Parte uno
El ruido externo no es comparado con el alboroto interno que Baekhyun carga ni de los propios de Chanyeol. La desorientes que uno vive mientras otro continua alejándose es un repique constante en sus vidas más es uno sin audio. Un silencio funesto que con el pasar de los días los recuerdos se están yendo, perdiéndose en el tiempo, dejándolos en olvidos llenos de dolor.
Él pudo imaginar la actitud que Chanyeol cogería cuando se enterara de sus sentimientos. Así era Chanyeol y Baekhyun lo sabía. No puedo imaginar una escena tan desastrosa como, regularmente, era cuando alguien se confesaba. Con Chanyeol las cosas eran diferentes y, claramente, su confesión no fue la excepción.
El distanciamiento no fue palpable. No al principio al menos sino con el pasar de los días. Comenzó con un buen día, Baek y terminó simplemente asentimientos con la cabeza en forma de saludo. Luego surgió el silencio que reinaba en el departamento que ambos compartían cuando antes todo era risas y juegos entre ambos. Baekhyun está odiándose por abrir su boca, él sólo quería decírselo a Chanyeol porque, muy a parte de haberse enamorado del gigante, para él Chanyeol, antes que todo, es su mejor amigo. Él no quería que nada cambiara entre ellos pero todo había cambiado para su desgracia y lo odiaba. Se odiaba a si mismo por siquiera abrir su boca, debió callarse, al menos es lo que él piensa.
Esa mañana Baekhyun decidió salir más temprano del departamento. No quería estar rodeado de incomodidad. Él sólo quería regresar a los viejos tiempos pero no podía, ya no. Cogió su mochila del sillón donde lo había dejado y salió del departamento haciendo el menor ruido posible. Era demasiado temprano para encarar a Chanyeol y enfrentar el silencio.
Cogió el bus y tomó asiento para luego colocarse los audífonos y dejar que la música invadiera todos sus sentidos. Le gustaba la música porque le hacía recorrer un mundo que él mismo se creaba y donde, por supuesto, olvidaba que su amistad con Chanyeol se había ido al carajo.
Tenía un mes aproximadamente que pasó lo de la confesión y Baekhyun aún puede imaginarse una y otra vez en la misma escena con Chanyeol. Donde ambos están tumbados pacíficamente en su cama, charlando, riéndose y compartiendo abrazos antes de que él divagara por su cabeza y decidiera decirle a Chanyeol acerca de sus sentimientos.
» —Yeol,-Le llamó —quiero decirte algo.
—Hm.-Murmuró Chanyeol —Te escuchó, Baek.
—Es importante para mí decir esto, a pesar de lo que pueda ocurrir-Baekhyun miró como su acompañante abría los ojos para mirarlo en silencio —y no quería que esto sucediera pero simplemente pasó.-rió sin ganas.
— ¿Qué es?-Preguntó pausadamente.
—Estoy enamorado.
—Pues estás jodido.
—De ti.
—Pues más jodido aún.-El silencio reinó por varios minutos. Baekhyun no despegó su mirada de Chanyeol quien miraba el techo con fascinación, como si algo ahí arriba fuera más importante — ¿Qué fue lo que te había dicho desde antes, Baek?-cuestionó Chanyeol dirigiendo su mirada hacía los ojos de Baekhyun. Este último se mantuvo en silencio, esperando que Chanyeol continuara —Dilo. Que fue lo que te dije, Baek, dilo.-demandó —Recítalo tal cual como lo dije.
—N-no te enamores de mí, Baek.-Recitó con vacilación y un leve tartamudeo escapó de entre sus labios.
— ¿Y qué fue lo que tú dijiste?-Preguntó Chanyeol sin despegar su mirada de los ojos del contrario —Creo que habías dicho algo como ‘estaría completamente idiota de la cabeza si llegase a enamorarme de ti, Yeol’. ¿Me estoy equivocando en algo, Baek?
—N-no.-Baekhyun carraspeó tratando de alejar ese sentimiento de angustia de su pecho —Te dije que simplemente pasó. Yo no quería esto, Chanyeol.-se excusó.
—Nadie quería esto, Baekhyun pero está pasando ahora.-Murmuró el gigante suspirando en el proceso.
—Tú sabes que no quería que esto pasara, Yeol.-El bajito negó con efusividad —Te quiero pero continúo siendo tu Baekhyun, tu mejor amigo.
