Besé a Claudia, primero fue lento y amoroso pero se tornó apasionado, metió su lengua dentro de mi boca y una guerra para ver quien tenía el control se desató, nos separamos y empecé a besar su cuello, deposité pequeñas mordidas mientras acariciaba sus piernas lentamente, mordí y lamí sus pechos.
-Karolina… con cuidado… Aahh…- Fue lo que dijo, retomé mi tarea, los lamí y mordí hasta que estaban erectos, retomé sus labios mientras que con mi mano derecha bajaba para poder acariciar su flor y castidad, me detuvo abruptamente, la miré a los ojos y me dijo - Se amable con migo… es mi primera vez- Le di un beso cargado de amor y procedí a estimular su clítoris, ella gemía y gemía y justo cuando estaba a punto de introducir el primer dedo… SASCA, que alguien me plasta la cola, así es señoras y señores, estaba soñando y mi queridísima suegrita me aplastó la cola.
-Lo siento mucho Karolina, olvidé que estaba ahí, bueno… aprovechando que ya estás despierta apúrate para que puedas ir a la escuela- me dolía mi hermosa colita, no es justo, pudo haberme interrumpido luego de llevarla al cielo, pero no, ¡¿tenía que despertarme antes?
Miré por la venta y me di cuenta que aún está muy oscuro, me transformé en humana y le pregunté.
-¿Qué hora es?, aún sigue oscurito el cielo- Me miró por un momento y luego tomó el reloj del buró, checó la hora, dejó el reloj en su lugar y me dijo.
-Son las 5:00 a.m., apúrate para que te dé tiempo de bañarte y desayunar- O_O!
-Pero la escuela comienza a las 7:00 a.m.- Clavó su mirada nuevamente en mí, esta desprendía algo de enojo… tengo miedito.
-Déjame recordarte querida que ya no eres la mascota de esta casa, por lo tanto ya no te puedes ir a la misma hora que mi hija- Tenía toda la razón, sin decir ni una palabra más, me alisté para irme antes de que Claudia se despertara, la verdad es que tiene el sueño MUY pesado, por lo tanto pues no fui una espía en cubierto precisamente… me caí por las escaleras, creo que me fragmenté las costillas.
Luego de todo eso y un regaño extra para el día, desayuné mi delicioso serial y me fui de la casa, claro que antes de irme tuve que repasar la segunda fase del plan, esta parte consiste en que acompañe a Claudia a la escuela y me retire antes de la ultima hora, y ustedes dirán, ¿Para qué?, pues para conseguirle un perrito a Claudia, investigué un poco y en principio quería darle un Husky Siberiano pero son muy enérgicos y mi princesa demasiado floja y opté por un Akita Inu, son algo más calmados y lo más parecido a un lobo sin la necesidad de serlo y tener tanta energía, solo necesita de 20 minutos de caminata diaria y listo, el problema es donde comprarlo, bueno como decía, luego de comprar el perrito tengo que ir a la casa y aparecer como de sorpresa y entregarle el animalito a mi niña, ganaría muchos puntos con ella, en cuanto a la tercera fase… no estoy tan segura de cómo le valla a hacer.
Esperé a que Claudia pasara por una tiendita que queda a 3 cuadras de la escuela, la saludé pero solo me sonrió, bajé mi mochila y la abrase, al principio se quedó inmóvil pero luego empezó a temblar y a sollozar, reforcé el agarre y ella también me abrazó fuertemente, luego de ese momento en que casi lloro también, nos fuimos a la escuela, el día pasó normal, mi amorcito no hablaba mucho, solo lo necesario.
