Capítulo 2
Los rayos del sol iluminaban la habitación de cierto castaño ojiverde que dormía tranquilamente. Se movía de un lado a otro, revolviendo las sábanas blancas de aquella cama. El sol comenzaba a molestarle así que cubrió su rostro con una almohada, pero recordó que debe levantarse para ir al instituto, así que lentamente abrió sus hermosos ojos color esmeralda y se sentó en la cama estirando los brazos para quitarse la pereza. Miro el reloj que se encontraba en un pequeño mueble que estaba a lado de su cama y vio que marcaba las 7:30 de la mañana.
-¡Aaah! ¡Que tarde es! ¡Me quede dormido! – grito y se levantó de la cama. Corría de un lado a otro buscando su uniforme y las cosas que necesitaba. Después de 10 minutos ya estaba listo así que bajo a la sala, comió un poco de cereal y salió corriendo a toda prisa de su casa.
-si llego tarde me ira mal, Kamijou-sensei no dejará de lanzarme libros-decía un Misaki agitado mientras corría a toda velocidad. Y para su buena suerte después de su larga carrera llego justo a tiempo antes de que el profesor entrara al salón.
“¡lo logre! Soy todo un corredor olímpico” pensó mientras se sentaba en su pupitre y justo cuando se sentó un hombre con rostro joven, y cabellos y ojos color avellana entro al salón.
- Buenos días alumnos-saludo serio
- buenos días Kamijou-sensei- dijeron todos al unísono.
- bien alumnos, el director de este instituto quiere que todos los alumnos de esta institución sean destacados en cada una de las materias correspondientes al nivel educativo en el que se encuentran.- tomo aire- es por eso que a los alumnos que tengan “ciertos problemas “en alguna materia se les asignara un tutor, que será un alumno de un grado superior, por favor pasen-dijo el profesor y comenzaron a entrar al aula 6 alumnos. Misaki solo miraba como aquellos chicos y chicas entraban, pero se sorprendió al ver que entre esos alumnos se encontraba la persona que inundaba sus pensamientos Usami Akihiko.
“¿Por qué esta el aquí? Buaaaah yo quiero olvidarlo y tiene que aparecer hoy y justamente aquí” bufo Misaki evitando mirar al peli plateado.
- bueno estos son algunos de los alumnos con las mejores notas y como se darán cuenta solo son 6, puesto que en este grupo solo hay 6 alumnos con “ciertos problemas”, así que uno por uno los nombrare y les asignare a su tutor- dijo el profesor sosteniendo una lista en la cual se encontraban los nombres de los alumnos que necesitan un tutor.
“¡por favor que mi nombre no esté ahí!, bueno es obvio que está ahí porque siempre me va mal en matemáticas y en literatura” se quejaba mentalmente el castaño.
- Tomoe Hikari, tu tutora será la señorita Hotsuma Michiko- dijo el profesor mirando a una chica de cabello rubio y ojos azules. Y así continuo nombrando a los alumnos y asignando tutores.
“¡buaaaah! Si estoy en la lista, ¡que no me toque con Usami-senpai! Por favor todos menos él “rogaba el ojiverde desde su lugar.
- Y por último Takahashi Misaki, tu tutor será el joven Usami Akihiko- concluyo kamijou-sensei.
- Misaki se quedo paralizado procesando lo que el profesor le acababa de decir.
“¡porque a mí! Yo he sido bueno, me he portado bien... Bueno acepto que si aplaste a esa inocente hormiga que caminaba en mis libros pero ¡porque a mí!- se lamentaba mentalmente el pequeño Misaki.
-bien los alumnos mencionados se reunirían con sus tutores hoy en la biblioteca al termino de las clases para que les entreguen los horarios que tendrán para estudiar – dijo el profesor y los alumnos se retiraron. De inmediato el profesor comenzó a dictar su clase mientras un castaño ojiverde se lamentaba y quejaba de que su tutor, fuera la persona que quería olvidar. Por primera vez deseaba que las clases no finalizaran, deseaba que algo ocurriera y no tuviera que ir a la biblioteca para ver a su “querido senpai”. Que la biblioteca se incendie, que haya un terremoto, un tsunami, un tifón, lo que sea, pero que no tuviera que presentarse en la biblioteca era la prioridad que pasaba por la mente de Misaki. Y por supuesto que nada de lo anterior ocurrió y el pequeño Misaki no tuvo de otra más que ir a la biblioteca para ver a su nuevo tutor. Si el accidente del día anterior no hubiera corrido el ojiverde estaría saltando de alegría por tener a su senpai como tutor pero ahora las cosas eran diferentes pues el día anterior descubrió que su senpai era un “idiota arrogante”. Y sin darse cuenta ya estaba en la entrada de la biblioteca, dio un largo suspiro y entro. Casi de inmediato diviso la mesa en donde se encontraba sentados los alumnos y que entre ellos se encontraba el peli plateado. Se acercó a la mesa y tomo asiento lo más lejos que pudo del peli plateado. Después de un momento un profesor de cabello negro y ojos grises se presentó y comenzó a dar indicaciones.
