La chica más popular y prestigiosa del colegio me había invitado al baile ¿Me debía considerar un chico con suerte? Ella fue invitada por docenas y todos fueron rechazados.
Solo un problema: yo no sé bailar.
Necesitaba aprender a bailar y rápido. 811 un bailarín experimentado, rápido por favor.
- Aquí tienes. -Chanyeol le tendió una tarjeta pequeña. - Dicen que es el mejor.
- ¿Que tanto?. -tomo la tarjeta-.
- No lo sé. –hinco sus hombros. - Sehun dice que no tiene igual.
- Confiare en Sehun, entonces. Gracias Channie.
Al llegar a casa me coloque ropa deportiva y llame al número que estaba en la tarjeta.
- ¿Kim Jongin?
- Diga.
- Llamo para sus servicios de maestro de baile.
- Yo no doy esa clase de servicios a cualquiera. ¿Por qué crees que debería de enseñarte a ti?
- Porque lo necesito. -sonó mas como una pregunta.
- No suenas seguro.
- Vamos, te pagare bien.
- La forma de pago la decido yo.
- De acuerdo, ¿Cheque, transferencia, efectivo? Como quieras.
- Eso depende. ¿Especificaciones? Algo como para qué o para quien necesitas bailar.
- Para un baile, impresionar a una chica.
- De acuerdo. En media hora, en el centro, toma el primer cruce a la derecha, hay un local que... Sabrás que es el indicado. No tardes. -y sin más colgó.
- Mi nombre es Baekhyun por cierto. -dijo al notar lo mal educado que era el hombre.
Demonios. En media hora y el vivía a 25 minutos del centro. Mejor se pondría en marcha.
Llego al centro y tomo el cruce. Solo habían dos locales: una linda jardinería que abarcaba todo el lado derecho y en frente un local del mismo tamaño que sus paredes tenían solo grafitis bien hechos del arte de la danza. Le gusto, tenía estilo. Era obvio que ese era el local.
Pasó al tocar y que sonara como una alarma que señalaba que le habían quitado el seguro eléctrico a la puerta. Adentro había un gran sofá de cuero, como una sala de espera o algo así y al lado la recepción o eso pensó Baekhyun.
- Disculpe, vengo a tomar clases con el señor Jongin. -le dijo a la señorita recepcionista.
- Ah, el chico Jongin. -rio suave- Él de vez en cuando da clases. Es un chico muy aplicado. Aunque, no le gusta mucho dar clases.
- ¿Chico?. -¿Con esa voz?.
- Si, el joven Kim solo tiene 19 años.
- Oh. Bueno, su voz dice lo contrario. -dijo asombrado- ¿Forma de pago?.
- Eso es personalmente con él.
- Oh, bueno...
- Al final, pasillo izquierdo, único salón.
- Muchas gracias.
Se dirigió hacia el salón indicado y en el camino fue asomando la cabeza en las pequeñas ventanas donde veía gente practicar todo tipo de danzas: contemporánea, salsa, e infinidades de tipos de bailes que dejaron a Baekhyun boquiabierto.
Llego al salón de práctica y... Todo estaba oscuro.
- ¿Sera este? ¿No tome mal el camino?. -se preguntaba a sí mismo. - ¿Hola?. -unas cuantas luces del centro se prendieron dándole luz a un chico que cargaba ropa algo suelta y una gorra puesta. Baekhyun soltó un grito pequeño pero audible del susto. - ¿Señor Jongin?.
- Pasa adelante.
- Disculpe la tardanza.
- No hablemos con formalidad. Soy menor que tú.
- ¿Eso como lo sabes?
- Te he observado antes. Vas a la escuela central, último año, te gradúas. Yo voy a solo un par de años menos de diferencia.
- Oh, un gusto en conocerte, soy Baekhyun.
No podía ver muy bien al chico a los ojos, la sombra de la gorra tapaba sus ojos. Lo único que pudo ver era la leve sonrisa de lado que se le dibujo en los labios, algo siniestra.
- Comencemos de una vez. ¿Qué te interesa aprender? En un baile de escuela no se hace nada más que saltar y bailar feo para hacer reír a la gente. -se levantó un poco la gorra permitiéndole a Baekhyun admirar sus lindos ojos que pensó al instante que serían su encanto.
- Bueno, como veras... Yo iré con una chica, una muy peculiar...
- Taeyeon. -no preguntaba.
- ¿Cómo sabes?
- Si por peculiar quieres decir que es la chica más prestigiosa y popular, entonces tiene que ser ella.
- No te equivocas. Quiero aprender a bailar para sorprenderla. No es como si ella me gustara, pero no puedo quedar haciendo el ridículo ante las personas. Todos me juzgan por ser a quien ella escogió.
- Entonces quieres sorprender a todos, no a ella.
- Algo así.
- De acuerdo. -Jongin unió sus manos y se estiro un poco, preparándose. - En el baile es importante muchas cosas, una de ellas es el ritmo pues claro, tienes que tener mucha perseverancia y bailar con ganas ¿Me entiendes? Que se sienta que disfrutas. No se mira al piso ni porque te pisen. Respirar y mirar con quien bailas como si fuera una tarea fácil, no hacer notar que se te quiebran los pies. -le explico. - En todo tipo de danza es importante el ritmo y el sentimiento que te transmita la música. - Jongin se había inspirado un poco y se estaba yendo por un lado que a Baekhyun ni le importaba.
- Entiendo entiendo, pero yo solo quiero aprender a ser sensual, ya sabes, moverme con estilo.