Como marcaba el plan, me retiré una hora antes del toque y pasé por cada veterinaria, tienda de mascotas y refugios, perdí la esperanza cundo al fin, en un centro de adopciones, lo encontré, era completamente blanco, no es original ya que tiene las orejitas algo caídas pero daba igual, le dije al encargo del lugar que animal quería y lo sacó de la jaula, me lo entregó al mismo tiempo que yo le pasaba $100.00, el anuncio decía que lo que quisiera darle y esto fue lo único que me dio mi suegra la tacaña, me fijé en la hora y ya eran las 4 de la tarde, caminé a casa a paso lento con el cachorro en brazos hasta que noté el aroma que desprendía el perro, no es por ofender pero apestaba, decidí que lo bañaría antes de dárselo, lo llevé a una estética para animales que me recomendó Margaret y resulta que la dueña era su prima, como era mi primera vez ahí y le dije que venía de parte de Margaret, no me cobró nada. Una vez que el animal estaba presentable, lo lleve a casita, toqué la puerta y Claudia me abrió, estaba triste pero cuando me vio se le iluminaron los ojitos.
Perspectiva de Claudia.
Tocaron la puerta, no quería abrir, estaba muy deprimida pero no me quedaba de otra, giré la perilla y me quedé anonadada, Karolina estaba con un perrito blanco entre sus brazos, me dedicaba una enorme sonrisa, no reaccioné hasta que escuché la voz de una tercera persona.
-Karolina, pero que gusto tenerte por aquí… hija no seas grosera con tu amiga y hazla pasar, traeré limonada- Mi madre tan oportuna como siempre, la hice pasar y ella se dirigió a la sala con el cachorro en brazos, la seguí y me senté en el mueble de dos plazas, ella se sentó en el de tres y mi madre llegó con la limonada y una vez nos sirvió, se sentó en el mueble de una plaza.
-Dime Karolina, ¿qué haces con ese animalito en bazos?- Karo simplemente asintió y procedió a hablar.
-Pues verá Margarte, el motivo de que tenga a este cachorro, es porque se lo quiero obsequiar a su hija… claro si usted lo permite- que tierna es, si fuera hombre estaría enamorada de ella, aunque es muy linda y atenta con migo.
-Y por qué se lo quieres regalar- Mi madre a veces es muy imprudente y preguntona, Karolina ni se inmutó, solo le dedico una sonrisa.
-Porque, desde ayer su hija ha estado muy triste por la pérdida de Nagi y pues no me gusta verla triste, y supongo que eso es todo.- ella siempre es muy informal, incluso dice una que otra grosería pero con mi madre siempre actúa de esa manera, tal vez por eso es que le agrada a mi madre.
-Pues si eso es todo, entonces te agradecemos el obsequio y como agradecimiento, ¿no te gustaría cenar con nosotras?, ya es algo tarde.- Miré a Karolina y ella a mí, yo le decía que si con la mirada, me sonrió y aceptó la propuesta de mi madre. Luego de comer la llevé a mi cuarto, platicamos un rato y le pregunté.
-¿Por qué te retiraste antes de clases?, me sentía un poco sola, Octavia y Dafne andan algo extrañas últimamente- Solo agachó su cabeza apenada y dijo.
Perspectiva de Karolina.
-Pues tenía que escoger bien a tu futuro compañero, lamento que esta vez sea él y no ella como Nagi- Me abrazó y empezó a temblar, luego a sollozar para después estallar en llanto.
-Mu…muchas gra…gracias, de verdad- Me enterneció tanto que tenía ganas de darle duro contra el muro, basto contra es pasto, liso contra el piso, lento contra el pavimento y muchas otras más, pero no, este es momento de reflexión.
-No te preocupes… yo te amo Claudia y quiero que siempre lo tengas presente… yo haría cualquier cosa por ti.- Ella se calló por unos instantes y procedió a hablar.
-Yo también te amo… mejor amiga, no tenías que tomarte tantas molestias por mí, por mi culpa perdiste clases.- Nunca antes había sentido una pena tan grande, prácticamente me le confesé y ella pasó de mí, la vida no es justa con las buenas personas… o licántropos.
-Lo digo en serio princesa, por ti, mi vida entera- No dijo nada, solo la abracé hasta que se durmió, la acomodé en su cama y estaba tentada a ponerle su pijama pero mejor no, mis instintos pedirían su cuerpo.
