-5 Enero - Vuelta a Clases
Pov’s Yugi
Las vacaciones de invierno de este año habían sido por demás alucinantes, de hecho los últimos meses lo habían sido, había pasado momentos increíble tanto con Malik y Ryou como con todos mis amigos -exceptuando a Tea- además de eso habíamos empezado una serie de sueños-visiones con nuestros yamis, esas noches se convirtieron en un consuelo para nosotros, era un momento único en que nuestras almas podían unirse.
Pero luego de eso encontramos algo mucho mejor, gracias a las pruebas de Shadi dimos con la manera en que nuestras oscuridades pudieran pasar un par de días con nosotros aquí, lastimosamente el ritual se volvía algo extenuante, y luego de la ‘visita’ de año nuevo Shadi nos informó que debíamos tomarnos un tiempo de descanso pues hacer aquello tan seguido consumía cada vez más nuestra energía vital. Por lo que, en conjunto con Malik y Ryou hemos decidido esperar hasta San Valentín para una nueva visita.
Fin Pov’s Yugi
Era la última hora, la clase de matemáticas no era precisamente algo que le llamara la atención a Yugi, aunque este siempre procuraba poner atención para mantener el promedio en sus clases, pero en esta ocasión el chico se dedicaba únicamente a mirar por la ventana con gesto distraído meneando su lápiz en su mano derecha mientras su mentón reposaba en su mano izquierda cuyo codo reposaba en su escritorio.
─Psss ─Ryou le llamo la atención a Yugi a la vez que dejaba caer disimuladamente un papel doblado en el escritorio del tricolor.
Yugi se sobresaltó un poco al ser sacado de su estado de ensueño, tomo la nota y la desdoblo para leerla “oye, sé que la clase de matemáticas a última hora no es de lo más entretenido pero… ¿te ocurre algo amigo?”
Yugi sonrió, sus amigos eran tan detallistas con él que sabían hasta cuando su sonrisa era diferente, dio un breve vistazo al frente y se dispuso a contestar el mensaje justo bajo del escrito de Ryou. “Estoy bien, no se preocupen. Solo pensaba en que es el primer día de clases de Kurumi y tengo que ir a recogerla a la salida” le regreso la nota al albino.
Ryou escribió su respuesta y luego le paso el papel a Malik quien lo leyó para luego escribir también una respuesta.
“Por mi parte sigue en pie lo de acompañarte, sabes que prefiero pasar tiempo con ustedes ;) . R”
“Igual yo, te acompañaremos amigo =) .M“
Malik regreso el papel a Yugi. El tricolor menor sonrió ante las respuestas. Escribió un respuesta más y se la regreso a Malik con disimulo.
“No me cansare de darles las gracias. Son los mejores amigos ;) .Y”
El resto de la hora paso lenta y tortuosamente para la mayoría, hasta que finalmente la campana de salida.
Y como la vez pasada la gente se acumulaba desesperada por salir.
Los tres chicos tomaron camino rápidamente, la escuela de Kurumi estaba como a 10 cuadras de la suya, Ryou les guiaba pues ya conocía el lugar (de su escuela suben 5 cuadras, doblan a la izquierda, caminan tres cuadras más y vuelven a subir otras dos.) En el camino iban conversando tranquilamente sobre el nuevo semestre que se les venía encima. Malik ya era prácticamente un estudiante como cualquier otro, se adaptó fácilmente a la escuela y las clases -claro que recibía algo de ayudita de Ryou con el curso de inglés- estaba dejando atrás todo su pasado y se adaptaba muy bien a su nueva vida con sus amigos y hermanos, se podía decir que el chico conocía finalmente lo que era la verdadera felicidad.
─ ¿y qué hay de tus sobrinos? ─Pregunto Ryou.
─Su escuela está cerca de casa y ya deben de haber salido, las clases de primaria terminan antes.
─ ¿por qué traes tu mazo? ─quiso saber Malik viendo el cinturón extra en la cadera de Yugi.
─No sabes la de veces que al salir de clases me eh topado con montones de duelista, es cansino pero aprendí a las malas que siempre debo estar preparado ─dijo recordando la vez que él y su otro yo se enfrentaron a Anubis. Ryou soltó una risilla ante esa respuesta, había visto un par de veces los ataques de los fans y retadores de Yugi en la escuela ─Además los niños me tienen la cantaleta de que les muestre mi deck... más bien el de Yami.
─Son tan adorables ─dijo el albino.
─Si… los quiero mucho ─dijo con una mirada tierna.
