Tu y yo…Y la familia también.
Capítulo 2:
Familia Uzumaki
Por qué mierda acepto entrar? Por qué no huyo cuando tenía cargando a Naruto, antes de conocer ese calco macabro de su familia?
Esas y más preguntas pasaban por la cabeza de Sasuke, mientras era fusilado en dardos de goma espuma por los mocosos sobrinos, primos y hasta hermanos de su dobe.
Después de saludar a la mitad de la mitad de la familia de Naruto, todos se prepararon para cenar en la mesa principal en el jardín de los Uzumaki. Pero, porqué en el jardín? Fácil, necesitaban el espacio de 6 mesas para todos, y eso no alcanzaba en la casa.
Ya en medio de muchos viejos, jóvenes y adultos, Sasuke y Naruto comían o eso trataban. El Uchiha en verdad se sentía incómodo con la prima de su novio, esa Karin Uzumaki parecía que quería comerlo con la mirada. Desde que llagaron a la casa, intentaba toquetearlo de una o mil formas.
Cosa que en verdad le asqueaba en demencia, ósea esa mujer casada de 35 años de edad y madre de 4 mocosos, lo quería como su amante y lo peor de todo es que se le entregaba descaradamente frente a su novio y su marido! Aunque no creía que Naruto se allá dado cuenta, ese dobe despistado es más tonto y inocente que nadie.
También estaba el venenoso de su cuñado Deidara, el hermano de su dobe, aunque se parecían un poco, eran totalmente lo contrario. Se la pasaba contando cosas vergüenzas de su novio sin fin. Que antes gordito, que le gustaba un tal “Muku” y demás cosas que jamás quiso saber en su vida.
Ahora tenía alguien más en su lista negra además de Itachi, ese tal “Muku” según le contaban, era muy toque ton y cariñoso con su novio antes que se fuera al instituto en España. Sin conocerlo, lo odiaba hasta en lo más profundo de su alma. Sabía que él fue quien le quito la virginidad a su rubio, pero el saber que alguien más estuvo a punto de hacerlo le enfurece en verdad.
Ahora todos ahí, comiendo mientras hablaba cosas de adultos frente a los menores como si fuera lo más normal del mundo. Que, esta familia también era pervertida como la suya?
–Y bien, Sasuke-kun. Cuando será el día donde mi bebe use vestido blanco-ttebane?
–Mama! –Naruto sabía que su madre saltaría con eso.
–Qué? Solo quiero morir sabiendo que me pequeño hijo está casado!
–La verdad señora Kushina, Naruto y yo no queremos ninguna unión por el momento–El varón esperaba que con eso este conforme, al menos no la cago como Naruto en su casa.
–Que, no es una relación seria? –La pelirroja de lentes pregunto con interés a eso, parecía que el macho escultural de su tonto primo tenía el camino libre.
–No, eso no es lo que quise-
–O es que el tonto de mi hermano no te satisfecho bien en la cama? –Los Uzumaki rieron antes el chiste venenoso de Deidara, molestando al rubio a su lado.
–Eso no puede ser-Dattebane! –Lo bueno que su suegra salió en defensa–Nosotros los Uzumaki somos una fiera en la cama–El uchiha le dio la razón con toda firmeza. Naruto puede ser muy inocente, pero bajo las sabanas era un pecador lujurioso que amaba el “Duro contra el muro” toda la noche. Salió de sus recuerdos nada sanos ente lo siguiente que dijo su querida suegra–No es culpa de Naruto que el soldadito de Sasuke no funcione muy bien.
Las risas se volvieron a escuchar, esta vez hasta los niños se reían de él y su novio trataba de ocultar su risa con las manos. Lo fulmino con la mirada sacándole la risa de golpe.
A un uchiha nunca jamás de los jamases le digas que su soldadote no sirve, ahora verán ellos lo que es su soldadito es capaz de hacer.
