero el pobre griego con todo y su pena aclara que fuera uno cortito, nada mejor que le mismo libro que Camus le regaló en su cumpleaños .
-Quieres que leamos Vuelo Nocturno?
-Claro, tú me lo regalaste y que mejor para iniciar nuestras tardes de lectura con el libro que con tanto cariño me regalaste - palabras buenas, palabras ciertas.
Ahora fue leo quien toma la mano de acuario para guiarlo a su templo. No sin antes pasar por la casa de Géminis el pequeño de los risos pide que le tomen una foto con Camie. Claro que el otro niño esperaba en la salida del templo en lo que su amigo convence al gemelo mayor de ser partícipe.
-Anda Saga, tómanos una foto, sabes que amo tener foto de mis amigos y familia - le sonríe risueño.
El gemelo mayor se lleva una mano a sus ojos , el hermano menor de Aioros era una lata con las fotos, hacía su propio álbum o libro de recuerdos, peor pues en su cumpleaños se la pasó ordenando que foto aquí foto allá y por acá.
-Si aceptas haré que tú y mi hermano pasen 24 horas ustedes dos solos, sin nigua interrupción- Eureka, el gemelo lo ve con interés - No es lo que tanto has querido Sa-Ga, pasar tiempo con mi hermano , a solas sin "metiches" revoloteando ?- ese tono que Aioria usaba... significa que el muy diablo los espiaba , pero como no si no dejaba a su hermano al menos que fuera para irse a divertir con los otros santos.
-Cómo planeas hacerle para que podamos estar solos?- tuvo que preguntar pues la intriga puede.
-Por favor Saga es que acaso dudas de mi?- fingió estar afligido para enseguida hablar- Sabes que tengo el encanto con mi Hermano, Además de ser el dichoso por encima tuyo y de shura de manejar Aioros, así que ,¿ que decides?- la mirada y el gesto en los labios del menor mas la soberbia y seguridad en sus palabras hacen a saga pensar...
El mayor pone su título en juego si lo que vio en esos ojos verdes era un brillo de maldad, Aioria para su edad sabe ser un perfecto embaucador, tiene mente maquiavélica con cara de inocencia. Se tragó sus palabras, su coraje y sus ganas d mandar a otra dimensión la pequeño demonio frente suyo.
Sacó todas las fotos que el menor quiso a él y Camus; por otro lado el galo conmocionado , no supo como el rubio convenció al inflexible saga de ser una especie de fotógrafo ; al terminar el muy patrón de leo ordena al mayor ir a revelar las fotos tras secretearle unas palabras para regresar con su amigo.
Ahora sí puede ir a leer su libro tranquilo, de todas formas con Shura hace lo mismo.