Perdoname... por Agapi_MK_JT

Ya habían pasado 2 semanas en las que Minho ignoraba a completamente Kibum, todos en el grupo sentían la tensión que había entre los 2 raperos de SHINee.

Minho estaba enojado, furioso y quería lastimar al rubio, estaba herido. Se preguntaba ¿cómo  es que pudo haberlo traicionado de esa manera, con su hyung?

¿Qué fue lo que paso?... Muy simple… Kibum el amor de su vida, esa persona que le costó mucho conquistar y lograr que Key se olvidara de su orgullo y aceptara lo que le pasaba con el más alto del grupo. Le había sido infiel, una sola vez tuvo un desliz y la confianza que Minho había depositado en él se perdió.

Por qué Minho no creía que solo una vez había pasado eso… Trato de hacer borrón y cuenta nueva, pero cada vez que veía a su hyung. Se preguntaba si aún seguirían viéndole la cara, si aún se veían a escondidas o si no era la primera vez que se entendían.

Por ese motivo el alto decidió darse un tiempo alejarse de Kibum y de Seúl… Viajo a la Isla Jeju aprovechando que tenían unos días libres, gracias a que estaba grabando el Drama junto a Sully (la manzana de la discordia entre Minho y Key) la empresa había creído que merecía unos días de descanso antes de seguir con las grabaciones y las presentaciones.

Key por su parte estaba muy arrepentido por lo que había pasado. Su culpa no pudo más y le confeso a Minho lo que había pasado aquella noche en la que tuvo una fuerte discusión con el moreno. Kibum había tomado de más, estaba ebrio y Minho lo había dejado solo. Fue esa noche que cometió la peor estupidez de su vida, engañar a Minho; entregarse a los brazos de otro que no era su novio.

Salió de la casa no quería estar allí y pensar en Minho y lo lejos que estaba… No se atrevió en los días que su novio estaba en casa tratar de arreglar las cosas, sabía que lastimo al alto y prefirió dejar que el tiempo pasara para luego hablar con él.

Minho ya tenía 3 días lejos, y el medio empezó a invadirlo… ¿Y si lo perdía? O ¿Si, nunca lo perdonaba? O ¿Si, ya lo de ellos había terminado?... No quería que eso sucediera, lo amaba demasiado, así que aunque Minho no quería hablar con él, lo escucharía.

• Espera y veras mi amor… - hablaba Key mientras se embarcaba en el avión rumbo a donde estaba Minho.

Una vez que llego, no se atrevió a avisar a moreno y darle oportunidad que este se negara a verlo. Se encaminó a su hotel gracias a Onew sabia donde se estaba quedando.

Una vez que llego subió con miedo y angustia no sabía cómo reaccionaría al verlo allí. Se detuvo frente a la puerta de la habitación 566, la habitación de Minho. Toco, cuando escucho “un momento”. Sintió que el aire le escaseaba.

• ¿Qué haces aquí? – pregunto Minho, seco y frio lo último que esperaba era ver al rubio. El causante de su dolor.

• Yo… yo… necesito decirte algunas cosas Minho…

• Ja… que ahora me dirás que estuviste con otro más… - estaba molesto, verlo le hacía pensar que otro había recorrido su cuerpo, que otras manos lo habían acariciado y él les dio permiso de hacerlo. – puedes largarte por donde viniste Kibum, déjame en paz. – lo dijo intentando cerrar la puerta.

Kibum haciendo acopio de su fuerza impedía que el moreno lo hiciera. Con lágrimas en los ojos le suplicaba a Minho que lo escuchara, si aun así no quería verlo, él mismo se alejaría de él y lo dejaría en paz.

• No Kibum, aunque me llores no lo vas a conseguir. Vete por las buenas, no hagas que sea un grosero contigo y te vote.

• Minho… por favor.

