////Grimmjow/////
-Grimmjow…ahhh…Grimmjow mírame soy tuyo, solamente tuyo.
Claro que lo eres. Sonrío mirando su rostro erótico y suplicante al igual que su cuerpo desnudo y obsceno acercándome para besarlo sintiendo la suavidad y humedad de sus labios hasta que percibo un aroma extraño ¿Kurosaki? Abro los ojos escupiendo al ver que otra vez es ese puto caballo lamiéndome. Lo empujo levantándome y escupiendo ¡Joder deja de lamerme cabrón! Me limpio la boca corriendo hacía el pequeño riachuelo que hay cerca enjuagándome la boca.
El estúpido caballo me mira divertido casi burlándose de mi mientras yo lo miro con asco, pensar que estaba besando a Kurosaki cuando era ese idiota animal que tuvo que despertarme de mi sueño ¡¿Pero en qué mierda pienso?! Apenas vea a ese cabrón de Kurosaki me lo voy a follar hasta matarlo por haberme mentido. Cuando le ponga las manos encima me suplicará que no lo asesine cruelmente.
Miro a mí alrededor viendo algunas lagartijas pasar entre la tierra árida y las rocas. Me detuve en la parte baja del cañón ya que estaba muy cansado por andar todo el día cabalgando aparte de que ya no falta mucho. Apenas rodeé el cañón algunos kilómetros más y habré llegado a Karakura. Joder ya necesito dormir en una maldita cama, eso de andar entre rocas pasto y arena me está matando.
Pues si quiero dormir a gusto será mejor que me vaya de una vez, rápidamente me aseguro que el peor caballo del mundo beba un poco de agua tan solo para emprender mi viaje. Ahora que lo pienso tendré que llegar por la parte trasera de la ciudad, no vaya a ser que ese bastardo viejo millonario tenga más hombres esperándome. Aunque creo que él da por hecho que me asesinaron aquella noche.
Me detengo en la parte alta del cañón sonriendo al ver que hacía abajo se encuentra Karakura comenzando el descenso tan rápido como puedo. Creo que no iré a mi hogar directamente así que iré a hacerle una visita al idiota de Starrk. Una vez que llego rodeo por la parte del bosque pasando de largo por el campamento de los gitanos. Apenas veo la casucha de Starrk no puedo evitar sonreír aún más.
Amarro el caballo a un árbol para luego tocar la puerta tan fuerte como puedo. Starrk de mierda sé que estás ahí ábreme y deja de follar o le contaré la verdad a tu esposa. De inmediato se escucha ruido abriéndose la puerta algunos segundos después. Un muchachito sale molesto abrazando su camisa mientras intenta cerrarse los pantalones.
-¡No! Espera no te vayas cariño nos la estábamos pasando muy bien, lo que dijo este idiota es…
El tipo le da una fuerte bofetada callándolo y haciéndome reír.
-Bastardo no me dijiste que eras casado ¡No me vuelvas a buscar!
El mocoso se va muy molesto mientas yo me rio de la patética escena.
-Grimmjow eres un hijo de puta ¿Viste lo bueno que estaba? ¡¿Sabes lo difícil que es conseguirse chicos así de lindos hoy en día?! ¡Pero claro vas y me jodes todo como siempre! ¡Y lo peor de todo es que no tengo esposa! ¡Joder!
Sí, si deja ya de lloriquear bastardo ¿Quién querría casarse con un imbécil como tú?
-Claramente nadie si sigues arruinándome las conquistas. Eres como un puto imán, siempre que estoy tirándome a alguien apareces para echarme todo a perder.
¿Si yo no lo hago quién lo hará idiota? Lo abrazo por el cuello viéndolo reírse.
-Oye espera ¿Por qué estás todo sucio? ¿Dónde está tu camisa y tus zapatos?
Es la moda Starrk acóplate idiota.
-Eres un imbécil, pasa ya.
Entro cerrando la puerta mientras él se arroja a su sillón viejo y roto prendiendo un cigarrillo. Me siento sobre un escritorio que tiene suspirando cansado.
-Creí que estabas muerto.
Yo igual.
-¿Cómo mierda es que sigues vivo?
Tuve suerte.
-Escuche que te habían disparado.
Lo hicieron ¿No ves la jodida venda en mi abdomen?
-¿A ese trozo mal cortado de tela le dices venda? Sí como sea. Y dime ¿Por lo menos valió la pena el balazo? ¿Dónde está el anillo?
Aprieto los puños imaginando dónde carajos estará mi anillo.
-El anillo ¿Dónde mierda está el anillo Grimmjow? No me digas que lograron quitártelo. Joder no me extrañaría después de todo eres al único pendejo al que se le ocurre robarle a Yhwach.
¡Cierra la boca! Él no me lo quitó, fue alguien más.
-¿Ahh? ¿Quién más?
Mi jodida esposa.
-Deja bromear idiota.
Hey Starrk ¿Quieres oír lo que me pasó?
-Habla ya.
Tomo una enorme bocanada de aire tan solo para comenzar a contarle todo lo que me pasó desde que me robe el anillo hasta que Kurosaki me dejó como idiota a mitad del maldito bosque. Starrk me mira totalmente sorprendido sin decirme una sola palabra. Oee di algo ¿En qué piensas idiota?
-Pienso que debes de dejar las malditas drogas Grimmjow ya te jodieron el cerebro.
¡¿Qué dijiste imbécil?! Me levanto tomándolo por el cuello.
-Vamos idiota ¿Escuchaste lo que me acabas de contar? ¡No tiene sentido!
Me empuja soltándose y volviendo a sentarse.
-Imbécil ¿Me estás diciendo que un salvaje te salvó? ¡Y no solo eso! Sino que quisiste engañarlo y terminaste casado con él, bueno le mentiste diciéndole que se casaron al darle el puto anillo que tanto trabajo te costó robarle a Yhwach con tal de que te llevara al maravilloso e inigualable “tesoro” de su tribu que se encuentra en quién sabe dónde y que ni siquiera te consta que existe.
Para que luego el mocoso se pusiera en celo, porque claro el cabrón es un encanto sensual, sexy y erótico adicto al sexo que no te dejó dormir por hacer que te lo follarás sin descanso y todo para que cuando despertaras te hubiera robado y dejado como el reverendo pendejo que eres ¿Me faltó algo?
Ahh claro, el cabello naranja y los ojos marrones, el aroma embriagante de su cuerpo más unas caderas anchas como para morirse. Mierda Grimmjow dame de eso que te fumas a ver si yo también tengo un sueño así.
