Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Colores del Amor por LunaPieces

[Reviews - 47]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Pareja principal: Kid x Law

Parejas secundarias: Marco x Ace, Sanji x Zoro y Doflamingo x Crocodrile

Género: Romance/Angst

Autor: Manato

Traducción japonés-inglés: Amaitsumi

Corrección inglés: Beposbutt

Traducción inglés-español: LunaPieces

Corrección español: LunaPieces

Algunas palabras japonesas permanecen intactas para preservar el sabor de la historia. Las traducciones respectivas serán dadas al final de la página.

Paso a dejar el tercer capi :3

 

A mi cliente actual, le gustaba denigrarme. Su actitud opresiva desde el momento en el que había pisado mi suite, era una clara indicación de ello. Era fácil decir que era del tipo de hombre que se deleitaba al infringir dolor a alguien lo suficientemente desafortunado y de un estatus menor que él. Su orden para mí era hablarle como un esclavo lo haría a su maestro y no dudaba en golpearme siempre que olvidaba desobedecerlo.

—Hah, no pensé que hubiera un hombre que se divirtiera siendo subyugado de esta forma, pero pareces divertirte, ¿eh? Así que, ¿deberíamos seguir con esto? Ya que eres un hombre, no debe haber ningún problema si te follo duro, ¿cierto?

—….Mmm, por favor. Úseme como guste…

—Eso está bien~. No. Creo que tendré que follarte primero con este juguete de aquí.

—… ¿Eh? ¡Ahh! ¡No, ah, ahh!

El hombre pretendió no escucharme mientras movía el vibrador anal dentro de mí. Las vibraciones llegaron a mi próstata y me corrí pronto.

—¡Oye, oye! ¡¿Cómo te atreves a correrte antes que tu amo?! ¡Zorra!

—¡Ahh, ah, lo siento! ¡Las vibraciones eran muy fuertes, ahh! ¡Por favor, deténgase!

—¿Por qué debería? ¡De hecho, voy a aumentar la fuerza y será mejor que no te vengas esta vez!

Miró el anillo en la base de mi pene, evitando por la fuerza alguna descarga futura antes de poner el vibrador en una modalidad más fuerte y empujarlo aún más adentro.

—¡Ahh! ¡Haa, por favor, sáquelo! ¡No puedo! ¡Ahh!

La despiadada estimulación a mi próstata resultó ser demasiada. Mi cuerpo se sacudió mientras era forzado a soportar varios orgasmos en seco. Estaba a punto de perder la conciencia cuando finalmente liberó el anillo.

Aliviado, me desplomé en el futón, relajándome mientras el hombre procedía a follarme y vació su carga dentro de mi cuerpo cuando finalmente terminó.

Si yo fuera una prostituta, este acto habría estado prohibido. De hecho, creo que ésa es la principal razón por la que muchos prefieren a los hombres.

El hombre desapareció en el baño para lavarse, dejando mi agotado cuerpo, dispuesto en el futón. Tiempo después, salió del baño dirigiéndome una mirada de desprecio.

—…¡Oye! ¡¿Por qué todavía estás ahí?! Tu cliente se retira.

—Ah… ¡Lo siento...!

Me apresuré a sentarme y el movimiento repentino hizo que el semen del tipo escurriera de mi entrada hacia mis muslos.

Viendo eso, el hombre chasqueó la lengua en señal de disgusto y me abofeteó.

—¡¿Cómo te atreves a desperdiciar el semen que te he dado, zorra?!

Empujándome sobre mis rodillas y abriendo mis piernas, tomó el vibrador anal y una vez más, lo empujó con fuerza hacia adentro.

—¡Ahh! ¡Ahh. Duele…!

—Necesitan enseñarte algunos modales. ¡Apresúrate y discúlpate!

—¡Uuh…! ¡Lo siento…!

—¡No!

—¡Wah! ¡Ahh… ¿por qué?!

El hombre movió el vibrador de nuevo y las fuertes vibraciones se expandieron por mi cuerpo mientras mis caderas se resistían sin poder hacer nada. Sin inmutarse, el hombre continuó su amenazador embiste.

—¡Deberías arrodillarte ante mí! ¡¿Acaso no eres un estúpido, zorrita?! ¡¿Dónde está tu sinceridad?!

Con un pie, estampó mi cabeza sobre el piso, demandando una disculpa total. Incapaz de escapar, me puse en posición obedientemente, inclinándome delante de él con mi cara contra el suelo y el vibrador sumergido dentro de mi expuesto trasero.

—¡Me disculpo por desperdiciar el esperma… que el cliente me obsequió...! ¡Uhh…! ¡El cliente ha pasado su tiempo con una zorra como yo...Ahh! ¡Debí haberlo sabido m-mejor, lo s-siento…!

El hombre se agachó empuñando mi cabello en su mano y me obligó a encararlo, incluso con el dolor nublando mi cerebro, sabía que estaba esperando por algo más. Me apresuré a recitar las palabras estándar que me sabía de memoria.

—…¡Uuh! ¡¡Por favor… venga de nuevo… a follarme...!!

—Debiste haber hecho esto la primera vez. Regresaré para follarte.

Como parte del regalo, me escupió en la cara y abandonó la habitación.

Cuidadosamente saqué el vibrador de mi interior y me arrastré hacia el baño para lavarme, dejando que el agua caliente limpiara el semen de aquel hombre de mi cuerpo.

Maldije mi desventura silenciosamente. Si sólo no tuviera que entretener a clientes como él con regularidad.

Por fin limpio, regresé al cuarto principal y absorto, me puse a limpiar el desastre, dejando que mi cuerpo realizara las acciones familiares mientras dejaba la mente en blanco.

 

………………...

