Detective Haruna Yamamoto a tu Servicio
Capítulo II: El Primer Misterio
-Se lo encontraron en su camarote- le dijo el policía a Haruna mientras llegaba a la escena con Tomoko detrás de ella.
-¿Cómo paso todo?- pregunto la detective.
-No hemos examinado nada, esperábamos a que llegaran- le respondió el mismo policía.
Entraron al camarote de la víctima. – ¿Me estás diciendo que uno de los mejores hombres del mundo, bueno probablemente el mejor, está muerto, en su camerino?-.
-Supongo que si-.
-Lindo- le respondió Haruna con una sonrisa en la boca y un entusiasmo evidente, ya estaba a punto de acercarse para examinar el cuerpo cuando su compañera la detuvo por el hombro.
– ¡No puedes decir que un buen hombro murió y luego decir lindo en la misma oración!- le dijo de manera que el policía no escuchara.
-¿Por qué no? Se ve que este va a ser un muy buen asesinato-.
-¡Aun así! Es de esas cosas que no puedes decir con gente alrededor- le resalto.
-¡Oh! Ya veo…- miro al cadáver recostado contra su escritorio –Pero solo mira ese cadáver- le dijo volteando a ver a Tomoko con sus ojos de perrito –esta tan bonito, sin manchas de sangre, por ahora digo que o fue un tiro a la cabeza o envenenamiento-.
A continuación saco su cámara para tomar fotos de la escena, vio la parte de atrás de su cabeza y dijo –De acuerdo olvida la idea del disparo- le dio la cámara a Tomoko y levanto delicadamente la cara de la víctima, -No, no fue un arma-.
-La victima este día es el millonario/buen hombre Roderich Bottlom- dijo la pelirroja, volteo a ver la copa de vino que tenía en su mano, se acercó a olerlo.
-¿No es una psicópata verdad?- pregunto el policía con voz baja.
-No- le respondió Tomoko, luego vio como Haruna se acercaba para oler la copa de vino –Aunque a veces tiene sus momentos-.
-Entonces, el primer misterio es porque en su camerino decidió tomar un vino en su que estaba claramente envenenado- Haruna soltó una pequeña risita y volteo a ver a sus compañeros.
-¿Acaso es obvio?- pregunto Watami.
-Transparente- señaló –se ven las burbujas del veneno, y este hombre si no me equivoco debería tener un amplio conocimiento sobre venenos. El veneno que el consumió fue metanol, no es muy letal al ser mezclado con alcohol, no a menos que sea en grandes cantidades, y si se le pone una gran cantidad entonces se mostraría, obviamente al fondo de la copa se ve algo extraño que no te encuentras al tomar vino, por lo que sabía que estaba envenenado, y si no me equivoco unos pasos atrás de mi debería haber unos pies talla 24*- dijo apuntando hacia la alfombra.
-¡Fascinante!- exclamo Tomoko –Nunca te había visto en acción-.
-Eso no es nada todavía- dijo Haruna acercándose para examinar las pisadas –les recomiendo que no se acerquen más, tal vez pisen alguna de las huellas que dejo el sospechoso- indico la detective.
-¿No ha salido nadie del barco oficial?- pregunto la compañera.
-No que yo sepa, el capitán dijo que una de las mucamas lo encontró y fue directamente a avisarle a él, de ahí el capitán nos llamó, le indicamos que cerrara la salida cuando llegara al puerto, puede que alguien haya escapado aun así, es una caída de diez metros hacia el agua-.
-¿Puede ir a revisar?- le pidió Tomoko.
-Si, por supuesto- dijo saliendo de la habitación.
-Desafortunadamente las huellas no revelan mucho, al parecer solo han estado aquí en el barco, diría que son nuevos, esto fue planeado minuciosamente. Lo extraño es que un hombre como el, un hombre que solo da, da y da, sea asesinado…- eso ultimo pareció darle una idea a Haruna.
-¿Pasa algo?- pregunto.
Haruna no respondió, levanto la copa de vino y se encontró con una nota pequeña, la desdoblo y la leyó, el que no le diera respuesta hizo que no se quedara muy tranquila.
-¿Haru?-.
-No pasa nada, al parecer el asesino pensó que sería divertido dejarle la cuenta- dijo agitando el papelito.
Ambas rieron un poco –No podemos reírnos en una escena del crimen-.
-Lo sé “Watson”- dijo Haruna antes de ponerse a reír con Tomoko.
-No sigas con tus… cosas- dijo Tomoko cuando finalmente pudo dejar de reír.
-¿Cosas de Sherlock?- pregunto Haruna para que su compañera se pusiera a reír.
-¡Ya! Deja de ponerme a reír en plena escena del crimen- dijo dándole un pequeño golpe.
-¿Hay algo malo con nosotras?- pregunto Haruna.