-Buenas noches mi amor, te amo- Le dije en el oído, estuve a escasos centímetros de sus labios pero algo en mi me detuvo, mejor rosé mis labios contra su frente.
Luego de eso, caminé hasta el cuarto de Margaret y cuando entré, ella estaba mirando nuevamente por la ventana, me paré justo detrás de ella y procedí a hablar.
-La señorita Claudia está profundamente dormida, ahora qué aremos- Esperé una respuesta que nunca llegó, me transformé en lobo y caminé hasta llegar a su lado, como si hubiera despertado de un sueño, me miró.
-Esperaremos unos cuantos días más y luego procederemos con la última fase del plan, procura ganar puntos en todo con mi hija y dejar en ridículo al irrespetuoso chico.- Asentí levemente y me acomodé en los pies de su cama, ella también se fue a dormir, de ahora en adelante, espero que todo salga bien.
5 Días después…
Durante este tiempo me he dado cuenta de muchas cosas de las cuales no me percaté por estar celosa, sé que solo han sido 5 días pero es algo tan evidente. Al parecer Octavia y la garrocha mejor conocida como Dafne, andan extrañas, y no precisamente que digas “¡oh madre mía!, parece que algo muy malo pasa, más malo que la muerte de Mufasa”, en los recesos, nos reunimos las 4, que por cierto Claudia anda un poco más feliz, en cuanto a Samuel… no ha ido a la escuela, su amigo Álvaro, que ahora es mi amigo, me dijo que le dio mucha gripa, algo que me dejó anonadada es que Alvarito tiene sentimientos amorosos por Samuel, pero el chico ese es tan siego como Claudia que no se da cuenta, dice que hasta le llevó serenata y como era su cumple pues creyó que era un regalo de mejores amigos pero un mejor amigo no te canta la canción del Titanic, pero bueno. Como les comentaba, ese par está muy raro, nos reunimos y Octavia mira a Dafne y viceversa, después de unos minutos Tavi desviaba la mirada y Dafne se cubría el rostro y ya la neta por muy romántico que sea, ya raya lo estúpido, como misión principal, averiguare que chuchas está pasando.
El día transcurrió normal, todos felices y contentos, fui a dejar a Claudia a su casa como estos últimos días y algunos tal vez tengan la gran duda de ¿Cómo le haces para escabullirte?, pues bueno, los dos primeros días fueron pan comido, pues mi amada se quedaba dormida pero luego todo se complicó, me tenía que ir a las 6 de la tarde ya que me quedaba a comer y la ayudaba a hacer sus deberes, me pasaba desde esa hora hasta las 11 o 12 de la noche porque resulta que la damita tiene un proyecto súper atrasado de hace como dos semanas, yo ya lo terminé, tengo el conocimiento de alguien mayor así que fue un juego de niños pero ella escribía una palabra y veía 2 capítulos de Pokémon, bueno el punto es que me pasaba deambulando por TODA la pinche ciudad durante 5 o 6 horas, incluso me intentaron asaltar porque eran como las 12 de la noche y ella ni madres que se dormía, luego de pasar en la intemperie ese lapso de tiempo, tenía que hacer malabares para entrar por la ventana de “Mí habitación” que es la polvorienta sala de música, no quería hacer tanto ruido, aunque mi princesa tuviera el sueño tan pesado como el de una ardilla invernando, es obvio que con mucho ruido se puede despertar, en fin, entraba y cenaba, pasaba a la habitación de mi niña a darle su besito de buenas noches y a saludar al perrito, creo que se llama Sunny. Luego de eso, al fin podía dormir… en suelo de mi suegra, de perdis que me diera un lugarcito en su cama matrimonial, pero NO, la tacaña no quiere.
