Takano Pov
ME costaba trabajo creer que solo había pasado un año desde que conocí a mi castaño, el año más maravilloso de mi vida gracias a él, Ritsu me salvo del abismo en el que me encontraba, sin su ayuda jamás me hubiera podido levantar para terminar mi carrera aunque estuve muy cerca de reprobar un año por mis descuidos y ausencia, el también me permitió volver a tener a Misaki en mi vida, lo necesitaba de regreso a pesar de que solamente fuéramos amigos, estoy agradecido de que el apareciera como un ángel, pero lo que más valoro de sus acciones fue que me enseño que el verdadero amor no necesariamente es el primero.
Hoy con seguridad digo que lo amo, mucho más de lo que he llegado a amar al a otro ser humano, incluso a mí mismo, cada lindos gesto que me regala los quiero almacenar en mi corazón, por eso me enferma la idea de que los demás abusen de él solo porque es más inteligente y tímido, me dan asco, siento repulsión a la persona que alguna vez fui, si yo no hubiera conocido al oji verde hoy de seguro estaría de vago con Tsumori atormentado a los demás, uno jamás sabe lo que le depara el futuro.
Yo quería hace sentir especial a Ritsu por eso planifique todo un día para nosotros dos, jamás he sido una persona que tiende al romance, me cuesta mucho prestar atención en los detalles, eso me pasa con todo el mundo menos con mi castaño, cuando estoy junto a el no puedo evitar prestar atención a cada una de las palabras que sale de su apetitosa boca, cada detalle que provoca una linda sonrisa en él, por eso supe que era lo que debía hacer.
Después de que nos mantuviéramos abrazados horas en la cama, sin hacer nada más solo disfrutando de la presencia del otro, llego el momento del decirle adiós a nuestro cuarto, con pesadez y tristeza nos separarnos por un par de horas para reunirnos luego de que la entrega de diplomas finalizara.
Hoy se definiría todo, le diría a mi oji verde lo mucho que lo amo, lo mucho que lo necesito en mi vida, yo quiero ser el hombre que lo acompañe en cada uno de los pasos que dé y lo ayude a levantarse en sus caídas, ya no dejare que se haga daño, nunca más dejare que una lagrima se escapare de esas bellas orbes verdes, él ya ha cuido mucho tiempo de mí, es hora de que el me permita velar por el.
Ahorrare para comprarnos un apartamento a los dos, trabajare duro para que jamás le falte nada y tenga todo lo que el merece, quiero poder verlo todos los días, deseo permanecer a su lado más que cualquier otra cosa y de esa manera verlo convertirse en el increíble profesional al que está destinado a ser, aspiro a ser quien borre todas esas heridas, quien cicatrice las cortaduras que hay en su corazón.
Con esos pensamientos de enamorado Salí de la que alguna vez fue nuestra habitación, antes de cerrar esa puerta, observe por última vez su interior con una gran nostalgia recordando cada uno de los maravilloso momentos que habíamos vivido en ese lugar, no pude evitar esbozar una sonrisa de tonto enamorado ante el recuerdo de Ritsu en mi mente.
Camine por el campus mirando a las familias felices siendo abrazadas por sus padres ¿Los míos vendrán? Ya conocía perfectamente la respuesta, ellos de ante mano por una carta se disculparon conmigo por no poder asistir, mi madre me prometió una gran fiesta de bienvenida cuando llegue casa en las vacaciones, el trabajado siempre los mantiene ocupados, pero no es algo que me moleste, después de todo cada uno tiene sus prioridades, la de ellos es el trabajo, la mía es mi amado.
“MASAMUNE” Reconocí perfectamente la voz de mi efusivo amigo de toda la vida y también primer amor.
“Misaki” Abría los brazos para recibir al oji esmeralda que se arrojaba sobre mí son tener cuenta lo pesado que comenzó a ser a partir de los diez años, a pesar de lo pequeño que es cargarlo ya no es tan fácil.
“Muchas felicidades por tu graduación” El más bajo libero mi cuello lo que permitió que el aire regresara a mis pulmones.
“¿Tu no tendríamos que estar en clases?” Regañe al menor acariciando sus cabellos como solía hacer hace años.
“Si, pero me escape para poder felicitarte” El más bajo se separó de mi para husmear en su mochila algo frustrado, la escena me daba mucha risa, el oji esmeralda no ha cambiado nada desde que lo conozco, aunque creo que eso es lo que le da esa aura de inocencia que se complementa tan bien con la mía.