-Mejor dicho que NO está mal con nosotras- rieron un poco, y después se pusieron a trabajar.
Y después de un largo día de trabajo aún no habían conseguido atrapar al culpable, pero Haruna sabía exactamente quién era, pero no donde estaba, y en la noche, en la mansión, ella ya había ido a su habitación, cansada se cambió sus ropas y se preparó para dormir, no sin antes llamar a su primo.
-Dai-chan- dijo acostada en su cama.
-Esto debe ser importante- le dijo en un tono medio molesto.
-Alguien está detrás de mí- no se escuchó del otro lado de la línea otra cosa por un momento.
-Intentare ir lo más rápido posible, pero ahora estoy en un asunto, importante-.
-De acuerdo, hasta entonces- dijo Haruna luego colgando.
-Flashback-
-¿Todavía estás enojado?- pregunto Haruna.
-¿Cómo no habría de estarlo? Arruinaste mi vida-
-Aun no veo como-.
-No estaría viviendo en un pequeño apartamento-.
-Cierto- Haruna se levantó de la mesa y se acercó hacia él. –Entonces, quieres tu venganza- le pregunto acercándose con intención de rozarle los labios –Hagamos un juego, ganas tu si yo muero y no publico mi artículo de ti, yo gano si tu mueres y publico mi artículo-.
Asintió con la cabeza y con esa última respuesta Haruna salió del apartamento.
-FIN DEL FLASHBACK-
A continuación se escuchó como tocaban la puerta levemente –Haruna- se escuchó una voz amable y suave del otro lado de la puerta.
-Pasa- dijo Haruna sin levantarse de su cama.
Se abrió la puerta para revelar a Tomoko lista para dormir con un camisón y su cabello trenzado. Cerro la puerta tras de ella y se recargo en ella.
-¿Te sientes mal por el sr. Bottlom?- pregunto Haruna todavía acostada en su cama.
-Sí, no puedo creer que alguien quisiera matar a un hombre como el- dijo recargada en la puerta todavía.
Haruna se puso en el lado que estaba pegado hacia la pared dejándole espacio a Tomoko, esta sonrió y acostó a lado de su compañera –Aparte de que Seiya y Shun están siendo un poco ruidosos- dijo teniendo a Haruna enfrente de ella, ambas soltaron una pequeña risita.
-Pregunta ¿Qué tipo de ruidosos?- pregunto Haruna haciendo que su compañera se pusiera a reír acompañada de ella – ¿Ruidosos habladores o movedores de muebles?- esto último hizo que Watami se riera a carcajadas haciendo que se le humedecieran los ojos.
-Un poco de ambos- finalmente pudo contestar.
Ambas siguieron riendo, ninguna de las dos sugería ir a espiar a los dos muchachos, porque si estaban moviendo muebles y hablando al mismo tiempo quería decir que era una ocasión importante para ellos.
Después de hablar por un buen rato se fueron a dormir, o al menos Watami, muchas veces ella hacia eso, si se sentía perturbada por un caso entonces iba con Haruna para hablar un poco antes de ir a dormir, ya que a pesar de que Seiya y Shun fueran sus vecinos normalmente estaban “ocupados”. Pero antes nada más se quedaba a charlar y luego se iba a dormir, empezó a quedarse con Haruna cuando se habían quedado hablando hasta las dos y ambas estaban cansadas así que la pelirroja le ofreció que se quedara en su cuarto, y las últimas veces había pasado de esta manera, y a pesar de que ella no podía dormir tan bien como normalmente lo hacía le gustaba tener a Tomoko durmiendo pacíficamente, ya que eso significaba que estaba a salvo y eso era lo que más le importaba a Haruna.
Al día siguiente Tomoko bajo las escaleras para solo encontrar a Seiya y a Shun desayunando, ambos con el cabello muy alborotado. Miro a su alrededor para ver si Haruna no estaba ahí y al no verla les pregunto si la habían visto.
-No, supusimos que aún estaba dormida- dijo Seiya respondiendo por ambos.
-No esa arriba ni el baño está ocupado- dijo Tomoko.
Shun hizo una pausa en comer por un momento, ambos lo voltearon a ver sospechosos –Bueno… puede que yo tenga la respuesta- dijo Shun.
Ambos se miraron un segundo y luego dirigieron su mirada a Shun –Vagamente recuerdo que en la noche me levante para ir al baño y escuche unos pasos con dirección para las escaleras-.
-No otra vez- dijo Tomoko dijo subiendo las escaleras.
-Está en problemas- dijo Seiya volviendo a su comida.
-Sí, lo sé, me pregunto a donde habrá ido- dijo Shun.
-Estoy casi segura de que cuando Tomoko la encuentre la va a traer por la oreja-.
-No lo dudo- respondió.
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