─Owww ─dijeron Ryou y Malik a modo de juego.
De pronto Ryou frunció levemente el ceño ─desde hace tiempo que quería preguntarte. Sí sabes que su nombre es Atem ¿por qué les sigues llamando ‘Yami’? ─pregunto curioso.
Yugi mostro una pequeña sonrisa enamorada ─es algo de nosotros, le llamé Yami desde que nos conocimos en el reino de los duelistas, mucho antes de saber que era un faraón y todas esas cosas y se convirtió en algo especial. El día de la batalla final él me dijo que para mí siempre seria yami, y es gracioso puesto que lo dice porque siempre será mi oscuridad además de que podría seguir llamándole Yami siempre.
Ryou y Malik se miraron entre si conmovidos ─Owwwww ─los tres rieron.
… Un par de minutos después ya habían llegado al lugar.
Era, por decir menos, hermoso y enorme. La estructura recordaba a un castillo, una gran entrada daba a dos paredes en diagonal con varios ventanales que dejaban espacio en el centro a un enorme patio y cerraban con otras dos paredes creando un rombo. (https://www.facebook.com/photo.php?fbid=10203270473910144&set=a.1878830698006.2092261.1458445222&type=1&theater )
Llegaron justo para el toque de la campana. Aun habían algunos estudiantes de primaria que no se había ido y los de secundaria y preparatoria empezaban a salir.
El uniforme era bonito, las chicas llevaban una blusa blanca de botones con corbata roja, una chaqueta negra y falda roja a cuadros con rayas negras. Los chicos también usaban camisa blanca con corbata azul, la chaqueta negra y pantalón azul a cuadros con rayas negras.
Los tres hikaris se quedaron cerca de uno de los árboles que adornaban el camino de entrada/salida a la espera de la peli-azul.
Lamentablemente no fueron muy discretos.
─Mira allá ¿Qué no es ese Yugi Motou, el rey de los juegos? ─comento una chica peli-negra que iba saliendo con su grupo de amigas.
─ ¿estas segura? ─pregunto otra castaña.
─Si es, mira su cabello. Y esos chicos ¿no son también de los ochos finalistas de ciudad batallas? ─comento una rubia.
─Sí, sí. Malik Ishtar y Ryou Bakura ¿no son guapísimos? ─dijo la pelinegra.
─Totalmente ─dijeron las otras con corazones en los ojos
Pronto un gran grupo de chicas estaba rodeando a los tres hikaris, provocando todo un alboroto de adulaciones y chillidos femeninos.
Mientras tanto Kurumi iba saliendo tranquilamente con un maletín marrón tipo portafolio colgando de un costado -trae esos tirantes que se enganchan y quitan a gusto- con una compañera de cabello rojo a la mitad de la espalda recogido en dos coletas altas y de ojos ámbar. Tres chicas pasaron agitadas a su lado.
Kurumi llevaba unas largas medias blancas que le llegaban casi hasta la falda y un lazo rojo sobre su flequillo, tenía la chaqueta totalmente cerrada (N/A: así, pero en vez de sweater es chaqueta https://www.facebook.com/photo.php?fbid=10203275136226699&set=a.10201030095142075.1073741833.1458445222&type=3&theater ). Kyoko tenía unas medias bombachas por debajo de las rodillas de la misma tela que la falda y sus coletas estaban adornadas por un broche negro en forma de ‘X’ y su chaqueta estaba abierta dejando ver la blusa blanca debajo.
─ ¡Hey, hey! ¿Qué pasa? –pregunto extrañada Kurumi.
─ ¿No lo han oído? ─pregunta una.
─ ¿Qué cosa? ─dijo la peli-azul.
─Dicen que el rey de los juegos está en la entrada ─dijo con un suspiro enamorado otra de las del trio ─vamos chicas, que no se vayan a ir ─ordeno emocionada y las tres chicas regresaron a la carrerilla.
─ ¿el rey de los juegos? ─se preguntó la pelirroja, su nombre era Kyoko ─seguramente se haya formado un gran alboroto.
─ ¡Ay no! ¡Vamos! ─Kurumi jaló a su nueva amiga escaleras abajo hacia la salida del colegio.
─ ¿Eh? ─la chica se sobresaltó ante el jalón ─ ¿Qué pasa?
