Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

de esos amores para recordar por haruhi-chan

[Reviews - 0]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

es un recuerdo algo distorsionado.. espero y les guste... les recomiendo leer con She- ed sheeran de fondo :D... sin mas disfruten la leecturaaaa! :D

Siempre que uno se pone a escuchar un tema romántico, como “more than words”, se le vienen recuerdos a la mente.

 Si; ya se tal vez soy muy cursi… inclusive se me tacharía de idiota.

Sin embargo, no me arrepiento de recordarlo. Do Kyungsoo. Así se llama.

 Digo llama porque para mí está vivo. Debe seguir sonriendo, cantando, con una familia como quería; en fin viviendo.

Cuando lo conocí tenía doce años. Él, siendo mayor por un año, en ese momento era más alto que yo. Al menos, por un tiempo, hasta que pegue el estirón.

Teníamos en común actividades extra-curriculares en el club del centro de la ciudad de Seúl. También, tras la repentina amistad entre nuestros padres, las clases de ingles en un instituto y música.

Fue asi que nos encontramos compartiendo casi todos los días horas y horas de nuestro tiempo. Al principio, yo era algo timido. Con él al menos. ¿por qué? Tal vez porque … no quería ser sólo su amigo desde el principio.

FLASH BACK

-¡chicos compórtense!- gritaba enojada la profesora de natación- por el escándalo que armaron, quiero que hagan diez vueltas. ¡AHORA!- gritó finalmente al ver que nadie se movía. Esa mujer da miedo cuando se enfada.

Por lo que de repente mis compañeros y yo nos veíamos corriendo hacia el punto de partida de la pileta. Yo estaba tan concentrado en que no me gane ninguno de mis compañeros; que no me di cuenta que alguien nuevo había llegado hasta que termino mi cuota de tortura y me dispongo a ir a las bancas.

Era un poco más alto, piel blanca, ojos grandes, sonrisa simpática. Bastante agradable también y se llevaba bien con todos. Yo no paraba de observarlo. Había algo que no me dejaba. En ese momento no lo sabía. Ese algo era atracción.

-Hola, soy Do Kyungsoo. Un gusto conocerte.- dijo sonriéndome.- Hola, soy Kim Jongin-. Fue lo que respondí; tornándome de todos colores al sentirme algo inhibido.

Desde ese momento nos encontramos charlando amenamente en todas las clases. Nos invitábamos a nuestras fiestas de cumpleaños… fue así que nuestras madres sobre todo, tuvieron la idea de mandarnos a un instituto de idiomas, ingles específicamente,” para que tengamos más herramientas para el futuro”…. Y blah bla blah…. Cosa que agradezco un poco; mucho.

En fin; comenzamos el instituto en turno mañana, porque a la tarde teníamos la escuela. Éramos los más jóvenes del lugar… y nos trataban como a dos niños a pesar de ser bastantes avispados.

Cada clase, aprendía algo nuevo. No sólo de idioma. Sino también de él. Sus gustos; le encantaba beber café con galletas con chip de chocolates, leer filosofía… Nietszche más que nada en el mundo, y la música, cantar y tocar la guitarra eran su pasión. Varias veces en los recreos cantaba en voz baja si me veía muy cansado. Me relajaba para dormir unos quince minutos que eran la gloria.

Y creo que él también aprendió bastante de mi… como que me gusta estar tranquilo y que devuelvo los golpes.

 Si. Mi hyung era un golpeador de primera. Si quería llamar tu atención: un golpe, si quería jugar: seguro tienes varios golpes, si te quería molestar: golpe. Tenía las manos pesadas el desgraciado.

DOS AÑOS DESPUÉS

Tras unos días de notarlo más raro que de costumbre. En el recreo, me pidió que lo acompañase a comprar dulces (si, fan de los chocolates D.o). así lo acompañé. En el camino , hablamos de las chicas que se le tiraban encima esa semana. Gracias a la confianza que crece tras dos años de amistad.

