Cap. I Capturado o tal vez no…
by karuNeko
Después de la gran captura y la detención de los ladrones de trenes, el comisario de la ciudad se convierte en un héroe.
-Tenía fe en que yo iba a capturarlos a ellos un día. Pero ocurrió un milagro y me las arreglé para capturar a estos criminales.- Dijo el comisario a la prensa local. La cuidad después del robo experimentó oscuridad, como ciudadanos tenían miedo de estar fuera de sus hogares. La cuidad se convirtió en un lugar más seguro, la captura de los ladrones de trenes significa que los bienes robados serian devueltos a sus respectivos dueños.
El pueblo había experimentado el mayor robo del tren de la historia, era un misterio el cómo la operación se filtro entre los ladrones y el comisario estaba investigando el caso. Se sospecha que criminales vinieron desde lejos a la ciudad por grandes cantidades de dinero. El tren llevaba una gran cantidad de dinero en efectivo en su segunda carga, donde se hizo pasar por correo certificado. La cantidad era más grande que de costumbre porque tenía en gran parte los ahorros de casi todo el pueblo. Los ladrones de tren debían tener de algún modo conocimiento para saber en qué consistían las cargas de grandes sumas de dinero y un plano, planeado todo para robar este tren particularmente.
Los periódicos estaban repletos de la noticia de la semana, el comisario, Choi Siwon, atrapo al ángel sin alas el ladrón de trenes más famoso de todos los tiempos también buscado por el asesinato de un comisario.
Ladrón, asesino, embustero, estafador, maestro del engaño y mas es el ángel sin alas, llevaban más de 4 años asaltando trenes, robando bancos y joyas extrañamente raras, cuyo valor tenia mas de siete cifras, es el segundo ladrón en hacer que su nombre resonara en más de una ciudad y pueblo de Corea y otras partes del mundo, después de la extraña desaparición del SGK un ladrón que también había hecho historia en las páginas de SM (el periódico de la cuidad Mapo). Ángel sin alas era el seudónimo de este ladrón cuyo nombre verdadero era desconocido para los medios y para quienes lo capturaron, este astuto ladrón era inteligente negándose a revelar su verdadero nombre.
Panfletos de “SE BUSCA VIVO O MUERTO, RECOMPENSA $5,000.00 POR ORDEN DE LOS GRINGOS” con la fotografía del ángel sin alas estaban colocadas en cada poste, entradas de establecimientos y las oficinas de la comisaria donde el precio por su cabeza era $5,000.00, vivo o muerto su cabeza tenía un valor, el comisario junto con sus hombres le tendieron una trampa donde cayó sin siquiera percatarse que era una emboscada. El arresto fue un éxito llevando a la fama a Choi Siwon. Él fue conmemorado y reconocido por el alcalde del pueblo con medallas y otorgándole la llave del pueblo por su acto heroico.
-Siwon me alegra que todo haya salido como lo planeaste, aunque sentí mucho miedo de que pudiera sucederte algo malo, los rumores dice que el ladrón que atrapaste es un hombre muy peligros.- Su cabellera negra se esparció en el pecho desnudo de su acompañante.
-No tenias por qué preocuparte, regrese a salvo como te lo prometí.- Dio un beso en la cabeza del peli-negro, este lo abrazo.
-No me preocupe.- Quiso sonar desinteresado.- Es solo que….- Se coloco encima de Siwon.- Si te pasa algo con quien me quitare el estrés que me causa ser el dueño de la cantina.
-Heechul yo te…ah…- Sus palabras fueron interrumpidas al sentir los dedos del peli-negro envolver su miembro, sus caricias comenzaron a endurecerlo nuevamente.- Heenim me… vuelves loco… ah…- La habitación comenzó a llenarse de suspiros.
-Quiero sentirte dentro…- Heechul se levanto auto-penetrándose provocando que ambos gimieran uno de placer al sentirse envuelto en un calor abrazador y otro de dolor al sentir como sus entrañas eran nuevamente invadidas.- Si-won… ahh…
Siwon disfrutaba de los gemidos y movimientos de Heechul, sabía que al mayor le gustaba tener el control pero también sabía que amaba que él tomara el control, en un movimiento rápido sin salir del peli-negro cambio las posiciones esta vez situándose él sobre Heechul. Ambos festejarían toda la noche el éxito de su captura.
***
Eran aproximadamente las 6 de la mañana, el sol comenzaba a iluminar el pueblo de Sangam. Las afueras del pueblo fueron invadidas por el sonido de un par de caballos al galopar rápidamente en las calles desiertas.
