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La cuenta regresiva, la vida sin ellos por DanyNeko

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Notas del capitulo:

Aquí traigo la primera secuela de “No es un adiós, sino un hasta pronto”
Yugi, Ryou y Malik empezarán una nueva vida, ahora todos juntos en Domino, empezarán las clases, llevaran una vida normal como estudiantes, el único problema con eso es que ellos no son chicos normales, son hikaris y sin sus yamis no está completa su vida. Tendrán que superar muchos sentimientos antes de tomar su decisión. Tendrán que aprender a vivir sin ellos. Será una prueba para sus almas. ¿Serán capaces de superarla?

Yugi-oh! No me pertenece si fuera así esto lo estrían viendo como capítulos en televisión xD

 

El día había sido de lo más entretenido, toda la pandilla acompañados de Serenity y los hermanos Kaiba, habían ido a patinar sobre hielo. Los yamis aprendieron con sorprendente facilidad a moverse por el hielo. Los hikaris habían hecho una pequeña carrera con Joey, Seto y Tristán donde Yugi y Ryou empataron el primer lugar.

Pero para lastima de todos todo lo bueno tiene su fin y cuando comenzó a oscurecer había que irse pues el domo de la pista estaba a las afueras de la ciudad y estar allí de noche no sería la mejor idea.

Gracias a Mokuba, Joey y Serenity se fueron con él y Seto en la limo, en los asientos de atrás se sumaron Tea, Tristán y Duke mientras los hikaris y los yamis eran llevados en otra de las limos de la empresa -la misma que Mokuba les envió para las fiestas-.

─Oahhhh ─bostezó Yugi recostándose contra Yami quien de inmediato le rodeó un brazo.

─ ¿cansado Yugi? ─preguntó Malik con una sonrisa. Yugi asintió ─jeje, pues somos dos ─el egipcio menor se estiro un poco.

─Ven aquí ángel ─Marik se movió hasta el extremo del asiento jalando a Malik para recostarlo en su regazo. Malik se sonrojo un poco, desvió los ojos pero se topó con las miradas pícara de Ryou y Bakura haciéndolo sonrojar más por lo que se giró para ocultar su rostro en el abdomen de su yami quien empezó a acariciar sus mechones con suavidad.

Por su parte Ryou ya estaba recostado en el pecho de Bakura con toda la tranquilidad del mundo y el mayor mantenía su mano jugueteando entre los blancos y sedosos mechones de su adorada luz.

La limusina llegó primero a casa de los albinos para felicidad de Bakura, quien estaba realmente ansioso de estar a solas con su luz… esa noche prometía y mucho.

─Hasta mañana chicos ─con toda la intención Ryou deposito dulces besos en las mejillas de Malik y Yugi a modo de despedida bajo la atenta e igualmente molesta mirada de su yami, ese pequeño travieso estaba tentando su paciencia.  

─Hasta mañana Ryou, que descanses ─se despidieron los otros dos hikaris con una sonrisa y respondiendo al gesto de su mejor amigo.

─Ustedes también ─respondió bajando de la limo tras Bakura.

─Lo ha hecho a posta ─dijo Malik con una pequeña sonrisa.

─Lo sé, se ha anotado ─Yugi soltó una risilla.

Sus yamis los miraron intrigados.

Cuando ambos albinos estuvieron en la puerta recién arrancó la limo, Ryou se despedía con la mano a sabiendas de que sus mejores amigos lo veían por la ventanas, Bakura se adentró más en la casa. Cuando el auto se fue Ryou cerró la puerta tranquilamente, se quitó los zapatos y la chaqueta como ya lo había hecho su yami y se recostó contra la puerta, se dejó caer lentamente hasta quedar sentado en el piso ─bufff ─soltó un pequeño suspiro ─mañana seguro que me dolerán las piernas, hace mucho que no patinaba y creo que me eh pasado un poco ─susurró ─buaaaaa ─se estiró bostezando ─pero ha sido muy divertido ─terminó con una sonrisa.