—Mi mejor amigo que está enamorado de mí.-Chanyeol comenzó a moverse del lado de Baekhyun colocándose en sus dos pies de inmediato —Descansa, Baek. «
Se quitó los audífonos en el momento que bajó del bus y caminó hasta la entrada de la universidad. Absorto como lo había estado desde hace un mes no se percató de la presencia de alguien más hasta que este le habló.
—Hey Baek.-El interpelado alzó la mirada, conectándola con el rubio alto que tenía en frente — ¿Cómo estás?-preguntó.
—Hola Yifan.-Saludó Baekhyun —Estoy bien, ¿qué tal tú?-sonrió cordialmente.
—Bastante bien.-Sonrió ampliamente Yifan — ¿Recién llegas?-el bajito asintió —Genial, podemos caminar juntos y eso.-propuso el mayor y Baekhyun no quería ser descortés así que volvió a asentir.
—Está bien, vamos.-Le dedicó una pequeña sonrisa. Ambos volvieron a emprender marcha hacía el interior del edificio en una charla trivial, cosas comunes y que, regularmente, cualquier persona preguntaría. La cosa estaba que Baekhyun sabía que Yifan estaba muy–muy interesado en él pero el problema es que él no podía corresponderle, no ahora y, probablemente, nunca. Su corazón había sido arrancado y aplastado, sin mencionar que su mejor amigo, seguramente, lo estaba odiando ahora mismo.
—Baekhyun,-Llamó Yifan —quería preguntar algo.
—Adelante.-Tarareó sin ganas el menor —Sólo pregunta, Yifan.-sonrió para que no sonara tan áspera su forma de hablar.
— ¿Te gustaría salir el sábado conmigo?-Preguntó esperanzado y Baekhyun lamentaba este tipo de cosas porque él realmente no tenía ganas de absolutamente nada.
—Lo siento, Yifan.-Se disculpó Baekhyun.
— ¿Por qué no quieres?-Baekhyun agitó su cabeza rápidamente al escuchar la pregunta de Yifan. Por supuesto que no era culpa del mayor sino de su lamentable y herido corazón.
—No es eso Yifan, te lo prometo.-Soltó el menor —No es que yo no quiera salir contigo, es que yo no puedo salir contigo porque ya tengo compromiso para ese día. Realmente lo siento.-mentiras y más mentiras. Baekhyun no tenía planes para ese sábado y esperaba que Chanyeol si los tuviera porque sólo quería estar en la soledad de su habitación.
—Oh.-Murmuró Yifan —Entonces será después, ¿está bien?-Baekhyun sólo se permitió asentir. Ya estaba lo suficientemente cansado para continuar mintiendo. Sintió una mano cálida mano en su hombro y quiso alejarse pero sería tan terrible de su parte hacerle eso al mayor así que decidió sólo aceptar el roce amistoso de su acompañante.
— ¡Hey!-Escucharon y para suerte de él Jongdae apareció y se inclinó ante la presencia de Yifan en forma de saludo —Te estaba buscando.
—Estaba con Yifan.-Señaló Baekhyun.
—Me retiro entonces.-Informó el mayor —Nos estaremos viendo Baek, hasta luego Jongdae.
—Bye hyung.-Se despidió este último mientras que Baekhyun agitó su mano en forma de despedida —Así que Byun,-comenzó Chen — ¿otra vez se te declaró u algo parecido?-preguntó lleno de curiosidad.
—Me invitó a salir.-Contestó Baekhyun mientras cerraba su casillero.
—Le dijiste que sí, ¿cierto?-Jongdae lo observó y el silencio de Baekhyun le confirmó —Dijiste que no.-murmuró.
—Le dije que quedé contigo y más vale que me ayudes con la maldita cuartada, Jongdae.-Advirtió.
— ¿Por qué, Baekhyun? Debiste decirle que sí y olvidarte por un jodido día de lo que pasó con Chanyeol.-Soltó Jongdae —Sé que estás mal por lo que ha pasado pero no puedes vivírtela deprimido para siempre, ¿entiendes?
—No quiero lastimar a Yifan.-Contestó el más Baekhyun.
—No quieres dejar de sentir lo que sientes por Chanyeol.-Intervino el otro.
—No quiero lastimar a Yifan mientras siento esto por Chanyeol.-Concluyó — ¿Puedes ayudarme a teñirme el cabello?-preguntó amablemente Baekhyun para salir del tema —No lo quiero más rubio.
— ¿Esto tiene que ver con Chanyeol?-Preguntó.
—Todo tiene que ver con Chanyeol, Jongdae.-Baekhyun se encogió de hombros —Así que necesito salirme de la zona de confort de Chanyeol por mi propio bien, supongo.