Cuando Kurumi y Kyoko llegaron a la salida los tres hikaris eran rodeados por alrededor de 35 a 40 chicas que chillaban sus nombres emocionadas gritando halagos y cumplidos con tono enamorado, logrando que los tres portadores de articulo milenarios se removieran sonrojados intentando zafarse de aquel escándalo y los chicos del colegio hirvieran en rabia y celos.
Kurumi apenas y alcanzo a divisar a su primo estando arriba de las escaleras. Rápidamente se acercó a los chicos soltando un potente chillido.
─ ¡¡¡¡YA BASTA!!!! ─grito la peli-azul molesta. El grito fue realmente fuerte logrando que el escándalo de las chicas se calmara un poco, a la fuerza atravesó el tumulto hasta llegar frente a su primo ─Hola Yugi nii-chan, chicos ─saludo como pudo, luego se dio la vuelta para enfrentarse al tumulto ─ ¡ustedes chicas! ¡DEJEN EN PAZ A MI ONI-CHAN! ─se quejó llevando las manos en puños a las caderas con postura firme y el ceño fruncido, sus ojos esmeraldas brillaban peligrosamente con poca paciencia.
─ ¡¿Tu QUÉ?! ─gritó la mayoría sorprendidas.
─Lo que oyeron ¡dejen a mi primo en paz! ─tomo a Yugi del brazo para jalarlo y sacarlo del túmulo. Yugi alcanzo a tomar la muñeca de Ryou llevándolo consigo y el albino hizo lo mismo con Malik, las chicas se les quedaron viendo anonadas ─Vamos Kyoko-chan! ─llamo a su amiga quien dio un pequeño sobresalto antes de seguir a su nueva amiga y compañera sujetando su maletín -también tipo portafolio, pero ella lo lleva del mango-
Kurumi los llevo hasta la salida.
─ ¡Son tan lindos! ─chillo una de las chicas que se quedaron viendo a Yugi y compañía hasta que salieron de su vista, llevando ambas manos a sus mejillas coloradas, moviendo sus caderas de lado a lado con corazones en los ojos.
─ ¡Sí! ─corearon las demás imitándola.
─Tu sí que sabes cómo formar un alboroto ¿eh? ─bromeo Kurumi cuando estuvieron fuera de la institución.
Yugi hizo un puchero ─como si tuviera la culpa.
─Ah… etto… ─la pelirroja se removió nerviosa.
─ ¡Ah sí! Les presento a mi nueva amiga Kyoko ─dijo la peli-azul con una sonrisa.
─Me llamo Kirigaya Kyoko ─se presentó haciendo una pequeña reverencia ─es un placer ─dijo algo sonrojada pero con una amable sonrisa.
Yugi le sonrió tranquilamente ─ Motou Yugi, es un gusto.
─ Ishtar Malik ─Malik también sonrió amablemente alzando la mano.
─ Bakura Ryou ─se presentó con su acostumbrada dulce sonrisa llevando una mano a su pecho correspondiendo la leve reverencia ─ el placer es nuestro ─la colorada amplio su sonrisa aún más sonrojada.
─Es increíble que seas pariente del rey de los juegos… pero no llevas su apellido ─dijo confundida.
─Es que es mi madre quien es hermana de su padre, por eso no llevamos el mismo primer apellido ─explico ─ pero Yugi y yo crecimos juntos y somos como hermanos ─se enganchó cariñosamente a su brazo ─ ¿nee?
Yugi le dio una sonrisa ─sí.
─Gracias por venir a buscarme nii-chan ─le dio un besito en la mejilla ─ pero para la próxima vez mejor me esperas aquí fuera y nos ahorramos eso ─los tres hikaris soltaron una risita nerviosa ─y gracias también a ustedes chicos ─les sonrió a Malik y Ryou soltándose de Yugi.
─ ¿Vamos? ─pregunto Yugi.
─ ¡Hai! ─concedió emocionado ─vamos Kyoko-chan ─la pelirroja dio un pequeño brinco antes de ponerse al lado de su amiga para iniciar el camino.
─ ¿y qué tal tu primer día? ─pregunto Yugi.
Kurumi empezó un laaaargo relato sobre lo nerviosa que estaba al presentarse y de cómo había sido su primer día en el instituto Seiyu con algunas anotaciones de Kyoko.
─Mañana vas a tener a medio instituto pidiéndote autógrafos de Motou-senpai ¿sabes? ─dijo la pelirroja con una risilla.
Kurumi fingió un suspiro dramático llevándose una mano a la frente y elevando la mirada al cielo ─ ¡Ah! El precio de tener un primo celebridad ─Yugi le hizo una mirada mala, Kyoko rio más.
