“Si el tuviera alas, volaría lejos,
algún día Dios se las dará.”
James blunt-Carry you home
El reloj marcaba las 11:17 pm. Un chico menudo y bastante delgado caminaba por la ahora solitaria avenida Sunshine, a paso lento y casi letárgico iba cruzando por el antiguo pero no menos hermoso puente, se podía apreciar a simple vista el hecho de que el muchacho estaba atravesando por una situación no muy agradable, y no estaba seguro de el por qué.
Chanyeol se encontraba estacionado al otro extremo de la calle, de donde podía observar todo movimiento del muchacho, y su mente y corazón se encontraban en un debate feroz. Por un lado su siempre aguda y previsiva mente le decía que se marchara de ahí, que fuera a su casa y así se ahorraría cualquier problema “Ni siquiera lo conoces Chanyeol, vete rápido” se repetía a sí mismo, y cuando estaba a punto de encender el motor algo en su pecho le pesaba y lo hacía sentir incómodo y culpable, lo cual era raro porque ni siquiera conocía al muchacho y lo más sensato era irse y descansar.
Lo ayudo.
Me voy.
Lo ayudo.
Me voy.
Lo ayudo.
Me voy.
Como el maldito buen muchacho que era decidió salir del auto con un “Maldición!” de por medio. Afuera el clima estaba realmente frío, estaban en pleno Mayo y aun así el clima invitaba a quedarse en cama con una buena taza de café caliente. Mientras seguía maldiciendo al mal tiempo, se acercó al muchacho que ahora se había quedado parado a solamente unos centímetros de la baranda que había en el puente.
“Oye es bastante tarde…. Mm Me preguntaba si tal vez necesitabas ayuda” –
Chanyeol espetó estas palabras de una forma casi exageradamente alta, como si por alguna razón temiera no ser escuchado.
“Escucha solamente quiero ayudarte, me parece que no son horas para que estés aquí, además te resfriarás”
El pequeño cuerpo pareció reaccionar ante esta última palabra, y poco a poco fue girando su cuerpo.
“R-resfriado?”
Chanyeol se sentía inmensamente emocionado porque finalmente aquel muchacho daba señales de haberle estado escuchando. Cuando el muchacho se giró y quedó frente a frente con él casi podría jurar que sintió como toda su sangre se había marchado de todo su sistema.
Un adolescente de 17 años, delgado y de una estatura bastante normal, cabello negro azabache, piel tan pálida como si de un muñeco de nieve se tratara, y los ojos más hermosos que jamás nadie podrá siquiera llegar a semejar, labios rosa pálido, sutil y muy elegantes, pequeños pero amenazadores. Labios que te invitaban a adentrarte en una aventura hacia el placer y lo prohibido. Labios de príncipe.
Chanyeol no quería asimilar el hecho de que el ver el enorme abrigo que llevaba el muchacho le había provocado una corriente eléctrica que le provocó una sensación demasiado extasiante como para ser real. Y en otras circunstancias se hubiera puesto a reír como el raro y reservado adolescente que era, si no fuera porque rápidamente pudo notar el estado del muchacho.
Luego la mente de Chanyeol fue rápidamente procesando todo lo que habia visto, y se encontraba en un shock descomunal. No solamente porque frente a el se encontraba un muchacho en extremo hermoso y delicado, sino porque precisamente, frente a el se encontraba el ser mas especial para el.
Y sintió su estómago revolverse y sintió miles de corrientes viajando desde su cerebro y repartiéndose por todo su cuerpo. Sabía a que se debía esa sensación.
Y más que nada porque justo en frente suyo se encontraba Byun Baekhyun el chico más popular, admirado y querido del instituto, por no mencionar que era probablemente el chico con el futuro más brillante de toda la nación.
Byun Baekhyun, la estrella de la equitación.
Y no sabía bien que le había pasado a Baekhyun, pero el hecho de que estuviera a las once de la noche totalmente empapado, llorando como si no hubiera mañana, y con la desesperanza más grande reflejada en los ojos que Chanyeol jamás siquiera haya imaginado que podía ver en un ser humano.
Eso le estaba matando.
Porque nadie soporta ver a alguien que amas en ese estado.