- En la danza la sensualidad es importante, pero no lo mas importante. Quieres aprender a hacer esto: - se alejó un poco haciendo que la luz le iluminara mejor, se bajó la gorra y saco un pequeño control de sus pantalones y dio play. En el fondo sonó música electrónica que Jongin uso para demostrarle a Baekhyun un baile corto que demostraba lo bien que se podían llegar a mover las caderas, cintura y todo lo demás. Baekhyun quedo K.O. Se había hipnotizado sin lugar a dudas. Tan sensual que si no fuera porque llevaba ropa deportiva, hubiera sentido sus pantalones apretados.
La música dejo de sonar y Jongin se levantó la gorra nuevamente viendo con cara perversa a un Baekhyun que no pestañeaba.
- E-eso es lo que yo quiero hacer.
- Eso no es lo indicado para un baile escolar pero de acuerdo. Te enseñare cosas simples. Primero están los bailes de pareja.
Jongin le pidió con una señal con la mano para que se acercara y sin permiso alguno tomo a Baekhyun de la cintura y con la otra mano coloco los brazos de Baekhyun en los lugares correctos. Lo acerco más aun quedando con ambos rostros muy de cerca, podían rozarse ligeramente. Baekhyun no podía respirar, los nervios no le dejaban hacerlo.
Pero qué demonios...
- Comenzamos. El hombre lleva a la mujer. A tu dirección, son pasos individuales, primero hacia atrás. -Baekhyun dio un paso atrás y Jongin uno hacia delante. - Otro más hacia atrás pero levemente hacia al lado.
Hacían todo lo que Jongin le indicaba. Vueltas, pasos, adelante, atrás, al lado, dos pasos juntos, lento, suave. Baekhyun aprendía rápido y no cuestionaba. Tal vez era porque se hallaba puesto nervioso ante el toque de Jongin y sus respiraciones que se mezclaban con algo de facilidad.
A solo dos horas de haber comenzado ya podían moverse al ritmo de la música clásica. Baekhyun estaba realmente feliz de haber avanzado. Sehun tenía razón después de todo.
Pasaron los días y Baekhyun seguía asistiendo a las clases de Jongin. Era buen instructor y a Baekhyun como que le estaba gustando toda esa cuestión de baile...
¿O era el instructor?
Muy seguido veía a Jongin caminar por los pasillos del colegio con Sehun, lo que se le hacía muy curioso, anteriormente ni sabía que iba al mismo instituto, nunca le había prestado atención ya que estaba más pendiente de rechazar a las chicas locas que se le confesaban de maneras un poco vergonzosas. Pero ahora le miraba todo el tiempo; siempre andaba en las canchas jugando o en los jardines escuchando música mientras leía un libro. Baekhyun sentía que lo acosaba, pero es que era inconscientemente, cada vez que volteaba o levantaba la cabeza ahí esta él haciendo cualquier cosa a lo lejos. Hablaban pocas veces fuera de las clases de baile, cuando andaba por los pasillos con Chanyeol y de repente se acercaba Sehun con Jongin o situaciones como esa.
Esta sería la última clase ya que el baile seria el día siguiente; le desanimaba en cierta parte porque le estaba gustando eso del baile y los estilos de danza. No era el instructor, no.
Jongin le tomo de la muñeca y le paso el brazo por encima de la cabeza, una vuelta que quedo a medias. Jongin quedo detrás de él aun con las manos unidas y lo miro atreves del espejo.
- Querías ser sensual ¿No? - le abrazo por detrás, sus miradas seguían conectadas atreves del espejo. - Sigue mi ritmo. - le dijo seductoramente al oído en un leve susurro que hizo que Baekhyun cerrara los ojos sintiendo un fuerte cosquilleo en todo su cuerpo. Jongin le miraba sin perderse nada y comenzó a balancearse de un lado a otro. - Cadera, Baekhyun. Más cadera.
¿Quería cadera? Vamos a darle cadera.
Baekhyun sin vergüenza comenzó a seguirle el ritmo, destenso su cuerpo y le dio más poder a sus caderas moviéndose sensualmente, chocando su espalda contra el pecho de Jongin, quien hacia presión para obtener más contacto.
Baekhyun se dejó llevar, ¿Que tan malo podría ser? Jongin le atraía, se le hizo irresistiblemente encantador y quería jugar un rato con él.
Baek meneo su trasero junto a su cadera y cintura, teniendo como resultado que la parte baja de Jongin rosara lenta, descarada y sensualmente contra su trasero. Obteniendo una deliciosa sensación. Jongin solo intensifico el abrazo y hundió su rostro en el cuello de Baek quien gimió ante la respiración de Jongin en su nuca y los toques que le brindaba en su pecho. Termino de dar la vuelta que había quedado a medias y junto sus pechos elevando un poco a Baekhyun al poner sus brazos en posición indicada haciendo que quedara de puntitas y ambas narices muy pero muy juntas. Así eran los bailes de pareja ¿No? ¿O era que Jongin se aprovechaba de la situación y a Baekhyun le gustaba que lo hiciera?
- A menos que quieras aprender a como bailar en un prostíbulo eso es todo. -Jongin se separó de él, dejándolo guindado en la caliente atmosfera.
- ¿Y-ya? -intentaba recobrar el ritmo cardiaco normal.
- Sí. El pago es en efectivo, puedes dárselo a la recepcionista. -se colocó la gorra que tanto odiaba Baekhyun.
- ¿Me estas tomando del pelo? ¿Tú crees que no supe tus segundas intenciones? Era obvio que tu forma de pago era teniendo sexo y ahora me vienes con eso... - Baekhyun sonaba urgido.