─Yo me voy por aquí ─se despidió la oji-ámbar a unas cinco cuadras de la casa de Kurumi desviándose a la derecha─nos vemos mañana Kurumi-chan, senpai’s ─les dio una sonrisa agitando la mano.
─Hasta mañana Kyo-chan ─se despidió la chica alegremente mientras que los chicos solo agitaron la mano.
─Parece que se llevan muy bien ─comento Yugi con una sonrisita picara.
Kurumi se sonrojo un poco llevando una mano empuñada a su rostro agachando la mirada ─si, fue muy linda y amable conmigo desde el primer momento e hicimos muy buenas migas o eso me parece.
─Es una buena chica, seguro que llegan a ser grandes amigas ─le dijo en tono fraternal. Kurumi le dio una bella sonrisa.
Ryou y Malik les vieron con una sonrisa, Malik recordó algo.
Flash Back
─ ¡Malik! ─llamó una joven morena.
─ ¿Qué pasa hermana? ─respondí diligente el chico.
─ ¿con quién estabas hablando? Te has pasado un largo rato al teléfono.
Malik se sonrojo un poco ─etto… estaba hablando con Yugi ─respondió llevando ambas manos tras la espalda.
Ishizu le sonrió maternalmente ─te llevas muy bien con Yugi ¿cierto?
─Si... bueno, Yugi es muy amable y es agradable hablar con él y… etto.
─Yugi es un buen chico, me alegra que se lleven bien y sean amigos ─Ishizu le revolvió un poco el pelo a su hermanito antes de dirigirse a su habitación.
Malik se quedó ahí de pie aun algo sonrojado, parpadeo un par de veces antes de que una pequeña sonrisa se plasmara en su rostro ─ amigos ─susurro tiernamente la palabra.
Fin de Flash Back
─ ¡Tío Yugi! ─saludaron emocionados los gemelos corriendo hacia el cuarteto, sacando a Malik de sus pensamientos.
─ ¡Hey niños! ─Yugi se agacho para abrazarlos a ambos.
─ ¡Hola tío Ryou, tío Malik! ─corrieron a saludar a los otros hikaris, ellos devolvieron el saludo afectuosamente.
─ ¿Y yo qué? ¿Estoy pintada en la pared?
─Algo así ─le respondió Shouta sacándole la lengua, Keita se rio con su hermano.
Kurumi les hizo la mirada mala ─respeto chicos, respeten a su tía ─dijo Yugi intentando aguantar la risa ─ ¿Y? ¿Cómo les fue a mis adorados sobrinos en su primer día de clases?
─ ¡Bien! ─respondieron a coro.
─Estamos en la misma clase ─dijo feliz Keita, Shouta lo abrazo con cariño rosando su mejilla con la de su gemelo. Yugi tuvo que parpadear un par de veces y agitar un poco la cabeza cuando a su mente vino una imagen de él y Yami en la misma posición.
─Eso me alegra ─Yugi se arrodillo para ponerse a su altura y hablarles en voz baja mientras Kurumi entraba ─recuerden que pase lo pase siempre se tendrán el uno al otro ─Shouta y Keita sonrieron entrelazando sus manos ─cuídense entre ambos ─les dio un beso paternal en la frente a casa uno.
El uniforme de los niños se les veía realmente adorable, la camisa blanca bajo una chaqueta negra con bordes verdes y shorts pantalones negros para invierno y otoño, para las estaciones cálidas eran un short verde con diseño escoses con lineras en verde oscuro. Los cual les quedaba muy bien con sus grandes ojos verdes.
Los tres se dieron un gran abrazo bajo las conmovidas miradas de Ryou y Malik, el egipcio se preguntaba como seria cuando él tuviera sobrinos… si es que sus hermanos le daban sobrinos alguna vez.
-Días después-
El frio invernal empezaba a mermar, las nevadas eran cada vez menos frecuentes y menos intensas hasta quedar solo como un precioso recuerdo blanquecino de vacaciones.
Estaban en el descanso y toda la pandilla estaba en el mismo lugar de siempre junto al gran roble, Yugi estaba conversando de algo con Joey mientras Ryou estaba acurrucado junto a Malik contra el árbol, cuando el egipcio noto que su amigo se había dormido lo suficiente como para no notar su ausencia se separó de él y le hizo una señal a Yugi quien se paró y en voz baja se excusó para ir al baño, Malik se ofreció a acompañarlo.