—Al menos estás comenzando con algo.-Felicitó — ¿Por qué no simplemente dejas de vivir con él?-Baekhyun negó.
—No es tan fácil, Jongdae.-Murmuró —No puedo dejarlo. A pesar de que comenzamos a distanciarnos y nuestra amistad quedó reducido a nada, aún no puedo dejarlo. Es difícil.
—Eso amigo es joderse a sí mismo.-El rubio sintió unos brazos colocarse en sus hombros —Sólo déjalo, Baek.
—Es muy fácil decirlo, lo difícil es hacerlo.-Baekhyun respondió mientras caminaba a lado de Jongdae.
—Cuando quieras dejarlo ir, las puertas de mi departamento estarán abiertas para ti.
—Eso es dulce de tu parte, Jongdae.-Arrulló Baekhyun dedicándole una sonrisa sincera. Una sonrisa que no había estado otorgándole a nadie desde que se distanció con Chanyeol.
—Es porque eres mi amigo y deseo lo mejor para ti.-Susurró el otro —Sabes que lo único que quiero es verte feliz…otra vez.-completó.
**
El timbre anunció la terminación de clases por el día. Baekhyun, por más que buscó, no encontró en ningún lugar a Chanyeol. Ni siquiera lo vio en el almuerzo y él se aseguró de mirar con cuidado en dirección de la mesa en donde Chanyeol suele sentarse con sus amigos. Había visto a la pareja melosa y al chico de ojos dormilones. Si no estaba equivocado eran Sehun, Luhan y Jongin, y, por supuesto, Chanyeol incluido. Era un cuarteto muy deseado según lo que había oído y le había dicho el cotilla de Jongdae.
En la universidad la gente habla y demasiado. Decían cosas de ese cuarteto aunque Baekhyun no podía estar seguro de todo lo que decían de ellos, únicamente lo que decían de Chanyeol podía creer aunque algunas veces exageraban las cosas. Eran tan cotillas, es como si ellos no tuvieran una vida propia. Por ello Baekhyun prefiere encerrarse en la biblioteca a leer cuando sus amigos no estaban alrededor o bien cuando si estaba con sus amigos preferían mantenerse bajo el radar de los cotillas de la universidad por seguridad propia.
Lo que más sorprendió a Baekhyun ese día, aparte de no ver por ningún lado a Chanyeol, fue cuando Jongin lo detuvo en el pasillo después del almuerzo.
Baekhyun iba en compañía de Kyungsoo cuando el chico más alto apareció en el camino de los más bajitos. Incluso fue sorprendido al saber que el aclamadísimo Kim Jongin lo conocía. Probablemente si el pasillo hubiese estado abarrotado de alumnos los murmullos no se hubiesen hecho esperar e incluso especulaciones serian lanzado en contra de ambos bajitos pero para suerte de ambos ese día no sería. La conversación no duró lo suficiente, sólo lo necesario. Sí, lo estrictamente necesario puesto que por parte de Baekhyun, él sólo sabía el nombre del chico de piel apiñonada.
—Baekhyun, ¿cierto?
—Sí.-Respondió — ¿Necesitabas algo?-preguntó un poco curioso.
—Sí. En realidad quería preguntarte si habías visto a Yeol.-Baekhyun rápidamente negó —Creí que estaría contigo. Tiene un par de horas que no lo he visto.
—No he visto a Chanyeol desde la mañana.-Respondió —Así que lo siento, realmente no sé dónde está Chanyeol.
—Está Bien, Baek.-El chico apiñonado sonrió —Soy Jongin por cierto.
—Un placer, Jongin.-Sonrió el rubio —Él es Kyungsoo.-presentó a su silencioso amigo que se mantenía retorciendo las mangas de su cardigan.
—Lo sé.-Jongin sonrió —Los veo después, chicos.-se despidió, alejándose por el lado contrario del pasillo.
Una vez que había recogido las cosas que necesitaría de su casillero caminó hasta la salida encontrándose a Jongdae y Kyungsoo a la espera de él. Los tres chicos llegaron hasta el estacionamiento y subieron al auto de Jongdae, que por cierto hasta el momento era el único con auto porque según soy lo suficiente inmortal y bello para andar en autobús. Jongdae tiene la mala costumbre de hablar hasta por los codos pero definitivamente era un buen amigo, al igual que Kyungsoo. Después de Chanyeol, Jongdae y Kyungsoo eran muy importantes para el rubio.
—Entonces,-Comenzó Jongdae — ¿Ya has decidido de qué color vas a teñirte el cabello?-preguntó.