─Ven ─Bakura se inclinó frente a él y le enrolló los brazos en la cintura para levantarlo.

─Jejeje gracias Kura ─le dijo con cariño acurrucándose mimosamente contra su cálido pecho.

─ ¿Estás cansado pequeño? ─preguntó intentando no sonar decepcionado.

Esta vez Ryou rio de manera más traviesa ─quizá un poco… pero estoy bien y ahora… hay algo más importante que precisa mi atención ¿no es verdad? ─preguntó con coquetería. Ágilmente se zafó de los brazos del mayor y fue hasta la escalera, Bakura lo siguió con una sonrisa ladina, respondiendo con un asentimiento ─Has dicho que me he portado mal ¿no, Kura?

─Así es mi pequeño, has sido demasiado travieso… y eso trae consecuencias hikari ─le dijo tomándolo del mentón con una mano.

Ryou se puso en puntillas para darle un beso en la mejilla cuando el mayor le soltó la cara.

─En ese caso… tendrás que pillarme ─saltó un par de escalones y puso sus manos alrededor de su sortija concentrándose en ella, logrando crear un peculiar brillo.

─ ¿Pero qué…? ─se quejó el mayor sintiendo su cuerpo entumecido.

─Por hoy… hare una última travesura ─le dijo guiñándole un ojo, había usado su sortija para inmovilizar temporalmente a su yami, era una de las pocas cosas que había aprendido a hacer al conectar continuamente su energía con la de su preciado artículo ─te espero arriba Kura, como dije… tendrás que pillarme ─le dijo juguetón sacándole la lengua.

─ ¿Eso es un reto hikari? ─dijo intentando luchar contra la parálisis.

─Quizá Kura ─dicho esto Ryou corrió escaleras arriba hasta su habitación, preparando algunas cosas en lo poco que duraba el efecto de su pequeña travesura.

A los dos minutos Bakura ya podía moverse libremente, con una perversa sonrisa ladeada plantada en su rostro subió las escaleras. Al llegar arriba notó que la puerta estaba cerrada, así que entró y la  volvió a cerrar tras de sí, notó que adentro estaba totalmente oscuro, movió su mano para encender las luces pero un impulso lo detuvo, no sabía lo que era pero le hizo caso.

─Ryou ─le llamó.

─Jejeje por aquí ─canturreó el joven, su voz se escuchó desde un costado de la habitación, Bakura se movió a ese lado pero no halló nada, incluso las cortinas estaban corridas impidiendo que la luz de la luna entrara por la ventana y sus ojos no se acostumbraban a la penumbra.

─Estoy aquí Kura ─su voz ahora se escuchó del otro lado de la habitación, lo cual sorprendió mucho al mayor, no había escuchado movimiento alguno en el lugar, se dirigió hasta allá.

─ ¿Qué haces pequeño? ¿Por qué huyes de mí? ─preguntó agudizando el oído al volver a toparse con la nada, sin haber oído ni un solo paso.

─No huyo de ti Kura ─ahora se escuchó cerca de la cama ─solo estoy jugando jejeje.

─Estas muy travieso, voy a castigarte pequeño ─le dijo con voz picará e imponente el mayor avanzando hasta la puerta donde había oído la voz de su luz la última vez.

─Jejeje. En ese caso…creo que es suficiente, ya puedes encender la luz ─esta vez Bakura escucho como la voz de su yadonushi pasaba fugazmente a su lado y un pequeño roce de sus manos que lo hizo estremecer.

Bakura apretó el interruptor para encender las luces, encontró a Ryou de pie en medio de él y la cama, mirándolo con una sonrisita traviesa.

(Advertencia de Lemon   Advertencia de Lemon   Advertencia de Lemon   Advertencia de Lemon   Advertencia de Lemon   )

Bakura se le acerco a paso lento, sus ojos brillaban con diversión y lujuria, parecía un cazador acechando a su presa. Se detuvo a dos pasos del menor, entonces  fue Ryou quien acortó la distancia, con picardía le paso los brazos por el cuello apegándose a él.