-¿y cómo vas con Aimara?... la chica que te dejó la carta el otro día?- pregunté por pura curiosidad. Encerio, era sólo curiosidad… ¡bueno no tan pura!... como sea.

-bien, es una persona agradable… pero la veo más como amiga, que como posible novia… ¿vos que decis?- me pregunta mi opinión. No sé qué decirle. Me tomó por sorpresa el enano… sí, ya lo pasé finalmente.

-mmm si ves que no va … no va. ¿queres que te presente alguna de mis amigas? Por ahí, y te gusta alguna, nunca se sabe.- dije lo más tranquilo que pude.

-si, eso sería bueno… pero hay algo que quiero preguntarte igual.-dijo algo ido… ese cambio de actitud me asusto. – nahh… mejor deja no es nada- dijo quitándole importancia. Lo que me hizo enervarme. ¿para que me habla en ese tono si lo va a dejar por la mitad?

-¡¿cómo que nada?! Ahora me lo contas.- respondí bastante sacado de mis casillas.

Venía tan distraído con la estupidez que planteo, que no me di cuenta que estábamos en las escaleras que usamos como atajo… ya que están a mitad de camino , escondidas y casi nadie la conoce.

-me decís enserio, ¿enserio querés saber?- me pregunto entre desesperado y ¿pícaro?... no entendía que estaba tramando, pero siempre termino mal en sus travesuras.

Asi, sólo llegué a asentir… de repente, me veo acorralado contra la pared. Frente a frente. Y observo sus pupilas totalmente dilatadas observando mis labios; exactamente igual que yo. Por lo que termina de restar el espacio que nos separa.

 Fue mi primer beso. Era tan perfecto que asustaba. Porque a medida que iba guiándome, me gustaba más. Enredé mis manos en su pelo, el me abrazo. Y nos mantuvimos así. Dándonos caricias, hasta terminar las horas de instituto.

Ninguno dijo nada. Ninguno aclaró que fue lo que sucedió. Pero se notaba en el aire. Luego de ese beso en las escaleras, se terminó convirtiendo en nuestro lugar. Seguíamos siendo los mismos amigos de siempre, frente al resto. Pero esas bromas, toqueteos… ahora tenían un significado distinto.

Como decidimos mantenerlo en secreto, fue algo difícil. Ya que nuestros padres no eran tolerantes. Ni siquiera les gustaba hablar de homosexualidad.

Siempre luego de salir de clases salíamos, al igual que del club. Cuando queríamos cambiar la rutina nos veíamos en otros lugares, centros comerciales cines, etc. Sólos.. nos gustaba así.

 

 

Estuvimos bien por un tiempo, hasta que al cumplir los diecisiete; llegó una noticia para mi familia. Al parecer debíamos irnos a Inglaterra, porque mis padres fueron asignados a una empresa de la compañía. Tuve que irme. Y esa despedida fue lo peor que tuve que soportar hasta ahora.

-desearía que no te fueras- dijo entre lagrimas mi ojitos- si, yo igual… te voy a extrañar mucho… pero por favor, no dejes de vivir Kyung… algún día nos volveremos a ver… y me vas a contar todo lo que hiciste… ¿de acuerdo?- dije también pero llorando. Tras un fuerte abrazo y un par de besos dejé Seúl y parte de mi corazón.

 

Hoy a las cinco de la mañana; a mis veinticinco años, me levantaba para ir al trabajo. Como hace seis meses desde que vine a Seúl nuevamente.

Al prender la radio como la rutina que hago desde siempre, escuche la canción “More than Word”. Y todo esto vino a mi mente. Generándome unas lagrimas de emoción. Y deseando que siempre esté bien. Es de ese tipo de amores que siempre se recuerdan con una sonrisa. 

Notas finales:

y pos ahi fue mi creación... espero les haya gustado :)

byee!


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).