No hubo más respuesta el moreno solo, no lo dejo continuar y aun con el dolor de su alma, cerró la puerta dejando a Key fuera. En el pasillo, el rubio se dejó caer en el piso de rodillas, se prometió que aunque Minho no quisiera hablar con él lo oiría.

• Ya no te pediré perdón, aun que te llore, sé que te lastime. Te amo y solo dios sabe cuánto, no te pido que vuelvas a confiar en mí, es imposible que lo hagas… – hablaba Key entre lágrimas a la puerta, sabiendo que Minho estaba detrás oyéndolo, lo había sentido sentarse y recostarse en ella – tampoco te voy a pedir que lo olvides y empezar de cero, hice mal y no sabes lo arrepentido que estoy… Yo, me embriague estaban tan mal, tú estabas tan alejado de mí y tan cerca de ella. Me dolía en el alma verte a su lado tan cariñoso, me deje llevar por los celos y la ira… Te vi que te fuiste con Sully, cuando discutimos  y el alcohol me hizo imaginar cosas. Esa noche fue la 1° y última vez que te engañe, jamás pensé hacerlo.

• ¡Claro y porque estabas molesto que mejor idea que irte a revolcar con otro, ¿verdad?! – gritaba Minho y golpeo la puerta con su puño.

• No pude mas Minho, yo te necesitaba conmigo… Él se acercó a mí, me estaba consolando y cuando menos lo pensé ya me estaba besando.

• Ahórrate los detalles…

• Yo pensé que eras tú, yo te veía a ti en él… Mi mente y mi corazón me jugaron mal mi amor…

• Esa palabra te queda muy grande Kibum.

• Solo te sentía que eras tú él que estaba conmigo… No él, eras tú Minho… por favor créeme – suplicaba Key – cuando desperté y me di cuenta de mi error, no sabes lo asqueado que me sentí, tenía asco de mí.

• Ja ja ja ja... claro que si Kibum, asco, seguro aun recuerdas sus caricias, su cuerpo y sus besos, ¿verdad? – le reprochaba Minho, dejando que lágrimas de rabia, impotencia y dolor; bañaran su rostro.

• No… no… Minho – contesto el rubio acariciando la puerta, tratando de que Minho sintiera lo arrepentido que estaba – no Minho, te recuerdo a ti. Cuando tú me tocas, siento que muero con cada rose de tus manos. Estar contigo es lo único que quiero, cada vez que me acaricias, me tocas enloqueces mi cuerpo, siento que un huracán invade mi ser y miles de emociones me invaden, siento que quiero llorar y reír, siento que un miedo se aloja en mi de que todo sea un sueño y a la vez me siento dichoso porque me amas.

• …

• Cuando me tocas nublas por completo mi mente, me llenas de ti, en cada toque siento tu ternura y tu locura… Esa noche yo me entregue a Minho, en mi mente solo estabas tú. Veía tus ojos y era tu piel la que sentía.

• Basta Kibum…

• Te amo, Minho… por favor, tienes que creerme.

• Bonita forma de demostrarlo.

• Tú sabes que mi carácter es un poco difícil, antes de entrar al grupo, no me relacionaba con muchas personas. Tenía pocos amigos, mi vida era gris, todos pasaban de mi sin notarme. Tenía que esforzarme de más para obtener lo que quería. – la puerta se medió abrió solo una pequeña porción, eso provoco que Key se limpiara las lágrimas y continuara – cuando te conocí, tu brillabas con luz propia… que pensé “wow, él si llegara lejos”, me sentí intimidado por ti… jamás pensé que te fijarías en mí, tú lo tenías todo. Cuando me di cuenta de que me había enamorado de ti. Sufría porque tenía miedo que lo descubrieras, que sintieras asco de mí, o que te burlaras.

• Kibum… yo no habría sido capaz de eso.

• Es muy difícil para mí expresar mis sentimientos, siempre vivo con el temor de que algún día despertar darme cuenta que todo era mentira, que la felicidad que tengo se rompa de apoco y hundirme en lo más profundo de la oscuridad. Cuando me dijiste lo que sentías por mí. Me sentí tan feliz, la dicha no cabía en mí. Pero mis miedos estaban allí y aún siguen.