—Sólo quiero oscurecerlo.-Contestó Baekhyun mientras jugueteaba con su cabello rubio —No quiero más este color.-se encogió de hombros. En realidad el color de cabello había sido decisión propia pero Chanyeol lo había acompañado ese día y él no quería más ese color, ya no. La angustia que golpeaba en su pecho lo asfixiaba y, más que nada, el rechazo de cualquier tipo de contacto que Chanyeol tuviese con él, ya ni siquiera se dirigían la palabra el uno y el otro. Baekhyun nunca deseó esto y, claro está, jamás imaginó que Chanyeol le haría esto. Pensó que, tal vez y sólo tal vez, Chanyeol lo rechazaría lo más amable posible y ambos harían como si nunca hubiese pasado nada pero aun siendo amigos. La realidad que vive Baekhyun es cruel.
Durante el resto del camino Baekhyun decidió enviar lejos todo lo relacionado con Chanyeol y dejó que toda su atención estuviese con sus amigos. Los tres habían llegado al centro de la ciudad y por orden de Jongdae habían ido a centro de belleza que la madre de este último frecuentaba. Kibum, como se había presentado, era el encargado de, según palabras del mismo, embellecer más a Baekhyun. Comenzó con la aplicación del tinte para luego darle paso al lavado de cabello. Ese lavado de cabello era tan relajante que adormeció a Baekhyun pero Kibum se encargó de despertarlo y lo llevó de nuevo al frente del espejo donde cortó, secó y peinó el, ahora, cabello negro de Baekhyun.
Él no esperó que Jongdae haya dado la clara orden de hacerle un cambio a su look. Claro que no fue un cambio exagerado y, de hecho, no fue el único. Kyungsoo resultó en las mismas condiciones de Baekhyun y ni se diga del propio Jongdae.
— ¿Por qué estás pagando todo esto y, además, sin consultarnos?-Preguntó Kyungsoo aún incrédulo.
—Necesitaba un cambio de look porque Junmyeon quería verme más precioso de lo que soy.-Contestó Jongdae.
—Junmyeon nunca diría eso.-Espetó Baekhyun —Esto es sólo por ti.
—Bueno sí.-Admitió. Kyungsoo rodó los ojos y se cruzó de brazos.
— ¿Y yo que tenía que ver en todo esto?-Preguntó el más bajito —Estaba perfectamente con el color de mi cabello.-discutió con Jongdae que para ese entonces se dedicó a ignorar las quejas de ambos chicos. Después de un par de horas en el salón de belleza llevaron a Baekhyun hasta su departamento donde se despidió de sus amigos y entró al edificio. En el elevador pedía que Chanyeol estuviese ahí, no le importaría el funesto silencio, sólo quiere verificar que el gigante este en perfecto estado.
Cuando llegó hasta la puerta de su departamento y abrió, Baekhyun esperaba encontrar silencio pero en vez de ello gemidos, maldiciones y jadeos fue lo que Baekhyun recibió. Algo dentro de él comenzó a agrietarse y el dolor punzante estaba ahí. En completo silencio dejó sus cosas y corrió hasta su habitación, encerrándose en el cuarto de baño que tenía su habitación para luego abrir la llave de la regadera y así dejar fluir el agua que ocultaba sus saladas lágrimas de tristezas.
Chanyeol era así. Baekhyun sabía que era una persona desagradable en cuestión de romance o lo que sea que él tuviese con todas las personas con quien mantenía contacto físico, pero jamás, ni una sola vez, había traído a alguien al departamento que ambos compartían. Ninguna sola vez lo había hecho, Chanyeol no era ese tipo de persona, él era más de volver en la mañana con una recesa de lo peor y a veces con el estómago revuelto, pero nunca había tenido a alguien aquí y mucho menos mientras tenían sexo. No en la presencia de Baekhyun.
Baekhyun lloró durante horas bajo el chorro de agua, con sus manos en su boca para evitar que cualquier sollozo escapara de entre sus labios. No necesitaba que Chanyeol lo escuchara llorar y mucho menos la tipa o tipo que estuviese con él. Cuando comenzó a temblar del frío, apagó la llave del agua y se despojó de la ropa empapada para envolverse en su bata de baño e ir a su habitación a colocarse ropa cálida que lo protegiera del frío incesante que tenía su cuerpo. Se oían aún esos desagradables ruidos que hacían que poco a poco hicieran llorar a Baekhyun en el silencio de su habitación hasta muy entrada la noche. Una vez que su cuerpo estaba pidiendo descansado, Baekhyun pudo conciliar el sueño con los gemidos como música de fondo.