- Dije que eso lo decidía yo. Y decidí efectivo. - no podía mirarle bien con esa gorra puesta.
- Mírame. - le quito la gorra de un manotazo y lo apego un poco fuerte a la pared. - ¿Si no tengo efectivo?
- Cheque, transferencia.
- No manejo una cuenta en el banco. -dirigió su mano al cuello ajeno y se acercó lentamente, la otra mano la dirigió debajo de la camiseta ligera de Jongin.
- Entonces déjalo así. -le agarro la mano que estaba en su abdomen y la quito de allí.
- ¿Qué es lo que pasa contigo? -no entendía el comportamiento del menor.
- No creí que aceptarías en primer lugar.
- Pero acepte.
- Pero no debías. Debías de colgar y decirme que era un loco enfermo o algo por el estilo. Insistir en que me pagaras con billetes y nada más. El unico motivo por el cual esa una forma de pago es para que la gente no acepte mis clases debido a que no me gusta dar clases. -hubo un silencio que Jongin rompió al mirarlo con una ceja alzada y esa sonrisa suya- ¿O es que te gusta que te den?
- Me gustaría que tú me dieras. Esas caderas tuyas deben de ser mágicas ¿No crees? Le preguntare a Sehun. - Jongin se deshizo de la mirada y sonrisa que tenía hace unos segundos- Pero creo que preferiría descubrirlo por mí mismo. -acerco su rostro al de Jongin e intento volver a tocarle.
- Pregúntale a Sehun. -le alejo.
- ¿Por qué demonios me evitas ahora? ¿Para qué me propusiste sexo como pago, entonces?
- No creí que lo aceptarías, ya te dije.
- Pero acepte.
- Que puta.
- Solo contigo. ¿Crees que soy así con todos?
- De todas maneras... No contigo.
- ¿Por qué? -un poco agresivo.
- Tú no eres como los demás, Baekhyun.
- ¿Que me quieres decir con eso?
- Ya yo te he estado observando. Eres delicado, pareces una princesa, muy diva, el eyerliner te hace ver salvajemente bien. -¿Eso era algo malo?. - Le atraes a Taeyeon, a muchas chicas en realidad. Te gusta vestir muy bien y siempre andas con Chanyeol. -¿huele a celos?
- Oh, el pequeño Jongin es un lindo acosador -hablo con ternura. - Ah no, mi pequeño acosador. Que lindura, yo te gusto. -le acuso con voz ligeramente aguda de la excitación.
- No te burles, ya te puedes ir. -En ningún momento le escucho negar sus acusaciones.
- Ah no. Eso no. -le tomó del brazo y junto sus labios en un beso profundo y salvaje que Jongin no se esperaba, succionando los labios ajenos Baekhyun le hizo entender que realmente le deseaba. - Tú, pequeño Jongin, me darás por este culo tan bonito que tengo.
- Te veré en el baile. -se separó.
- ¿Iras?
- Los que no son de último año pueden comprar las entradas.
- ¿Iras solo para verme?
- Tengo que ver si mis clases te sirvieron. -escusas.
- Si claro.
Solo faltaban dos horas y Jongin logro convencer a Sehun que le acompañara. Irían como dos alumnos solteros haciéndose compañía.
La ambientación estaba muy linda y Jongin se entretenía hablando con Sehun. La llegada de Baekhyun junto a Taeyeon no paso desapercibida. Baekhyun llevaba los ojos potentes con ese eyerliner que le hacía ver demasiado bien y el cabello hacia arriba algo despeinado y largo. Muy atractivo.
Baekhyun le guiño el ojo y llevo a Taeyeon a su mesa, Jongin le miraba sin disimulo a la distancia. Seguía hablando con Sehun quien estaba muy animado viendo a chicas mover sus cuerpos unos contra otros. Parecía orgia de chicas. Muy entretenido para los ojos masculinos.
Jongin y Sehun siempre fueron muy unidos por lo tanto hablaban con los rostros muy unidos, además de la música que no les dejaba conversar muy cómodamente.
Le llego un texto.
"No le mires así."
Levanto la cabeza y noto que Baekhyun le estaba mirando sin disimulo. Tenía un brazo sobre los hombros de Taeyeon quien hablaba con una de sus amigas.
"Ve y cógete a tu chica" le envió.
No tardo nada en que le llegara un texto.
"Prefiero que vengas y me cojas tu"
Le miro y le alzo una ceja. Taeyeon ya no hablaba con nadie solo observaba y bebía de un vaso mientras le sacaba conversación a Baekhyun.
"Esta difícil con tu chica allí"
Baekhyun le miro después de leer y sonrió levemente.
“Tengo una deuda que pagarte, ¿Soy el único ansioso?"
Jongin sintió un cosquilleo en su parte baja e intento no prestarle mucha atención para que el rostro no se le colorara o se notara algo que no quería a través del pantalón.
Después de un rato de miradas por el rabillo del ojo le dijo a Taeyeon que iría al baño.
¿Debería de seguirle?
Taeyeon se levantó y se dirigió hacia Jongin. Este se puso algo rígido pero demostró frescura y desinterés, le dedico atención a lo que Sehun le comentaba y sintió el tacto de Taeyeon en su hombro llamando su atención. Jongin le sonrió pero esta no le sonrió de vuelta.
- Deja de mirarle.
- Dile que no me ande mirando. -¿Para qué fingir que no comprendía nada? Jongin no era un cobarde.
- Déjate de juegos, niño. -¿Niño?