Tenía muchas preguntas, demasiadas para su propio gusto, pero decidió casi forzándose, guardarlas para otro día. La cosa más extraña de toda la extraña situación se radicaba en el hecho casi irónico y doloroso de que justamente en la mañana aquel chico que ahora se veía destrozado y derrotado, se encontraba sonriendo y recibiendo felicitaciones por parte de todo el cuerpo docente y las autoridades ya que había logrado clasificarse para la final del mundial de equitación donde su colegio había clasificado gracias a Byun Baekhyun.
Y le parecía algo estúpido si le preguntaban, porque se supone que Baekhyun debería estar en casa de alguno de sus amigos celebrando, se supone que debería estar con Kris, su novio, se supone que debería desbordar alegría por todos lados, se supone que debería estar en cualquiera otro lado menos en donde se encontraba ahora.
“Baekhyun, escucha no sé qué fue lo que sucedió, no me interesa ahora mismo, pero déjame llevarte a casa”- Chanyeol se acercó tratando de hacer frente al pequeño que ahora ya había comenzado a temblar, lo que no sabía decir si era de frio, miedo o coraje. Y esto último podía ser una opción muy fiable ya que el ceño fruncido y los labios en línea recta dejaban una muy filial posibilidad a ello.
Chanyeol creyó que el popular chico lo iba a insultar, o que incluso saldría corriendo de allí, pero lo cierto es que sería un tremendo idiota si no admitiera que la reacción dada por el muchacho lo dejó más que anonadado.
“No puedo volver a mi casa, Chanyeol, no puedo regresar después de lo que he hecho sabes?” –Baekhyun había soltado aquellas palabras con tal vez demasiada suavidad y dolor, y él lo pudo sentir, pudo percibir el dolor y la gravedad que encerraban.
Quiso preguntarle qué había sucedido, realmente tenia curiosidad por saber si fuera lo que fuera era demasiado grave y le había afectado tanto como para dejarle en aquel estado. Pero Park Chanyeol no era por nada el estudiante genio en física del colegio, y como buen físico que era decidió ser prudente y callar, y limitarse solamente a tratar de llevarse al chico a un lugar más cálido.
“Está bien, entonces te parece bien si vamos a mi casa?, digo, cualquier lado sería mejor que estar en medio de una calle con 3 grados bajo cero no crees?”
“Me llevarás contigo?” Chanyeol ladeó la cabeza confundido pero asintió finalmente.
Baekhyun simplemente le tendió su mano, y Chanyeol aun embobado la cogió sintiendo lo fría y delgada que era. Nunca en toda su vida estudiantil hubiese siquiera llegado a imaginar coger la mano de Baekhyun, no porque no le atrajera porque todo el club de física avanzada sabia de los sentimientos de Park Chanyeol hacia Byun Baekhyun, pero también sabían de lo extremadamente imposible que era el hecho de que Baekhyun saliera con Chanyeol.
Y el hermoso y extraño suceso de que ahora fuera precisamente Baekhyun quien le tendiera la mano era casi gracioso, casi, porque no era precisamente una cita ni una declaración-
Caminaron hacia el carro de Chanyeol, este le abrió la puerta del muchacho, quien se limito a entrar y fijar su vista en el camino. Mientras cursaban el camino hacia casa de Chanyeol, Baekhyun le formuló una pregunta repentina.
“Chanyeol, crees que soy un fracasado?”
Chanyeol no sabia que responder, y el shock mental que tuvo fue grande, muy grande. Fracaso? Byun Baekhyun un fracasado? Definitivamente la persona que le haya dicho eso, estaba mas que equivocada, como es que alguien con los grandes logros de Byun Baekhyun podía ser llamado con tan despectivo adejetivo? Se debería ser o muy idiota o ser un genio de la antigüedad para decir aquella barbaridad.
“como has dicho? Baekhyun no eres nada cercano a lo que el fracaso es, y sea quien sea el que te haya dicho aquello es una vil y vulgar mentira entiendes?
“Chanyeol?”
“mmh?”
“Nadie me lo ha dicho….yo me he dado cuenta de que soy un total desastre, que soy todo lo que no quería ser sabes? Nunca deseé ser lo que soy!...... y duele porque siempre quise ser como aquellos guerreros valientes y altivos de los que lees en libros, pero resulta que al final he terminado ahogándome en mi propia piscina… y no sé- suspiró- no sé como tomarás lo que he hecho, no sé si precisamente tu serás capaz de perdonarme.
Las palabras soltadas por el chico mas bajo realmente habían sido profundas, y Chanyeol se limitó a no decir nada.