**
Cuando despertó su cuerpo estaba envuelto entre sus sabanas, se sentía cansado a pesar de que recién había despertado, sentía sus ojos hinchados y no dudaría que estuviesen rojos por haber estado llorando casi toda la noche. Su cuerpo le dolía por alguna extraña razón y odiaba ese estado vulnerable.
Con parsimonia se levantó de la cama y caminó hasta su baño. Necesitaba tomar una ducha que lo hicieran sentir un poco mejor físicamente hablando porque sentimentalmente estaba mal, demasiado diría para su propio gusto. Cuando terminó de ducharse se miró al espejo y vio las bolsas negras debajo de sus ojos y también estaban hinchados. Se aplicó un poco de maquillaje que ocultaría lo decrepito que se miraba el día de hoy para luego vestirse.
Su estómago pedía algo de comida aunque si por él fuera no comería nada pero anoche no había probado ningún bocado y ahora su estómago lo exigía. Salió de su habitación y se dirigió hasta la cocina. Baekhyun no creyó que el destino quisiera fastidiarlo más pero resultó que sí que quería fastidiarlo muchísimo más puesto que cuando entró a la cocina se encontró con el cuerpo de una fémina envuelta en una bata de baño, de complexión delgada, cabellos rubios y demasiado bonita, debía admitirlo. El ruido de las grietas de sus corazón resonaron en sus oídos y el dolor de su pecho incrementó.
—Hola.-Saludó la chica con voz cantarina —Soy Sandara.-se presentó con una sonrisa plasmada en sus rosáceos labios. Ella es demasiado bonita, pensó Baekhyun forzando una sonrisa.
—Soy Baekhyun.-Se presentó aún con esa forzada sonrisa pintada en sus labios.
— ¿Eres Baekhyun?-La chica se acercó y extendió su mano la cual el bajito aceptó —Chanyeol me comentó que tenía un compañero de departamento.-rió —Lamento muchísimo por los ruidos de ayer.-él no respondió pero asintió en silencio mientras se abría pasó en la cocina. Su pulso estaba acelerado y sólo quería irse de ahí pronto. Baekhyun escuchaba como la chica le hablaba de cómo había conocido a Chanyeol ya hace un tiempo atrás y que frecuentaban algunas veces, lo que le dio a entender a Baekhyun que no era nada serio pero eso no le importaba, no en realidad. Baekhyun necesitaba irse y dejar de escuchar la cantarina voz de la chica de cabello rubio. Él no necesitaba esto, por supuesto que no y cuando creyó que no soportaría más una figura alta apareció por el marco de la puerta.
—Sandara.-Llamó y se percató de la presencia del otro chico —Hey Baek.-saludó con un movimiento de cabeza. ¿Le acaba de hablar con qué fin? ¿Para no quedar mal en frente de lo que sea que fuese la chica de Chanyeol? ¿Se estaba burlando de él? Baekhyun desechó esa idea de su cabeza. Probablemente todo lo que había pasado anoche fue porque el gigante estaba lo suficiente ebrio que terminó justo en el departamento con la chica. Sí, seguro que era eso, se trató de convencer a sí mismo el pelinegro pero en vez de saludarlo verbalmente sólo hizo un movimiento vago de cabeza y salió de la cocina mientras se dirigía rápidamente a su habitación a recoger su celular y otras cosas que serían necesarias para luego salir y coger su mochila bajó el escrutinio de ambos chicos. Baekhyun agitó su mano en forma de despedida por obligación y cerró la puerta tras de sí. Sus ojos ardían por las lágrimas que querían ser derramadas pero las mantuvo bajo control y se dirigió hasta la parada del bus. Necesitaba llegar pronto a la universidad para que llenara su cabeza de cosas para estudiar y quitar momentáneamente la imagen de Chanyeol rodeando la pequeña cintura de Sandara.
Cuando llegó a las instalaciones fue recibido por un alegre Jongdae quien al notar la mirada angustiada que traía se le borró lentamente y corrió hasta quedar frente de él. Baekhyun trató de mostrarle una sonrisa para poder tranquilizarlo pero en vez de ello un sollozó escapó de sus labios mientras las lágrimas se derramaban de sus ojos. Jongdae lo rodeó entre sus brazos y Baekhyun deseó quedarse bajo el cuidado de esos protectores brazos.
Baekhyun no está seguro después de ello aunque puede recordar claramente que se mantuvo llorando durante horas a lado de Jongdae y Kyungsoo quien en algún momento había llegado, pero lo que no recordaba es como habían llegado hasta la azotea, además de que estaba seguro que habían perdido al menos tres clases seguidas.