¡Jódete cabrón! Sé que suena como una locura pero es verdad ¡No miento! De verdad me lo folle, maldición Starrk te juro que existe, hubieras visto su rostro es…¡Es jodidamente lindo! Pero sobre todo su culo…maldición tiene un culo de infarto.
-Grimmjow no más alcohol ni drogas para ti. Tus bromitas están superando la realidad.
¡Que ya te dije que no es broma!
-Bueno maldición en ese caso llévame contigo la próxima vez que vayas a ver a tu salvaje. Yo también quiero una esposa así claro sin que me robe, mienta ni me deje como idiota a mitad de la nada.
Ja ja muy gracioso. Solo espera Starrk apenas lo vuelva a ver lo haré desear nunca haber nacido.
-¿Ahora piensas buscarlo?
Idiota ¿Qué parte de que él se quedó con el anillo no entiendes? Necesito ese maldito anillo para pagarle al gitano.
-¿Y qué hay de Yhwach? En cuestión de nada sabrá que has vuelto a la ciudad.
No lo sabrá.
-Por dios Grimmjow el desgraciado es dueño de más de media ciudad, de verdad que solo a ti se te ocurre robarle alguien como Yhwach ¿En qué carajos estabas pensando?
¡No lo sé joder! Creo que ni siquiera estaba pensando. Es por eso que necesito encontrar al idiota de Kurosaki, si por lo menos no puedo recuperar el anillo lo venderé o yo que sé. Se lo daré a Yhwach para que haga con él lo que quiera, aunque tiene esposa es sabido que le gustan los mocosos.
-¿Piensas darle a tu esposa imaginaria a el loco de Yhwach?
No es imaginaria idiota. Eso lo calmará mientras consigo como pagarle al gitano, ese bastardo ya me tiene el ojo encima y no dudará en matarme si la próxima vez que nos veamos no le pago.
-Eres un idiota, te fuiste a meter con los únicos dos hombres con los que nunca debiste de haberte relacionado. Realmente eres un imbécil, no entiendo ¿Cómo te hiciste acreedor de tantas deudas? Los robos menores que hacíamos no fueron suficientes por lo que tuviste que pedirle prestado al gitano y luego para pagarle vas y le robas a Yhwach. Joder Grimmjow no sé cómo carajos estas vivo.
Cierra la boca si me matan es mi problema.
-Sí claro idiota ¿Y luego quién cuidará a tu hermana?
Chasqueo la boca molesto ¿Sabe lo que pasó?
-Algo así pero le invente que te habías ido por unos días por lo que ella regresó tranquila a su hogar. Por cierto se veía más delgada de lo normal por lo que le di algo de dinero para que comiera.
Maldición, también necesito dinero para ella. Starrk suspira cansado aventándome un cojín.
-Cenemos algo y luego a dormir, ya mañana verás que haces pero antes de todo date un maldito baño que ahora si luces como un salvaje de la montaña más jodida del mundo.
Imbécil… Ambos sonreímos mientras yo imagino que hacer. Por cierto gracias por darle dinero, ya luego te lo pagaré.
-Sí quieres pagarme consígueme una esposa como la tuya idiota pero por favor que sea real.
¡Ven aquí idiota!
///////Ichigo////////
Apenas sentí algunos rayos de sol sobre mi rostro me levante para comenzar mi día. Ayer nuevamente tuve que pedirle a los del clan del Agua otro caballo para dirigirme hacía Karakura ya que de irme a pie llegaría en una semana. Avance un buen tramo pero me sentí bastante cansado por eso de las dos de la mañana por lo que decidí detenerme y descansar.
No me falta mucho para llegar por lo que decidí detenerme cerca de un pequeño riachuelo para asearme. No quiero llegar y que Grimmjow me vea todo sucio y oliendo a sudor. Me desnudo lavando mi ropa para luego tenderla sobre una piedra caliente para que se seque más rápido mientras me lavo el cuerpo. Me arrodillo junto al pequeño caudal tomando agua con mis manos para empezar a lavarme.
Canto alegre tallándome el cabello imaginando que pronto me reuniré con Grimmjow cuando de repente siento como no solo me toman por la cintura sino que me tapan la boca. Me asusto horriblemente girando y viendo a mi peor pesadilla intentando soltarme y gritar.
-Tranquilo, tranquilo no te asustes Ichigo soy yo…soy yo tu novio.
Lo muerdo haciendo que me suelte tan solo para levantarme y mirarlo asustado. Kokuto ¿Qué haces aquí? ¿Me has estado siguiendo todo este tiempo?
-No he dejado de buscarte desde aquella noche Ichigo, perdóname. No sé qué me pasó, no era yo en ese momento, discúlpame ¿Sí? No quería lastimarte ni mucho menos asustarte. No me odies por favor no lo soportaría.
Después de lo que me hiciste no volviste a la tribu.
-Si volvía sin ti hubieran creído que te hice daño. Además tuve la esperanza de que si te encontraba y me perdonabas de verdad pudiéramos huir juntos. Cuando vi que no te encontraba decidí volver pero en ese momento vi como saliste huyendo después de hablar con Tensa por lo que quise seguirte y asegurarme de que estabas bien. Ichigo perdóname ¿Sí? Nunca más volveré a lastimarte.
Camina lentamente hacía mí mientras yo retrocedo ¡No te me acerques! ¡No vengas! Se detiene extendiendo su mano.
-Por favor Ichigo te amo, solo quiero estar contigo, eres el único que me quiere y me acepta. Si te pierdo no me quedaría nada. Sé que lo que hice no estuvo bien pero no pensé en otra manera para que te quedaras conmigo para siempre. Ven Ichigo, ven conmigo…
No Kokuto, no me iré contigo. Mira yo… te perdono por lo que hiciste pero lo nuestro se ha terminado. Retrocedo aún más tan solo para tomar mis prendas y colocármelas sin quitarle la vista de encima sintiendo una fuerte corriente de viento golpearme mientras Kokuto me mira fija y sombríamente.
-Ichigo…que bien hueles y también luces más hermoso que nunca. Tu aroma al igual que tu belleza son irresistibles ¿Por qué no vienes conmigo Ichigo? ¿Por qué? Yo solo te he amado tanto tiempo y te he dado lo mejor de mí y apenas me equivoco me dejas. Realmente eres cruel.
Kokuto quisiste abusar de mí…ya te perdone pero aún así siempre hemos sido amigos sin embargo sabes que yo…que yo nunca te he amado de esa forma de la que tu quisieras. Pensé en seguir contigo porque tal vez era conveniente para ambos pero ahora yo…yo he conocido a alguien más.