 

—¡En serio, tú atraes a todos los pervertidos! Como las bestias de gafas, los masoquistas que quieren que actúes como su reina, los que te tratan como una mascota, los hombres viejos que insisten en llamarte “Law-chan”... Oh, y aquellos que te fuerzan a vestir como mujer… ¿Por qué les gustas tanto a todos esos pervertidos?

—No es algo de lo que esté orgulloso… además, las verdaderas bestias no usan lentes.

—¿Oh? ¿En serio?

—Da igual, ¿no todos ellos tienen un fetiche que quieren que hagas?

—¡Claro que no! No aceptaré a ningún cliente con “pedidos especiales”. Y en primer lugar, no es que tenga muchos clientes.

El hombre con el que estaba conversando, era Roronoa Zoro, un compañero como yo y Ace.

Había escuchado que era un espadachín habilidoso y tenía un empleo como guardaespaldas antes de que viniera a trabajar en los suburbios de placer. Sin embargo, sufrió una grave herida que le impidió continuar en esa posición. Incapaz de recuperar la pérdida y enfrentando gastos médicos espantosos, Zoro-ya había sido forzado  por su compañía a vender su cuerpo aquí.

Zoro-ya era alto, pero a diferencia de mí, tenía más masa muscular constituida con cabello color verde musgo y una expresión necia. Definitivamente parecía el tipo de hombre que jugaría el rol dominante en el sexo y era evidente ya que sus clientes eran mujeres.

—¿Así que estabas hablándome de este tipo Eustass? El que vino sólo para hablar contigo.

—Sí…. dijo que quería regresar para hablar.

—Qué pervertido— murmuró Zoro en voz baja.

—¿Qué?

—De repente sentí una tercera presencia detrás de nosotros.

—En serio, Law. Atraes a los clientes más extraños.

—¿Pierna negra-ya?

—¿Qué? ¡¿De dónde saliste?! — Exclamó Zoro en shock.

—¿Hmm? Ya terminé por hoy en las cocinas, así que vine aquí para ver a mi maldito marimo-chan <3

—Asqueroso.

—¿Qué? ¡No seas tan malo!

El que se había unido a nuestra conversación era el chef de los suburbios de placer, Sanji. Siempre vestido en traje, era el que preparaba todas las comidas para nosotros los servidores y tenía la maña de aparecer en lugares inesperados, el hombre era como un fantasma.

Un alto y rubio, era un fumador compulsivo, pero era uno de los pocos que se preocupaba por el bienestar de nosotros los prostitutos masculinos. Y también era…

—Hey Zoro, estás fuera de servicio  hoy, ¿no? ¿Deberíamos hacerlo~?

—¿Qué diablos, maldito cocinero? ¡Law está aquí! ¡Déjame ir!

—Bueno, podemos hacerlo después de que Law se vaya…

Y pensar que yo estaba ahí en primer lugar. Era un fastidio de hombre… resoplé indignado de sus travesuras.

Sí, Zoro-ya y Pierna Negra-ya eran amantes. De hecho, los suburbios de placer prohibían el romance entre sus trabajadores, pero parecía que Pierna Negra-ya había logrado convencer al propietario de otro modo. No podía imaginar cómo lo había hecho, pero creía que probablemente había perdido sus salarios esperanzado en poder comprar a Zoro-ya y liberarlo de su esclavitud algún día.

Pierna Negra-ya definitivamente era la “persona correcta” para Zoro-ya. Incluso yo podía ver que ellos estaban verdaderamente enamorados. Sin embargo, el concepto de amor permanecía tan elusivo como siempre para mí; algo que existía en un mundo muy lejano que no podía alcanzar.

—Así que, ¿qué piensas de Eustass-ya, Law?

—¿Qué pienso…?

La pregunta de Pierna Negra me desconcertó. Honestamente, no lo sabía, ya que Eustass-ya no tenía deseo alguno por mi cuerpo.

Sí, estaba contento de que quisiera venir a verme, pero cada vez que pensaba en las palabras que me había dicho, mi corazón parecía estrujarme, dejándome sin aliento.

Estaba confundido… si alguien me hubiera preguntado si quería verlo también, no sería capaz de dar una respuesta certera.

—No lo sé… pero me divierto mucho con él...—confesé.

Ambos intercambiaron miradas, antes de poner una mano en mis hombros.

—¿Qué?

—Buena suerte.

—…¡¿Eh?!

—Lo entenderás cuando venga a verte de nuevo…

—De todas formas no te sobre esfuerces. Tómalo con calma, piensa las cosas.

—...Bien. Gracias.

No entendía por qué los dos me deseaban buena suerte, pero sabía que ellos sólo veían por mí.

Y esperaba entenderlo cuando Eustass-ya regresara a verme.

Un pensamiento impreciso surgió en mi cabeza mientras recordaba las palabras de Eustass-ya una vez más, pero lo apagué antes de que tomara forma. Era un prostituto y siempre había sido uno. No había nada que pudiera hacer para cambiar eso, nada que pudiera decir en respuesta a esas palabras, así que era mejor no pensar en ello.

Si lo hacía, un dolor inexplicable y persistente en lo profundo de mi mente podría abrumarme y asesinarme con él.

 

……………….

 

—Me pregunto si lo sabrá.

—Bueno, él ha pasado por muchas cosas. Sólo espero que sea feliz algún día…

—De cualquier forma… ¿ese tal Eustass entiende siquiera el concepto de “prostituto”? Law no es una hermosa muñeca para que la contemple…

—Lo siento, Zoro. Sé que te sientes como él, pero te amo, así que espera por mí, sólo un poco más.

—Te esperaré siempre que me necesites. Puedo hacerlo.

 

……..

 

Notas finales:

Futón: Cama estilo japonesa.

 Todos los comentarios serán traducidos a la autora del fic :3

Nos leemos~


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).