Bakura lo apresó por las caderas ─Pequeño travieso. Te enseñaré que de mí no puedes huir ─aseguró.

Ryou lo miró impaciente ─Hazlo Kura, tómame ─le susurró sugerente al oído.        

Bakura lo arrojó a la cama sin mucha delicadeza, a Ryou le encantaba ese brusco trato, su cuerpo empezaba a calentarse. El menor se revolvió entre las sabanas y estiró sus brazos hacia el mayor, demandando su compañía.

Ágilmente el mayor se posicionó sobre él y lo tomó de nuevo por las caderas con fuerza antes de plantarle un fiero beso, Ryou pasó sus brazos por la espalda de su yami aferrándose a sus hombros, respondiendo sumisamente al furioso beso lo cual no hizo más que excitar a Bakura.

Ryou empezó a mover sus manos alzando la camisa del mayor, Bakura se separó de su boca unos escasos cinco segundos para quitarse la prenda por completo antes de volver a inmiscuir su lengua en la dulce boca de su par. La lengua de Ryou se movía según imponía su yami mientras sus manos acariciaban cada centímetro y cada músculo de la piel recién expuesta.

Pequeños jadeos empezaban a salir de la garganta del menor, disfrutando de la situación. Bakura separó un poco sus labios para permitirles tomar aire, aun así sus lenguas seguían jugueteando entre sí, Bakura levantó un poco la camisa del menor, luego desabrocho los dos botones del pantalón y bajo la pequeña cremallera antes de hacer lo mismo con su propio pantalón. Finalmente volvió a separar sus bocas para sacar la camisa de su luz.

Ryou lo vio con ojos brillantes, respiraba agitadamente y sus mejillas estaban levemente sonrojadas. A los ojos de Bakura su niño se veía sumamente hermoso, sensual e inocente y solo podía pensar en que esa noche no acabara. para no tener que irse al día siguiente.

─Te quiero ─soltó Bakura sin pensarlo.

Y la reacción fue inmediata ─ ¡Oh Kura yo también te quiero! ¡Mucho! ─Ryou se lanzó contra él para besarlo con todo el cariño que le tenía, hizo algo de presión intentando voltearlo y recostarse sobre él, pero Bakura se opuso e hizo más presión que él para mantenerse ─ ¿Bakura? ─preguntó extrañado.

─No, no yadonushi ─canturreó negando con un dedo ─te has portado mal pequeño ─dijo con malicia.

─Kuuuuuraaaaaa ─se quejó el menor pero luego hizo un puchero, giró su cuerpo para quedarse bocabajo, de espaldas a su yami, se levantó un poco apegándose a él, restregándose contra su cuerpo ─vamos, castígame ven ─avanzó unos pasos a gatas alejándose de él, pero enseguida Bakura lo jaló por las caderas, atrayéndolo hacia sí embistiendo, aún por encima de la ropa ambos lo sintieron delicioso, haciéndolos vibrar por dentro.

¡Ahhhhhhh! ─como si fuera ensayado, ambos echaron la cabeza hacia atrás abriendo la boca para dejar escapar un gemido de placer al mismo tiempo.

─Oh, ten por seguro que voy a castigarte mi pequeño… voy a tomarte tan fuerte que mañana no vas a querer salir de la cama Ry-ou ─enfatizó su nombre con voz traviesa y sugerente.

Bakura le dio nuevamente la vuelta a Ryou, le quito el resto de la ropa lo mismo que la suya y luego le tomó ambas manos con una sola y con la camiseta que había dejado cerca le amarró las muñecas, firme pero sin hacerle daño, terminando de amarrarlo al cabezal de la cama.

─ ¿Eh? ¿Pero qué haces? ─se quejó el menor intentando soltarse las manos.