-¿Qué? ¿Es una broma?
Kokuto comienza a reírse a la vez que se acerca a mí ¡No vengas! ¡No te acerques! Rápidamente me toma agresivamente por las muñecas mirándome furioso.
-¿Has perdido la cabeza? ¡Tú eres mío!
Me besa agresivamente mientras intento resistirme sintiendo como hace mi cabello de lado. ¡Maldición suéltame! ¡Kokuto basta! ¡Eres un monstruo!
-Ohh Ichigo ¿No sabías que también los monstruos se enamoran y sufren por amor?
Lo miro horrorizado intentando soltarme. Por favor…por favor suéltame, me lastimas. Lo miro lloroso viendo como detiene el forcejeo mirándome fijamente para luego cambiar su expresión por una de espanto soltándome y retrocediendo.
-¿Qué hiciste?...¡¿Quién fue?!
¿De qué hablas?
-¡No te hagas el idiota inocente que ya no te queda!
Me toma agresivamente por el brazo señalándome algunas mordidas, besos, chupetones y moretones que me hizo Grimmjow cuando follamos.
-No pudiste tener sexo conmigo pero si te entregaste al primer idiota que te encontraste ¿Es eso? ¿Te atreviste a dejar que alguien aparte de mi te tomara? Ichigo me has decepcionado ¿Por qué lo hiciste? Lo esperaba de todo el mundo pero no de ti ¡No de ti! ¿Ya estás en cinta?
¡Kokuto suéltame! Lo empujo visualizando mi caballo y como podría escapar. Salgo con prisa hasta que me logra jalar del cabello haciéndome caer.
-¿Debería hacerte perder ese niño?
Kokuto levanta su mano listo para golpearme cuando de repente una flecha le atraviesa el hombro haciéndolo gritar y soltarme. Apenas me levanto miro quién le ha disparado dejándome estático. Renji…
-Vuelve a tocarlo y la siguiente ira entre tus ojos maldito demente.
-¡Abarai maldito! Lo sabía, sabía que sentías algo por Ichigo ¿Ahora te lo quieres quedar? ¡Te tengo malas noticias! ¡La zorra ya se entregó a alguien más y a menos que no te importe compartir tendrás que esperar su turno para meterte entre sus piernas! Porque…
Antes de que siga hablando le suelto un puñetazo en la cara tan fuerte como puedo haciéndolo caer inconsciente. Renji se baja de su caballo tan solo para correr a mi lado y abrazarme. Le correspondo aferrándome a él con fuerza.
-Vaya y creí que yo me había pasado.
Tonto…
-¿Lo mataste?
¡Claro que no! Nos separamos viendo a Kokuto inconsciente, de inmediato me agacho revisando que respire. Solo estará así por un buen rato. Renji ¡¿Qué haces tú aquí?!
-Esa es mi pregunta ¿Si sabes que todo el mundo te está buscando?
¿Otra vez?
-¡Sí otra vez! Al parecer volviste solo para nuevamente desaparecer y como hoy se casa Tensa tu padre me mandó a buscarte desde ayer en la noche, seguí algunos rastros y luego vi a Kokuto y algo me dijo que tal vez te encontraría, decidí seguirlo y mira que no me equivoque ¿Qué haces hasta acá? Bueno no importa me cuentas al regreso apúrate ya que tu padre me dijo que no volviera sino te traía conmigo.
Renji toma mi mano para llevarme pero de inmediato me detengo haciéndolo mirarme desconcertado.
-¿Ichigo?
Renji no me iré contigo, no regresaré al Clan. Ese ya no es mi hogar, mi lugar ahora es junto a mi marido.
-¿Marido? ¿Kokuto?
¡No idiota! Mira te lo diré rápido y si me crees o si te opones no me interesa pero es mi vida y lo haré de todas formas. Me case con un hombre blanco y espero un hijo suyo, ahora iré a la ciudad de Karakura para vivir a su lado ¡Y antes de que me digas que está mal yo…!
-Bien.
¿Qué?
-Dije que está bien. Te creo, tú no eres de las personas que suelen mentir y por como huiste de verdad te creo. Si eso quieres para ti anda y ve.
Renji…¡Gracias! Lo abrazo con fuerza para luego separarme. Será mejor que me vaya, quiero encontrarme con Grimmjow antes de que atardezca.
-Bien ¿Qué camino deberíamos de tomar?
¿Ehh? Toma a Kokuto subiéndolo en su caballo, amarrándolo y dándole una nalgada. El animal sale corriendo hacía la dirección contraria mientras yo intento comprender. Renji…
-Creo que si rodeamos y luego descendemos por las llanuras llegaremos rápido.
¡Espera! ¿Quieres venir conmigo?
-Tarado ¿Escuchaste lo que te dije? Tu padre me dijo que si no regresaba contigo que no volviera y como no piensas volver pues yo tampoco. Además…no sé puede que algo me espere a mí también en esa ciudad. Tranquilo si te preocupa que me meta en tu vida de recién casado no lo haré, solo me aseguraré de que no te metas en problemas.
Ambos sonreímos mientras yo vuelvo a abrazarlo hasta que comprendo despegándome y mirando cómo reacciona.
-¿Qué te pasa?
¿No notas algo extraño en mí?
-¿Algo cómo que te pusiste más feo?
¡Tonto! Volvemos a reírnos divertidos. No…algo como…como mi aroma.
-Ohh…lo dices porque hueles a la esencia de tu hombre ¿Cierto?
Rápidamente asiento ¿Por qué a ti no te afecta?
-Tengo seis hermanos mayores y todos tienen cualidades femeninas. Como mis padres siempre estaban trabajando me dejaban con mis hermanos aun después de que se casaron. No sé, supongo que me acostumbre a esa clase de aroma cuando era un niño y ahora no me causa nada realmente. Aunque no puedo negar que hueles realmente bien, tal vez será que somos amigos casi hermanos lo que me bloquea la idea de algo sexual.
Qué alivio en ese caso vámonos cuanto antes. Ya no puedo esperar por ver a mi feroz pantera. Renji asiente subiéndose a mi caballo y jalándome para que haga lo mismo. Me aseguro de no haber dejado nada para que podamos emprender nuestro camino. Platicamos por horas hasta que vemos la ciudad en la parte baja del cañón, comenzamos el descenso tan rápido como podemos tan solo para entrar por uno de los lados.