-Así que este será mi nuevo hogar.- Un joven de piel blanca, ojos castaños y cabello platinado movió la cortina de la ventana del carruaje para admirar el paisaje nocturno de las calles, sus labios acorazonados formaron una linda sonrisa, esperaba que el éxito lo acompañara en ese pueblo… mas no imaginaba que le depararía ese lugar en el futuro.
-Señorito pronto llegaremos al hotel, su padre pidió que se le confirme en cuanto lleguemos.
-Haz la redacción correspondiente y envíale la carta e infórmale que llegamos bien, no olvides decirle que el encargo llego a salvo.
-No joven Sungmin
-Solo dime Min, no me gusta que me llames señorito o joven, Hangeng, estamos el otro lugar podrías olvidar las formalidades en este sitio.- Su acompañante, un hombre de cabellera obscura, ojos cafés y tez blanca se sentía atrapado, no era la primera vez en que su joven amo le pedía le hablara de manera informal.
-Pero jo...
-Nada, appa no está para llamarte la atención. Hazlo por mí ¿sí? - El peli-blanco realizo uno de sus mejores aegyo convenciendo al peli-negro.
-Como guste jo….- El peli-blanco realizo un puchero.- Como gustes Min.- El chico sonrió triunfal.
-¿Donde nos hospedaremos?
-En el hotel Vitamin, tengo entendido que es uno de los más lujosos de esta ciudad.- El más joven suspiro recargándose en el asiento.
- [Solo espero que appa se enorgullezca y no se decepcione] – El silencio reino una vez mas mientras llegaban al lugar mencionado por el chino.
***
Eran más de las seis de la mañana, un hombre de cabellera azabache discretamente revuelto, alto, de piel blanca sin llegar a lo pálido, se miraba al espejo.
-Kyuhyun.- Canturreo una mujer de cabellera obscura y larga sentada en medio de la cama, su cuerpo desnudo era protegido por una sábana blanca.
POV Kyuhyun
El chillido de aquella mujer me revienta los tímpanos, desde que decidí venir a este lugar no ha hecho otra cosa que hostigarme, aunque debo admitir que me divertí bastante con ella. Es la primera vez que vengo a este hotel es bastante lujoso como bien rumora el pueblo. Una vez termine de asearme y vestirme adecuadamente con un traje negro decido que es hora de irme.
-¿Kyuhyun no vienes a la cama a dormir? – Me mira con curiosidad al ver que salgo vestido del baño. La ignoro por su puesto dirigiéndome a la puerta, esto solo fue un arrebato de mi deseo por saciar mi lujuria en cuanto salga por la puerta abre olvidado su nombre como muchas otras que has estado debajo de mí, es una más; solo eso.- ¿Te vas tan pronto? – Pobre ilusa, así como ella otras tantas han tratado de retenerme con la esperanza de que me enamore de ellas. Le doy la espalda, tomo el pomo de la puerta dispuesto a abandonar la habitación.- ¿Kyuhyun me buscaras más tarde? – No emito sonido alguno, me acabo de dar cuenta que olvide su nombre antes de lo predicho. Sonrió satisfecho ante mi hallazgo y salgo. Ella se queda muda, debe tener una graciosa mueca en el rostro ante mi indiferencia.
Empiezo a caminar con calma admirando este lugar, el papel tapiz es de un color beige con detalles dorados que parecen guías en espiral. El pasillo está completamente pulcro con una alfombra roja que lo cubre, hay algunas mesitas de madera con floreros que contienes rosas rojas y blancas. Este lugar es como lo mencionaban en la cantina, ahora que recuerdo tengo que ir a cobra el dinero que gane con la apuesta, fue sencillo ganar ese dinero, solo tenía que acostarme con la mujer que deje en la habitación en este hotel y asegurarme que ella pagara. Mate a dos pájaros de un tiro.
Bajando las escaleras visualice el lobby y a la entrada, un hombre se encontraba hablando con el recepcionista, seguramente ha de ser uno de esos riquillos mas, el hombre corre a la entrada, ahora platica con el cochero del carruaje en el que al parecer llego, al estar más cerca seguí con la mirada al extraño, se acerco a la puerta del carruaje y la abrió extendió su mano derecha, observe una mano alargarse desde adentro, creí por un momento que sería una joven o alguna mujer mayor sin embargo del carruaje salió un joven con vestimenta negra, un traje de etiqueta a su medida, su piel es tan blanca como la leche, sus labios tienen un color rosado, su cabello es blanco y lacio, del lado derecho de su ojos unos mechones obscuros son visibles, ¿No le estorbara el flequillo para ver? Veo que unos anteojos redondos descansan en el puente de su nariz. Es atractivo, termino de concluir.
