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Amor Enfermizo por Sailor cosmos

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Notas del capitulo:

Gracias a:

Shigure-san
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MeroNiakheel
User Alaska
kahyra26
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anonima

por comentar .33 las adoro~~ este es el penultimo cap º3º

Mente danneggiato

 

—Te has quedado mucho rato pensando

 

—No es nada…—murmuro suspirando.

 

.

 

.

 

.

 

— ¿No piensas decir nada? —pregunto algo molesto, entrecerrando los ojos. Francesco estaba ahí de brazos cruzados con su sonrisita pedante de siempre

 

—Aun no es necesario, debo decir que de entre lo más fastidioso de este asunto es el hecho de esperar a alguien—bufo con cierta molestia

 

—¿Y a quien estas esperando? Nadie te puede salvar de algo como esto—rio sumamente divertido, aunque Francesco seguía fresquito como lechuga recién lavada.

 

—Yo no estaría tan seguro de eso—escucho el seguro de la puerta –debido a que estaban en esas salas de interrogatorio- y sonrió de forma aún más notoria al ver a alguien entrar

 

—Mierda que maldito coñazo el venir a este lugar, ¿pueden ponerlo aún más escondido? —Gruño quien entro, tenía una gabardina roja, ropa casual bajo esta, cabello castaño con cierto rojizo y cara perfecta—Oh… Parece que hablaban de algo muy importante

 

—De hecho llegaste bastante justo—respondió Francesco poniéndose más recto—Ahora… ¿comenzamos? Quiero ir a ver a McQueen y a Edward

 

—Tsk, no cuentes con ello—gruño McMissile cada vez más enfadado

 

—Me siento realmente ofendido señor McMissile. Pero ya que estamos en estas… Me llamo Génesis Rhapsodos, serviré como abogado de Francesco Bernoulli—se presentó con una sonrisa galante y coqueta

 

Génesis Rhapsodos, él es un comandante… muy pocas personas pueden siquiera hablarle, es tan antipático así como con un gran problema de superioridad... ¿Cómo le conoce? —se preguntaba interiormente viéndoles intercambiar una que otra palabra de forma tranquila y hasta burlona—Un momento…

 

—Entonces señor McMissile… ¿algo que quiera preguntar? —dijo de forma mal intencionada y ciertamente rencorosa

 

—Jump. Lo obvio sin embargo es necesario para ver cuantos años te mete el juez en la cárcel

 

—Mi cliente no ira a juzgado—sentencio Génesis cruzándose de brazos sorprendiendo un poco a McMissile — En primera  él no ha sido acusado de ningún crimen por la supuesta víctima, así como tampoco ha incumplido ningún tipo de ley

 

—Mantuvo cautivo a un hombre por 11 meses, en los cuales se negó completamente a ayudar por ser el mismo secuestrador, Rayo McQueen no estaba por su propio deseo encerrado, eso es seguro. Sin embargo y para lo que estoy aquí que es lo que nos atañe, ¿porque lo secuestraste justo antes de su boda? ¿Tantas ganas eran las de amargarle la vida?

 

—Me lo lleve simplemente porque lo amo—dijo con toda la tranquilidad que tenía dentro de su ser, impactando de cierta manera a McMissile que tenía unas ganas bestiales de pegarle un tiro entre ceja y ceja… o repetir lo mismo que el hizo a Miles en su celda—Y como notaste, el a mi también

 

—Un simple síndrome de Estocolmo, no solo con eso, tú tienes un muy severo problema de ira así como un gran trastorno en lo que viene siendo la realidad, ¿enserio crees que te ama? Tan solo es algo pasajero que tarde o temprano terminara muriendo al estar de nuevo con las personas que quiere—decía con intenciones de ver la reacción del italiano, cosa que no tuvo tiempo de aparecer

 

—Deje de usar jueguecitos psicológicos con mi cliente, al parecer no es tan serio como dicen que es. Ahora, han pasado alrededor de 6 u 7 horas desde que la supuesta víctima esta libre y aún no ha dado siquiera la más mínima señal de querer demandar, o pedir algún tipo de castigo hacia Francesco…

 

—Casi un año incomunicado, quiero tomar represalias o no, no va a borrar el hecho de que este hombre él tuvo secuestrado y en secreto de todos aquellos que fueran conocidos. —decía entre dientes, la paciencia le estaba durando poco, a veces quisiera volver a ser del otro bando solo para matar al acusado de una vez

