Hoy cuando he llagado a la zona de entrenamientos, los niños a los que entreno se callaron rápidamente, hago como si no hubiera oído nada y llevo a cabo el entrenamiento como todos los días, es cuando salgo y vuelvo andando tranquilamente al barrio Uchiha que empiezo a recordar la conversación de los niños y como llegue aquí.
-“He oído que Sasuke es un traidor”-decía Juma.
-“no es cierto”-grita Anna,sus gritos y su forma de sonrojarse al mirarme me recuerda demasiado a algunas chicas de cuando iba a la academia.
“Traidor”, si, Juma tiene razón, mi sed de venganza pudo más que cualquier cosa, busqué el poder donde pudiera encontrarlo, me daba igual donde, como o con quien.
-“También he oído a mi papa que el mató a su propio hermano”-seguramente es la segunda cosa de la que más me arrepiento en toda mi vida, con mi mente infantil creí que todo lo que veía y escuchaba era real, no paraba a pensar en si había motivos ocultos, aprieto mis puños fuertemente al recordar cómo sin darme cuenta caí en un juego de “mayores “para que llegaran cada uno a su propósito, yo que siempre he presumido de mantener mi cabeza fría y saber que pasaba en todo momento.
-“es cierto, además de matar a su hermano formo un grupo para atacar Konoha”-¿Cómo no hacerlo? Si fueron ellos con sus miedos a un golpe de estado los que llevaron a mi hermano a hacer lo que hizo?, ellos eran los adultos, que ellos hubieran luchando contra los Uchihas, ¿Por qué Itachi tenía que llevar esa cruz encima?, Por qué tenía que seguir quedando como un traidor cuando evito una guerra?.
-“También he oído que mato a su maestro”-¿Orochimaru mi maestro?, era solo un objetivo, que me enseñara técnicas que aún no dominaba pero una vez aprendidas, ¿Por qué iba a cederle mi cuerpo a alguien más débil que yo?.
Sin darme cuenta cuenta llego a la puerta de la mansión Uchiha y escucho un plato romperse y a ti maldiciendo.
-“¿vas a romper todos los platos de esta casa, Dobe?.” veo que pegas un grito y sueltas el plato que llevas en la mano, también rompiéndose”.
-“No me asustes así,Teme”.me gritas mientras me señalas y inflas tus mofletes,dios eres exactamente igual a cuando tenias 12 años.
Cruzo mis brazos y levanto una ceja, se que es algo que te fastidia, según tu sigo igual de frio y insoportable como siempre.
-“¿Y donde están tus sentidos de ninja?, si no eres capaz de notar que alguien entra en casa”.
Aprietas los puños y me miras serio, vas a gritarme Teme ,después de estos años se cómo vas a reaccionar pero te callas cuando una voz desde la escalera te interrumpe.
-“Papi, cuando va a llegar papa”-pregunta esta voz entrando en la cocina, es cuando me ve y esos ojos azules brillantes me miran como solo otra persona con esos mismos ojos lo hacen.
-“Hola papa”-me grita acercándose corriendo, se frena y me da la mano en saludo, según él ya es mayor para que lo tomen en brazos y le hagan cosquillas aunque eso sea algo que haces tú y no yo, le revuelvo el pelo y le pregunto qué tal sus clases, sé que no ando por ahí demostrando mis sentimientos ni sea la persona más alegre del mundo, porque si admito que mi carácter es difícil y que la simpatía y la paciencia no son 2 de mis virtudes, pero no quiero que sienta que no tiene el “amor”de su padre aunque no lo diga en palabras pero si en acciones.
Cenamos tranquilamente, todo lo tranquilo que se puede estar teniéndote a ti alrededor, menos mal que nuestro hijo a heredado mi carácter, cuando por fin Tenma se queda dormido nos vamos a la cama.
-“No solo eso, mi mama me ha dicho que ha intentado matar al hokage varias veces”-y eso es la cosa de la que más me arrepiento en toda mi vida, ¿Cómo puedes seguir a mi lado después de todo lo que te he hecho?, Cómo puedes decir que me amas cuando he intentado quitarte la vida?, es curioso que entonces no pensara en ellos ni me doliera y ahora sea algo que me quita el sueño.
-“¿En que estas pensando?”Me preguntas colocándote encima de mi pecho mirándome con esos ojos que tanto adoro pero que no digo en voz alta por mi testarudez, me miras con cara de no entender nada al ver que no te contesto y de nuevo inflas esos mofletes,”teme”me dices colocando tu cabeza sobre mi pecho, sin poder evitarlo, sonrío de lado, acaricio tu pelo y en un susurro digo ”pensaba en lo mucho que te amo”, levantas la cabeza de mi pecho mirándome con los ojos abiertos, una sonrisa que haría iluminarse esta casa entera sin encender la luz aparece en tu cara, ”yo también te amo Sasuke”.