• Nunca logre que te sintieras seguro… ¿Por qué hasta ahora me lo dices? – suspiraba Minho.

• No es eso, no tengo miedo de ti. Si no de mí, de arruinar las cosas. Cuando estas a mi lado con tu sonrisa me desarmas, eres un ángel para mí, me ayudaste a superar muchas cosas, que a veces creo que no eres verdad, ¿sabes?... Por eso cuando te veía cerca de ella, sentía que te darías cuenta de que ella es mejor que yo. Y que podría perderte… Yo… – empezó a llorar más angustiadamente. Por la sola idea de perderlo. – Min… Minho… ¿dime… dime que no te perdí… por favor…?

• Ki…

Minho abrió la puerta del todo él aún estaba sentado en el suelo, con rastros de lágrimas. Encontró a Kibum de rodillas, con los ojos cristalinos, la nariz roja por haber llorado y sus labios acorazonados temblando y su cuerpo frágil convulsionando por el llanto.

No podía ver a su ángel quebrado así, no se contuvo y lo abrazo. Key oculto el rostro en el pecho de Minho, y apretaba su camisa mojándola.

• Te amo, por lo que me haces sentir, cuando estoy contigo. Porque contigo me siento importante, siento que algo bueno hay dentro de mí para que tú me ames… Perdóname por favor, yo no quería lastimarte… ¿Qué tengo hacer, dímelo  y lo hare?

Minho no contesto. Rompió el abrazo y lo ayudo a pararse. El rubio sintió que se le iba la vida, el pecho le dolía y se le dificultaba el respirar. Había arruinado las cosas, su mayor temor se hizo realidad.

Una vez que estuvieron de pie, un silencio doloroso se instaló para ambos. Kibum tomo eso, como la respuesta del alto y era un “NO” a sus suplicas de perdón, se lo merecía a pesar que dolía y sintiendo que las fuerzas lo abandonaban, agacho la cabeza y dio media vuelta dispuesto a irse. Y como le había prometido al alto no volvería a molestarlo nunca más. Al final todo había sido culpa de él.

Solo alcanzo a dar 2 pasos, cuando sintió que alguien lo abrazaba por la espalda. Era Minho, sentía su hombro mojado, era el moreno que lloraba.

• Sabes que te amo, más que nada en esta vida. – decía Minho, aspirando el olor de Kibum. – Tengo miedo que descubras que él es mejor que yo…

• Minho, nadie es mejor que tú.

• Demuéstramelo.

Kibum no lo dudo y se viro dentro los brazos del alto y lo beso con ternura, pasión y aun con lágrimas se encargaría de demostrarle a Minho que lo amaba. Las manos del alto se aferraron a su estrecha cintura, el rubio pasó sus brazos por el cuello de él. Haciendo más profundo eh intenso el beso. Sus lenguas se acariciaban, se lamian los labios degustando del sabor del otro. Poco a poco fue levantándolo eh hizo que el más bajo subiera sus piernas a sus caderas.

Siguieron besándose, tan apasionadamente que se marearon y tambalearon mientras Minho lo llevaba a la cama.

• Min… minho… por favor - su voz sonó suplicante.

• ¿Dime que quieres? Dímelo por favor Key… - suplicaba Minho rozando su nariz con la del rubio.

• Acaríciame, tócame… prende este fuego y llévame al cielo con tus caricias… Te necesito Minho – hablaba en el llanto Kibum, con la mirada suplicante y con temor de ser rechazado.

Ese tono de voz y esas palabras, fueron una oleada de éxtasis para Minho. Deslizo su mano por debajo de la polera de Key y acaricio su vientre, subiendo hasta sus pezones que provocaba en él rubio suspiros. Logrando deshacerse de esa estorbosa prenda.