Al siguiente minuto Chanyeol prendió la radio, decidió prudente poner algo de música, seguramente ayudaría a aliviar el ambiente.
-Chanyeol?- a Chanyeol le sorprendio el poder que tenia Baekhyun sobre el. Solo bastaba que el pelinegro pronunciara su nombre para que casi pierda el control del volante.
-S-sí?.- trató de que su voz sonara lo mas casual y “normal” posible.
-Tu has comido en un Mc Donalds?-
Un gran signo de interrogación habia ocupado todo su cerebro.
Quien no habia comido en uno de esos locales de comida rápida, que a su parecer tienen las mejores papas fritas del mundo. Byun era raro, pero especial al mismo tiempo, por lo que respondio tranquilamente.
-Por supuesto, todo el mundo ha ido alguna vez en su vida-
-Bueno…yo no- soltó en un tono triste Baekhyun quien se encontraba mirando la ventana.
¿Nunca?
¿!Byun Baekhyun, el chico prodigio, perfecto y mas codiciado, nunca habia pisado un Mc Donalds?¡
-Lo dices enserio?-
-Por que mentiría?-
-Oye, no lo sé, es realmente extraño que nunca hayas ido, es algo casi cruel sabes?-
El sonido de la risa de Baekhyun lo hizo confundir mas. .-Lo sé, pero… nunca me dejaron ir, y yo nunca peleé por ir tampoco, aunque ahora me arrepiento.-
-No lo sé, humm, no sé que decirte- Chanyeol alegó totalmente sorprendido por la actitud del pequeñuelo.
De pronto el sonido del cinturón de seguridad siendo desabrochado bruscamente lo sobresaltó y el grito seguido lo hizo sonreir como nunca antes creyó ser capaz.
-Chanyeol!!- Baekhyun estaba arrodillado en el asiento- Llévame! Llévame a uno!!- gritó felizmente.
Y quien era Chanyeol para negarle algo a Byun Baekhyun?
Nadie, eso la sabia. Y la imagen desgarradora de Baekhyun antes lo habia puesto de mal humor, pero si el niño quería ir a un Mc Donalds, y mas importante, si eso lo hacia feliz, entonces lo haría, lo haría porque quería ver sonreir a Baekhyun.
Por siempre.
-Esta bien.-
Y asi siguieron mientras cantaban “Bad Day”, y asi continuaron con un repertorio bastante peculiar pero acertado.
Tras veinte minutos de recorrido, finalmente llegaron al Mc Donalds.
-Llegamos!- saltó Baekhyun- Oh! Por dios!
Chanyeol no dijo nada, simplemente se bajó para abrirle la puerta al bajito, pero se obviamente el niño estaba mas que emocionado y ya se encontraba adentro, pegando su cara en las mesas, mirándolas como si fueran lo mas maravilloso del mundo.
La imagen era tierna, pero triste al mismo tiempo. ¿Qué tipo de padres prohíben a un niño ir al “paraíso” que era Mc Donalds? pensó el alto. Era realmente cruel, pero para eso estaba el, para mostrarle lo maravilloso del mundo de calorías y carne.
Se acercó a Baekhyun quien ahora estaba con los dos codos en el mostrador, con los ojos brillantes mientras admiraba el menú.
Simplemente era la cosa más tierna del mundo, más linda y más maravillosa.
-Chanyeol mira!!! Mira!! – gritó dando saltitos Baekhyun- hay demasidadas cosas!!, y todas son igual de sabrosas!! Oh dios mio!- se llevó sus manos a su boca intentando calmar su emoción.
Chanyeol rio.- Si, vamos! Escoje lo que quieras, yo invito-
El puchero que apareció en la carita de Baekhyun le pareció demasiado- que ocurre?-
-Es que- Baekhyun jugaba con sus manos- Yo… no sé que escoger- hizo un puchero.
-oh!.- fue todo lo que salió de la boca del mas alto.
-Disculpe, es su primera vez joven?- preguntó la cajera.
-Lo es- dijo Chanyeol sonriendo.
Después de eso una cadena de “que mono!” “Es demasiado adorable” “que lindo” se fueron oyendo en todo el local.
-Señorita, cual es la mejor hamburguesa que tiene?- preguntó Baekhyun con voz suave.
-“Perdon?” grito la cajera.-
confundido Baekhyun empezó a buscar en el menú, fallando.- í-
-No Baek, ella ha preguntado que vas a comer- Chanyeol rió por la inocencia del pequeñito.