─Te vas a quedar así mi pequeño ─murmuró en su oído antes de lamerlo lenta y provocativamente, haciéndolo cerrar los ojos con fuerza y jadear. Luego de eso bajo hasta su cuello en un, tortuosamente lento, camino de besos. Ryou movió su cabeza para exponer más el cuello gimiendo en voz baja, sus mejillas estaban coloradas y su boca abierta, de vez en cuando se arqueaba levemente al sentir la lengua de su yami atormentarlo y como su boca y dientes dejaban lo que mañana serian notorias marcas en su blanca piel.

─Ahhh Kura ─sollozaba el menor intentando forzar el agarre de sus manos sin conseguir nada, por lo que siguió revolviéndose.

Bakura soltó un gemido tras los constantes roces del miembro de su luz contra el suyo, su boca siguió camino abajo llegando su pecho donde su lengua empezó a torturar sus pezones, mientras una de sus manos bajaba a masturbarlo, haciendo a Ryou gemir con fuerza dado el lento ritmo del movimiento de su mano.

─Moooo Bakuraaaa… ¡Ahhhh! No me… n-no me tortures así… ¡Ahhhhh! ¡Kura!

─Te lo mereces pequeño… eso pasa cuando me desafías encanto ─le dijo con malicia.

Bakura aumentó el movimiento de su mano logrando que el menor moviera desesperadamente su cara a los lados. Cuando sintió ese conocido cosquilleo en su vientre sus caderas empezaron a bombear contra la mano del mayor, quien en respuesta le cerco las caderas con sus piernas para detenerlo y cuando lo sintió tensarse detuvo su mano.

Agitado y frustrado por haber sido cortado justo antes de llegar al clímax, Ryou levanto cuanto pudo el cuerpo ─ ¡Bakura! ─se quejó en un gemido de inconformidad.

En respuesta el mayor solo le da una -muy- perversa sonrisa ladina que logra que un potente estremecimiento se apodere del menor. Entonces Bakura retoma el movimiento, Ryou se estremeció con fuerza al sentirse más sensible, Bakura retomo el rápido movimiento de su mano provocando fuertes gemidos del menor, pero una vez más el mayor se detuvo justo antes de que su luz se corriera.

─ ¡Bakura! ─volvió a quejarse esta vez más fuerte. Apretaba los ojos con fuerza, sentía hervir su interior y las débiles contracciones en su entrada. Se estremeció con fuerza cuando su yami retomo su movimiento por tercera vez, ya no le importaba si le dejaba o no correrse, solo quería sentirlo en su interior embistiéndolo con fuerza como le había amenazado ─ ¡Por favor!

─ ¿Qué pasa pequeño? ─murmuró cínicamente ─ ¿me deseas Ryou? ─le murmuró al oído parando una vez más el movimiento de su mano al sentirlo tensarse. El menor asintió y Bakura llevo su mano libre a la entrada del menor apenas haciendo círculos en alrededor ─dímelo yadonushi, quiero escucharte gritar encanto.

─Si Bakura ¡Te deseo! ¡Te necesito! ¡Por favor!

Bakura se inclinó lamiendo el borde de su oreja ─y me vas a tener hikari ─le murmuró.

Se movió para ponerse en medio de sus piernas, dio un suave mordisco al lado del tatuaje del menor antes de tomarle ambas piernas y las alzarlas por sobre sus hombros, acomodándose para penetrarlo.

─Por favor, suéltame, quiero abrazarte.

─Todavía no hikari… es más ─tomo la camiseta de su luz que también había dejado cerca y se la puso sobre en la cara tapándole únicamente los ojos.

─ ¡No! ¿Qué haces? ─se quejó revolviéndose con fuerza, pero solo consiguió que Bakura apretara un poco más el agarre de sus manos.

─Así, mi niño, lo sentirás más intenso ─le dijo antes de besarlo con fiereza.