Una vez ahí Renji me pide que espere, que ira a conseguir algunas cosas. Miro las construcciones de las viviendas de lo que parece ser madera y piedras acumuladas en cuadros perfectamente cortados. Con techos resistentes y demás, me ocultó detrás de una casa observando hacía la calle principal. Miro a los hombres blancos con trajes muy elaborados y zapatos pensando en que realmente si entro así no encajaría.
Observo a algunas mujeres maravillándome, hace mucho que no veía una pero sin duda creo que hay más hombres ¿Los hombres blancos también podrán concebir como nosotros los salvajes? Sonrío abrazando mi vientre con cariño. Tranquilo hijo pronto veremos a tu padre y todo estará bien, él nos protegerá y amará por siempre.
-¡Ichigo!
Giro viendo a Renji que trae puesta ropa como la de los hombres blancos. Me avienta una camiseta blanca con mangas largas y unos pantalones del mismo color más unos zapatos.
-Póntelo, así podremos pasar desapercibidos.
Asiento intentando descubrir la manera de colocarme las prendas hasta que Renji me ayuda al igual que con mis zapatos. Que incomodo es esto, me siento sofocado.
-Lo sé yo también.
Me duelen los pies.
-Cierra la boca aun ni siquiera caminas con ellos.
Doy pequeños pasos refunfuñando. Me gusta estar descalzo.
-Lo sé pero ahora vivirás con tu marido y él se viste así por lo que tendrás que hacer lo mismo. Recuerda que aquí no les agradan mucho que digamos los salvajes así que si no quieres problemas atente a las leyes y reglas del lugar Ichigo.
Asiento comenzando a caminar con Renji mientras jalo mi caballo de su cuerda. Conforme caminamos las personas comienzan a mirarnos raro y a susurrar.
-Parece ser que nunca habían visto a alguien con el cabello naranja.
Me paso mi cabello de lado mirando nervioso a la gente, no dejan de observarnos y me hacen sentir intimidado. Caminamos por horas en busca de mi pantera viendo como el sol comienza a ocultarse comenzando a preocuparme pensando en dónde pasaremos la noche si no lo encontramos hoy.
-¿Eres imbécil Starrk? Jódete ese trabajo es basura.
-Tú eres basura.
-Es que quiero parecerme a ti idiota.
-Ven aquí cabrón.
¡Esa voz! Giro en su búsqueda mirando a mi guapo marido tomándose por el cuello con otro hombre mientras se miran fijamente. Sonrío enormemente agradeciéndole a los cielos haberlo encontrado ¡Pantera feroz! Apenas escucha mi grito gira para buscarme mientras yo corro tan rápido como puedo arrojándome a sus brazos a lo cual rápidamente me carga. Me abrazo a su cuello rodeando su cintura con mis piernas tomando su rostro y besándolo.
-¿Kurosaki?
¡Mi amor estoy aquí!
-¿Qué…qué mierda haces aquí? Y no me digas mi amor idiota.
Grimmjow te extrañe tanto mi feroz y voraz pantera. Lo abrazo con tanta fuerza como puedo llenando de besos su rostro a más no poder sintiendo como intenta despegarme.
-Basta joder, basta ¡Kurosaki carajo!
No lo suelto tan solo aferrándome más a él encontrando mi mirada con la de ese hombre que se hace llamar Starrk mirándolo de mala gana mientras él no puede cerrar la boca de la impresión. A que no se esperaba que la esposa de Grimmjow viniera y le dejara bien claro a quién le pertenece. Grimmjow logra bajarme respirando.
-Joder idiota casi me asfixias…¡Ven aquí bastardo!
Me toma por el cuello de la camisa mirándome furioso.
-¡Me dejaste cabrón malnacido! ¡Me abandonaste a mitad de la maldita nada con un puto caballo y vil fruta! ¡Me mentiste!
Grimmjow… Lo miro con ternura volviendo a abrazarlo ¿Te sentiste muy solito sin mí? Lo siento pantera es solo que te quiero tanto que si me hubieras pedido que me quedara no hubiera podido desobedecerte así que me fui sin avisarte ¿Pero acaso no viste todas mis señales? Te conseguí un lindo caballo y aparte te indique el camino para seguir. No te abandone ¿No te lo dije antes de que te durmieras? Te dije que soy tuyo y que yo vendría por ti ¿Lo olvidaste? Que idiotita que eres.
-¡¿Qué dijiste imbécil?!
Nada, nada pero eso ya no importa. Lo que importa es que ahora por fin nada ni nadie… Volteo a ver enfáticamente a ese tal Starrk. Podrá separarnos porque no pienso irme de tu lado. Bueno ahora te presentaré a Renji, mira él es… Giro viendo que no hay nadie ¿A dónde se fue?
-Maldito loco no solo eres un ladrón y un mentiroso seductor sino que ahora hasta ves gente. Qué bueno que vienes solo que te voy a cocinar en un maldito cazo para luego servirte con una puta manzana en la boca ¡¿Escuchaste Starrk?! ¡Esta noche cenaremos tigre frito!
Le doy un manotazo en la cara a Grimmjow apartándolo y pasándolo detrás de mí colocándome frente a ese hombre. Soy Kurosaki Ichigo, la esposa de Grimmjow ¿Y tú eres? El hombre tan solo me ve fijamente aun con la boca abierta, vaya idiota espero ya se haya dado cuenta que no es competencia para mí. El tipo toma mi mano besándola sorprendiéndome totalmente a la vez que se quita su sombrero y hace una pequeña reverencia.
-Oee Starrk es un salvaje.
-Antes que nada quiero aclarar que solamente soy un conocido casi amigo se podría decir de Grimmjow y no me interesa nada físico ni sexual con este idiota. Ahora sí mucho gusto mi nombre es Coyote Starrk y eres verdadero ¿Cierto? ¿O es que Grimmjow me drogó?
-¡¿Quién te drogó idiota?! ¡Ya viste que no mentía!
¡Claro que soy verdadero! Ya veo, así que solamente son amigos, que alivio.
-Nada más que amigos. También puedo preguntar si es verdad ¿Qué eres adicto al sexo y violaste a Grimmjow hasta que te hartaste?
¿Perdón? ¡Yo no lo viole! Consumamos nuestro matrimonio es todo.
-Vaya Grimmjow no sé qué decir joder.
-¿Kurosaki traes el anillo que te di?
¡Por supuesto! Jamás me lo quitaré.
-¡Claro que lo harás! ¡Dámelo ahora mismo!
¡No! ¡Tú me lo diste, ahora es mío! No puedes quitarme algo que me regalaste y menos si es lo que simboliza nuestro matrimonio tonta pantera idiota y llorona.