Un intenso sonrojo se apropió de la cara del pelinegro.- Lo siento-
-No debes sentirte asi.- dijo la cajera- pero bueno, no lo sé, escoje la que te paresca apetecible-
El delgado muchacho lo meditó por un tiempo, y después de dos minutos de intenso debate cerebral, gritó- Las quiero todas-
La boca de Chanyeol se abrió de par en par, y no era menos, ¿acaso Baekhyun pretendía comer todas esas hamburguesas?.
-E-es enserio?-
-Ajá-
-Baek, no es que no te las quiera comprar, pero…- Chanyeol rascó su nuca- no creo que sea bueno que comas tanta comida chatarra.-
-Pero… pero tu dijiste- la voz de Baekhyun se empezó a cortar- dijiste que podía pedir lo que quisiera.
Chanyeol tenia una debilidad, Baekhyun. Pero si a eso le sumamos el hecho de Baekhyun con los ojos llorosos, esa era defitivamente era la debilidad de Park.
-Esta bien, compraremos de todo-
Y asi pasaron comiendo hamburguesas. Y como era predecible, baekhyun no avanzó ni con tres, asi que terminaron alimentando perros callejeros con el resto. Antes de salir, baekhyun quiso comprar un milshake de chocolate, y como siempre Chanyeol no se lo negó.
Ya de vuelta al carro, Chanyeol y Baekhyun empezaron a contarse historias, unas divertidas y otras un tanto extrañas. Y entonces Park sabia que nunca estuvo equivocado.
Byun Baekhyun era perfecto.
Habian llegado a una colina que Chanyeol encontraba muy armoniosa, pues desde ahí se podía apreciar lo bello de la ciudad y del cielo en sí.
-Sabes channie?-
-Mhm?-
-Nunca he tenido relaciones sexuales- soltó el mas bajo.
Chanyeol casi se atora con el capuccino que estaba tomando. Porque sí, baekhyun quiso ir a una cafetería a tomar café en “esos vasitos de plásticos”, pero la confesión del bajito lo habia hecho perder los estribos momentáneamente.
-C-como dices?- soltó nerviosamente.
Baekhyun se acercó peligrosamente hasta pegar sus labios a su oreja, susurrando-Quisiera saber y sentir como es tenerlo-
Chanyeol no sabia que hacer, como es que de la nada baekhyun salía con ese tipo de cosas?. Por qué?
-Baek creo que estas cansado, no sabes lo que dices, será mejor que te lleve a casa-
-No!, por favor, no me quiero ir aún- suplicó.
No sabia como habían llegado a eso, a estar besándose apasionadamente. Pero Chanyeol estaba viviendo la aventura mas erotica y placentera del mundo.
Baekhyun se encontraba en su regazo, con una pierna a cada lado de su cadera, con sus delgados brazos rodeándole el cuello, mientras que sus ya notorios bultos se restregaban entre sí.
Gemidos y jadeos era todo lo que se escuchaba en el carro. La temperatura empezaba a subir. Y la lujuria entre ambos muchachitos también.
Chanyeol ahora acariciaba descaradamente el trasero de baekhyun, quien a su vez habia comenzado a mover sus caderas, provocando un placentero roce entre ellos.
-Baek- jadeó Chanyeol-
-Mhm?-
-Esto no está bien- dijo apretando mas las nalgas del bajito- tu tienes novio.
De pronto Chanyeol sintió como el roce se apagó, por un momento pensó que la habia cagado, pero luego lo siguiente ni siquiera tuvo cabida en su mente.
Baekhyun le cogió el rostro con sus manos, le besó salvajemente antes de decirle- El me engañó, además nunca estuvimos enamorados, era una simple estrategia para nuestros padres.- volvió a besarlo- ahora, hazme el amor Park-
Y quien era Chanyeol para negarle algo a Byun Baekhyun? , quien era el para negarle algo al chico de sus sueño.
¿Quién?.
Empezaron besándose, saboreando cada rincón recóndito de sus bocas, succionando sus lenguas y sintiendo la ansiedad que los estaba devorando como si de los leones en celo se trataran.
Chanyeol consiguió sacarle la camiseta a baekhyun, y cuando lo hizó y pudo apreciar aquel blanco y suave torso, limpio, puro, sin manchas, y en medio de el pudo divisar sus dos botones rodaditos, erectos y listos para ser succionados.