Justo después se introdujo en él de un solo movimiento haciéndolo gritar con fuerza, gracias a las sesiones del día anterior de esa misma mañana no le dolía demasiado, pero aun así el movimiento había sido muy brusco y dolía un poco. Contrario a lo esperado Ryou se sintió encantado con la brusquedad del mayor por lo que empezó a gemir alto de deleite revolviéndose intentando moverse lo más posible contra él.

─ ¿Estas bien? ─preguntó preocupado el mayor luego de soltar un rugido de placer, pensó que quizás había sido demasiado brusco con su luz y en verdad no deseaba lastimarlo.

─No te preocupes Kura… me ha gustado ─dijo entre gemidos.

─Mi hermoso niño ─repartió uno dulces besos en sus mejillas y cuello ─me encantas, eres perfecto hikari no tenshi.

Los ojos del menor se abrieron como platos -por debajo de la tela- al escuchar la forma en que le llamo ─Kura ─ronroneó mimosamente moviendo el rostro para intentar besarlo. Bakura no se hizo del rogar y tomo su boca un fiero beso enrollando sus lenguas en una antigua danza por la supremacía que Bakura ganaba y Ryou se rendía sumisamente a su dominancia.

Bakura empezó a moverse con fuerza contra él haciéndolos gritar a ambos de placer.

─Ahhhh Ahhhh ¡Kura, Kura! ¡Te quiero!

─Yo ¡Ahhhh! También yadonushi… ¡Me encantas pequeño! ─gritó lo último al sentir al menor contraer los músculos de su entrada a su alrededor.           

Luego de unos segundos así donde lo único que se escuchaban eran sus gemidos de angustiante placer Bakura quiso intentar algo nuevo, le puso una mano a Ryou en su trasero desnudo y lo manoseó con suavidad acariciándolo en círculos con la mano abierta. De pronto su mano ya no está ahí… y entonces le da una palmada.

─¡Ahhhhhhhh!─ Ryou abrió los ojos de golpe en respuesta al leve ardor e intenoa revolverse, pero él lo sujetó por las caderas para impedirlo. Volvió a acariciarle donde le había pegado y Ryou sintió que le cambiado la respiración: ahora era mucho más fuerte y agitada. Le pega otra vez, y otra, rápido, seguido. ¡RA Bendito! Eso realmente se sentía muy bien.

─ ¿te gusta pequeño? ─preguntó sin dejar de embestirlo.

─ ¡Sí! por favor, sigue –suplicó fuera de sí, el hecho de sentir el impacto de su mano, teniéndolo en su interior  era un nuevo nivel de placer.

Y Bakura no iba a negárselo de ninguna forma, siguió impactando su mano de manera suave pero firme en los, ahora colorados, cachetes del sensual trasero de su luz, Ryou notó que no lo golpeaba en el mismo lugar, si no que extendía la sensación por toda la zona. Mientras no lo golpeara muy duró Ryou no iba a quejarse de ninguna manera, se sentía realmente bien… bueno, podía quejarse de sus amarres, pero Bakura tenía razón en cuanto a que, con los ojos cubiertos, todo se sentía más intenso.

─ ¡Ryou! ¡ahhhh, argggggg! Yadonushi… ─rugió Bakura al sentirlo apretarlo una vez más.

─ ¡Ahhh Mmmmmm Kura! No… no puedo más ─gimió al sentir nuevamente el intensó cosquilleo en su vientre bajo, pero esta vez era más fuerte, consecuencia de la anterior ‘tortura’ de su yami.

─ ¡Arggggg! Yo tampoco… córrete conmigo hikari ─le murmuró al oído con su ronca y sensual voz.

Bakura se empujó con más fuerza contra su luz, un par de fuertes embistes más y…

─ ¡Ahhhhh Kura/Ryou! ─gritaron al unísono al llegar al orgasmo, sintiendo la cara de Bakura a un costado suyo Ryou se estiro un poco alcanzando a morder el cuello de su yami con fuerza, siendo presa del orgasmo más intenso que pudiera recordar hasta ahora.