“¿Cómo están las cosas con el idiota de Akihiko?” Pregunte con la intención de molestarlo, yo conocía muy bien las intenciones del peli plata con Misaki, podía ver la desesperación que tenían sus ojos al no poder tocarlo.
“¿Usagi-san?” El menor dejo de rebuscar en su mochila “Es un maravilloso amigo” Intente contener la risa, mi pequeño compañero es alguien muy ingenuo que no logra captar cuando alguien lo quiere seducir o le coquetea, si el oji violeta no se le declara directamente las cosas entre ellos jamás van a avanzar.
“Se nota que solo quiere ser tu amigo” Susurre con un notorio sarcasmo observando como el oji esmeralda se ruborizaba tratando de ignorarme.
“Acá esta” Declaro feliz extendiéndome un paquete azul cerrado, envuelto con un gran moño verde “Felicidades”
“Gracias” Tome objeto misterioso ente mis manos con mucho cuidado para poder comenzarlo a desenvolver, cuando vi que no podía despegar la cinta decidí destrozar el papel de regalo encontrándome con un cuaderno personalizado, el que tenía la foto de mi castaño por un lado y la mía por el otro.
“Le pedí a Chiaki una foto de Ritsu para que tú la tuvieras, yo se lo mucho que lo amas, Masamune a mi tus ojos no me engañan” Sonreí de forma ilusa ante las sinceras palabras acompañadas del mejor regalo que hubiera podido pedir, al fin tenía una imagen del más bajo solo para mí, como a él lo acosaban mucho decidió borrar toda red social para que ya no lo pudieran molestar por eso no tenía ninguna imagen de él, odiaba a los idiotas anónimos que se encargaban de hacerle la vida imposible al igual que los malditos de mis compañeros, nunca me había dado cuenta de lo bajo que las personas caen por envidia.
“Estoy tan enamorado de él, Misaki lo amo” Suspire entrelazando mi mirada a la del oji esmeralda “Estoy tan enamorado de él” El castaño me abrazo de forma cálida en señal de que se alegraba por mí.
“Te dije que todo estaría bien, yo sabía que él era el indicado para ti” Cuando nos separamos el menor me miro con él entre cejo fruncido “Aunque te tardaste demasiado en reaccionar, yo me di cuenta desde la primera vez que lo vi” Me sentí frustrado conmigo mismo al saber que el más bajo poseía la razón.
“Supongo que tenía algo de miedo de volver a caer en un amor destructivo” Los ojos del más bajo se opacaron, mierda hablando del tema incorrecto con la persona equivocada, intente arreglar mis palabras para evitar un ambiente tenso entre nosotros dos, sin embargo antes de que lo pudiera hacer la tierna mano de Misaki me callo la boca.
“Yo también estoy asustado de volver a enamorarme, no tienes por qué dejar de confiar en mí, tu eres mi mejor amigo así que no te guardes ningún tema” El oji esmeralda tomo un gran suspiro y cerro sus ojos con una expresión llena de paz la que me calmo “Cuando yo te digo que me alegro por ti es enserio”
“No me corresponde ser quien te diga esto, pero si no lo hago siento que las cosas jamás pasaran entre ustedes” El más bajo levanto su mirada con un gesto de confusión, parecía un pequeño perro perdido.
“Masamune no me molestes con tus juegos, eso es infantil” Un puchero se pozo en los labios del menor.
“No estoy jugando contigo” Una pervertida sonrisa se dibujó en mi rostro asustando al pequeño castaño “Tu querido amigo, Usagi-san” Intente imitar sus voz al decir eso ganándome un mirada llena de odio “Esta más que enamorado de ti, Misaki” Un fuerte sonrojo apareció en sus pálidas mejillas.
“N…No juegues con eso” El oji esmeralda intento darme la espada para que yo no notara la evidente vergüenza de la cual era presa.
“Akihiko te ve de una forma especial, luce como una chica enamorada junto a ti” Sonreí con satisfacción al notar como el rojo se apoderaba de hasta sus oreja.
“No sé cómo Ritsu te soporta., eres muy pesado conmigo Masamune” Tome la delgada cintura del castaño con la intención de molestarlo como cuando éramos un par de niños jugando en el jardín de mis padres.
“SUELTALO IDIOTA” De repente como si él hubiera sido convocado Akihiko apareció detrás mío separándome bruscamente de quien aparentemente había marcado como alguien de su propiedad.