-¿Quién es una tonta pantera tú tigre tarado, imbécil y ladrón?
-Bueno Grimmjow prácticamente tú te lo robaste primero.
-¡Cierra la boca!
¡¿Cómo que te lo robaste?! ¡¿A quién se lo robaste?! ¡Dijiste que era tuyo! ¡Bueno aunque ahora es mío!
-¡Lo es! ¡Es mío! Starrk está bromeando ¿No es así idiota?
Grimmjow le da un golpe en el brazo a Starrk el cual rápidamente asiente.
-Starrk lárgate de aquí antes de que te meta mi bota por el culo, te veo mañana.
Grimmjow no seas grosero es tu amigo.
-¡¿Tú también?!
Pongo una cara de tristeza abrazando a Starrk ¿Qué hago? ¡Mi marido me grita y me maltrata!
-¡Ahh! ¡A mí también! ¡Este hombre es un abusador! ¡Le pega a su esposa y me roba dinero!
-¡Cierren la boca par de imbéciles que todos nos están mirando! ¡Tú largo y tú ven acá, no te me volverás a escapar tigre!
Grimmjow me jala por la cintura pegándome a él, de inmediato acaricio su pecho y rostro. Grimmjow no creí que me desearas tanto y tan pronto pero si eso quieres puedes tomarme aquí mismo, soy tu esposa después de todo.
-¡¿De qué mierda hablas loco?! ¡Y deja de decir que eres mi puta esposa!
¡No soy puta pero si tu esposa! ¿O es que acaso me mentiste? Lo miro sorprendido a lo cual él rápidamente niega con la cabeza.
-No te mentí, ya te lo dije estamos casados pero deja de gritarlo tonto.
¡Ahh! ¿Es que te da pena? Que tierno Grimmjow…
-Sí, que tierno Grimmjow ¿Quién te viera casadito y tímido?
-Malditos…
Tomo su rostro besándolo, apenas mis labios tocan los suyos siento como una dulce corriente eléctrica me recorre el cuerpo por completo al mismo tiempo que mi corazón comienza a latir desenfrenado. Sus labios están un poco secos pero la humedad de su saliva más la de su lengua los empapan deliciosamente haciéndome disfrutar de su textura. Nos despegamos apenas unos segundos mirándonos fijamente ansiando más contacto.
-Starrk te veo mañana, le sacaré el anillo y el tesoro a mi esposa.
Grimmjow me jala llevándome para luego subirse a mi caballo e indicarme que haga lo mismo. Me ayuda a subirme detrás de él a lo cual de inmediato me abrazo a su cintura depositando pequeños besos en su nuca. Grimmjow…
-Silencio, mi hogar no está muy lejos.
En cuanto llegamos me sorprendo de ver que está casi hasta el final de la pequeña ciudad si es que se le puede llamar así junto a otras tres pequeñas casas. Pero definitivamente la de Grimmjow es la que se ve en peor estado a comparación de las enormes y lindas casas que hay en el centro de la ciudad. Se detiene y se baja jalándome para cargarme en su hombro tan solo amarrando al caballo sobre la cerca.
Grimmjow tira la puerta de una patada destrozándola para luego entrar y llevarme hasta lo que parece ser su habitación. Me suelta sobre una superficie alta y totalmente esponjosa en la que apenas caigo me sumo un poco escuchando algunos rechinidos. Miro a mi hombre el cual rápidamente se quita el cinturón doblándolo para luego tomarlo por los extremos y estirarlo un poco creando un temible sonido al escuchar el cuero tronar mientras se da unos golpecitos en la palma de la mano.
-Tu marido te va a enseñar quién manda aquí Kurosaki ¿Estás listo?
///////Grimmjow/////////
Kurosaki tiembla y traga saliva rápidamente asintiendo, de inmediato lo jalo atando sus muñecas a la cabecera impidiéndole moverse. Me aseguro de arrancarle la ropa mirándolo indefenso y a mi merced a la vez que me acomodo entre sus piernas. Podría matarte por haberte burlado de mí pero eso sería demasiado rápido y sencillo.
Me aseguraré de disfrutar esto tanto como tú lo harás. Te diré algo Kurosaki y quiero que te lo grabes bien. La venganza es dulce, es increíble, es el manjar más sabroso del mundo y es mejor aun cuando es condimentada con el maldito infierno.
-Grimmjow…¿Me harás el amor?
Te voy a joder por lo que me hiciste.
-No, yo…
Le tapo la boca negando con la cabeza, lo suelto viendo que me mira inquieto haciéndome sonreír. Lentamente me abro los pantalones liberando mi erección, la maldita erección que he tenido desde que lo vi, apenas percibí su aroma y saboree sus labios dándome cuenta que me tiene entre sus malditas redes que es lo que más me molesta.
Le abro las piernas tanto como puedo notando la dura erección que ya tiene. Me mira lloroso y ansioso totalmente confundido haciéndome sentir un pequeño placer por verlo tan asustado. Tomo mi erección comenzando a rozar mi punta contra su entrada que ya se encuentra húmeda y palpitante, casi ansiosa por recibirme dentro.
-Grimmjow…
Sonrío y sin esperar más se la meto de un golpe hasta el fondo escuchándolo gritar y retorcerse mientras yo sonrío disfrutando su calor asfixiante más que no para de apretarme deliciosamente. Lo miro temblar y jadear excitado mientras su erección no para de ponerse más dura goteando totalmente empapando su abdomen en líquido que comienza a escurrir por toda su piel. Me encantas joder.
Comienzo a empujar cada vez más profundo, entrando y saliendo de su interior despacio, sumamente lento para que me sienta bien, para que note mi calor y lo dura que la tengo por él mientras Kurosaki grita, jadea, gime, suspira, llora y berrea mi nombre. Escucharlo suplicar me enloquece, hace que la sangre me hierva de lo caliente que me pone.
-Grimmm…haaahh….ahhh….Grimmjow…ahhh. Estás…ahhh…tan…tan profundo…haaahh. Más…ahh…me...me encanta no pares…pantera…ahhh.
Sonrío perversamente para él lamiéndome los labios demostrándole que no es el único que sabe enredar entre placer y caricias. Lo tomo por ambos tobillos tan solo para comenzar a penetrarlo más rápido y con mucha más fuerza. Míralo Kurosaki, mírame entrar en ti.