 

—Creo que ya entiendo tu rabia—intervino Francesco captando la atención de McMissile—Te da envidia que a mi si pueda amarme ¿verdad? Hasta ahora nunca se me pudo ocurrir que tu sintieras algo por el… Aunque no es difícil el hacerlo realmente. Sin embargo…—su mirada se oscureció bastante—… Aléjate de él… No iré a la cárcel, ni siquiera me acercare a ella, sabes, después de investigar mucho encontré algo muy…interesante en lo que vendría siendo el historial médico de McQueen…—Génesis saco una –enorme- carpeta, de la cual saco un documento

 

—“Rayo McQueen” es una persona con un ligero trastorno psicológico debido a fuertes traumas y abusos de la niñez, no puede estar bajo extrema presión o estrés, es sugerible que para su caso pase algún tiempo fuera de contacto con cualquier tipo de problema, noticia y/o persona que pueda alterarle de manera profunda, ya sea algo insignificante su autoestima tiende a bajar de manera dramática llegando al punto de querer acabar con su vida, a pesar de ser totalmente capaz de hacerse cargo de sí mismo siempre necesitara a alguien para apoyarse en lo que a emocionalmente se refiere

 

—Y con esto que me quieres decir—entendía por donde iban las cosas, y le estaba molestando, verdaderamente quería dejarle en ridículo

 

—Quiero decir que, haciendo caso a lo que esta sugerencia medica ordeno, no estuvo mal el mantenerle incomunicado, siendo esta situación favorecedora para el

 

—No trates de adornarlo Bernoulli, es un crimen lo diga quien lo diga. Aparte ¿tú crees que enserio no iras a juicio?

 

—Tienden a ser bastante públicos, este caso será completamente aislado, tenemos la firma de cuatro superiores para evitar dicho acto además de anular por completo este asunto de lo que sería toda la historia—contaba Génesis con una sonrisa de oreja a oreja

 

— ¿Cuatro superiores? ¿Y quiénes son esos superiores si se puede saber? —pregunto frunciendo el ceño. Se escuchó el seguro de la puerta, por esta entro Sephiroth moviendo su larga melena al caminar de forma elegante como de costumbre

 

—buenas McMissile—saludo con cinismo. Le entrego un papel al agente que miro las cuatro firmas que aprobaban el procedimiento. La primera de Sephiroth Crescent, la segunda de Génesis Rhapsodos, la tercera de Angeal Hewley y por ultimo de Zack Fair. Aun no comprendía del todo de donde le conocía, aunque eso le recordaba a lo que le había dicho Francesco en aquella casa…

 

—Firmaría yo mismo como General pero digamos que no estaría muy bien visto ¿no te parece? —pregunto de forma mal intencionada.

 

—Aja…—farfullo leyendo y releyendo el maldito documento. Aunque ahora cobraba sentido, con razón estaba tan confiado, no solo su título sino que con estos amigos no era para nada extraño, la corrupción de verdad era una cosa horrible

 

— ¿Algo más que quieras discutir conmigo McMissile? —dijo con saña

 

.

 

.

 

.

 

—¡¡MCQUEEEEEEEEN!! —el solo escuchar reverendo coro se despertó, aún estaba medio anestesiado, aunque eso no le impidió notar que todos sus amigos estaban rodeándole

 

—Ho…la…—saludo aguantándose el bostezo, aún estaba más dormido que despierto, aunque eso se acabó al momento en que todos le dieran un abrazo de oso—No…respiro….

 

— ¡Duraste todo un año desaparecido! —dijo Flo cuando soltaron a  McQueen

 

—Sobre eso…

 

—Creímos que te habían asesinado… ¡¡Y TU AUTO TAMBIEN SE LO ROBARON!! —lloraba Wildo junto a Luigi

 

Wow…cuanta prioridad…—pensó sintiendo un ligero tic en la ceja derecha—Oigan…

 

—De seguro a que a Francesco lo meterán preso de por vida—aseguraba el Sheriff de brazos cruzados y una enorme sonrisa

 

—Sally casi se muere de la angustia—dijo Rojo con una expresión algo tranquila como de costumbre

 

—Oye…—intentaba hablar y aclarar un poquito las cosas pero ¡realmente estaban más enfrascados en decirle cosas que ya sabía!