Kibum se aventuró a delinear su cuello con sus labios, haciendo que Minho se estremeciera… Y lo beso desesperadamente.  El rubio baja su mano hasta llegar al borde del polo del moreno y lo desliza hasta lograra sacárselo. Acaricia la espalda ancha y marcada, logrando sacar suspiros del alto.

• Eres hermoso Bummie… - dice susurrando sensualmente en el oído del rubio, haciendo que el rubio dibujara una hermosa sonrisa.

• Te amo Minho, eres mi sueño… déjame demostrarte cuanto te amo… ámame…

Minho nuevamente besa a Key, delinea sus labios y este deja paso a su lengua que sin pudor recorre cada rincón de la boca del rubio, llegando a su garganta, haciendo que este se estremezca y vibre por el deseo de que lo tome nuevamente.

• Key… moría por tener de nuevo… bebe

• Y yo por estar entre tus brazos… mmm…

Los besos de Minho se deslizaron de su boca, a su cuello hasta llegar a sus hombros desnudos. Donde los besaba y mordía, Kibum bajaba sus caricias por toda la espalda del alto hasta llegar a sus glúteos donde los apretó haciendo que Minho se pegara más a su cuerpo y el abriera las piernas, simulando embestidas.

• ¡Ahhh!... Minho... mmm – empieza a gemir Kibum.

• ¡Me encantas!... amo la suavidad de tu piel y tu dulce aroma…

Kibum toma la iniciativa y baja sus manos hasta el borde del pantalón de Minho, intentando torpemente despojarlo de esa prenda… Quiere ya sentirlo dentro, sentir toda la pasión del otro.

La respiración de los 2 ya es pesada y el libido de los 2 hasta en su punto máximo. Minho despoja poco a poco el pantalón y el bóxer del rubio. De rodillas ante él besa sus muslos, va subiendo poco a poco los besos hasta llegar al sexo erecto de SU KIBUM…  No duda en meterlo a su boca, lame, succiona y muerde todo el falo del rubio. Mientras este se deshace en suspiros y gemidos.

• ¡Ah!... ¡Ahhh! Minho… mmm… - trata de hablar aferrándose a las sabanas. Necesitaba desesperadamente aferrarse a algo la oleada de placer que el moreno le causaba lo volvía loco.

• Mmm… di mi nombre otra vez, me encanta oírte decirlo…

• Minho… Min… Ahh…

• ¡Kibum eres mio!... solo mio – le dice Minho mientras continua con el vaivén de su boca sobre el pene del más bajo.

• Mmm... aah… si solo tuyo… solo… aaahhh…

• Mi nombre Key… dilo

• Minho… aaahh…

Las succiones continúan hasta que Kibum le advierte que está por llegar al orgasmo. Sube a besar al rubio y con su mano, hace que suelte su semilla en su mano.

Key se incorpora después de su 1° orgasmo y ve a él falo de Minho, grande hinchado y necesitado de atención. Lo toma entre sus manos.

• Quiero sentirte, quiero que me llenes de ti – le susurra Kibum al oído a Minho.

Que no duda en atraerlo hacia él y sin preparación alguna lo penetra, el rubio suelta en grito mezclado entre dolor y placer. Minho aún no embiste se toma su tiempo en besar el rostro a Kibum, lamer su cuello y morderlo. Espera hasta que este se acostumbre a la intromisión. Al poco tiempo Key empieza con el vaivén que enloquece a Minho, anunciándole para empezar con la danza de placer para ambos.

Minho quiere enloquecer a Su Kibum y empieza con embestidas lentas, el rubio esta cegado por el placer mueve sus caderas, haciendo que el alto aumente la velocidad de estas.

• Mmm… Sí… se siente… aaahhh… tan bien – logra hablar Kibum mientras a se abraza a Minho. Acariciando las espalda del moreno. Mordiendo el cuello de este debido a la desesperación que le causa el placer de las embestidas que recibe.

