Nunca he pedido que me quiera o que me acepte; no, nada de lo que he hecho ha sido para obtener su aceptación o la de alguien más, la verdad mis palabras creo siquiera hayan sido sinceras, entonces ¿Lo he estado lastimando todo este tiempo?
Creo es una pregunta muy estúpida.
Nunca me he considerado un humano; no se cual es mi rol con las demás personas…solo me puedo dar una idea y sobre esa idea actuar como creo, más siempre tengo en duda sobre lo que esas personas sentirá.
Mentira. Nunca me preocupo de ellos; nada que tenga que ver conmigo tiene que ver con ellos, siempre pongo un límite. Lastima y me gusta. ¿Seré tan extraño? Pero es por que el dolor ha sido el único sentimiento que he podido explorara hasta lo más recóndito. Es lo único en lo que puedo sentir abro las alas….es una forma hermosa de expresar mi lástima, porque no tengo alas….como las mariposas que son solo presas de los más despiadados para arrebatarles sus alas y convertirlas en especimenes.
¿Es posible que me haya convertido en eso? No, no deseo serlo y tampoco…convertir en eso a este niño-baja la mirada de forma lenta y observa el rostro pacifico de Ritsuka al dormir-Seimei…de todo el dolor de este espacio, tenia que ser tu hermanito el mayor de todos. Nunca eres justo con tu pobre mascota-sonríe como si el mismo quisiese buscar compasión a si mismo-Combatiente…pelear y proteger al Sacrifice sin importar la vida; muchos podrían pensar es algo egoísta y un camino de sufrimiento y por eso me admiran y me llaman el “Combatiente Perfecto, pero la razón es que ser un Combatiente es lo único que se hacer, el único estilo de existencia que puedo tener y por eso doy mi cien por ciento en ello. Lastimar o Lastimarme es solo una manera de seguir comprobando que sigo vivo; que mi Sacrifice me ordene.
-Cierra los ojos intentando profundizar aún más-Seimei…como siempre res alguien que va muy por encima de mí y por eso me has dejado a Rituska. ¿Te das cuanta de lo que has hecho? Dejar a un niño a cargo de alguien como yo, a amar a este niño-sus dedos acarician muy superficialmente los cabellos del pequeño que se mantiene dormido-La primera vez fue mentira, la segunda fue por piedad, la tercera por que yo mismo lo he comenzado a creer hasta que por fin decir “Te amo Ritsuka” ha dejado de ser una orden, donde las cosas no son solo ordenes; algo que nunca lograste o quizá no querías que sucediera.
Es horrible. Ritsuka no ha aprendido a ser como tú y por eso sufro, pero también me alegro, la piedad que tiene al entrar en combate es realmente adorable. Me hace sentir vulnerable ante él y siendo un niño aún.
Para él la palabra amor no ha formado parte de su mundo y de eso te has encargado, ¿no es así? ¿Es tu forma de crear un Sacrifice? Lo compadezco, pero me compadezco a mí también.
Nada de lo que había echo era para ganarme algo de verdadero amor de Ritsuka, ni siquiera le pedí cediera, pero el mismo me ha dejado conocerlo, que lo toque, que lo abraze e incluso que me deje decirle que lo amo. De alguna manera este lazo no es el de un Combatiente con un Sacrifice; es otro; muy distinto, pero con la misma intensidad. Amor, amarlo por sus errores, por su majestuosidad, por su dolor y felicidad. Se ha preocupado por mí, aunque en su tierna carita quiera aparentar ser tú. Me ha tratado como algo con vida sin la necesidad del dolor. No hay duda que son hermanos.
Seimei, el día en que llegue a ser algo de verdad libre solo puedo preguntarme algo…¿Seguirás detrás de mí? ¿O volverás a ser lo que siempre has deseado ser?
Cuando peleo con Rituska siento temor, siento miedo a perder algo más que una batalla, porque el sigue siendo delicado como las flores de invierno-se acuesta con lentitud al lado del netito que sigue perdido en sus sueños-Rituska…Nunca he pedido que tu me ames, pero a final de cuentas lo que hago y haré será por amor, tal vez en este momento tu hermano me golpearía por mi pensamiento y volvería a hacer lo mismo…Lo único que necesito es estar a tu lado-sus manos abrazan la cabeza de Rituska y acerca su rostro y lo sumerge en sus cabellos-tu olor, tu piel-acaricia su nuca-Mi existencia dejara de ser existencia si llegara a perderte, la vida es…Ritsuka.
La noche es eterna, el cielo es hermoso…hasta mi dolor solo porque puedo vivir para ti.
-Soubi-murmuró el pequeño tan suave que el rubio no alcanzo a escucharlo.
Mi Ritsuka.
“”””””
Ok, pues me he puesto hoy algo más sentimental que de costumbre, donde otra vez necesito esconder mi propio dolor. Este POV de Soubi es hasta el cápitulo 10, ok? Es como yo comprendo lo que ha de sentir Soubi como Sacrifice y humano.
De ante mano agradezco a quienes lean esto y me comprendan.