“Usagi-san” Una bella sonrisa se formó en los labios del menor, el parecía feliz de ver al peli plata a pesar de su agresiva actitud.
“No te acerques con tanta confianza a él” El oji violeta me susurro en la oreja “Recuerda que Ritsu también es mi amigo” A juzgar por el tono de voz que utilizo deducía que él me estaba amenazando con máteme de celos, por eso decidí sepárame de mi compañero.
“Muchas felicidades por tu graduación” El castaño saco una bolsa llena de panquecitos caseros en su interior.
“¿Son para mí?” Ahí estaba la tonta sonrisa de enamorado que el más alto dibujaba cada vez que estaba al lado del menor.
“Si, los hice solo para ti” Un tímido rubor adorno las mejillas del oji esmeralda, de repente me sentían como un tercero en la escena.
“Misaki” EL peli plata al pronunciar el nombre del oji esmeralda hizo que todo su cuerpo se estremeciera, se nota a kilómetros que a mi amigo le gusta el petulante escritor, el cual para mi desgracia paso con honores con tan solo cursar medio semestre, ese hombre es alguien de verdad molesto, le deseo suerte al castaño “Esta noche quiero que me acompañes al cine para agradecerte tu detallado regalo”
“No es necesario, lo hice porque quería verte sonreír” EL oji esmeralda escondió su rostro bajo su flequillo “No quiero ser una molestia para ti” Esa era una actitud muy típica del más bajo, desde que éramos niños se ha esforzado por no alterar a nadie.
“Está bien” El oji violeta abrazo on cariño la espalda del castaño “Quiero celebrar mi graduación solo contigo” AL ver la amorosa mirada que ellos compartían decidí retirarme para darles algo de privacidad.
“Misaki recuerda lo que te dije” El carmín se apodero del rostro de mi amigo el peli palta me miraba con desprecio ante mi insinuante tono, yo con grandes deseos de tener un momento parecido con mi adoración me dirigí a las filas para la entrega de diplomas.
Me forme en el gran aulario según orden de lista, suspire al no poder estar con mi oji verde, la ceremonia fue bastante monótona y aburrida, la duración fue de tres largas horas hasta las premiaciones especiales en las que yo por su puesto no participe al haber faltado la mitad del año, tuve suerte de que el demonio Kamijou se apiadara de mi alma y me dejar pasar, agradezco mucho esa misericordia, la cual el no tuvo con Tsumori, dejándolo un año más tras, me sentía algo asustado de haber podido terminar de la misma forma.
Cuando le entregaron el premio al esfuerzo a otra persona mi corazón se partió imaginándome el gesto de dolor que mi castaño estaba poniendo, yo estaba dispuesto a hablar con el mismo director para que reconsideraran la nómina y le entregaran esa medalla a quien si se lo merecía. Cuando me acerque al final de la presentación el demonio nos detuvo helándonos la sangre ante su cálida mirada, el miedo que sentí pronto fue reemplazado por un inmensa felicidad al ver como el esfuerzo de mi oji verde era reconocido, ninguno de esos malditos se atrevía a despegar la mirada de asombro, me gustaba verlo así, después de todo lo que lo hicieron sufrir, mi Ritsu fue capaz de mantenerse fuerte y surgir como persona, él había logrado superar cada uno de los obstáculos que la vida le puso, me sentía orgulloso de él.
Con un ilusa expresión camine hasta el lugar en donde él y yo nos encontraríamos, me senté en una banca imaginando como sería el momento de mi confesión, por fin tendríamos nuestros tan anhelado final feliz.
“Takano” Esa molesta voz me saco de todas mis rosadas fantasías, con un aura de rechazo levante mi mirada para encontrarme con él.
“¿Qué es lo que quieres?” El más alto se acercó hacia mí para tomar asiento a mi lado, yo lo mire bastante molesto, no me gustaba que actuara como si nos tuviéramos confianza o fuéramos amigos.
“Necesito hablar contigo sobre Odita” Solté un ronco gruñido al escuchar como lo llamaba, detestaba a este hombre, el siente lo mismo que yo por mi castaño, y soy demasiado egoísta como para cederlo.
“LO amo, estoy enamorado de Ritsu, es lo más importante en mi vida” Declare sin despegar mi vista de sus ojos.
“Entonces déjalo ir” No entendía de qué mierda él me estaba hablando, definitivamente me molesta.