Grita excitándome aún más mostrándome ese rostro suplicante y sofocado, totalmente perdido por mí. Kurosaki fija su mirada en nuestros cuerpos y como no paran de unirse descontrolados y totalmente llevados por el maldito deseo que nos envuelve.
-Grimmjow…tuyo, soy tuyo…haaah. Puedes…puedes hacer conmigo ahhh…lo que quieras.
Claro que lo haré. Le doy una fuerte estocada mirando esa cara tan sexy que pone al correrse.
-Dentro…pantera córrete dentro de mí.
¿Qué pasa Kurosaki? ¿Quieres que te llene hasta preñarte? ¿Es eso?
-Sí…ahh…Grimmjow lléname, hazlo. Tendré a todos tus hijos.
Me rio un poco lamiéndome los labios. Como si de verdad pudiera embarazarse. Joder que rico me estás apretando…ahhh. En ese caso dame…ahhh…dame gemelos Kurosaki. Me mira lloroso mientras asiente retorciéndose e intentando liberar sus manos.
Me aferro a su cintura clavándome en su interior escuchándolo gritar a la vez que arquea la espalda mientras yo termino en su interior llenándolo hasta ver como comienza a escurrir por sus muslos. Sonrío disfrutando un orgasmo intenso y cálido recorriéndome todo el cuerpo.
-Bésame…Grimmjow…bésame.
Es venganza idiota no tu puto cumpleaños.
-Pantera por favor….Grimmjow bésame.
Chasqueo la boca de lo lindo y tierno que se ve tan solo para colocar mis manos a sus costados y besarlo levemente viéndolo berrear.
-Eres malo, tonta pantera estúpida pero aun así te quiero y solo por eso seré una buena madre para nuestros hijos.
Si claro idiota lo que digas.
-Grimmjow creo que el bebé que tengo dentro solo es uno pero después de que nazca podemos intentar tener gemelos…
¿Ahh? ¿De qué hablas idiota? Vamos era broma.
-¿No quieres gemelos? ¿Con uno está bien? En ese caso iremos teniendo de uno en uno ¿Cómo se llamará nuestra pequeña panterita Grimmjow?
Lo miro intentando comprender mientras él me mira curioso. Espera…no me digas que…
-¿Qué? ¿No te dije que puedo concebir y dar a luz?
Creo que…creo que olvidaste ese pequeño y diminuto detalle… Respiro hondo intentando no desmayarme de la maldita noticia. Tranquilízate Grimmjow solo tiene un mocoso tuyo dentro…un mocoso como él…como yo ¡¿Cómo yo?! Joder! ¡¿Estás embarazado?!
-¡Sí, sorpresa pantera! Grimmjow…¿Grimmjow? ¡Grimmjow!
Siento como caigo de lleno al piso mirando como Kurosaki intenta zafarse para auxiliarme mirándome desde la cama. Tiene que ser una maldita broma…¿Voy a tener un hijo?
//////////Tensa//////////
-Tensa luces precioso.
Gracias Ju-nii. Jugram continua arreglándome el cabello trenzándome algunas plumas mientras yo me pinto la cara de blanco con manchas y rayas rojas.
-Miren nada más a estas dos bellezas.
Giramos viendo a Shiro-nii entrando lentamente a mi choza.
-Shiro-sama ¿Qué hace levantando? Debe de descansar.
-Es la boda de mi hermanito el más llorón de todos, no me la podría perder por nada. Y ya que no está Ichigo me toca a mí como hermano mayor decirte unas buenas verdades.
Jugram lo ayuda a sostenerse mientras él me sonríe y yo a él. Me pongo de pie encarándolo sintiendo como acaricia mi rostro tiernamente.
-Tú e Ichigo siempre han sido unos problemáticos, tontos, llorones, torpes en especial tú que cada paso que das es un milagro que no te caigas.
Inflo los cachetes mirándolo molesto haciéndolo reírse para luego sonreírle.
-A pesar de ser tan torpe eres mi hermano, casi mi bebé, te he cuidado toda la vida ¿O ya se te olvido tonto? ¿Quién te daba de comer mientras papá se iba de caza? Joder hubieras visto los problemas en los que nos metíamos Ichigo y yo con tal de no verte llorar.
Pero ¿Qué le voy a hacer? Siempre te he amado, ahora que te quede bien claro que no concuerdo con este matrimonio ¿Casarte por proteger el Clan? Eso es una estupidez por lo que si ese loco de Aizen te hace algo dímelo y lo próximo sabrás es que le enterraré una maldita lanza en el cuello.
Me rio un poco asintiendo y abrazándolo escuchándolo gruñir un poco. Lo siento…
-Está bien tonto. Pero por lo que más quieras sé feliz pero no por alguien, tampoco por algo. Nada de eso, sé feliz porque al fin y al cabo es lo que te mereces. Ahora ve y muéstrale a Aizen que aun con esa carita de niña sabes patear bolas, después de todo tus hermanos mayores te lo enseñaron ¿Qué no?
Asiento para luego salir lentamente de la choza dejándolos ahí, cuando de repente recuerdo que olvide algo escuchándolos hablar.
-Jugram ¿Dónde está Ichigo? ¿Por qué aún no llega?
-No lo sé Shiro-sama.
-Eres todo menos un buen mentiroso sabes…
Jugram mis pulseras ¿Las has visto? Giran viéndome y sonriendo, de inmediato Jugram me pasa mis pulseras colocándomelas.
-Tranquilo, no le diré nada.
Asiento volviendo a salir. Apenas lo hago se escuchan los sonidos de la música tribal empezar. Por donde camino la música me sigue al igual que un pequeño grupo de personas hasta que llego a donde ya se encuentra Aizen y nuestros padres bajo el árbol más grande y viejo. Miro a Aizen con un enorme penacho de plumas blancas y negras sobre su cabeza más algunas colgando a sus lados.
Su rostro se encuentra totalmente pintado de negro con algunas rayas rojas y blancas mientras que de su pecho cuelga un largo collar que le llega hasta la cintura de detallados colmillos tallados. Nos miramos fijamente sabiendo que nuestras vidas están por cambiar, todo el mundo grita y se emociona mientras que para nosotros el tiempo se ha detenido porque ya no hay marcha atrás.
Camino despacio como si esperara un milagro, ansiando y añorando ver a mis hermanos. Esperando que alguien se dé cuenta de este error pero rápidamente tomo consciencia, esto no es un error. La vida me puso a Aizen en mi camino y debo de ser agradecido, sé que tal vez es un tanto problemático pero si me esfuerzo podría encontrar al hombre que realmente es bajo esa máscara.