Ese chico le dedico una sonrisa, quede embobado por un momento, me maldije por observar tanto tiempo a unos completos riquillos.
Fin POV
-Joven… Sungminnie, la habitación está preparada como lo indico su padre, en breve enviare la carta mientras usted debe descansar a sido un largo viaje desde Inglaterra.
-¿Hangeng, tú no descansaras?
-Después, hay muchos asuntos que resolver.- Ambos entraron por la puerta principal, el peli-negro fue a recepción a recoger las llaves de las habitaciones, Sungmin lo espero caminando a paso lento hacia las escaleras por donde los botones llevaba los baúles que contenían sus pertenencias.
El menor miro hacia el techo encontrándose con un deslumbrante candelabro de cristal en el centro, sonrió maravillado a pesar de ser uno más sencillo a los que acostumbraba ver en Inglaterra. Siguió caminando sin percatarse que delante de él otra persona venia, al igual distraída.
-Fíjate por donde caminas.- La voz gruesa de un hombre alto de cabellera obscura lo regreso a la realidad, choco con el dueño de aquella grave voz. No se había fijado por donde caminaba sino hasta que choco con un extraño con el que cayó al suelo.
-L-lo siento.- El peli-blanco tenía demasiado cerca un rostro ajeno, la posición en la que se encontraban dejaba mucho volar la imaginación si no fuera porque era de madrugada y ni un alma más que las de ellos estaba presente para verlos. El más bajo se encontraba encima del pelinegro, quien le miraba fijamente, sus manos se encontraban abrazando al menor. Estuvieron varios segundos mirándose a los ojos.
-¡Joven Sungmin! – Chillo Hangeng en cuanto vio a su amo tirando en el suelo encima de aquel hombre, corrió a socorrerlo.- ¿Se encuentra bien? – Ambos en el suelo desviaron la mirada, Sungmin miro a su acompañante quien le extendió la mano, dudo unos segundos mirando a quien se encontraba debajo de él y luego se sonrojo; tomo la mano de Hangeng.- ¿Se encuentra bien? ¿No se hizo daño? – Le sacudió la ropa con cuidado, examinado cada parte de su cuerpo asegurándose que no tuviese alguna herida.
-Estoy bien, este señor me protegió de la caída.- Fue hasta ese momento que el chino recordó al desconocido: a quien le extendió la mano para ayudarle a levantarse, el peli-negro bufo por lo bajo aceptando la ayuda, el chino retomo su lugar al lado del mas bajo.- Discúlpeme por favor.- Iba a realizar una reverencia pero Hangeng se interpuso en medio se los dos.
-Gracias por su ayuda.- El chino tomo el lugar del peli-blanco realizando la debida reverencia, aquel hombre arqueo una ceja.- Joven amo es hora de subir a su habitación.- Tomo de la mano al bajito, pero este se libero de su agarre y corrió hacia el desconocido.- ¡Joven Sungmin!
-Lamento mi descuido.- Dijo en cuanto estuvo frente al desconocido y realizo la reverencia que el chino le había negado hacer.- Mi nombre es Lee Sungmin espero me pueda disculpar.
-Deberías ir con tu mayordomo, luce preocupado.
-Es un exagerado.- El peli-negro sonrió ante lo dicho.
-Cho Kyuhyun.- Realizo una reverencia.- Bienvenido al pueblo.- Dicho lo ultimo dio media vuelta dispuesto a salir, sonrió de medio lado con una extraña sensación que había nacido en su interior.
***
-Apresúrate que pronto amanecerá.- Exigió detrás de una reja un hombre con sombrero y bigote.
-Lo estoy haciendo lo más rápido de puedo
-No parece.- Se cruzo de brazos.- Este comisario me las va a pagar.- Dijo entre dientes.
-¡Ya quedo!
-Cállate.- Le tapo la boca con las manos.- ¿Acaso quieres que nos descubran? – El otro negó con la cabeza.- Esta bien vámonos.- Ambos salieron por detrás de la comisaria sin ser vistos, algunos rayos de sol comenzaban a asomarse pintando los techos de las casas con su color.- [Regresare, ya verás la que te espera Choi Siwon].- El ladrón dio un último vistazo a la comisarían antes de perderse en las calles de Sangam.
Cont. *OOoo*ooOO*
La imagen no me pertenece solo hice algunos cambios (En algunas letras y numeros) sin remover los créditos de quien lo realizo. Espero les guste. Portada