“Ijuuin yo no dejare a la persona que más me importa, quiero pasar cada minuto de mi vida junto a él” Un gesto de obvia molestia se dibujó en el rostro del mayor.
“Ahí algo que debes saber” El tono de voz que utilizo fue tan serio que me asusto “Kamijou sensei le ofreció un viaje de estudios todo pagado por un año a Odita, es la primera vez que la universidad da una oportunidad tan grande a tan bajo costo, si va el podrá convivir con los principales exponentes de la literatura y apoyar a sensei con sus nueva investigación, su carrera despegaría apenas comienza” Me sentía bastante feliz por mi amor, él se lo merecía, por fin todo su esfuerzo estaba siendo recompensado.
“Es maravilloso que finalmente le pasen cosas buenas, él lo merece” Musite perdido en mis pensamientos.
“Rechazo la oferta” Mire sorprendido al peli negó el cual me observaba con una enorme frialdad, no entendía bien la situación.
“¿Por qué la rechazo? Él no me dijo nada de esto” Intente recordar sobre este viaje sin tener éxito, Ritsu no me había dicho ¿Porque? Sé que el confía en mí, no me gusta hacia donde se dirige esta conversación.
“Tu culpa” El oji gris apretó fuertemente su labio “Me enfermas Takano, no lo merece, tu no lo mereces, no lo has amado desde la primera vez que lo viste, no estuviste a su lado y ahora le impides ir al viaje de su vida, enserio eres lo peor que le pudo haber pasado” Kyo anteriormente me había declarado cosas parecidas para que yo reaccionar, sin embargo, esta vez las cosas se sintieron diferentes.
“Yo ni si quiera sabia del viaje” Me intente defender de la acusadora mirada del peli negro, no lo sabía, yo lo apoyaría sin importa que decisión escogiera.
“Claro que no sabías tarado, él lo rechazo porque te quiere más a ti que a su futuro” Las palabras me dejaron estupefacto.
“Yo jamás le impediría ir, yo lo esperaría porque lo amo” Musite impacto por el comentario del oji gris, no quería que el fracasara por mi culpa.
“¿Sabes?” Mire con algo de depresión al otro hombre “Odita me conto que te tiene una sorpresa, al parecer el pidió un gran préstamo por un departamento para que ustedes dos vivieran juntos, tú lo acabas de condenar a una vida de pobreza, él está arrojando sus sueño a la basura por tu culpa” Me pare agresivamente para mirarlo con superioridad.
”Yo no le impido nada, y podemos pagar el departamento juntos” EL peli negro correspondió a mi acciona levantándose violentamente.
“MALDICIÓN, DEJA DE SER TAN EGOISTA” La última palabra resonó en mi cabeza, egoísta, siempre me comporte así con mi amor.
“¿PORQUE MIERDA TE METES EN NUESTROS ASUNTOS?” Ya no podía contener la rabia que se apoderaba de mi cuerpo.
“PORQUE LO AMO MÁS QUE TU” Una mueca de desagrado se colocó en mis labios “Si yo tuviera la suerte de estar junto a él, no sería una enorme roca en el camino, sabes que tengo razón, debes hacerlo por el bien de Ritsu”
“¿Y qué rayos harías en mi lugar?” Inseguridad, ese sentimientos no me atacaba muchas veces pero cuando lo hacia mi mundo se desmoronaba, no viviere la misma escena dos veces, recuerdo la forma en que los ojos de Misaki perdieron brillos cuando le impedí cumplí sus sueños, no quiero pasar lo mismo con Ritsu, no, yo lo quiero apoyar no me pienso convertir en todo lo opuesto a lo que el necesita.
“Lo dejaría ir” Un gran dolor se apodero de mi pecho ¿Dejar ir al amor de mi vida? ¿Cómo hare eso si ya no puedo vivir sin él?
“Es imposible, debe haber otra solución, yo puedo convencerlo de tomar el año, de que lo esperare, podría ahorrar un poco para que cuando vuelva” Un grito de frustración interrumpió mi poco elaborado plan.
“NO, YA DEJATE DE JUEGOS” El oji gris tomo un gran bocado de aire “El jamás te escuchara, esta muy cegado por el amor que te tiene, él no se separara a menos que lo obliguemos a alejarse, la única forma de convencerlo de que vaya es” Mire lleno de expectación la respuesta del mayor “Hacer que te odie”
“¿Me estas pidiendo que lastime a la persona que más me importa en este mundo?” Pregunte frustrado como si de una mala broma se tratara.