No perdió el tiempo y empezó repartiendo besos y lametones por toda la extensión del blanquecino cuello de baekhyun, disfrutando de cada retorcijón que el bajito tenia debido al placer, siguió hasta el hueco que habia justo en medio de sus clavículas, y ¡benditas clavículas! Tan marcadas y tan envenenadas, esperando a atacarte, y Chanyeol no se lo pensó dos veces, simplemente se dejó llevar, lamiendo y mordiendo cada parte de ellas.
Cuando baekhyun comenzó a jadear producto de la excitación, Chanyeol decidió que era oportuno dejar volar su camiseta.
Toques y mas toques que lo volvían loco, ya no era suficiente el roce de sus dos torsos desnudos, y decidieron que los pantalones estaban sobrando.
Con mucho cuidado Chanyeol recostó a baekhyun en el asiento, mientras besaba y lamia los pezones de baekhyun, ágilmente fue desabrochando el botón del pantalón de baekyun, quien ante el repentino frio que lo golpeó en su intimidad, dejo escapar un gemido.
-ahh!... oh!- gimió mientras sentía como el alto le besaba la entrepierna.
Chanyeol sabia, o mas bien esperaba que el bajito fuera delicado, siempre lo supo, lo que no esperaba era a un lampiño y niveo baekhyun. El bajito no tenia nada de vello en su parte baja, y era totalmente blaco, su miembro era rosadito, ahora mezclado con algo de rojo en la punta y sus testículos también, producto de la acumulación de sangre. Pero en definitiva era lo mas hermoso que Chanyeol jamás haya visto, y no es que el haya tenido sexo con alguien antes, pero estaba seguro de que nadie mas se compararía a la majestuosidad que era Byun Baekhyun.
Sin temor alguno procedió a lametear la punta del pene de baekhyun, quien ante tan placentero toque se limitó a arquear su espalda, mientras sus manos se aferraban a los asientos de cuero.
-oh! Dios! … - gritó cuando sintió como chnayeol engullia su miembro.
Baekhyun personalmente nunca hubiera imaginado que estaría teniendo sexo en un automóvil a las dos de la mañana, pero si le preguntan diría que ha sido lo mas atrevido y adrenalinico que jamas hubiera pensar sentir.
Despues de que Chanyeol lo llevara a las estrellas con aquella mamada, sabia lo que venia, y aunque estaba asustado, tambien estaba firmemente seguro de lo que quería, y lo amaba.
Y cuando Chanyeol metio el primer dedo en su virginal entrada, sintió como perdia poco a poco la “educación” y la “dignidad” que sus padres tanto se esmeraban en hacerle conservar. Pero como deseaba que ahora mismo le estuvieran viendo, que le vieran y se dieran cuenta que el ya no era el niño de casa, que ya no quería serlo, que nunca quiso y que jamas volveria a ser.
Con el segundo dedo, recordó todas aquellas ocasiones en las que deseo ser libre, todas aquellas veces que escapó de clases de latín, solamente para ir a alimentar a los pajaros del parque, aquellas veces en las que practicaba hasta cinco horas seguidas, aquellos golpes físicos y psicológicos que recibia por no haber obtenido una calificación perfecta.
Y cuando Chanyeol introdujo el tercer dedo, se olvidó completamente de todo, su mente simplemente se desconectó de todo, solamente era consciente de aquella sensación abrumadora que le hacia ver mas allá de lo que siempre se limitó a ver, aquel movimiento casi marcado por la biología era simplemente todo lo que alguna vez estuvo buscando fervientemente.
Y Chanyeol, el gran amor de su vida era el que se lo estaba proporcionando.
Porque estaba seguro de que Chanyeol jamás llegó a recibir ninguna de sus cartas, y también sabia que el gigante nunca lo habia visto cuando lo iba a ver en cada decatlón de física en el que participaba, seguramente tampoco estaba al tanto de que “Carden” su perro fue un regalo que el le habia dado.
Pero estaba bien, porque justo ahora, cuando creía que todo estaba perdido, y que de hecho, lo está, se econtraba con Chanyeol, haciendo el amor como siempre deseó y con quien siempre deseó.
Cuando Chanyeol le besó y le susurró al oído un suave pero ronco “Quieres seguir?” su cordura ya no dependía de el, simplemente asintió y dejó que su deseo fuera el que tomara el mando.
-“llévame a otro mundo, Chanyeol “- fue lo ultimo que fue capaz de vocalizar claramente.
Continuará