Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Something special por vickytoya

[Reviews - 1]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Something special

— ¡Hyung! —Grita el menor persiguiendo al líder para poder quitarle el celular de las manos.

Últimamente Sunggyu tenía esa maña de tomarle fotos, Sungjong podría jurar que ese no era el problema realmente, sino el hecho de que para esas instancias el líder al parecer había perdido la razón, pues empezaba a tomarle fotos en cualquier lugar.

CUALQUIER lugar.

A penas hace dos días había tenido que hacer la misma carrera, pues al muchacho se le había ocurrido ir a hurtadillas al dormitorio cuando se encontraba listo para dormir, si hubiera estado bajo las sábanas o con algo más que un bóxer cubriendo su cuerpo, no le habría molestado en absoluto, pero no, lo había fotografiado en ese estado que al menor aun no le gustaba.

Y ahí se encontraban ahora, llenando el dormitorio particularmente vacío de agua debido a la carrerilla que habían iniciado.

Sungjong realmente no lo entendía. Ni siquiera sabía qué era lo que él tenía de especial para que el mayor tomara esas libertades, es decir, estaba bien que no le gustara mostrar su cuerpo, o mostrarse siquiera, pero no era para tanto.

Al fin lo alcanza. Da gracias a sus piernas, pues son más largas que las del mayor, lo que no había tenido en cuenta era que iba a casi colgarse del otro y los iba a llevar a ambos hasta el piso.

Sunggyu hizo lo posible porque el menor no se lastimara, abrazándolo y girando al tiempo, dejándolo sobre su cuerpo; Sungjong se encontraba cubierto solamente en la cintura por una toalla, pues debido a la carrerilla no había tenido tiempo para nada más, es decir, ¿a quién le gustaría que irrumpieran en su ducha para hacerle una foto íntima?

— ¿Estás bien? —Pregunta el líder, acariciando con suavidad el cuerpo ajeno, llevándose unas cuantas gotas de agua entre los dígitos, logrando que el menor se sonroje, asintiendo al tiempo que desvía la mirada, ¿qué es eso que está pasando? Se apoya con manos y rodillas en el suelo, levantando su torso y quedando hincado antes de levantarse del cuerpo contrario por completo, no es hasta que lo intenta que nota las manos del mayor sobre su cadera, obligándolo a sentarse nuevamente.

Repara en sus facciones, en la sonrisa estacionada en el rostro, la cual hace que sus ojos se cierren por completo en dos perfectas medias lunas—. Hyung— lo llama el menor en un susurro—, ¿qué pasa?, ¿por qué no me deja irme? —Hace otro amago de levantarse, pero el afiance se hace más fuerte, regresándolo al lugar.

— ¿Te he dicho que eres hermoso? —Le acaricia la mejilla, inquietando al muchacho, quién se remueve lentamente.

—Hyung… Basta— El mayor no lo oye, no hay otra manera de describir el extraño comportamiento contrario pero por Dios, desearía que lo hubiera, desearía que por un momento, aunque fuera un solo instante, hubiera un destello de comprensión, porque estaba más que claro que no lo entendía.

Al parecer alguien fue capaz de escuchar las plegarias del menor, pues en ese instante Sunggyu tomó el celular y se lo pasó— anda, bórrala— también deshizo el agarre, dejándolo ir—. Por cierto Sungjong, no deberías andar por ahí mojado y sin ropa interior.

Los colores suben rápidamente por el rostro del muchacho, no había notado ese pequeño detalle, pero justo cuando ve el lugar en donde se había encontrado sentado, puede descubrir la mancha de agua alrededor de la pelvis—, yo… Hyung… Esto…— La incomodidad era palpable, pues fuera de que hubiera agua en ese lugar, también podía notar una ligera erección en el contrario. El menor suspira con fuerza y tomando el celular huye hasta su cuarto.

Las preguntas se agolpan en su cabeza una tras otra, ¿acaso su líder no era hetero?  Es decir, él no lo era, lo había descubierto unos cuántos meses antes cuando se imaginó al líder besándolo… Precisamente.