“Deja de ser egoísta si el de verdad te importara ni si quiera tendrías que pensar en si debes o no anteponer su bienestar, entiendo que sea difícil esta decisión, pero Takano tu amor lo lastima, detesto verlo sufrir así por ti” El peli negro apretó con furia sus puños “Estoy cansado de verlo vivir en la mierda por tu culpa”
“Al menos yo intento apoyarlo, tu solo lo estas confundiendo, eres tan egoísta como yo al anteponer tus emociones a las suyas” EL oji gris me miro lleno de ira y algo de impotencia, él sabía que yo tenía razón.
“Takano si fueras el hombre que el merece, Odita no haría sufrido tanto, no lo habrían molestado, no habría tenido que sufrir todas esas humillaciones, tú no eres lo que el necesita, ni si quiera puedes aclarar los sentimientos que tienes hacia el” No dejaría que nadie jamás dudara de mi amor al más bajo.
“No te atrevas a poner en duda eso” Me acerque al rostro del peli negro con la intención de que viera la seriedad con la que hablaba.
“PUES SI LO AMAS TANTO, HASTE CARGO DE SU FELICIDAD” El más alto se dio vuelta frustrado mordiéndose el labio, el me enfurecía me afectaban mucho sus palabras, yo lo intentaba, quería ser lo mejor para Ritsu, estaba dispuesto a cambiar, a convertirme en un mejor hombre alguien a su altura.
“YO LO CUIDO LO MEJOR QUE PUEDO” Me sentía débil, estaba tan frágil como cuando termine por primera vez con Misaki por un lado el miedo a perderlo era demasiado aterrador, por el otro la culpa por tenerlo limitado me apresaba el alma, no debía ser un impedimento, no cometeré el mismo error dos veces.
“Solo es un maldito año, si su amor es tan fuerte deberían poder resistir ya déjate de joder Takano, date cuenta de lo mucho que el necesita tu apoyo, solo es un maldito año, intenta dejar de ser un imbécil y reacciona” EL peli negro tomo un gran bocado de aire para alejarse de mi lado dejándome muy confundido.
Siempre velando por mí, siempre cuidándome desde lejos, siendo la voz que calmaba las pesadilla en mis noches con tu calor lograste derretir mi congelado corazón, pegaste cada uno de los fragmentos destrozados de mi alma, me transformaste en una mejor versión de mí mismo, con tu linda sonrisa alumbraste mi camino y, me ayudaste a cumplir mi sueño, todo eso era Ritsu, él lo hacia todo por mí.
No quiero, no quería tener que dejarlo, no quería romperle el corazón a la persona que amaba, pero en el fondo sabía que Kyo tenía razón, que él no me dejaría porque yo tampoco lo haría a menos que el me lo dijera, es porque lo amo que debo hacerlo, por su bien, para que todo su duro trabajo tenga alguna recompensa, es porque lo amo que soportare un año separados con el alma destrozada y aun así no recaeré en mis vicios, me mantendré fiel a él cada uno de mis días rogando por su bienestar.
“Masamune tu” LA linda voz de mi oji verde me saco de mis pensamientos, ahí estaba con su aura llena de inocencia mostrándome lo mejor de él, no quería hacerlo pero debía, “¿Tu te pudiste enamorarte de mí?” Que pregunta más tonta, es más que obvio que estoy loco por él, yo lo adoro con mi vida.
Porque te amo lo hago Ritsu, porque te quiero demasiado como para ser quien hunda todos tus sueños, porque quiero que seas feliz a pesar de no poder verte, porque te esperare y cuidare de ti desde la lejanía por un año.
Solo es un año que tengo que soportar sin mi amado castaño, es increíble como pasamos toda una vida separados y ahora no concibo un segundo lejos de él, sé que esto nos lastimara a los dos, sin embargo a futuro cuando tu tengas tus propia editorial o incluso des charlas alrededor del mundo me agradecerás esta oportunidad, yo me esmerare por recuperar tu corazón, luchar por lo que es mío.
Amar implica no ser egoísta, dejar de lado tus necesidades para que tu pareja triunfe, yo soy capaz de todo por mi castaño, por el puedo enfrentar a medio mundo, a pesar de eso nada me será tan difícil como dejarlo, sé que es por su bien, sé que es lo correcto pero eso no me quita lo desgarrado que me siento.
