Nieve Teñida de Rojo por Pasivas Unidas

Un frío día de invierno, un día un poco desolado en las calles, pero como siempre a mí se me ocurría salir para no pasar en casa. Paseaba por las calles frías de Busan tomando un chocolate ya no tan caliente para calmar el frío. Exhalé y miré al cielo observando como caían copos de nieve del cielo grisáceo y triste. Mis ánimos en ese no son los mejores. Desde hace un tiempo para mí la nieve es roja.

Comencé a caminar viendo como mis pies se hundían en la nieve. Contaba los pasos…
1… 2… 3…
Me detuve en seco al escuchar un sollozo extraño. Caminé hasta donde estaban esos sollozos pero no había nada cerca nada…
pensé que solo me estaban jugando una broma de mal gusto.
No presté mucha importancia después.
Me puse de cuclillas, cerré mis ojos y respiré hondo.

*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*

-Aquí estás… -escuche decir cuando cruzó la puerta de mi habitación. Su tono de voz era frío…

-¿Y en donde más voy  estar?... Almenos YO si te espero. –Llevé mis manos a mi rostro mientras pensaba en como decírselo.

-¿Sabes?... Esto, fue una pérdida de tiempo.

Tomó sus maletas y bajó las escaleras saliendo por la puerta…
Quería detener a esa persona… pero todo pasó tan rápido…
Segundos después, esa persona, ya estaba en el suelo, tendido… sangrando.
Supongo, desde un principio no quiso estar a mi lado. Vi una sombra corriendo a lo lejos.
Los vecinos salieron a ayudar, pero ya era muy tarde, todo pasó muy rápido frente a mi… cuando sentí, ya estaba en el hospital.

*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*

Exhalé otra vez y me puse de pie. Me tomé el poco de chocolate ya frío que quedaba y empecé a caminar arrojando el vaso en un basurero, ignorando las lágrimas silenciosas que salían de mis ojos y rodaban por mis mejillas hasta caer sobre la suave nieve acolchonada.

Escuché otra vez esos gemidos lastimeros.
Observé detrás de mí y pude ver un gatito negro que sobre maullaba y estaba con una patita coja. Su color sobresalía en todo lo blanco… igual que yo.
Tomé al gatito y lo acaricié con suavidad como si de algo valioso se tratase, pues ha sido el único que almenos, aunque lo haiga conocido apenas unos segundos atrás, me trae recuerdo hermosos…

-¿Tienes hambre pequeño? –acaricié su cabecita y el respondió con un mullido suave. –Te pondré… Joy… Mi nombre es Minki. Le sonreí

Retomé mi camino con el pequeño animalito en mis brazos hasta mi casa… esa que ahora está vacío, eso que pronto ya no lo estará más.

-¿Sabes?... hablé con él gato como si fuese a responderme. –Solo quiero que vuelva…

Legué a mi casa, dejé al animalito en el suelo y cerré la puerta. Caminé hasta la sala para darle un poco de leche a mi nueva mascota y luego me fui a la sala para dejarme caer en el sofá esperando ciegamente que tú volvieras. Te extraño Baek…

-Solo quiero que sepas hoy yo te dejaré de amar….

Y cerré mis ojos quedándome dormido soñando con aquel día de nieve roja…

*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*-*

¿Sabes?

No, tú no sabes…
No quise hacerlo… No quería dejarte, no así.
Extraño esa sonrisa que alegraba mis días. Esos tiernos momentos junto a ti.
Tus caricias, gracias por todo lo que me distes en vida. Gracias Minki…

Gracias por todos los momentos que ya no podremos vivir.

Hermosos momentos que se perdieron entre La Nieve Teñida de Rojo….