 

—Pronto volverás a Radiador Spring, también volverás a las carreras y Sally—Ramón no lo dijo con mala intención ni nada, pero se le acabo al paciencia

 

— ¿¡PUEDEN DEJARME HABLAR!? ¡¡GRACIAS!! —Grito exasperado, todos guardaron silencio algo sorprendidos de esa acción—Oigan, entiendo que fue año y todo eso pero…

 

—RAYITO—la cerecita sobre el pastel llego, tirándose sobre el –como si no le hubieran abierto bajo el estómago para sacarle los intestinos- agarrándole la cara y plantándole el beso más pasional de toda la historia, aunque claro, Rayo al sentirse sin aire y realmente incomodo se separó, aunque eso no evito que Sally s ele guindara cual garrapata del cuello—Te extrañe tanto~

 

—Sally…—balbuceo, oh dios, ahora que le decía

 

—Sabía que estabas vivo en algún lugar, siempre lo supe, pero tranquilo todo volver a ser como antes, volveremos a organizar todo, aunque tendría que arreglar el vestido pero cuando volvamos podremos seguir con la boda y…

 

—Ya no vamos a casarnos—dijo de forma lo suficientemente audible como para que todos le oyeran

 

— ¿Q…ue? —balbuceo separándose de él. McQueen se enderezo en la cama, sentándose de buena manera y poniendo las manos en su regazo—Que estás diciendo… tu y yo vamos a casarnos… como antes de que te llevaran —por suerte, ella aún no estaba enterada de quien se había llevado a  rayo, tan solo sabía que había vuelto—… se-será en el mismo lugar… o en otro si quieres… comprare otro vestido… te cortaras el cabello y… y…—balbuceaba de forma alterada entrando en pánico

 

—No espera… Sally yo no… puedo—murmuro, aunque….

 

— ¿Y ahora por que no puedes? —Reclamo Flo ofendida—Todo este tiempo ha estado buscándote…

 

—Entiendo pero…

 

— ¿No vas a ser tan hijo de puta o si chico? —pregunto Sheriff de forma venenosa

 

—Si me dejaran explicarles…—las maquinas empezaron a sonar, dando a denotar el creciente miedo y pánico en el rubio

 

— ¡¿Explicar que piensas abandonar todo solo por algo así?! —Chillo Luigi siendo sostenido por su compañero –Wildo- de forma dramática

 

— ¡¿Podrían escucharme?!

 

— ¿Ya no me amas? —pregunto Sally en un tono entre dolido y algo que no supo identificar.

 

—E-ese no es el problema, aun te amo pero…—balbuceaba intentando calmar las cosas—Con que esto se siente ser una perra… Que horrible—se auto compadeció de sí mismo

 

— ¡¿ENTONCES POR QUE?! ¿¡AH!? ¿¡POR QUE!? —grito alterada. Sin embargo y antes de que respondiera

 

—Madre mía, vaya escandalo te montaste aquí ¿no crees? Si de por si me parecías sumamente irritante antes ahora solo lo empeoraste—todos vieron a quien hablo, que venía con pasos ligeros y elegantes—Ahora, si solo vienes a gritar y alterarlo mejor lárgate

 

—Francesco—murmuro McQueen, al verlo mejor se dio cuenta de que tenía un bulto en brazos

 

—McQueen~—contorreo pasando a los pasmados habitantes de Radiador Spring y se sentó en el borde la cama—Estaba llorando allá abajo, se notaba que te extrañaba—dijo cediéndole a Edward el cual dejó de quejumbrar apenas estuvo en los cálidos brazos de McQueen, quien le dio un beso en al frente

 

—Llevo todo un día sedado por una psicópata que pensaba mutilarme… ¿Cómo lo sacaste? —pregunto, aunque sintió cierto tirón así como un intento de chuparle el pezón

 

—Este papelito—mostro la muestra de ADN—Sirvió como pase para que me lo dieran. Aparte ya tiene hambre, tal parece que no le gusta mucho la leche maternizada

 

—Oh… Si claro, dejarme sin pectoral es mejor para ti no—se quejó McQueen y Edward soltó una risita—Pásame la tijera—Francesco tan solo hizo lo que supuso que haría el rubio, corto la camisa del hospital dejando a la vista el pecho de McQueen y una pequeña herida en el pectoral derecho, McQueen pego a Edward en el izquierdo para evitar cualquier problema

 

— ¿Que te paso ahí?