• ¡Aahhhh…! Gatito… eres tan estrecho – dice Minho con la voz ronca, por el placer que siente.

• Aahh… Min… mas… más rapi… do

• Gatito me vuelves… aaahh… loco…

Minho acelera más el ritmo, apega más su cuerpo al de Kibum. En un momento el alto da en el punto dulce del rubio que suelta un sonoro gemido y clave sus uñas en su espalda cegado por el placer. Kibum enreda sus piernas alrededor de las caderas del alto, y habré más las piernas si le es posible. Quiere que se entierre más en él y siga dando en ese lugar que lo hace delirar de placer.

• Mmm… Aahh… Sí… ahí… ahí Minho… mmm…

• Mmm… bebe… me la estas… succionando…

• Mmm… no te detengas… dame… maas… - gritaba como enajenado Kibum a causa del placer.

• ¡Aahh!... ¿Así es como… te gusta?

• Sí… aaaahh… mmm… así Minho… así… aaaahh… aaahh… ahí… no pares… por favooor… aaaaahhh… - Kibum no podía completar las frases, por causa de los suspiros y gemidos que involuntariamente salían de él. En cada embestida sus manos desesperadas bajaban a los glúteos de Minho arañándolos y tratando de que el moreno entrara más en él.

• No pienso… parar gatito… aaaahh… mmm… ¡Dios Key!... ¡Estar… dentro de ti… mmm… es exquisito! – le decía Minho… Su voz se volvió ronca, se sentía en la gloria su sexo estaba aprisionado en el pasaje de su amado, no había nada mejor que sentir ese caliente y estrecho pasaje de Kibum.

La cabecera de la cama chocaba fuerte con la pared, y los gemidos iban en aumento. Minho sintió que estaba por llegar al orgasmo y empezó a masturbar al rubio al ritmo de las embestidas.

• Minho… ya… ya… voy a terminar… no puedo más…

• Conmigo bebe… aaahh… llega conmigo…

Unas embestidas más y el rubio llego a su 2° orgasmo,  manchando sus vientres y la mano de Minho… Llamándolo solo a él, y mil te amos salían de la boca acorazonada. El miembro del alto era exquisita y desquiciadamente apresado por el interior de Kibum, mientras este contraía los músculos de su ser que convulsionaban por el orgasmo.

Terminando clamando el nombre de su Kibum, su rubio… Haciéndolo suyo una vez más, como tantas otras veces lo había hecho.

Con la respiración agitada salió del interior del rubio y lo abrazo posesivamente.

• Minho… perdóname, yo… yo – sentía las lágrimas salir una vez más.

• Shhh… descansa bebe… ¿Sí?... No quiero tampoco perderte…

• No quise lastimarte… - Kibum empezó nuevamente a llorar. Minho lo tomo del mentón y lo beso, acariciando con sus labios los del rubio. Tocándolos milímetro a milímetro.

• Te amo Key. Y no pienso renunciar a lo nuestro, sin luchar. Yo tenía miedo, de que lo prefirieras a él después de lo que paso entre uds…

• Noo… – Kibum tomo entre sus manos el rostro de Minho y limpio las lágrimas que caían de los ojos que tanto amaba - jamás, Minho. Solo eres mío y yo soy solo tuyo… Aun después de muerto, mi alma te pertenece solo a ti.

• Bummie, te amo, te amo – abrazo al rubio fuerte, apresándolo entre sus brazos por temor a que se vaya. Meciendolo y besando su cabeza, mientras acaricia su espalda desnuda.

Así Kibum se fue quedando dormido, en los brazos de Minho, el amor de su vida. Aun se reprochaba el haber lastimado lo que más amaba. Minho ya lo había perdonado, ahora solo faltaba que él se perdonara a sí mismo.

Poco a poco lo iba a lograr, ahora que estaba nuevamente al lado del moreno. Se prometió así mismo no volver a caer en las bajas pasiones y mucho menos dejarse llevar por malos sentimientos.

FIN