- ¿Si te digo que dejes de tener relaciones con la mayoría de tus amigas entonces dejarías de hacerlo?. -Taeyeon no se esperaba una de esas. Jongin le guiño el ojo. - Viste que no. - le sonrió- Ahora vete que Baekhyun te espera en la mesa. - le señalo por encima del hombro a un Baekhyun notablemente disgustado.
Le llego un texto.
"Que descortés"
Rio al ver el tierno puchero del pequeño en tamaño.
"Tu chica me arruino la huida"
Baekhyun fue a responder pero Taeyeon le quito el teléfono y lo dejo en la mesa junto a su cartera.
- Bailemos, Baekhyunnie.
Jongin miraba sin pestañear lo que se aproximaba. No era como si ver un baile de una canción algo lenta fuera lo más entretenido pero el baile de esos dos era particular. Las demás parejas eran aburridas y simples, estos dos le daban con sensualidad, mucha.
Taeyeon era buena bailando. Y Baekhyun se aprovechaba de lo que Taeyeon le entregaba. Baekhyun le dedicaba miradas cómplices a Jongin por encima de Taeyeon y este miraba expectante. Baekhyun pensaba que Jongin lucia brillante esa noche, ese traje y ese peinado resaltaban en él todo su encanto físico. Y la mirada de Jongin sin duda que era lo que le daba ese toque.
- Oye Sehun... Vámonos. -seguía mirando a Baekhyun.
- ¿Tan pronto?. -Sehun estaba hablando muy animadamente con un chico que tenía a su otro lado.
- Sí. Trae a tu amigo si quieres.
- ¿Vienes?
- Tal vez otro día. -le dijo el chico y le tendió una tarjeta. - Hablamos luego.
Sehun y Jongin caminaron hacia la salida.
- Coronaste amigo. -le dijo Jongin por la conquista de esa noche.
- Es interesante ese chico. -dijo mientras colocaba la tarjeta dentro de su billetera para no perderla.
Baekhyun miro como Jongin se marchaba del lugar y se puso en plan: El pequeño se va a arrepentir.
- ¿A dónde vas?
- Pídele a Tiffany que te haga compañía. Yo tengo asuntos que atender. Hablamos luego.
- Qué demonios. -pensó la chica.
Baekhyun logro alcanzar a ese par que se acercaba al coche para asi salir del lugar.
- ¿Apoco no te gusto como bailo?
- Bailas bien, Baekhyun.
- Aprendí del mejor.
Sehun escuchaba en silencio, desinteresado.
- ¿Te piensas ir?
- ¿Quieres venir?
Baekhyun no dudo y se montó en el coche junto a ese par.
- La casa de Sehun es grande, sus padres por lo general no están.
- ¿Mucho trabajo? -pregunto Baek.
- Digamos que salen para tener... Aventuras - dijo Sehun. Escucho un pequeño "Oh" de Baekhyun.- Ellos piensan que no tengo ni idea. -rio suave a lo que Baekhyun pensó que lucía muy tierno incluso al reír por algo nada inocente.
La casa de Sehun era sin duda grande y muy linda.
- A esta hora no están las señoras de mantenimiento así que tienen toda la libertad del mundo... Jongin conoce las reglas, que él te las diga. -les abrió una puerta. - Hay ropa disponible. Esta será su habitación. Yo iré a llamar a alguien. -sonrió tiernamente. - Pueden tomar lo que quieran de la cocina. -dijo a lo lejos.
- ¿A poco Sehun no es un encanto?. -Baekhyun le miro mal y se dirigió a la cocina.
Al volver pudo apreciar la hermosa espalda desnuda de Jongin. Este se había quitado la camisa del traje para colocarse una más cómoda. Baekhyun se acercó por detrás para evitar que se la colocara.
- ¿Para qué te la vas a colocar si de todas maneras yo te la quitare en un rato? -le hablo al oído seductoramente y coloco su mano fría en el pecho ajeno.
Jongin se dio vuelta para encararlo y mirar detenidamente su rostro.
- Ese eyerliner hace que quiera darte duro.
- ¿Qué haces que todavía no lo haces? -le reto.
Jongin tomo los glúteos de Baekhyun y lo levanto quedando a la misma altura con las piernas de Baek en su cadera. Baekhyun encontró su lugar en los labios de Jongin. Suaves y grandes, perfectos para un Baekhyun que le gusta jugar.
La clave en los besos era morder y chupar los labios ajenos para no despegarse, ejerciendo presión para transmitir el deseo que sentía. Las grandes manos de Jongin tocaban a gusto propio las nalgas de Baekhyun, rosando por debajo la virilidad de Baekhyun robándole chillidos que salían de sus labios por la impresión.
- ¿Así que quieres que te dé? -lo coloco encima de la peinadora de la habitación, Baekhyun respondió sin hablar con un sensual "Mjum". - ¿Que tan duro? -rio en su oído, mordisqueando su oreja suavemente, lamiendo ligeramente bajo de ella arrancándole sonidos de excitación a Baekhyun.
- Muy duro. -le suplico con voz de puta en celo.
- Te gusta lo fuerte ¿Eh? -se deshizo de todo lo que tapaba el blanquecino pecho de Baekhyun.
- Me encanta lo fuerte. -apretó el bulto de Jongin por encima de la tela fina del pantalón con fuerza, se mordió los labios viendo el rostro de Jongin reaccionar y recibir un erótico "Mmmm" por respuesta.
Sehun pasó sin avisar. Vio aquella escena y solo hizo una leve señal de que estaba bien, etiqueto aquella posición como buena al levantar el pulgar y asentir un par de veces con los labios curvados hacia abajo.
- Vendrá el chico de la fiesta.