Sus amigos lo abrazaron en silencio después de que él les hubiese contado porque estaba así de mal. Jongdae principalmente fue el que más se molestó y había llamado de mil formas desagradables a Chanyeol. Entonces Baekhyun había murmurado que probablemente estaba demasiado ebrio y por eso habían parado en el departamento, ganándose un bufido de exasperación por parte de Chen.
—Chanyeol no es así.-Excusó el pelinegro —Jongdae, Chanyeol no es así. Sé que es un asco de novio pero es un buen amigo y sus actos no fueron con mala intención, estoy seguro de ello.-explicó.
—Baekhyun, no seas ciego.-Murmuró Jongdae —Él lo está haciendo para dañarte. Joder, ni siquiera sé qué diablos intenta demostrar con echártelo en cara, pero sus actos son bien intencionados.
—No lo son.-Susurró Baekhyun —Enserio que no lo son. Chanyeol no lo hace con la intención de lastimarme, Jongdae, créeme. Chanyeol no es una mala persona, no lo es.-repitió una y otra vez tratando de convencer a sus amigos o, probablemente, a él mismo.
Cuando el llanto apaciguó decidió que ya era tiempo de ir a tomar clases y sus dos amigos asintieron aunque Jongdae estaba demasiado renuente con dejarlo ir así de inestable pero Baekhyun se encargó de asegurarle que estaba mejor. Las clases restantes antes del almuerzo entretuvieron los caóticos pensamientos de Baekhyun y cuando el timbre que avisaba la hora de almuerzo tocó no tuvo tiempo de pensar en Chanyeol y todo lo que tenía relación con la noche pasada porque Yifan apareció en su campo visual.
—Hola Baek.-Saludó con alegría el más alto inclinándose para depositar un beso en la frente del más bajito. Baekhyun quedó atónico por la acción pero después de unos segundos decidió no darle importancia.
—Yifan, hola.-Saludó — ¿Cómo estás?-preguntó.
—Ahora que te veo mucho mejor.-Sonrió y Baekhyun, sin poder evitarlo, se sonrojó —Estaba preguntándome algo, Baek.-el nombrado rió levemente.
—Cada vez que tú y yo nos vemos siempre tienes algo que preguntar, Yifan.-Se burló Baekhyun — ¿Qué es?-curioseó y el más alto sonrió.
— ¿Tal vez podrías darme tu teléfono móvil?-Baekhyun lo pensó por unos segundos y terminó asintiendo. A pesar de que Yifan lo acortejaba, para el bajito el más alto era su amigo y no podía negarle cosas tan simples como su número telefónico. Ambos intercambiaron números y continuaron platicando hasta llegar a la cafetería donde Baekhyun decidió invitar a Yifan quien aceptó gustoso.
Entre pláticas y risas que había compartido con sus amigos y especialmente con Yifan, el tiempo pasó más rápido de lo esperado y las clases reanudaron hasta que después de un par de horas el timbre de salida se escuchó. Baekhyun había quedado con Yifan para verse a la hora de la salida, sólo necesitaba dejar algunas cosas en su casillero. En su camino se topó con los amigos de Chanyeol, quien le dirigieron una mirada para luego saludar con la cabeza al más bajito que asintió de igual forma. No había visto a Chanyeol durante todo el día y de hecho había pensado muy poco acerca de su mejor amigo. Sacudió su cabeza desechando el pensamiento de Chanyeol y dejó sus cosas para así dirigirse rápidamente hacía la salida donde encontró efectivamente al rubio más alto.
El camino hacía su departamento fue en una amena charla con Yifan que entre risas y platicas triviales el recorrido fue corto, según palabras del mismo conductor quien en forma de despedida besó, una vez más, la frente del más bajito. Baekhyun salió del auto y entró al edificio, tomando el elevador que no tardó en llevarlo hasta su piso. El recuerdo de anoche se aglomeró en la cabeza de Baekhyun y volvió a sentirse ansioso y angustiado. No quería volver a revivir lo de anoche y sabía que sus amigos y Yifan habían sido un distractor para todos los problemas que tenía con Chanyeol. Lo sabía pero ahora ellos ya no están.
Sus ojos le picaron por las lágrimas que con lentitud comenzaron a bajar por sus sonrojadas mejillas. El ruido de la cama, los mismos gemidos y jadeos eran la música que se escuchaba en su departamento y votó sus cosas para volver a huir hacia la protección de su habitación. Sí tan solo las paredes fueran más gruesas, pensó entre lágrimas el pelinegro quien se hizo un ovillo en la cama.