De repente el doloroso recuerdo de Misaki apareció en mi mente “Por favor no me hagas elegir” Aun recuerdo la forma en que su cuerpo temblaba, como sus ojos se encontraban o rojos por la irritación, la decepción en su mirada, aquellas hermosos esmeraldas apagadas ¿Podría de nuevo destruir a quien más amo?
No puedo por más que me lastime ver así a mi amado, por más que quiera ir a su lado abrazarlo y calmar sus temores debo decir la mentiras más grande mi vida y pronunciar un “No te amo”, pero las palabras no me salían, mi expresión cambio a una deprimida no podía decírselo, yo no quería lastimarlo de esa manera, sabía que sería lo correcto me lo repetía una y otra vez, MALDCIÓN, mi mente es un caos.
El gesto del castaño cambio a una melancólica sonrisa “Lo entiendo” El oji verde me lanzo una última mirada para alejarse de mí, mierda, no quiero esto, necesitaba gritarle que lo amaba más que a nadie en este mundo pero “Por favor no me hagas elegir” El tormento de haber destrozado los sueños de mi antigua pareja no me lo permitieron.
“MIERDA” Grite impotente arrojándome al piso, al carajo todo ya no me importaba si alguien me veía llorar lo necesitaba esto me dolía más que mil demonios, se sentía como el mismo infierno saber que estar lejos de mí por tanto tiempo, tener que haber guardado la verdad me costaba respirar aun intentaba digerir lo que había pasado entre nosotros dos, lo único que me consolaba es que lo hacía por él.
Con el alma pendiendo de un hilo camine hacia el departamento de literatura, tenía un última petición que hacerle al demonio Kamijou, quiero que al menos el mantuviera viva la esperanza en mi oji verde.
Ingrese a su oficina, lo miré ordenando un par de papeles con ropa informarle, cerré la puerta de forma estrepitosa el mayor me miro lleno de molestia, sin embargo su gesto se suavizo por mi deplorable estado.
“Kamijou-sensei debo pedirle algo” El oji avellana se acercó lentamente a mi soltando un largo y cansado suspiro.
“Ya le dije a Ritsu que no te puedo meter en el viaje, cielos, este niño debe estar muy enamorado de ti para rechazar semejante oferta” Esas palabras solamente lograron hacer más profunda la herida.
“¿Qué tan importante es ir?” Pregunte temeroso, la verdad perderlo era el mayor temor que yo tenía.
“Es una pasantía que se le entrega a diez estudiantes en todo el país, este año gracias a Isaka-san la pudieron postular en nuestra universidad, si Ritsu viene conmigo será mi colega, me anima trabajar con él porque es mi mejor estudiante, también el iría para aprender de los historiadores y escritores más famosos del mundo, en este año no descansaremos estaremos prácticamente todos los días en diferentes lugares y al regresar él tendría un puesto asegurado en la universidad siendo mi colaborador hasta el día de la publicación de mi nuevo trabajo de investigación, le conviene tener un escrito a tan corta edad” ¿Cómo podría atreverme a interferir con eso? Esa pasantía arreglaba toda la vida de Ritsu, con ella se aseguraría de ser escuchado en el mundo profesional desde un principio, no soy tan egoísta como para negárselo.
“El ira con usted sensei” Musite débilmente con la voz “Por favor cuídelo mucho, asegúrese de que todos lo escuchen, de que su voz sea la más fuerte en todo el salón, calme sus miedos este año porque yo no podre” No te hare elegir Ritsu, sé que si lo hablamos te quedarías por mí, porque me amas demasiado.
“¿Por qué me estás diciendo estas cosas tan personales?” El castaño me miraba con confusión reflejada en sus ojos.
“Porque lo amo demasiado” Con una amarga sonrisa me dirigía a la puerta de la oficina “Yo no lo hare elegir”
No importa cuánto tiempo pase yo lo esperare, mi corazón nadie nunca lo podrá llenar de esta manera, contare cada uno de los días estando lejos de mi castaño, orare por su bienestar cada noche y mirare esa bella imagen antes de irme a dormir, trabajare este año que estará fuera para poder pagar un departamento, defenderé su nombre de quien se atreva a hablar mal de él, seguiré respirando, seguiré viviendo para el día de nuestro reencuentro, pero hoy te debo dejar ir porque te amo demasiado para contenerte.