 

—Soy un imán de problemas, luego te cuento—dijo en medio de un quejido, aunque toda la escena era vista de forma perpleja por todos. Mate se acercó y haciendo gala de su poca vergüenza o quizás de su extrema curiosidad se colocó al otro lado de la cama

 

— ¿Quién es el?—pregunto a McQueen el cual le miro y luego a Edward

 

—Es Edward, es mi… bueno, nuestro hijo—dijo al sentir la mirada penetrante de Francesco en la nuca

 

— ¿Suyo? ¿De ustedes dos? ¡¡Eso no es posible!! —chillo Flo entre impresionada y pasmada

 

—Se hizo de la manera tradicional, fue muy sorpresivo—comento Francesco mirando a Sally con malicia—Pero bueno, el solo hizo que me ame aún más—dijo dándole un beso a McQueen en la cabeza

 

—No hagas eso frente a otros, por amor a dios—resoplo, más que todo por Sally, de verdad se sentía espantoso ser una perra—La explicación es larga y ahorita no me apetece darla, cuando estemos más tranquilos lo hare pero… por ahora solo sepan que él es Edward, es mi hijo… y que lo parí—dijo en un suspiro

 

— ¡¿CREES QUE CON TREMENDA MENTIRA VAS A ENGAÑARME?! ¡¿O QUE LO VAS A ENGAÑAR A EL?! ¡¡RAYO ES MIO!! —grito Sally, aunque el susto que el pego a McQueen no fue normal pues brinco, y la maquina se alboroto, el pulso de McQueen subió bastante, con ello escupió sangre, el sabor metálico se estaba quedando impregnado en su lengua

 

—Mira maldita—todos abrieron sus ojos con suma impresión, desde siempre habían visto a Francesco coquetear con Sally… ¡¡ESTO ERA MUY BIZARRO!! —Si lo único que vas a hacer estando aquí será gritar y causarle más dolor del que ya tienes ve saliendo o yo mismo te saco. ¿Qué parte de que ahora es mío no captaste? ¿Tan pequeño resulto ser tu cerebro de avestruz? ¿O acaso necesitas algo más grafico? Está bien, por mi perfecto

 

 

—¡¡Frances-umf!! —se quería apartar, esto estaba tan… tan,… horrible que no quería empeorarlo, aunque con Edward en brazos era un poco más difícil. Sally pasados unos 20 segundos salió llorando de la habitación y solo en ese momento Francesco dejo de besar a McQueen—SA…

 

—Déjala, es mejor que lo entienda

 

—NO ES MOTIVO PARA QUE—antes de seguir con el regaño Edward se puso a llorar—Ay no…—murmuro intentando calmarle –cosa bastante efectiva- Edward al parar de llorar se puso a tocarle el pecho a  McQueen—No es motivo para que la trates así

 

—Se me había olvidado que eres un Empedernido—bufo Francesco, Mate parecía aguantarse algo, McQueen ignorando lo que dijo su… ¿podía considerarle pareja? Miro a Mate

 

— ¿Qué pasa? No te vas a tirar del edificio en paracaídas y no me vas a arrastrar contigo—advirtió con los ojos entrecerrados moviendo ligeramente a Edward a ver si se dormía, aunque parecía bastante enérgico

 

— ¿Lo puedo cargar? —pregunto con una sonrisa de oreja a oreja. McQueen curveo un poco los labios, era mate, quizás lo dejara caer… aunque si hasta Layla pudo llevar a este bebe en su lomo Mate no sería lo peor

 

—Está bien…—dijo extendiéndolo un poco—Ahora está más grande pero cuidado con la cabeza—le indico, Mate con cuidado lo alzo y Edward empezó a tocarle la cara, con un dedo le tocaba los dientes ligeramente sobresalientes

 

—Soy tu tío Mate—se presentó con el pecho inflado, aunque Flo apareció del más allá y se lo quito

 

—Yo soy tu adorable Tía Flo, la más linda que vas a tener, aunque no tan bella como tú—decía chucheándolo, aunque Edward solo ladeo la cabeza, mostrando cierta timidez, McQueen suspiro un tanto aliviado

 