- Que la pases bien, Sehunnie.
- Vale, ustedes igual aunque ya están gozando. No manchen. -se retiró.
Se miraron a los ojos, rieron cómplices y Jongin lo tumbo en la cama boca arriba viéndolo en aquella posición. Se deshizo de los pantalones del mayor y todo lo que pudiera estorbar. Baekhyun estaba a su completa disposición y abierto como abanico.
- Quiero chupar cada centímetro de ti. - le miro con deseo- Sé que a las zorritas como tú les gusta este tipo de juguetes. - agarro una caja que se ubicaba en la mesa de noche que estaba justo al lado y saco un vibrador en forma de pene, rosado y algo grande. - Rosado porque me hizo pensar en ti. - Baekhyun le acaricio su pecho desnudo y rio ante lo dicho. - En cuatro, bebé.
A Baekhyun le excitaba hasta escucharle hablar. Obedecía sin rechistar. Sintió como el vibrador se colaba dentro de su entrada fácilmente, ahogo quejidos ante la intromisión y cuando estuvo dentro en su totalidad Jongin lo hizo vibrar, arrancándole chillidos incomparables sin cesar.
- ¿Te gusta, Baekhyun?
- Me encanta ¡Ahh sí! -gemía-.
- ¿Que tanto? -verlo lo ponía más caliente que el sol.
- Mucho, Jongin. ¡Ah! Dios, que rico, no, dios basta ¡Ah sí! ¡Dame más, Jongin! ¡Dame más! -suplicaba.
- ¿Qué dijiste? -Jongin pensó que acabaría ahí mismo.
- ¡Que me des más, puta madre!
Baekhyun sintió como Jongin le golpeaba con un pequeño látigo en una de sus nalgas. Esto le hizo chillar. No esperaba eso pero sin duda que era excitante. Demasiado.
- Pégame Jongin. -pidió.
- ¿Quieres más? -se masturbaba debajo del pantalón con un mano mientras miraba y escuchaba atentamente sin poder resistirse.
- ¡Sí! Mucho más. -sus brazos le fallaban.
- Dios, Baekhyun. -no podía resistirse.
Jongin miraba como el culo de Baekhyun se contraía con cada golpe. Baekhyun chillaba y chillaba, gemía y pedía más. ¿Se cansaría alguna vez? ¿Cuándo sería suficiente para Baekhyun?
El masoquista Baekhyun podía poner duro hasta a una mujer.
Jongin apago el vibrador al verlo eyacular cobre las sabanas. Intento regular sus latidos. No podía contener más la presión que tenía en todas partes. Pero Baekhyun no se quedaba quieto, un par de minutos fueron suficientes para dejar de jadear como perro. parecía un niño al que nunca se le acaba la energía.
- ¿Que paso, Jongin? ¿Te cansaste ya? Si no has hecho nada, flojonazo. -dijo una vez que se sentó en las piernas ajenas restregando su virilidad por encima del pantalón de Jongin.
- ¿Para ti nada nunca es suficiente?
- ¿Tu anteriores víctimas se conformaban solo con eso?
- No es como si hubieran muchas anteriores "victimas".
- ¿Cómo cuantas?
- Las suficientes para saciar los deseos sexuales de un joven de 15 años para aquel entonces.
Baekhyun siguió restregándose encima sin pudor, vio la erección de Jongin ligeramente hacia afuera del bóxer. Se anduvo masturbando. Tomo la erección ajena y la saco completamente de su escondite, comenzó a masturbarlo lento y preciso, sin despegarle la mirada de los ojos cerrados de Jongin que dejo caer su cabeza hacia atrás y respiraba dificultosamente por la boca. Baekhyun le dio una mordida a la manzana de Jongin porque le tentó hacerlo, lamio debajo de ella y la chupo un par de veces. Algo en los gruñidos de Jongin le decían que lo estaba haciendo de maravilla.
- ¿Cuantas personas aceptan esta forma de pago? -Jongin respiraba dificultosamente. - Eso te hace ver como un enfermo ¿Sabes? -Jongin le miro. - Me encanta. -le sonrió y le beso ligeramente los labios.
Jongin tomo las sedosas hebras de Baekhyun y se limitó a disfrutar de lo que su maravillosa boca podía ofrecerle a su virilidad. Baekhyun se deshizo de toda prenda que le estorbara, dejando a Jongin al igual que él; como vinieron al mundo.
Vaya que sabía cómo dar placer, no dejaba su lengua quieta y aunque dejara de usarla, sí que sabía cómo usar los labios y su garganta. Jongin quería llegar cada vez más profundo, y aunque tal vez sus pequeñas estocadas en la boca de Baekhyun pudieran ahogarle, este no mostraba molestia alguna. Incluso relajaba su garganta para que le follaran la boca lo más que pudiera. Le encantaba y no le importaba quedar como una zorra a la que le encanta que le follen o mucho más, si lo era entonces ¿Para qué fingir que no?
Baekhyun supo que Jongin estaba cerca y no quería parar aunque Jongin tiraba de su cabello para que se apartara debido a que no quiera llegar aun.
- Para mí no es problema hacerte llegar veinte veces hoy, Jongin. -le sonrió cómplice y abrió la boca justo a tiempo para que Jongin atinara a correrse dentro de su boca en abundancia, a lo que Baekhyun no alcanzo a tragar todo, haciendo que corriera un poco por las comisuras de sus labios. Al terminar de tragar hizo como si fuera refrescante; Imitando a las personas de los comerciales. - Eso fue una bomba. -hizo ademan de limpiarse las comisuras de sus labios con sus dedos pero al darse cuenta de la mirada fija en él de Jongin quiso tentarle un poco y decidió limpiar sus comisuras con su lengua un poco demasiado seductoramente.