Bakura salió del interior de su luz con suavidad, parte de su esencia se escurrió entre sus muslos. Le quitarle la tela de los ojos, así como liberar sus manos. Ryou, aun un poco aturdido movió levemente en círculos sus muñecas, sintiéndolas ligeramente entumecidas. Aun respirando de forma irregular Bakura se recostó a medias en el pecho de su luz

Ryou lo abrazo inmediatamente ─has sido muy malo, mira que atarme así… quería abrazarte ─se quejó el menor.

─Te dije que iba a castigarte pequeño ─de pronto el mayor pareció recordar algo, ladeó el cuerpo de Ryou de la cadera para abajo y bajo a dejar suaves besos en sus glúteos ─ ¿dime, eh sido muy brusco? ─preguntó preocupado al ver tan enrojecida la blanca y tersa piel.

─Para nada… en realidad, me ha gustado ─dijo con timidez.

─Me alegra ─lo dejo con suavidad como antes y dio unos suaves besos y mordisco alrededor del tatuaje antes de volver y tomar su boca ─ ¿ya estas cansando pequeño? ─Ryou ladeó un poco la cabeza sin responder ─porque apenas estamos empezando ─declaró con una sonrisa ladeada.

El menor no pudo evitar soltar una risilla ─eres insaciable ─le acusó con diversión pasándole los brazos por el cuello.

─Solo de ti, encanto ─respondió besando su cuello.

─Mmmm, en realidad aun no tengo sueño ─jugó Ryou.

─Me parece bien ─apresó el lóbulo de su oreja entre sus dientes antes de susurrar ─porque esta noche, no te dejaré dormir pequeño.

Ryou le dio una bella sonrisa antes de recostarse sobre su yami ─ ¿si? y en que vamos a ocuparnos ─preguntó travieso, rozándose contra el mayor.

─Oh, se me ocurren un par cosas hikari ─Ryou empezó a repartir suaves besos por la cara de su yami, pero Bakura lo apresó con fuerza ─no, no. Esta noche mando yo, yadonushi ─lo movió hacia abajo rozándose tentativamente contra su entrada, Ryou gimió en protesta a su, ahora limitado, movimiento ─te advertí que tu mal comportamiento traería consecuencias pequeño… no hiciste caso y ahora debes asumirlo ─lo penetro de golpe una vez más.

─ ¡Kuraaaaaaaa!

─Eso es pequeño, grita. Voy a hacerte enloquecer del más puro placer. 

─ ¡Ahhhhhhhh! ¡Mmmmmmm!

Notas finales:

Continuará… xD

Bueno, bueno, bueno… ¿Qué quieren que diga? Estoy Onn fire con los albinos… literalmente… pero bueno, creo que con esto Bakura ya se puede estar a gusto un ratito… los siguientes en la lista son los egipcios, a ver si Marik me deja de joder tanto ¬¬.
YM:¬¬
Esperen el siguiente cap más o menor para el miércoles o así antes del de San Valentín. Estoy aprovechando que los jueves son mis días sin clase en mi nuevo horario, que hoy hay ‘guacherna’ (un gran y alborotoso desfile pal que no sepa del carnaval de barranquilla) por lo que no hay clases… y que pa mi única clase de mañana sábado (a las 10 am) mi profesora no ah podido regresar de Australia a tiempo, así que, tiempo libre for de win xD

Saludos a todos! Os quiero montones!
Tengo que decir que ni yo misma me creo que estemos llegado más o menos a 1.000 lecturas por capitulo *-* ¡Sois Enormes!

Pd. Si los moderadores de la página leen esto, les pido por favor que en la lista de los personajes de Yu-Gi-Oh! Incluyan a Yami Bakura y a Yami Marik!!
Únanse a la causa y publiquen la petición en sus historias, entre más seamos, más posibilidades tendremos de ser oídos… o leídos xD

Bueno, creo que eso es todo por ahora.

Aquí estoy porque eh venido
Porque eh venido, aquí estoy
Y si no le gusta mi canto
Como eh venido. Me voy!

Nos leemos


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