—te dije que todo saldría bien—Francesco le dio un beso en la frente y le acomodo el cabello para luego amarrarlo en una cola de caballo, McQueen seguía viendo como su amigos se iban quitando a Edward para presentarse y buscar una sonrisa de este

 

—Ya se. ¿No deberías estar en la sucursal con McMissile? —pregunto mirándole de arriba abajo

 

—Nah… Bueno realmente me eche una pequeña escapada, pero Génesis se encargara de todo, McMissile en este momento está echando chispas—se vanaglorio recordando al agente que estaría un buen tiempo de mal humor

 

— ¿Iras a Juicio? ¿Además que excusa planeas dar? No me sorprende que ya todo el mundo se haya enterado de que estoy aquí y los periodistas empiecen a acosarme—bufo tomando su cola de caballo y trenzándola

 

—De eso me encargo yo con Génesis, tan solo no se darán mayores detalles, tu explicaras la situación solo a tu patrocinador, el cual espero que no venga en camino por que también querrá matarme…

 

—Por supuesto que no lo hará, quizás solo te demande y consiga una orden de alejamiento—rio divertido, hace unos 3 años –desde su segunda copa pistón más o menos- Stanley* se comportaba como una especie de padre ganara en primer lugar o no en cualquier carrera siempre le felicitaba y por fin se mostraba

 

—Eso no es muy motivador—dijo con una especie de Mohín. En eso Mate cual niño pequeño llego saltando hacia McQueen

 

—¿Puedo ser el padrino?  ¿Puedo ser el padrino? Dime que si por favoooooooooooooor—suplico refiriéndose a Edward el cual estaba a punto de llorar por tanta gente discutiendo

 

—Obviamente…—un silencio en la habitación se hizo presente—… Si, eres mi compadre de toda la vida, pero yo seré el padrino de tus hijos, advertido estas— dijo como si fuera un castigo, Mate coloco su mano para hacer el saludo que se estaba haciendo eterno

 

—Cada año lo extienden—suspiro Ramón divertido de verlos, en eso Edward empezó a llorar

 

—Mi bebe se cansó de tanta gente, no está acostumbrado—rio McQueen, Francesco tomo a Edward y lo sentó con cuidado entre las piernas de McQueen, le entrego un pequeño peluche de conejo y empezó  morderle las orejas

 

—Es tan tierno, provoca comérselo a besos—dijo Flo maravillada—y dime ¿cuando iras a Radiador Spring? A pasar un rato como siempre

 

—Realmente no lo sé, me perdí una temporada completa y dentro de dos meses empezara otra, mientras se arregla los asuntos con este pequeñín no creo tener mucho tiempo

 

—Bueno, siempre eres bienvenido, estés con Sally o no… Pero tú, algún otra cosa extraña y no dudare en deformarte la cara—advirtió Sargento que aún no estaba del todo de acuerdo pero con el nuevo soldadito a todos se les había ablandado el corazón y también se habían calmado bastante, no siendo el este el caso de Sally obviamente

 

—gracias…—murmuro acariciando el cabello rubio del  bebe. Aunque la puerta se abrió nuevamente, esta vez y en primera con un enorme peluche de oso, creando una duda general de quien estaba atrás

 

—¡¡RAYITO!! ESTAS TAN FLACO COMO SIEMPRE…O bueno realmente no veo nada—Rayo golpeo su frente con su mano, lo que faltaba

 

—Termina de pasar de una vez Fair—el peluche fue derrumbado ahora mostrando una descomunal cantidad de globos—Deberían hacer las puertas más grandes—McQueen quería clavar la cabeza en el suelo, podía oler el desastre por venir

 

—Génesis si te apuraras no me molesto

 

—Cállate anciano

 

— ¡Terminen de entrar!

 

Edward veía con suma ilusión el montón de globos de colores los cuales aquella persona soltó para que volaran al techo, dejándolo completamente cubierto entre los colores. Por otro lado quien cargaba el peluche gigante lo dejo al lado de la cama del bebe

 

—Ahora si… SI ESTAS TAN FLACO COMOD E COSTUMBRE—celebro el pelinegro con una cicatriz en la mejilla derecha

 

—Claro que no, ahora estoy más regular, ahora ¿me explican la razón de forrar la habitación con todo esto?