- No sé cómo hacer contigo, Baekhyun. -Admiraba la belleza de quien tenía en frente; esa carita de ángel, ese cabello ligeramente húmedo, esa piel pálida, esos rasgos finos, esa sonrisa del demonio que le hace querer pecar, el puto eyerliner, Byun Baekhyun era follable en demencia.
Fuentes ajenas dicen que Jongin es sexo, y Jongin pensaba que Byun Baekhyun también lo era, ¿Así o más perfecto?
Baekhyun se puso de pie con Jongin todavía sentado en el borde de la cama, quedando la polla de Baek al nivel de los hombros de Jongin quien pudo admirar mejor el delicado cuerpo de su acompañante. Le acaricio su cabello medianamente largo mientras Jongin le acariciaba sus caderas y muslos mirándole desde abajo con sus ojos profundos y oscuros, completamente calculadores e inocentes.
- Te ves triste. -paso sus cabellos detrás de su oreja, acariciando su mejilla con el pulgar y la mano tendida en su mandíbula. - ¿Por qué, pequeño acosador?
Jongin le tomo las nalgas ligeramente fuerte y le acerco más hundiendo su rostro en el abdomen bajo de Baekhyun. Respirando pesadamente haciendo que la brisa que provocaba su respiración llegara hasta la virilidad de Baekhyun, quien sentía un cosquilleo placentero que lo llevo a cerrar los ojos y dejar caer su cabeza hacia atrás.
- ¿A que le temes?
- Esto no se va a repetir.
- Solo si tú no quieres. -Jongin le miro. - Yo puedo seguir asistiendo a tus clases. -le sonrió. De verdad quería seguir viendo a Jongin, con o sin clases.
- Ya el baile paso, Baekhyun.
- Tonto. -le empujo ligeramente, rodillas a los lados de sus caderas, y brazos flexionados en su formado y fuerte pecho, quedando ambos rostros racionalmente cerca. Una posición en la que se podía ver sin obstáculo alguno la rugosa entrada de Baekhyun. - Es una excusa para seguir viéndote.
Jongin le acaricio suavemente la espalda sintiendo su piel extremadamente suave, sus delicadas curvas en el hueco de su columna y fue bajando pasando por sus suaves nalgas; fuertes ondas de electricidad corrían por el cuerpo de Baekhyun y se intensificaron al sentir el grueso dedo índice de Jongin tantear su entrada. La reacción de Baekhyun fue algo que Jongin no se perdió y quería ver más, así que después de tantear un par de veces más su dedo entro sin lubricación ni nada que le ayudase. Y Baekhyun no se quejaba, le gustaba lo fuerte, como todo buen sadomasoquista. El pequeño en tamaño dejo caer su cara entre el pecho y cuello de su acompañante, reteniendo jadeos, gemidos, gritos, insultos o cualquier otro sonido. Pero lo que no podía retener eran esos "Mmmm" que salían uno detrás de otro dando a conocer que le gustaba, no, que le encantaba, que siguiera, que jamás se detuviera.
Baekhyun, ansioso, tiro el brazo de Jongin a un lado con brusquedad asustando al pequeño en edad.
- La gentileza... -dijo mirando los ojos de Jongin ligeramente abiertos del susto- ... No es lo de Byun Baekhyun. -paso sus manos por debajo de sus piernas buscando la erección de Jongin que al tenerla en sus manos la coloco en su entrada y froto un poco sintiendo tan deliciosa esa caricia y cayo con fuerza sobre ella.
Ambos abrieron sus bocas dejando salir cualquier sonido que quisiera escapar de sus gargantas. Como si los hubieran golpeado pero la sensación era realmente arrasadora, increíble.
- ¡Oh dios! -entre jadeos. - Eso no dolía tanto en mis pensamientos pero vaya que ¡ngh!
Tener a Baekhyun saltando encima de él no era algo que le molestase, para nada, que siga por el resto de su vida sino le haría seguir él mismo. Baekhyun tenía un baile erótico justo encima de su polla mientras se auto penetraba. Jongin pensó que en su vida pasada tuvo que haber salvado mil vidas para que ahora este siendo recompensado de tal manera. Baekhyun se frotaba de adelante hacia atrás, en círculos, de todas las maneras que improvisaba mientras sus manos paseaban por su propio cuerpo y junto a Jongin empezaron a masturbarle su virilidad que pedía atención.
- Salta, Baek. No pares, te prohíbo parar. -le ordeno mientras gruñidos se colaban en su garganta y sin intención de retenerlos salían al aire.
- ¿Que no pare?. -comenzó ligeros saltos- ¿Quieres que salte?. - incremento la fuerza. - ¿Qué tan duro, Jongin?. -preguntaba obteniendo solo gruñidos y una masturbación más precisa y fuerte como respuesta. Esto... Le enloqueció y le hizo perder el gramo de cordura que no tenía. Saltaba, gemía y sonreían como la zorra amante del sexo fuerte que era, las respuestas de Jongin le complacían y le animaban a seguir. Jongin con las rodillas dobladas empezó a empujar hacia arriba haciendo que entrara cada vez más profundo y tocando en el lugar indicado, paro sus embestidas y dejo que Baekhyun hiciera su trabajo, este último sintió el clímax tocarle la puerta y preparo su ultimo salto, espero arriba respirando un poco y soltó todo su peso llevando acabo su propia corrida. Dejo caer su cabeza y apoyo sus manos en el pecho de su acompañante. Jadeaba pesadamente y el sudor se hizo más que presente.