Una noche más pasó bajo el manto del dolor y la angustia. Las grietas se abrían cada día más y las lágrimas se derramaban con más frecuencia. Cuando la mañana llegó sólo se lavó los dientes y la cara antes de salir con sus cosas e ir a la cocina por un poco de jugo. Probablemente la misma escena de ayer se repetiría pero en vez de una Sandara en bata de baño encontró a Chanyeol sentado en el comedor con un vaso de leche entre sus manos. Baekhyun entró en absoluto silencio y abrió el refrigerador sacando el pequeño en base de jugo.
Esa mañana Baekhyun estaba cansado de fingir y simplemente decidió irse con el escrutinio habitual de Chanyeol. Ellos no han tenido una buena plática desde hace un tiempo. La incomodidad y silencio era más palpable que la alegría que alguna vez había en ese departamento. Jongdae no preguntó nada cuando lo vio pero lo envolvió entre sus brazos como lo había hecho anteriormente. Kyungsoo no fue excluido, de hecho él era el más paternal de entre los tres y arrullaba a Baekhyun cada que le fuese posible.
Yifan decidió sentarse en la mesa de Baekhyun desde que ayer se había sentado con ellos y compartían momentos que hacían vislumbrar una pequeña y verdadera sonrisa de Byun Baekhyun o de lo poco que quedaba de él. Había visto un par de veces a Chanyeol en la universidad y luego ya no estaba más. Baekhyun sabía dónde se encontraría Chanyeol cada vez que no lo viese por la universidad y entonces el llanto era su fiel compañero por las noches al igual que el insomnio mientras que Chanyeol follaba con Sandara. Entonces comprendió que Chanyeol si lo estaba haciendo apropósito, quería lastimarlo. Las grietas estaban más abiertas y no durarían mucho antes de que todo se desmoronara en pedazos.
Sopórtalo, sopórtalo Baekhyun, se animaba a sí mismo el pelinegro cada noche de insomnio y llanto. Pronto terminara, sopórtalo un poco más y entonces los gemidos se detenían, escuchaba ruidos en el pasillo, escuchaba como la puerta era abierta y luego se volvía a cerrar. Miraba con anhelo la puerta de su habitación con la mínima esperanza de que Chanyeol entrara por ahí y se disculparía por ser un idiota y provocarle tanto daño pero entonces las esperanzas comenzaban a morirse cuando la puerta nunca se abría.
**
Las recurrentes noches en penas duraron cerca de dos semanas en donde Baekhyun por las mañanas se pintaba una sonrisa falsa con rotulador y hacia como si nada estuviese afectando su estado emocional. Compartía momentos con sus amigos y Yifan quien se mantenía más tiempo con él. Baekhyun permitió que Yifan lo cogiera de la mano, lo abrazara cuando se le diera la gana y sí, incluso había aceptado salir una noche con él porque quería ser libre del dolor que vivía todos los días en su departamento. Nunca quiso hacerle daño a Yifan pero lo estaba haciendo y, probablemente, él único que le hacía daño a él era Chanyeol y Yifan era lo que merecía tener. Lo que debía tener porque lo merecía, tenía que botar los sentimientos que una vez declaró para poder ser libre.
Recuerda que una noche desesperado por la angustia terminó follando con Yifan. El rubio fue su vía de escape de su cruel realidad y a la mañana siguiente cuando despertó envuelto entre esos largos brazos deseó que fuese Chanyeol pero entonces recordó que Chanyeol era un patán que sólo lo lastimaba día tras día y que él merecía a alguien mejor. Que él merecía a Yifan y que tenía que dejar ir a Chanyeol.
Esa mañana él se despidió de Yifan con un beso en los labios que el más alto aceptó sin renegar absolutamente nada para que luego bajara y tomara un taxi que lo llevó hasta su departamento. Cuando entró fue a Chanyeol a quien miró, sentando sin moverse ni un ápice sobre el sillón. Entró ignorando la presencia de Chanyeol y planeaba llegar a su habitación y dormir un poco más. Estaba cansado físicamente y simplemente quería dormir para olvidar. Algo estaba haciendo mal con su vida.
— ¿De dónde vienes?-Esa fue la primera vez que Chanyeol le hablaba directamente desde hace un largo tiempo.
— ¿Qué eres? ¿Un detective o qué?-Preguntó Baekhyun mofándose de la actitud de Chanyeol —No te interesa, Chanyeol.
—No llegaste a dormir, Baekhyun.-Murmuró el más alto.