─ ¿me repites por qué hacemos esto?... mejor dicho ¿Qué estamos haciendo? ─pregunto Malik mientras caminaba con Yugi a paso veloz por los corredores de la escuela.
─Vamos al salón de profesores para buscar la información de los alumnos de nuestro salón ─explico ─sé que Ryou cumple a principios del año pero no sé exactamente ¿cuándo? y quiero saberlo.
─No es más sencillo preguntárselo.
─Talvez pero quiero hacerle una fiesta sorpresa y esta es la mejor manera.
Para suerte de los chicos todos los profesores estaban fuera del salón por lo que no les costó nada llegar al lugar de la señorita Mizuki y buscar entre las carpetas la hoja de vida de Ryou.
─A ver, A ver ─Yugi ojeo rápidamente hasta encontrar lo que quería ─ ¡Eureka! Cumpleaños: 24 de enero... Creo que vamos a tener que traer a los chicos antes de San Valentín ─dijo con una sonrisa.
─ ¿podemos salir ya de aquí? Ryou podría despertar en cualquier momento ─dijo Malik también con una sonrisa, ya quería ver a su yami de nuevo.
─Tienes razón vámonos antes de que nos pillen ─Yugi dejo todo tal y como estaba y salieron con sigilo del lugar sin ser vistos por nadie para regresar a su lugar, Malik regreso al lado de Ryou a pocos instantes de que el albino despertara inocente de todo. En el camino Yugi quedo con Malik para juntarse luego de clases para organizar la fiesta sorpresa de Ryou.
-o-
Luego de salir de clases todos se fueron a su casa para hacer los deberes y todo, tras terminar sus quehaceres Yugi tomo camino a casa de Malik.
Toc Toc.
─Hola Yugi ─saludo Malik dejando pasar al chico para luego subir a su habitación donde Yugi se tumbó bocabajo en la cama, mientras que el egipcio se sentó a su lado de piernas cruzadas con su Kuriboh violeta en medio de estas.
─Yo quiero hacerle el pastel ─comento de pronto.
─Claro, la repostería parece que se te da muy bien y sabemos lo mucho que Ryou adora los postres, yo me encargo de los bocadillos y eso.
─ ¿Y cómo hacemos con nuestros yamis? Ryou se dará cuenta de que planeamos algo para su cumpleaños si traemos a los chicos así por que sí.
─Lo tengo cubierto ─dijo con expresión orgullosa ─estuve hablando con Duke y si recuerdas los boletos para ir a patinar sobre hielo que nos regaló en navidad ─Malik asintió ─ podemos decirle a Ryou que los chicos quieren ir y por eso vamos a buscar a nuestros yamis.
─Excelente Yugi… y ¿Dónde va a ser?
─en casa de Ryou, podemos hablar con Bakura para que distraiga a Ryou durante el día mientras nosotros arreglamos todo en su casa.
─ ¡Vaya, lo tienes todo preparado! ─le dio una sonrisa.
─jejeje ─Yugi soltó una risita nerviosa ─por cierto quería tu opinión sobre el regalo que había pensado.
─Dime
─ ¿recuerdas las fotos que nos tomamos en el templo? ─Malik asintió ─tengo la que se tomaron ellos dos en el puente y pensé en imprimirla de gran tamaño y conseguirle un bonito marco.
─Si, me agrada la idea, seguro que le gusta.
Ambos hikaris intercambiaron una sonrisa para seguir afinando detalles para el cumpleaños del albino.
-o-
En su casa Ryou estaba en su habitación recostado en su cama con su Kuriboh blanco sobre su pecho y un calendario entre sus manos. El joven oji-marrón paso sus dedos sobre las últimas semanas de Enero ─mi cumpleaños ─torció un poco el gesto, pero luego una pequeña sonrisa se plasmó en su rostro recordando sus últimos cumpleaños, realmente no los celebraba como se debería pero eso no importaba teniendo a Bakura con él comportándose -extrañamente- amable y hasta cariñoso… a su traviesa manera, es decir, abrazándole por la cintura, acariciando tentativamente su cuello u orejas y diferentes cosas que lo hacían sonrojar y apenarse.
Ryou se levantó de su cama para ir a su armario y tomar la gabardina negra de su yami, regresó a recostarse de perfil en la cama arropándose con la prenda oscura teniendo a Kuriboh en una de sus manos y la sortija en la otra, entonces arrullado por los leves rastros del aroma y el calor de su yami en la tela se quedó dormido con una última palabra en sus labios… o más bien… un nombre.
─Bakura…