Una vez junto a él nos giramos encarándonos y tomando nuestras manos. Tan solo continuamos mirándonos en silencio mientras la ceremonia comienza. Dicen algunas palabras y oraciones para luego sentarnos a ambos y comenzar a tatuarnos tras el fuego de una enorme fogata. Ambos llevaremos la misma marca demostrando que nos pertenecemos.
En su mano derecha y en mi mano izquierda comienzan a crearnos una bella mariposa que no solo significa amor eterno sino también la trascendencia y la fuerza del instinto. De repente me sorprendo al sentir como comienza a rozar los dedos de su mano libre contra la mía hasta que entrelaza sus dedos con los míos. Mi corazón late fuerte y abruptamente temiendo al igual que él voltear a vernos.
-Listo, terminado.
Aizen me suelta levantándose al igual que yo volviendo a encararnos, gracias a dios tengo pintado el rostro y no puede ver el rubor en mis mejillas. Después de eso la ceremonia concluye con el intercambio de un par de collares que hicimos el uno para el otro. Tiemblo al sentir como Aizen me estrecha entre sus brazos acercándose a mí hasta besarme. Todos gritan eufóricos mientras yo me separo aún bastante avergonzado.
-Con esto no habrás más peleas hijo mío.
Mi padre y mi familia me abrazan deseándome una buena, larga y prospera vida junto a mi marido y sobre todo que tengamos hijos sanos, para luego conducirnos hasta una choza que fue preparada especialmente para nosotros porque es tiempo de consumar nuestro matrimonio hasta el día siguiente. Nos meten dentro casi a empujones no sin que antes Jugram me jale colocando algo en mi mano.
-Con esto se sentirá bien.
Lo miro sin comprender hasta que soy jalado por Aizen que me empuja tirándome al suelo donde yacen un montón de pieles y cobijas cerrando la puerta a su espalda.
-Es hora de continuar lo de ayer así que ahora abre las piernas para mi Tensa.
¿Ehh? ¿Tan rápido? No…¿No quieres conversar o algo así? ¿No quieres saber más de mí? Digo ahora estamos casados.
-No estaremos casados hasta que no me haya corrido dentro de ti así que abre las piernas de una buena vez.
Ai…Aizen espera yo no…yo no estoy preparado. Me sonríe quitándose el penacho al igual que los collares y toda la ropa haciéndome sonrojar para luego tomar un paño húmedo y limpiarse la cara enjuagándolo y aventándomelo.
-Límpiate, te haré el amor por lo que quiero ver tu rostro y las expresiones que pongas cuando entre en ti.
Lo miro sorprendido comenzando a limpiarme el rostro mientras él me espera. Una vez que termino me quito mis collares al igual que mi ropa recostándome y cubriéndome el rostro de la vergüenza.
-Jamás te había visto completamente desnudo, me gusta tu cuerpo aunque realmente eres como un niñito ¿No es así?
¡No soy un niñito!
-¿No?
Aizen se acerca a mí metiéndose entre mis piernas para acariciar mis muslos.
-Mira esta piel suave y tersa, jamás había tocado algo así ¿Qué es eso?
Se inclina tomando de uno de mis costados el pequeño recipiente cerrado que me dio Jugram, lo abre y huele sonriendo.
-¿Aceite de hierbas? Vienes bien preparado ¿No es así?
Se vacía un poco en los dedos y de inmediato comprendo cerrando las piernas. No…
-Ábrelas.
Aizen es vergonzoso.
-Por dios déjate de juegos, eres mi esposa me tienes que obedecer e intento portarme bien así que ábrelas.
Me vuelvo a cubrir el rostro a la vez que abro las piernas, apenas lo hago siento como lleva sus dedos hasta mi entrada comenzando a introducir uno lentamente. Jadeo un poco debido a la extraña intrusión sintiendo como al poco tiempo mete dos más que me hacen gritar y retorcerme ya que ha presionado un punto que me enloquece.
Haahh…Aizen…haahh. Aizen coloca una de sus manos a mi costado inclinándose para besarme lentamente haciéndome estremecer y sentir realmente deseado. Me besa suavemente a la vez que introduce sus dedos cada vez más profundo en mi para luego detenerse y sacarlos dejándome perdido y ansioso.
-Tensa di mi nombre.
Lo miro fijamente acariciando su rostro y besándolo susurrándole entre besos. Sousuke… Jadeo abrazándome a su cuello al sentir como comienza a penetrarme lentamente. Algunas lágrimas brotan de mis ojos al sentirlo tan duro y caliente dentro de mí. Me encanta la sensación, siento mi cuerpo arder en deseo. Haahh…Sousuke…me gusta.
-¿Te gusta así?
Asiento sin poder parar de jadear al sentir como se mueve lentamente dentro de mí al mismo tiempo que sus labios recorren mi cuello y pecho bajando hasta mis tetillas las cuales lame y muerde levemente hasta enloquecerme. Me abraza por la cintura levantándome hasta incorporarnos mientras yo continuo abrazándome a su cuello para besarlo a la vez que disfruto como me llena totalmente.
Me abraza con fuerza y yo a él mientras subo y bajo sobre su erección dándonos placer a ambos a la vez que rodeo su cintura con mis piernas. Sentirlo dentro de mí mientras nuestros cuerpos se rozan ardientemente entre sí me hace perder la razón ¿Cómo puede ser este el mismo hombre que ama hacerme bromas y decirme cosas crueles ahora ser tan dulce y tierno conmigo? No lo comprendo pero está haciendo que realmente me enamore de él.
-Tensa me encantas.
Sonrío para él jadeando un poco al sentir como me masturba lentamente hasta hacerme terminar entre sus dedos los cuales lame mirándome coquetamente.
-Maldición…ahh…no puedo más.
Nos miramos fijamente hasta que yo asiento dándole permiso. No podría haber momento más perfecto que este. Lo abrazo enterrándole las uñas en la espalda al sentir como su calor comienza a llenarme. Definitivamente sea el destino o no Aizen y yo estaremos unidos de por vida y creo que estoy bastante feliz a pesar de todo.
/////////Renji////////
Camino lentamente por las calles viendo que ya ha anochecido por completo, después de dejar a Ichigo con su marido creí que importunaría además si me hubiera visto ese hombre después no podría vigilarlo para comprobar que no lastime a mi tonto amigo. No sé porque rayos decidí quedarme aquí pero volver tampoco era una opción.
Aunque el jefe me aceptara de regreso realmente no me espera nada, no hay algo que me ate a ese lugar. Mis hermanos ya están casados y tienen sus propias familias por lo que el hecho de que yo esté lejos no importuna a nadie. Camino sumergido en mis pensamientos hasta que me detengo para ver en dónde me encuentro.