 

—Que mal agradecido eres—refunfuño Génesis—Libero a tu novio de una gente que anteriormente fue un sicario y así me agradeces, un gran desconsiderado—estaba siendo melodramático pero así era el

 

—te tardaste casi 8 horas en llegar, así que no te pases—dijo Sephiroth con un una cesta que dejo en la mesa al lado de la cama—Además yo solo vine a ver si sigues bien y a ver a mi sobrino

 

— ¿Sobrino?

 

—Mi sobrino—respondieron los cuatro recién llegados

 

—Vaya… Edward tendrá mucha familia—silbo Francesco y todos se echaron a  reír

 

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Debido a la influencia lograron que Edward pudiera quedarse con McQueen en la habitación, en la cual Layla de nuevo dormía a los pies de la cama, con una patita vendada debido a que estaba lesionada. De forma silenciosa a las 2:12 de la madrugada la puerta se abrió, dejando entrar la luz del pasillo a al habitación, iluminando el rostro durmiente de McQueen y una barrera de almohadas para impedir que el bebe fuera a caerse

 

Quien entro inyecto una gran dosis de anestesia atravesó del suero que estaba conectado al brazo de McQueen. Le dio un suave beso en la frente y acaricio el cabello rubio

 

—Ya te recupere… pero sigues con el estúpido hechizo de Bernoulli… Tranquilo, te liberare de el—aseguro con voz suave e inocente, bajo su vista a Edward que dormía plácidamente—Si tan solo este niño desaparece… ya no tendrás ningún vínculo con Bernoulli y volverás a mi… ¿verdad que si?

 

Cargo con cuidado al bebe entre sus brazos meciéndole con lentitud, aunque habían señales de que se pondría  a llorar

 

—Eres tan bello como McQueen… Como me gustaría que en este momento no existieras—dijo delineando el rostro redondo, sintió un jalón en la pierna, al mirar abajo vio a Layla jalándole el pantalón, aunque cuando intento morderle la pierna, ella le tomo de la nuca y sin cuidado le tiro al baño y cerró la puerta—Ahora… ¿que tal si paseamos un rato?

 

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—Umm…—abrió lentamente los ojos, se sentía obligado a dormir pero algo en medio de su subconsciente no le permitía volver a quedarse dormido. Con cuidado palpo la cama. Al no sentir el pequeño cuerpito al lado suyo se levantó de golpe— ¿Edward? —Llamo esperando al menos un quejidito –pues le bebe reaccionaba bastante bien a su nombre—… ¿Francesco se lo habrá llevado? —se preguntó a sí mismo, un estaba un poco caliente le lugar donde había dormido el niño

 

Con dificultad se arrancó el suero del brazo, ya después se aguantaría le regaño. Se colocó unos zapatos que había ahí en el suelo y una camisa blanca que le había dejado Francesco por la tarde. Al levantarse se apoyó de la pared, las piernas le fallaban, cosa rara, el que estuviera a medio dormir no significaba que le fallaran así

 

Al escuchar una especie de rasguño fue hasta la puerta del baño y al abrirla Layla empezó a ladrarle, acto seguido le empezó a jalar el pantalón

 

—¿Sabes dónde está Edward? —un ladrido, no sabía si eso era un sí pero Layla salió corriendo—Ah…

 

Empezó a caminar por los pasillos sintiendo un escalofrió tras otro, parecia tan típico de película de terror, aparte habían indicaciones en las paredes pero no entendía ni medio rábano porque estaban en italiano. Entendió maternidad de milagro, por aun así no sabía a donde pudo haberse ido Francesco –que era quien creía que lo había hecho- con Edward

 

—genial… ahora me perdí—balbuceo con el ceño fruncido. Al escuchar unos pasos volteo a ver— ¿Francesco?

 

—¿Que haces aquí? Me asuste de no verte en la habitación, además Layla llego corriendo  jalarme—dijo mostrado a animalito en sus brazos

 

—Un momento… ¿en dónde dejaste a Ed?

 

— ¿a Ed? Pero si él estaba durmiendo contigo. Fui a la casa a buscar ropa para ti y para él, como salen mañana…

 

—Pero no estaba en la habitación, crie que tú lo habías llevado a algún lado. —Layla salto de los brazos y empezó a ladrar—Layla sabe dónde está—dijo levantándose de forma dificultosa

 

—¿Qué te pasa?