-bien yo soy Miyagi you-sensei, soy el encargado de darles los horarios en los que utilizaran la biblioteca, así que los nombrare y pasaran aquí conmigo a recoger sus horarios- dijo tomando asiento y sacando unas listas de su maletín- ah y otra cosa, no está permitida cambiar de tutor, bien comencemos, Tomoe y Hotsuma- dijo el profesor y las chicas pasaron con el profesor y asi pasaron 10 minutos recibiendo los horarios y las indicaciones del profesor hasta que fue el turno de Misaki.
- y por ultimo Takahashi y Usami
Misaki se paró de su asiento y se acercó al profesor, Usami hizo lo mismo y también se acercó.
- Aquí están sus horarios- dijo extendiendo una hoja- Usami debes ayudar a Takahashi a estudiar en las materias de matemáticas y literatura- dijo mirando al peli plateado- así que ya pueden retirarse- finalizo el profesor. Misaki solo escucho aquello y camino lo más rápido que pudo a la salida pero alguien lo sostuvo del uniforme evitando que huyera.
- ¿a dónde crees que vas pequeño acosador?- preguntó Usami mientras jalaba el uniforme del castaño.
- -ajajaja-rio nervioso- etto…a ningún lado senpai- dijo nervioso. Usami soltó el agarre de su uniforme y lo tomo del brazo arrastrándolo al otro lado de la biblioteca. Misaki por su parte solo se dejaba hacer, su corazón latía muy rápido y sus mejillas estaban de vergüenza, por lo que no se pensaba con claridad. Llegaron a una mesa solitaria de la biblioteca, Usami soltó el brazo de Misaki y le indico que se sentara lo cual Misaki hizo sin rechistar.
- Bien pequeño acosador, te veré todos los días aquí en este lugar a las 5:00 pm, solo debes traer los apuntes de tus clases de matemáticas y literatura, y no llegues tarde porque no soy nada paciente y estudiaremos durante dos horas ¿de acuerdo?- dijo Usami al castaño que no dio respuesta alguna solo se mantenía con la mirada perdida y con el rostro sonrojado.
- ¡oye! ¡contéstame mocoso!-dijo el peli plateado llamando la atención del castaño el cual no dio respuesta alguna nuevamente. Mientras el peli plateado trataba de llamar la atención del castaño, este viajaba a través de sus pensamientos.
“¡Usami-senpai es mi tutor! Tenerlo tan cerca de él me hace sentir extraño… soy tan feliz… pero debo olvidarlo… ¡al demonio el tratar de olvidarlo!, le diré que me gusta y si me rechaza le diré que me permita enamorarlo “-pensaba el castaño pero una voz lo trajo de vuelta a la realidad.
- ¡oye! ¿me estas escuchando?-dijo con un tono de molestia el ojivioleta.
- ¡Usami senpai me gustas!- dijo Misaki como si del clima se tratara.
- ¿Eh?-dijo un Usami confundido, no podía creer lo que el castaño le había dicho pero lo pensó un momento y una sonrisa traviesa apareció en su rostro.
- Así que ¿yo te gusto?- pregunto acercándose peligrosamente al ojiverde.
- si... tú me gustas- dijo en un tono muy bajo y rojo como un tomate.
- Pero sabes...-se acercó al oído el chico, provocando que se pusiera más nervioso- tu a mi…. No me gustas- dijo burlonamente y se alejó de castaño pero Misaki tomo su mano y lo detuvo.
- Eso ya lo sé…- susurro- pero dame una oportunidad, ¡déjame enamorarte! ¡juguemos a enamorarnos! ¿por favor?- dijo Misaki con los ojos llorosos y un lindo sonrojo que lo hacía ver demasiado adorable. Usami no se resistió, ver a aquel chico tan adorable, tan apetecible y tierno, esto provoco que su cuerpo actuara por impulso y le dio un dulce beso al menor en los labios, el cual estaba sorprendido por tal acción.
- Acepto… que comience el juego- dijo el peli plateado terminado el beso y retirándose del lugar dejando a un castaño sonrojado y sorprendido.
- el me beso… el acepto- susurro el castaño muy feliz y sonrojado mirando como Usami abandonaba el lugar.