Desbloquea el móvil- todos se sabían las contraseñas de los demás-, y comienza a borrar las fotos que no le gustaban, descubriendo más fotos de él mismo que en su propio celular. “¿Qué está pasando?” Se pregunta cada vez que pasa otra foto, esperando encontrarse con alguna chica u otro miembro, inclusive, pero viendo que no, que solamente hay fotos de su persona en la pantalla.

Sale de su habitación cuando está completamente cambiado, encontrándose con el silencio muerto de la ausencia de los miembros. Camina lentamente por el lugar, yendo hasta el dormitorio de su hyung y encontrándolo con los audífonos puestos, los ojos cerrados y la respiración acompasada, tan tranquila que podría estar durmiendo. Se sube a la cama, sentándose al lado del contrario, comenzando a pasar sus dedos por el sedoso cabello de su mayor, observando lentamente como sus facciones relajadas cambiaban y una pequeña arruga se formaba entre sus cejas. Parecía confundido.

—Sungjong—murmura dulcemente mientras abre los ojos, encontrándose con los ojos grandes y castaños del aludido—, no deberías hacer eso.

—Y usted no debería tener tantas imágenes mías— rebate, entregándole el celular.

—Es que eres demasiado lindo— se defiende, pero la sonrisa le gana. No está mintiendo, simplemente nunca imaginó que se encontrarían en esa situación tan peculiar, en donde simplemente le diría lo que pensaba y cómo lo pensaba.

—Ese es mi trabajo hyung, no podría ser diferente— se encoge de hombros, volteando hacia otro lado al sentir su rostro arder, ¿qué demonios le pasaba?, ¿por qué hablaban de ello con total naturalidad?

Sunggyu se incorpora, viéndolo directamente a los ojos y quitándose los audífonos; le acaricia la mejilla dulcemente—. Claro que sí— asiente un par de veces. Ambos saben que el ambiente empezará a ponerse burdo, en realidad no pueden estar tanto tiempo en paz, es como unos minutos de tregua por tres años de guerra, aunque nunca se habían metido en esa clase de instantes, tal vez por eso tan poca paz, tal vez siempre estuvieran buscando esos momentos llenos de suavidad y ternura pocas veces poseída.

—Hyung—le llama suavemente.

—  ¿Qué pasa, Sungjong? —Pregunta siguiendo con las caricias, acercándose cada vez más al rostro ajeno, acariciándole los hombros.

— ¿Qué está pasando?

Ambos tragan con dificultad, pues Sungjong se había acercado hasta rozar los labios contrarios, mandando descargas eléctricas por las espaldas, recorriéndoles todo el cuerpo con la aceptación hacia la invitación provocada.

—No lo sé—confiesa, pero no puede evitar seguir pensando en los labios, en como cada roce se vuelve más placentero, en lo pequeño y delgado que es, en cómo es, en sus silencios en el dormitorio y lo adorable que puede llegar a ser a los ojos de los demás—, solo sé que quiero besarte— agrega siguiendo el roce entre los belfos de ambos.

—Yo también quiero besarle— confiesa, las mejillas teñidas de rosa, la boca seca y la excitación ante el beso bailando entre ellos.

El líder solamente tuvo que escuchar eso antes de tomarlo por la cintura y girarlo en la cama, dejándolo acostado sobre el mullido colchón, atrapado entre éste y su cuerpo. Propicia unas cuantas caricias antes del evento principal.

Entonces sucede, sus labios se juntan, tan dulce como un roce casual entre las yemas de los dedos, siendo tocadas por el pétalo de alguna flor. Tan cálido como si estuvieran en la playa, tan tierno como si estuviera tratando con el amor de su vida.

Tan perfecto que es algo especial… Que tal vez sea realmente el amor de su vida.

Notas finales:

Espero que les haya gustado kkk~

Hasta la próxima...

Victoria.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).