Jongin con una velocidad que dejo a Baekhyun atontado le hizo quedar de codos contra el suave colchón, las yemas de los dedos del pie izquierdo también apoyados en el colchón y la pierna derecha flexionada cerca de su costado derecho, abriendo hasta mas no poder sus piernas con trasero levantado, quedando en una nueva posición perfecta que dejaba el trasero de Baekhyun mas que disponible para el disfrute del menor en edad.
- Te había prohibido que pararas, Baekhyunnie. -Oops, se le olvido.
- ¿Que harás, Jonginnie? -le pregunto con voz melosa, era obvio que sabía.
- Te daré como te gusta.
- Dame fuerte. -movió las nalgas ligeramente como invitándole. Esa misma voz la usaría hasta que acabara mil veces si era necesario.
Jongin rio ante el comportamiento tan desvergonzado del mayor. Acerco su rostro y Saborío el dulce agujero de quien tenía las piernas más abiertas que un abanico. Baekhyun no se esperaba esta jugada y ahora sí que los sonidos que escapaban de su boca no los pararía nadie.
Los sonidos que hacia Jongin al besar y lamer ayudaban al disfrute de Baekhyun, realmente ningún sonido en esa habitación era sano. Ahora sí que estaba sintiendo la sensación más exquisita y placentera que alguna vez en su vida haya sentido. Y con solo eso pensó que se correría por tercera vez en esa noche.
Con el agujero de Baekhyun ligeramente lubricado con la saliva de Jongin, coloco su pene en la pequeña puerta hacia el placer y rozo haciendo fuerza, alejándola evitando entrar para ver como Baekhyun empujaba hacia atrás, impaciente.
- Te voy a pegar para que dejes de estar provocándome.
- ¿Y qué pasa si eso es lo que quiero que hagas?
Ahora sí que no se controlaría.
Como si de un animal con hambre se tratara Jongin tomo las caderas de Baekhyun y con su ayuda entro poderosamente sintiendo sus calientes paredes envolverle su despierto pene. Se detuvo sintiendo aquel mágico instante. Su pene se sentía más que a gusto pidiéndole que ya comenzara a atacar el interior de ese pequeño sadomasoquista que no se conformaba con nada.
Sintió como si fuera una carrera de coches donde tenía que ir a varias direcciones para tocar el punto indicado y cuando lo encontró no paro de darle fuerte y velozmente. Por un momento pensó que era una metralleta o alguna de esas armas poderosas, y le gustó la idea.
Baekhyun no se callaría así le pegaran mil tiras de cinta adhesiva en la boca. Le estaban dando la follada del milenio y vaya que la estaba disfrutando.
Jongin le daba fuerte, le estaba dando como un bruto, y le fascinaba. Pero Jongin no era una máquina, en algún momento alcanzaría el orgasmo y este llego sin tocar la puerta ni pedir permiso.
El semen caliente se sentía relajante. Jongin se dejó caer encima de la espalda de Baekhyun completamente agotado. Ambas respiraciones desiguales y pesadas, ya era hora de descansar sus cuerpos que acaban de disfrutar de los mejores orgasmos que tendrán en sus putas vidas.
~
Jongin despertó con el cantar de los pájaros y un dulce olor de un perfume que no le pertenecía. Se encontraba acostado bocabajo y con la sabana tapándole nada más que los pies. Esperaba amanecer con el pequeño a su lado pero este no se encontraba en el panorama.
Pensó por dos segundos que había sido una alucinación o un sueño, pero al ver la ropa tirada en el piso, el látigo y el vibrador esparcidos por la habitación... definitivamente no había sido un sueño. Sonrió inconscientemente y bajo a la cocina en busca de Baekhyun pero solo encontró a Sehun tomando el desayuno con el chico de el día anterior, un poco acaramelados pensó Jongin; El chico sentado en una butaca algo alta con Sehun entre las piernas quien le daba de comer una fresa a la boca.
- Disculpen la interrupción, buenos días. -la reacción del chico le fue graciosa; completamente apenado ocultando su rubor entre sus manos y un Sehun que le dirigía a Jongin una mirada de muerte- Yo solo pasaba en busca de Baekhyun. - sonrió.
- ¿Ya se te perdió tu pequeña princesa? -pregunto burlonamente Sehun. -Busca en el baño.
- Ah, claro, el baño. ¿Cómo no se me ocurrió? Un gusto... -espero que el chico desconocido dijera su nombre.
- Ah, Tao. Zitao, mucho gusto. -le saludo suavemente con la mano.
- Igual. -salió corriendo hacia arriba en busca de "su princesa", no sabía porque iba corriendo tan apresurado pero lo pensaría después.
Toco la puerta del baño que se situaba dentro de la habitación que ellos estaban usando y efectivamente allí estaba Baekhyun jugando con la espuma de la tina de baño. Quien le miro sonriente con una cara tan tierna e inocente que dudo por un momento que fuera ese el Baekhyun con quien había tenido sexo salvaje la noche anterior.
- Aquí estas. -recargo su peso del umbral de la puerta.
- Te estuve esperando. Pasa. -le invito sin rastro del Baekhyun de anoche. Este Baekhyun parecía un niño pequeño puro e inocente.
Una vez Jongin adentro se sentó en el borde del lavamanos en donde encontró un paquete de cepillos de dientes nuevos sin usar y decidió abusar de la confianza de su amigo y tomar prestado uno. El sabor de su boca no era muy agradable que se diga y él ya se estaba adelantando a lo que posiblemente se llevaría a cabo.