–Bueno–Trato de ocultar la sonrisa algo macabra en su rostro–No sé si 28 centímetros son suficientes para mi rubio–Esta vez se dirigió a doncel–Lo son, amor?
–QUE!? –Todas las mujeres y donceles en la mesa gritaron, algunas se desmayaron, otras comenzaron a criticar a sus esposos que no llegaban ni a la mitad de eso. Naruto escupió el agua que justo estaba tomando, mientras Sasuke dibujaba una sonrisa de satisfacción en su rostro.
–Ejem, podemos comenzar con el sorteo de una vez? –Esta vez hablo un varón pelirrojo, al parecer un tío del rubio llamado Nagato. El tener que escuchar a su esposa hablando del tamaño de pene, no le agrado en lo más mínimo.
–Sorteo? –Pregunto el azabache.
–¡Sí! El sorteo que se hace cada Halloween para ver quien será el llevara los niños a pedir dulces! –Otra pelirroja aclaro con alegría, en verdad que no soportaban a esos mocosos.
–Abuela Mito, no creo que Sasuke y yo participemos, es más nosotros ya nos vamos! –Naruto se levantó como resorte de la silla, tomando a Sasuke del brazo y tratar de alejarlo de la mesa. Pero le fue imposible ya que el Uchiha le gana en peso y el muy Teme parecía no entender que quería salvar su pellejo.
–Que!? Naruto, tú no te vas de aquí hasta que yo lo diga!
–Kushina, no creo que hay que ponernos histéricos–Le tranquilizo un viejo de largos cabellos blancos. Sasuke sabía que era Ashina, el abuelo del Dobe y ex esposo de mito. Según Naruto era el más tranquilo de la familia, por lo menos un normal en esta familia–Como Naruto no estuvo en los últimos años y no participo en los sorteos, él y Sasuke serán los que saquen a los niños para pedir dulces–Que era el más normar, maldito viejo hijo de…!
–¡No!
–¡Sí! –Protestaron en contra los Uzumaki.
–No! Jamás! Teme, corre! –Grito el doncel soltando al Varón Uchiha, comenzando a correr sin importarle dejar a su novio con su familia.
.°•°SasuNaru°•°.
–Teme, corre! –Imito con burla.
–Cállate, hijo de puta! Por tu culpa ahora estasmos en este lio! –Le señalo Naruto con puchero en su rostro.
Y es que cuando Naruto trato de huir, sus primos y tíos varones le cerraron el paso de escape, aunque de todas maneras no podría escapar, los demás integrantes de la familia tomaron a Sasuke antes que escape. Quien por desgracia, tenía las llaves del auto.
Así estaban, con 20 pequeños en medio de Halloween, disfrazados de caperucita y el lobo. Es oficial, jamás volverían a pasar un día junto con su familia.
–Vamos Sasuke, al menos recorramos algunas calles y luego volvemos–El rubio caminaba tratando de ocultar su trasero con la corta capa de caperucita. El azabache no podía apartar su mirada de culito. Con rapidez se coló de tras del otro, apoyando su ya despierto miembro.
–Mmm…Naru, estos disfraces no te traen recuerdos? –Le dijo con voz ronca al oído, mientras desplazaba su mano por el abdomen de Naruto, para apretar sin vergüenza el miembro de este. Si no estuvieran esos mocosos, se lo follaria hay mismo.
–S-sasuke….No…ghm…aquí no–No podían seguir así, o terminarían en callejón oscuro.
Pero todo ese ambiente caluroso que crearon, se rompió por una presencia no esperada.
–Naruto?
–M-uku? –Pregunto sorprendido Naruto. Como no estarlo, frente a él y su novio, estaba el varón que pudo ser su primer novio, quien veía como Sasuke le apretaba su cosita con descaro. Lentamente levanto su vista hacia el rostro de su Teme, encontrando esos raros y aterradores ojos rosjos.
Esto no es bueno, no es nada bueno, pensó el rubio con miedo.