— ¿Qué más te da a ti?-Rodó los ojos cansado —Estoy cansado así que no me molestes.-dio unos pasos para continuar su recorrido cuando sintió una mano en su muñeca que lo hizo detener de golpe por la dureza del agarre —¡Yah, Park Chanyeol!-chilló —¿Qué demonios estás haciendo?
—Te he preguntado algo.-Demandó.
—Chanyeol no te debo ninguna puta explicación, así que quítate, necesito dormir. Deseo dormir ahora que hay paz en este maldito departamento de mierda.
— ¡¿Dónde carajos estabas Baekhyun?!-Bramó el gigante — ¡Responde ahora!
— ¡Joder Chanyeol, no te debo ninguna puta explicación de lo que haga o deje de hacer con mi vida!-Gritó — ¡Es mi vida!-se soltó del agarre del otro y comenzó a caminar.
— ¡Baekhyun!-Chanyeol lo tomó entre los hombros y Baekhyun alzó la cabeza para mirarlo directamente a los ojos, demostrando que estaba demasiado enfadado como para asustarse de su puñetera estatura — ¿Qué demonios tienes en el puto cuello?-el bajito sintió los fríos dedos del más alto sobre su cuellos, bajando hasta bajar un poco sus camiseta y dejar a la vista los chupetones que rodeaban parte del cuello y clavículas.
—Déjame, joder.-Se soltó —Estoy cansado de tu mierda, Chanyeol.-comenzó Baekhyun alejándose del más alto — ¡Es nuestro puto departamento! ¡De los dos!, ¿entiendes el concepto de espacio compartido, tu idiota?-preguntó enfadado, dejando fluir todo lo que había estado reteniendo durante semanas —Estaba hasta los putos cojones de escuchar gemir a tu perra esa todas las jodidas noches, Chanyeol. Soporté cada una de tus mierdas porque creía que no lo estabas haciendo a propósito pero entonces me di cuenta que él único idiota aquí he sido yo, creía que sólo estabas demasiado ebrio como para irte a un motel de mierda pero resulta que nunca fue así.-gruñó.
—Baekhyun, ¿Quién fue?-Preguntó inhalando y exhalando por su nariz tan rápido como si le faltara el aire — ¡¿Quién maldita sea te tocó?!
— ¡Cierra tu maldita boca Chanyeol!-Gritó una vez más —Te pediré con la poca amabilidad que me queda y la que te mereces que no vuelvas a venir con Sandara o quien se te venga en ganas al departamento porque yo también vivo aquí. Sus malditos gemidos se escuchaban por todo el departamento que apenas pude dormir. Haz lo que se te venga en tu regalada gana Chanyeol pero no aquí, no donde vivimos los dos porque este departamento es tuyo como mío. Yo respeto este espacio y no traigo a mi novio, así que te sugiero que hagas lo mismo a partir de ahora.
— ¿Novio?-Preguntó — ¿Qué idiotez estás diciendo, Baek?-soltó una risa hueca — ¡¿Qué maldito novio?!-gritó.
—Yifan.-Contestó —Él es mi novio. No te debo de dar los reportes de mi vida.
— ¿Qué estás diciendo? ¿Novio? ¿Enserio? ¿Cuál novio, Baekhyun?-Preguntó —Tú me amas a mi así que no puedes estar con nadie más. Tú sólo me amas a mí, por lo tanto déjate de inventar a ese novio tuyo.
—Me cansé Chanyeol. Estoy cansado de tu mierda, ya te lo dije. No necesito más esto, he tenido suficiente para toda una vida.-Contestó el bajito —Confesé mi amor por ti, estaba bien que no me aceptaras, pero tú solo te alejaste y comenzaste a dañarme, inconscientemente o no, me estabas dañando Chanyeol.-susurró y negó —Estaba cansado de este amor unilateral y decidí darme una oportunidad con Yifan, él sí que merece un poco de mi amor. De este estúpido amor que derramé por ti y que únicamente fue toxico para mí mismo mientras que tú te la vives tan tranquilamente. ¡Eso pasó, Chanyeol!-gritó — ¡Me cansé y necesito ser feliz!
—Baek, tú me amas a mi.-Murmuró Chanyeol caminando para acercarse más a Baekhyun quien se alejaba más y más del gigante.
—No, ya no.-Respondió —Merezco algo mejor, Chanyeol y tú no eres una opción. Eras el único pero lo arruinaste todo y el amor que sentía por ti murió, me cansé y yo no necesitaba más de esto en mi vida. Se acabó Chanyeol, se acabó.