Un nuevo amanecer, hoy no tengo que dejar a Claudia a su casa ya que tiene que ir a hacer un proyecto a la casa de Dafne, a mí me tocó con Tavi, en este momento estoy sentada o mejor dicho acostada sobre la cama de mi compañera de equipo, mi cabecita está acomodada en su regazo y ella me está acariciando la cabeza.
-Karolina… a ti… te gusta… Claudia, ¿verdad?- su pregunta provocó que me levantara y la mirara a los ojos, no es novedad que todo el mundo sepa que me gusta aquella chica despistada, parece ser que todo el mundo lo sabe menos ella, incluso Coyote lo sabe.
-Sí, Octavia, a mí me gusta ella- me miró durante un segundo y procedió a hablar
- A mí también me gusta alguien- su confesión me desconcertó un poco, yo y ella nos llevamos a toda madre, pero de su vida amorosa pocos saben por no decir que nadie está enterado.
-Nunca me esperé que me digieras eso- Me sonrió y luego me recostó en su suave cama, ella se posó arriba de mí y se recostó en mi pecho, yo no podía reaccionar, solo por mero instinto la abracé y ella me estrujó más fuerte.
-Ella es una buena persona, graciosa, la considero mi mejor amiga, es algo torpe y no se da cuenta de los que la rodean, ella es alta, más que yo, es divertida y simpática.- A cada palabra mi pobre corazón de pollo se aceleraba más.
-Y ¿Puedo saber el nombre de la persona que te gusta?- me apretó un poco más y dejó salir un pequeño suspiro de cansancio.
-Creí que te quedaba más que claro, a mí me gusta…- Me quedé anonadada, nunca me lo esperé de ella, siempre pensé que solo era una amiga, esto me supera.
Perspectiva de Claudia.
Estoy en el cuarto de mi mejor amiga, me acaba de contar algo que me dejó boqui abierta, al parecer es… lesbiana, y le gusta Octavia pero parece que ella no le corresponde, en este momento la estoy abrazando, intentando hacer que se calme un poco.
Cuando al fin lo conseguí, ya era tarde, me regresé caminando a casa, no estaba tan lejos, necesitaba un baño y dormir mucho, jajaja el perrito que me regaló Karolina es igual de flojo que yo, somos tal para cual.
Perspectiva de Karolina.
Ya son las 3 de la madrugada, yo no consigo conciliar el sueño, lo que me dijo Octavia me tiene intranquila, miro por el ventanal del cuarto de Margaret y se ve la luna, aunque no lo crean, aun mantengo aquella promesa en pie. Al fin Morfeo se hace presente, me acurruco un poco más y me tapo un poco con mi cola, aún falta 1 semana y unos cuantos días para que inicie la siguiente fase del plan, no sé ni cómo madres le voy a hacer para mudarme a esta casa en mi forma humana. El sueño me ha ganado, ya no puedo más.
Continuará…
Lo que en realidad pasó en la mañana, cuando Karolina tenía sueños XXX…
Margaret se estaba levantando, y vio a Karolina acostada, sonrió de medio lado y estaba a punto de moverla suavemente para despertarla cuando vio como el lobo asía caras extrañas… algo pervertidas, se movía mucho pero se le notaba muy feliz, luego de verla un rato, se dio cuenta de lo que en realidad estaba pasando, muy moleste, se paró detrás de la licántropo y con todas sus fuerzas le aplastó la cola, el pobre lobo pegó un ladrido de confusión, mezclado con dolor y una pisca de enojo y frustración, Margaret solo puso una carita inocente e intentó “excusarse” por su descuido.
Luego de eso, cuando Karolina estaba corriendo de un lado a otro, para buscar su ropa y poder marcharse a la escuela, Margaret colocó un pequeño carrito de juguete en las escaleras, bajó a la cocina y esperó 2 minutos, luego de ese periodo de tiempo, se escuchó como Karolina rodaba por estas, unos pequeños quejidos y una adolescente entraron cojeando a la cocina, Margaret sonrió por lo bajo, y la reprendió por todo el ruido que había provocado.