 

—No importa, solo… busca a Sephiroth, McMissile, Zack… a quien quieras, si alguien se lo llevo…

 

—Tranquilo, no saldrá del hospital, pero tú deberías…

 

—Yo lo busco, tu solo has lo que te estoy diciendo, ¿podrías tenerme un poco de confianza Francesco?

 

—Esta… bien…—dijo de forma dudosa, no era que no confiara en el, únicamente que se preocupaba demasiado, así que salió literalmente corriendo a encontrar a esos flojos que ahora de seguro estaban roncando y babeando

 

—Muy bien… Layla, vamos—dijo caminando de forma un poco más rápida, ya recuperándose un poco. Layla iba olfateando el suelo cual sabueso que busca su juguete –o presa en este caso-.

 

Caminaron casi dando vueltas por todo el hospital hasta que llegaron a la zona donde hacían cirugías y operaciones, no había nadie en esa zona, y aunque examino varia salas no veía nada, eso hasta que escucho un llanto y lo más rápido que pudo entro ahí, encontrando a Sally sentada en la cama de operaciones cargando a  Edward con una sonrisa torcida

 

—Gracias a dios—no le presto mayor atención a  la sonrisa torcida de Sally —Creí que algún extraño se lo había llevado—dijo muchísimo más tranquilo, aunque Layla seguía gruñendo

 

— ¿Sabes? Cuando ese maldito te llevo me hice una prueba de Embarazo—McQueen se quedó rígido, ósea… ¡¿había embarazado a Sally?! —Pero… resulta que soy estéril—si pretendía jugar con sus emociones y –desde hace cierto tiempo- frágil estado mental lo estaba haciendo de puta madre—Pero resulta que hasta tu pudiste tener un bebe… ¿te digo la ironía? Lo odio tanto…

 

—Espera que estas haciendo... —dijo al verla jugar con un bisturí en una de sus manos

 

—Ese maldito infeliz te está engañando, tienes un bebe con él, solo fue para que te quedaras con él y te apartaras de mí... Pero tranquilo el ya no podrá atarte—hablaba de maner sicotica, alzando y jugando con el bisturi cerca del cuerpito del bebe—si lo mato no estarás con el… ¡Hasta Francesco lo dijo! “Esto solo hace que me ame más”…

 

—Sally no hagas una locu…

 

—¡¡LOCURA ES LAS QUE TU ESTAS HACIENDO!! ¿¿¡¡COMO SE TE OCURRE ENAMORARTE DE EL!!?? ¡¡CAER EN SU TARADO ENCANTO Y DEJARME A MI!! ¡¡A MI!! ¡¡HE ESTADO CONTIGO DESDE HACE DOS AÑOS!! — Empezó a gritar de forma muy alterada, apretando el objeto punzante en su mano y haciendo llorar a Edward, McQueen iba dando pasitos pequeños acercándose a ella—TU ERES MI ESPOSO, ¡¡MIO!! Y SI MATANDO A ESTE NIÑO HAGO QUE BERNOULLI LO ENTIENDA LO HARE

 

—N-no hace falta—dijo en un tartamudeo, sentía su estómago revuelto, el corazón al punto de salirse de su pecho—Claro que te sigo amando y nos casaremos

 

— ¿Verdad que si? Sabía que no podías hacerme algo como eso—decía entrando en una calma demasiado sorpresiva, pues fue de un momento a otro. McQueen ya estaba a unos 10 pasos de ella—Te cortaras el cabello~ Volveremos a escoger un salón~ Comprare otro vestido~ Compraras otro traje—decía sin prestarle la más mínima atención a que McQueen ya estaba casi frente a ella—¡¡Y!! —McQueen dio un ligero respingo al escucharle

 

— ¿Y? —pregunto alargando el brazo de forma lenta

 

—¡¡Le mandare de este niño su cabeza con la invitación!! —justo antes de si quiera acercara el bisturí al cuello de Edward McQueen le arrebato al bebe y la tumbo al suelo, aunque haciéndose una cortada en la mano

 

—No logro hacerle nada—suspiro aliviado, acaricio la cara de Edward con su mano y se dio cuenta de su herida

 

—¡¡MCQUEEN!! —chillo Sally empezando a incorporarse

 

—¡¡Francesco si es lento!! —pensaba poniendo a  Edward en la camilla, en eso noto que había una jeringa con algo dentro, quizás anestesia—Sally calmate…—dijo intentando alcanzarla, eso hasta que sintió el peso de la mujer en su espalda

 

—Lo matare… ¿¡NO VES QUE TE ESTA HECHIZANDO O ALGO ASÍ!?