- Te ves lindo así.
- ¿Así como? -no sabía porque pero Baekhyun no paraba de sonreír.
- No sé, la luz del día te hace ver bonito. -se acercó. - Esos cachetes. -le apretó ligeramente uno de ellos con dulzura.
- Gracias. -un ligero rubor se apodero de sus mejillas.
Raro, después de lo de anoche estaban siendo dulces e inocentes. Bueno... No era del todo inocente pero no se comparaba con lo que recordaban de lo ocurrido la noche anterior.
- ¿Quieres entrar? -le invito jugando con el agua.
- Tal vez luego.
- Vamos... Entra. -le tomo la muñeca y chapoteo ligeramente el agua.
Jongin tomo lugar en el otro extremo de la cómoda tina donde los ojos de Baekhyun miraban sin disimulo cada uno de sus movimientos, completamente embelesado.
- Tu también te vez bonito... -capto la atención de Jongin. - Pero no solo a la luz del día. -se acercó hasta quedar con la barbilla apoyada en el pecho suave de Jongin. Acostado ligeramente entre sus piernas abiertas y con las manos en sus caderas. Mirando desde abajo su linda sonrisa.
Uno de los pezones de Jongin se le atravesó en la mirada y lo chupo suavemente, como acariciándole con los labios y luego con la lengua, sintiendo los latidos de Jongin acelerarse.
- Créeme que cuando desperté y te vi en la posición en la que amaneciste me dieron unas ganas de despertarte con una mamada. Pero eres muy pesado y no podía darte la vuelta. -rio pícaro.
- Te debe de arder el culo por lo de anoche y aun quieres más. -rio suave.
- Si me duele, pero yo no tengo la culpa que seas así de irresistible.
Tomo el borde de la tina en donde Jongin estaba recargando su espalda e hizo fuerza para que sus piernas quedaran rodeando las caderas de Jongin, sentado sobre él quien sentado también cerro sus piernas sirviendo de silla para el trasero del pequeño demonio.
Sus penes se rosaban y debajo del agua tibia, todo se sentía incluso más rico. Se miraban a los ojos como diciéndose algo, no necesitaban hablar, sus intenciones no eran específicamente tener sexo; solo... Se miraban, admiraban la belleza facial del que tenían en frente sin perderse el más mínimo detalle. Se le escapaban unas que otras sonrisas cómplices y rubores que llenaban sus mejillas. Y fue Jongin quien dio el paso para darle la bienvenida al primer de tantos besos que llevarían a cabo. Los brazos de Baekhyun rodeando su cuello. Lentos y precisos besos sintiendo el sabor del otro, explorando la cavidad bucal ajena. Chupando los labios inferiores con lentitud y riendo suave al buscar un poco de oxígeno para alimentar sus pulmones. Baekhyun dejaba un camino de besos pequeños en la barbilla de Jongin para subir la mirada y ver aquellos ojos que le gustaban tanto. Podía pasar horas mirándolos y tal vez no se cansaría, pero es que eran realmente hermosos.
- Me gustan tus ojos. -se mordió el labio lentamente estudiando detenidamente los ojos de quien tenía en frente.
- Me gustan tus labios.
- Me gusta tu cuerpo.
- Me gusta tu sonrisa. -Baekhyun sonrió y Jongin no dejaba de verle esa linda sonrisa adornar su rostro. - Y tus ojos al sonreír.
- Me gusta como bailas. -le mordió el lóbulo de la oreja con suavidad susurrándole como si fuera un secreto.
- Me gusta tu trasero, vaya que sí.
- Me gusta tu polla. -dijo picaron.
- Me gusta como gritas que te dé más fuerte. -le susurro de igual modo riendo al sentir como el cuerpo de Baek se tensaba.
- Dime más. -le dijo con voz melosa, ya se había puesto caliente con tan solo eso.
- Como saltas. -Baekhyun intensifico el abrazo sintiendo como ambos penes rozaban. - Como rechazas a las chicas. Como te pones celoso al verme cerca de Sehun. -el pequeño en altura hizo fricción entre los miembros.
- Me gusta como pareces el rey de la fiesta con esa apariencia de dios griego recién salido del horno. -incrementaba la voz melosa cada vez más.
- Tu eyerliner del demonio.
- Tu en las mañanas sin ni una tela tapándote.
- Tú gimiendo mí nombre.
- ¿Ya dije tu polla?
- Sí.
- Bueno, tu polla. -rieron juntos.
- Tendrás de mi polla cuando quieras.
- ¿Podre comer de ella cuanto quiera?
- Tu solo pídelo.
- Jongin. -chillo bajito simulando embestidas.
- Tú en traje. Me encanta.
- Tu voz por teléfono.
- Tu voz de puta bien follada.
- ¿Justo esta? -le hablo con tono orgásmico.
- Justo esa. -tomo su trasero entre sus manos y jugo con él.
- Tus manos.
- Baekhyun sadomasoquista.
- Kim dios del sexo salvaje Jongin.
- Todo de ti.
- ¿Todo de mí?
- Absolutamente todo.
Estaban más caliente que el puto sol y la loca de Baekhyun simulando embestidas no ayudaban a calmar el deseo de romperle en dos. Baekhyun comenzó a masturbar ambos penes con una sola mano mientras Jongin le devoraba el cuello dejando chupetones y lamidas por aquí y por allá.
Ambos querían obtener todo del otro y lo obtendrían pasara lo que pasara porque así lo deseaban.
Después de todo Sehun tenía razón, Jongin no tiene igual.