Giro viendo que justo acabo de terminar de pasar por una enorme vivienda de tres pisos. Jamás había visto una construcción así de grande y se ve muchísimo mejor que cualquier otro hogar que haya visto. El hombre que vive ahí debe de tener muchos recursos ¿Pero en ese caso por qué no los reparte para que los demás también vivan bien? Que rara es la gente de aquí.
Miro que alado de la enorme casa viene un hombre corriendo a toda prisa, por la oscuridad de la noche no alcanzo a verlo bien pero lo que si noto es que tres hombres corren tras él. Parece ser que lo están persiguiendo y viene hacia acá, será mejor que no me entrometa. De repente veo que el hombre que vienen persiguiendo se cae, pobre lo van a asesinar.
Vamos Renji no te metas, no te incumbe no sabes si es bueno o malo y por qué lo están persiguiendo. Alcanzo a escuchar como grita de dolor ya que han empezado a golpearlo sin poder evitar sentirme angustiado. Simplemente no puedo dejar que lastimen a alguien frente a mí. Rápidamente corro en su auxilio, ni siquiera digo algo tan solo llegando y golpeando al primero.
-¡Maldito! ¡¿Quién mierda eres?!
-¡Maten a este idiota! Y después nos divertiremos con esta lindura.
¿Quieren abusar de él o algo así? Me molesto profundamente tan solo soltando golpes escuchándolos gemir del dolor hasta verlos caer y arrastrase para luego salir corriendo. Miro al hombre levantarse tembloroso, estoy a punto de hablarle cuando veo como se quita el pelo del rostro que se le ha adherido a la piel por la sangre que brota de su frente.
En cuanto nuestras miradas se encuentran siento como algo tiembla dentro de mí. Es precioso, es el hombre más hermoso que he visto en toda mi vida. Sin pensarlo mucho extiendo mi mano dirigiéndola hacia su rostro sintiendo como a los pocos segundos me da un manotazo.
-No me toques basura.
Lo miro muy sorprendido viendo cómo se limpia la sangre con la manga de su camisa.
-¿Quién te dijo que te metieras? No necesitaba tu ayuda ¿Me oíste insolente? ¡Basura, todos los hombres no son más que escoria ruin y despreciable!
Nos miramos en silencio mientras yo noto la furia, el dolor y sobre todo el rencor ardiendo en su mirada.
-Espera…esos tatuajes, ese cabello…¿Eres…eres un salvaje?
Permanezco en silencio viendo como de repente abre los ojos tan solo para sonreír perversamente.
-Di algo ¿Acaso no puedes hablar? Bien no importa realmente, no hables mejor por mí ¿Por lo menos me entiendes?
Me limito a asentir viéndolo sonreír sombríamente aún más.
-No sé qué hagas aquí pero dime si te regreso el favor de haberme salvado la vida ¿Harías algo por mí? Mejor dicho te pagaré con dinero o si quieres otra cosa te la daré pero hay algo que quiero.
Lo miro sin comprender viendo cómo se acerca a mí hasta dejar su rostro alado del mío comenzando a susurrarme. Tiemblo al sentir su aliento cálido y su pequeña risa perversa.
-He escuchado que los salvajes son asesinos expertos así que dime…¿Matarías a alguien por mí?
Me quedo estático sintiendo como comienza a deslizar sus manos por mi pecho sonriéndome y mirándome coquetamente ¿Cómo cambió tanto? Siento que mi corazón podría salirse de mi pecho de lo cerca que lo tengo. Es más allá de lo atractivo y sobre todo atrevido.
-Dime salvaje ¿Lo harás? A cambio te dejaré quedarte conmigo porque por lo visto no tienes ni donde caerte muerto ¿Qué te parece? También te daré comida y más trabajo pero un día no te diré cuando te pediré que mates a un hombre por mí y tienes que hacerlo ¿Aceptas mi trato? Bueno déjame ser más específico, es eso o le digo a la maldita policía que te eche a prisión por intentar robarme.
Mentir es muy fácil, digo si sabías qué en esta ciudad los salvajes no son muy queridos al igual que los gitanos ni los vagabundos ¿Cierto? Así que puedes trabajar bajo mis órdenes y nadie te pondrá un dedo encima o esta misma noche puedes dormir tras unos cómodos barrotes ¿Qué dices? ¿Me escogerás?
Lo miro sorprendido por la naturalidad de sus palabras al igual que su mirada incitante y tenebrosa.
-¿Tu respuesta?
Tal vez el destino me trajo a esta ciudad para conocer a este hombre, no sé si pueda matar a alguien pero definitivamente quiero quedarme con él. Rápidamente tomo su rostro besándolo, introduciendo mi lengua en su boca, saboreando el sabor de sus suaves y dulces labios. Miro como sus mejillas se tiñen de rosa mientras me mira totalmente sorprendido tan solo para empujarme y darme una bofetada.
-Buena respuesta salvaje pero no tienes tu suerte. No olvides que ahora trabajas para mi así que conoce tu lugar ahora sígueme.
Comienza a caminar y rápidamente lo sigo, ahh maldición ya no aproveche la oportunidad para decirle que puedo hablar. Continuamos caminando en silencio metiéndonos entre las callejuelas hasta que llegamos frente a una casa grande que a pesar de su tamaño luce en total decadencia.
-Entra rápido.
Entro mirando que todo luce resplandeciente.
-No hay sirvientes por lo que también tendrás que asear cuando ensucies algo ya que solo seremos los dos. Ahora ven tomarás un baño y luego dormirás en el sillón.
Moja un paño de agua intentando controlar el temblor de sus manos para limpiar sus heridas. Me acerco viendo cómo se pone un poco a la defensiva quitándole lentamente el paño. Nos miramos en silencio mientras yo logro comenzar a limpiar la sangre que ha manchado y se ha adherido a su hermoso rostro.
-No tienes por qué hacer esto.
Sonrío viendo como me mira sorprendido tan solo para apenas si tocar su pecho con la punta de mi dedo índice.
-Comprendo… ahora me sirves. Sé que parece estúpido y sin sentido ya que no hablas pero mi nombre es Kuchiki Byakuya.
Me regala una diminuta sonrisa falsa haciendo mi corazón vibrar emocionado. Byakuya…Kuchiki Byakuya ¿Podría ser acaso el nombre de la persona que he estado buscando? No lo sé pero sinceramente espero que sí…