 

—¡¡Es un bebe por amor a dios!! —le refuto dándose la vuelta y con el movimiento errático le hizo una ligera cortada en el cuello

 

—¡¡NO ME IMPORTA!! —grito intentando pasar por encima de McQueen, al menos tumbarlo o algo, aunque McQueen por más débil que estuviera seguía siendo un hombre y además de eso más alto y pesado que Sally, así que esta no pudo hacer más que medio inclinarlo hacia atrás

 

—Entiendo que estés molesta pero el matarlo no arreglaría nada, entenderlo

 

—Tú me amas a mi…. —empezó a balbucear cuando McQueen le tenía agarrada de las muñecas—… Ese niño hace que ames a Francesco… ¿¡QUE TENGO QUE HACER PARA QUE TE DES CUENTA DE QUE SOLO ME AMAS A MI!? Sera que… ¿te gusto estar secuestrado? Que te encerraran…

 

—Claro que no, lo detesto y créeme que si no fuera porque lo quiero Francesco no tendría huevos—aseguro McQueen aumentando la fuera del agarre por forcejeo de Sally

 

—NO ME IMPORTA. ¿Sabes qué? Un niño nuestro también sería un simple estorbo, tendrías que darle de tu amor a él también y sería una completa mierda

 

— ¿Cómo puedes hablar de esa manera? —pregunto algo impresionado y herido del comentario. De forma milagrosa llego hasta donde estaba la jeringa y tanteándolo con la mano, dejándose hacer una que otra cortada en la cara y cuello la tomo y de golpe se la clavó en el cuello, donde suponía que estaba la vena—Que sea anestesia, morfina, lo que quieras pero que se duerma…—suplicaba interiormente

 

—¡¡Mc…Queen…!!—dijo por fin soltando el objeto punzante y quitándose la jeringa del cuello

 

—Sa—un disparo impacto contra la pierna derecha de Sally, al cual aún no estaba tan adormecida como para no sentir el dolor del disparo, lo que la hizo gritar de dolor. McQueen miro en dirección a donde escucho el disparo, Francesco tenía un arma negra en la mano y miraba de forma gélida a Sally

 

—Me costó más que me dieran el arma que encontrarte. Gritas como una maldita enferma mental. Bueno, llevo cierto tiempo esperando esto—Al acercarse lo suficiente le apunto a la cabeza a Sally que gimoteaba del dolor. Al apretar el gatillo alguien le movió y la bala pego con la pared, miro a su lado, encontrando a McQueen y a pesar de ser el, siguió con una mirada fría y amenazante—No te metas

 

—¡¿Cuál es la obsesión de matarse unos a otros?! —pregunto enfadado—Ya tienes bastantes problema, tan solo no lo empeores

 

—¡¡Iba  a matar a  Edward y mira cómo te dejo!! —reclamo soltándose con demasiada fuerza del agarre de McQueen

 

—¿Crees que me importan estos rasguños? Lo evite, no pasó nada, tan solo esta trastornada y es culpa mía

 

—Como puede ser culpa tuya que este más loca que una cabra…

 

—Ese no es el punto, si hablamos de trastornos no somos los más indicados para hablar considerando que eres tan solo un impulsivo y agresivo así como yo un traumado de la infancia que intentó suicidarse en su adolescencia

 

— ¿A qué punto quieres llegar? —ladro enfadado

 

—En que no tiene por qué ser así, el que la mates no lo va a solucionar, que te quiera a ti no significa que aún no la quiera, además enserio crees que a  Edward le alegrara la idea de que asesinaste a alguien que no es realmente malo?

 

Se quedaron viendo unos cuantos segundos, Francesco no pudo con la mirada piadosa de McQueen y bajo el arma. McQueen se la quitó y la lanzo, para luego abrazarlo brevemente y acto seguido tomar a Edward en brazos

 

— ¿Entonces qué? ¿Solo… pasara y ya? —pregunto algo rencoroso pero acariciando el cabello de McQueen de forma cariñosa

 

—Confía en mí… ¿sí?

 

 


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