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C de Cita. por Ecto

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Notas del fanfic:

Serie de Drabbles y One-shots ShinKaza que tienen como tema principal una palabra que empiece por la letra del abecedario que toque.

C de Cita.

Shinnosuke se pasó una mano por la nuca de forma nerviosa. Hoy, justamente hoy era su primera cita con Kazama. Muchas veces le decía en broma al chico que se moría por salir con él, pero jamás pensó que Toru finalmente accederia a ello.
Y ahora ahí estaba. Esperando, apoyado en un árbol al chico de sus sueños, y temblando como un flan.
Hacía ya un tiempo que le gustaba Kazama. Pero nunca llegó a pensar que él se sentía de esa forma también, ni que se daría cuenta de sus indirectas tan directas.
- Eh, Shinnosuke... -Una suave voz a su espalda llamó la atención del moreno. Ni siquiera parecía la de Kazama de lo dulce y calmada que sonaba.
- Oh. Hey. -Saludó. - Esto uh... Estás muy ejeeee. Estas muy guapo.
El más bajito apartó la mirada, sonrojado.
Vestía un chaleco celeste, un polo blanco, y una corbata rosada que ahora mismo hacia juego con sus mejillas.
- B-bueno. ¿A dónde vamos? -Preguntó, un poco incómodo por el silencio.
- Oh. Eeeeh. He pensado que podíamos ir al Festival que hay está noche, pero aún es temprano. -Shinnosuke se quedó pensativo unos momentos. -¿Quieres comer algo?
- Umm... Vale. -Accedió Toru, aparentemente conforme con el plan.
- ¡Wohooi! ¿Y qué te apetece comer?
- Cualquier cosa está bien.
- Woo, wooo. En marcha~

Durante todo el camino estuvieron en el más absoluto silencio. Shin-Chan no se lo podía explicar...
Si siempre estaban de bromas, y piques. ¿A qué venía esta repentina vergüenza?
- Oye Kazama. -Llamó el moreno, un poco harto. El chico le miró de reojo, aún con las mejillas sonrosadas. -Ehhh... Esto... ¿Qué tal el capítulo de hoy de Moepi?
Entrecerró sus ojos azules, y frunció el ceño.
- Shinnosuke. Ya te he dicho que yo no veo esas cosas.
- Wooo, wooooo. Por eso usas calzoncillos de ella. -Sonrió, divertido.
- ¡Te digo que no son mios!
- ¿Umm? ¿Y de quién son~?
Y con esto, empezó una divertida discursion que al menos consiguió animar algo el ambiente.

Después de cenar en un restaurante de comida rápida en el que pagó Shin-Chan, pusieron rumbo al festival. Y lo cierto es que Kazama estaba algo emocionado. Hasta hace un rato habia pensado que todo iba a ser un tostón de miradas vergonzosas y silencios incómodos. Pero lo estaba pasando bastante bien.
Incluso había acabado llorando de la risa cuando Shinnosuke fingió ser Masao, Nene y Bochan en el restaurante.
Posó la mirada en el chico, que ahora le estaba contando un capítulo especial de Ultraheroe, y sonrió un poco.

No tardaron en llegar al festival, que tenía muchos puestos de juegos, comida y atracciones. Al más bajito se le iluminó el rostro, gracias a las luces brillantes de todo aquello. Y estaba más lindo que nunca.
- ¿Qué te apetece hacer primero? -Sonrió ampliamente Shinnosuke, intentando hacerse oír entre el gentío pero sin llegar a gritar.
- Oh... ¿Qué tal si jugamos a algo? -Respondió Kazama, señalando uno de los puestos.
- ¡Vale!
Intentaron ganar en el juego, que consistía en meter por un palo aros de colores, pero fallaron catastroficamente. Tras eso, Shinnosuke ofreció montar en los coche de choque, y así fueron probando las atracciones y puestos de todo el festival.
Una de las veces pararon en un puesto de bolitas de pulpo, en el que el moreno insistió en que Toru le diese del suyo. El más bajito después de quejarse un rato accedió, y le dio del pinchito como si de una pareja de tratase.

- ¡Bien! Ahora entremos ahí. -Señaló el moreno a la casa del terror. Kazama se tensó de pronto.
- A-ahí... -Susurró. Shin-Chan lo miró con una sonrisa malvada.
- No me digas que te da mieeeedo. -Empezó, acercandose a su oreja. -To-ru~
El más bajito dio un salto, y se sujeto la oreja con la cara encendida como un semáforo.
- ¡Claro que no, idiota! Venga vamos. -Soltó él, girandose con enfado.
- Wooo, woo. -Asintió.

El plan era perfecto.
Entraría con Kazama, y el chico tendría tanto miedo que se lanzaria encima suya. Entonces, lo calmaria y como premio se llevaría un dulce beso de esos rosados y perfectos labios.
- Ejejejeeeee... Ejeee...
- ¿S-Shinnosuke?
- ¿Eh? -Kazama le miró de reojo.
- Espabila, hombre que nos toca. -Susurró un poco nervioso, y cruzando la puerta. El moreno volvió a sonreír. Todo iba a salir a la perfección.

Todo salió horrible.
Si, Kazama se asustó como era previsible, y se lanzó a los brazos de Shin-Chan.
Pero cuando al moreno se le pasó la risa de vergüenza, y fue a consolar al chico, una niña empezó a perseguirlos, y acabó asustandose él también, corriendo hacía la puerta con Kazama de la mano.
Lo único que sacó en bueno de ello fue que al menos, Toru no soltó su mano en lo que quedaba de cita.

- Oye, ya es tarde... -Soltó de pronto Kazama mirando su reloj. Shinnosuke hizo un pucherito. -Pero lo he pasado muy bien...
- Si quieres te acompaño a casa... -Dejó caer el moreno.
- Bueno... Vale.
Caminaron por las oscuras calles de Kasukabe aún agarrados de la mano vergonzosamente.
Shin-Chan despegó los labios para decir algo, pero no salió nada de su boca. Asi que el camino acabó siendo largo y silencioso.
En poco tiempo ya estaban delante del apartamento de Kazama, asi que los dos chicos se despidieron.
- Iiih... Bueno... Podríamos repetir. -Susurró Shinnosuke. -Si quieres claro.
Kazama le dedicó una pequeña sonrisa.
- Vale.
- ¿Eeeh? ¿De verdad?
- Uh... Si. ¿Por qué no? Puede ser divertido.
Los dos se quedaron mirando un rato, en silencio.
- Bueno entonces... Hasta mañana. -Se despidió Shin-Chan.
- C-claro... Adiós. -El moreno se volvió para marcharse, cuando notó como alguien le tiraba de la manga. -¡Espera, Shinnosuke!
Cuando se giró de nuevo, sus labios se vieron presionados por los de Kazama, que se había puesto de puntillas, y lo agarraba por el cuello de la chaqueta para juntar sus rostros.
- Bueno, adiós.
Para cuando Shin-Chan acabó de procesar lo que había pasado, Toru ya estaba subiendo en el ascensor.
Se paso el dedo índice por los labios y sonrió un poco.
Definitivamente había sido la mejor cita de la historia. Y aún le quedaban muchisimas más con él.


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