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Hannibal por AndreaCum

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Notas del fanfic:

Esta serie esta basada en los personajes de Hannibal la serie de Bryan Fuller, para fines del genero los sexos de los personajes son fieles a los del libro Dragon Rojo de Thomas Harris. Teniendo a Alan Bloom y Fredy Lounds como chicos.

Se manejaran los eventos como en la serie pero desde diferentes puntos de vista.


CAPI II:


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Notas del capitulo:

HANNIBAL / WILL GRAHAM

La casa olía a sangre, estaba seguro de ello. No habia entrado aún, se mantuvo frente a ella varios minutos; una casa común dos pisos, grandes ventanales que dejaban ver el interior a través de cortinas de telas semitransparentes. Era un tranquilo vecindario, una tranquila familia, en una tranquila casa... hasta que alguien decidió que tanta tranquilidad era molesta y redecoro las paredes de la casa y allí estaba él sabía que no debería entrar, que al momento de atravesar el umbral lo que fuese que encontrara se incrustaria en el centro de su cabeza y que sin importar cuantos días o años pasasen permanecerían allí acechando en sus pesadillas.

-Señor Graham, lo están esperando.

Limpio lo empañado de las gafas, sus dedos temblaban levemente, suspiro y prosiguio. La escena un asesinato doble, primero habían asesinado el esposo para luego inmovilizar a la esposa, inmovilizada, no muerta, aun sintiendo y consciente de cada detalle... ella era el objetivo.

Las fotografías se acabaron y con ello la presentación, encendió las luces del aula con un mando a distancia mientras seguía exponiendo el asesinato a los oficiales del FBI que asistian su cátedra de perfiles criminales.

-El asesino intervino el telefono una semana antes de los asesinatos, grabó las respuestas dadas a la operadora y en el momento en que llamaron de la empresa de seguridad para verificar que todo estuviese bien usó esta misma grabación logrando que lo catalogaran como falsa alarma. Conocía a sus víctimas, las estudió, las vigiló y solo cuando se sintió a gusto atacó. Este es su diseño, ahora ustedes diganme ¿como es él?- todos salieron del aula dejándolo recogiendo el escritorio.

-Así que te has recluido en un salón de clases.

Reconoció la voz y no pudo contener el escalofrío que le subió por la espalda hasta erizar los vellos de la nuca.-Ayudó a que los demás puedan interpretar con más eficiencia las escenas.

-Ninguno lo hará como tú.

Suspiro mientras seguía guardando las cosas en su maletín-¿A que has venido Jack?

-Hay un caso.

-¿Cuando no lo hay?

-Son seis víctimas William, mujeres jóvenes, estudiantes, mismo color de cabello, de ojos, estatura... no tenemos nada sobre el asesino, ni siquiera los cuerpos son solo desapariciones. Te necesitamos, ademas ¿estas mejor? despues de todo estas dando clases, tienes más interacción social que antes.

-Yo solo hablo, me importa poco si me escuchan o lo que piensen. Solo estoy pensando en en voz alta- ¿porque era que lo hacía? ¿por que regresaba a esas escenas? salvava vidas, cierto, tenía un don para atrapar a los criminales más inteligentes, pero la cuota a pagar era alta. Se perdía un poco con cada asesino, no solo se perdía, se transformaba y eso era lo que lo hacía temer... pero eran vidas ¿cómo podria negarse? ¿que tipo de monstruo sería de hacerlo? -Iré Jack, pero tengo mis condiciones.

***

El Dr. Hannibal Lecter era un reconocido Psiquiatra entre los grupos médicos de mayor renombre, los articulos que habia escrito y los estudios que habia realizado crearon una fama que llegaba a muchos lugares, esa mañana en particular llegó a su consultorio con la presencia de un agente del FBI llamado Jack Crawford quien recomendado por el Dr. Alan Bloom un colega con el cual trabajó años atrás, venía con una especial petición que hacerle.

Necesitaba que generará un perfil, de una particular persona. Había escuchado de él, William Graham el sueño de cualquier psiquiatra. Una persona con niveles de empatías tan altos que podría identificarse con cualquier persona que encontrase, cualquier situación, no podían catalogar su condición pero estaba entre una nube cercana al Autismo, Asperger o bien a las conductas de sociopatas narcisistas.

Todo un caso, indiferentemente su profesión y lo que podria significar para los estudio del Dr. Lecter, había un trasfondo que le interesaba mucho más, empatía pura ¿que tan cierto seria? ¿hasta dónde llegaría esa empatía? ¿podría comprenderlo? ¿a él? a su verdadero yo, no al traje de persona que se obligaba a vestir cada mañana y que desechaba cada vez que deseaba. -Será un placer, ayudarle en su caso agente Crawford.

***

Nadie podria entender como funcionaba, no espera que lo hicieran, pero había un par de cosas que necesitaba a la hora de estudiar una escena; soledad y silencio, se quedaba en medio de la escena, con los cuerpos en su cercanía, solo era cuestión de concentrarse y con un parpadeo la escena retrocedía rápidamente hasta ese momento, donde él era el asesino, donde podía sentir el miedo de las víctimas, donde él tenía el poder, pero nunca la elección. Todas las acciones estaban definidas, su trabajo era simplemente aclararlas para que los demás oficiales pudiesen entender al asesino, él los entendía demasiado bien para su gusto...las miradas que recibía le dejaban claro que todos le temían y sino le temían lo despreciaban, por como era, por lo que hacía, todos agradecian su don, pero ninguno estaba dispuesto a pasar suficiente tiempo con él.

ACADEMIA DEL FBI, QUANTICO, VIRGINIA.

Habia llegado a las oficinas, luego de ver el cuerpo de la última víctima creía entender mejor al asesino, no solo lo entendía de algún modo lo podía sentir bajo su piel, en sus oídos, detrás de sus ojos...las jóvenes, las veía como ÉL, con adoración, como aquello que deseas con fuerzas porque sabes que perderás. Por ello había regresado a su última víctima, porque no podria honrarla, no podía comerla como a las demás, esta estaba enferma, enfermedad que ella y su familia desconocían y sentía un dolor y una pena asfixiante de la sola idea de haber quitado una vida sin poder agradecerlo correctamente ¿sentía? o ¿era el asesino quien debía sentirse de esa forma? -Es el asesino William, quien se siente de esta manera, no tú, no. Tú solo crees saber cómo ÉL se siente, pero no puedes sentirlo, solo crees que lo sientes, solo crees que s...- se cayo rápidamente al ver como una agente pasaba a su lado con gesto aterrado sin disimular su prisa, por suerte ya estaba llegando a la oficina de Jack.

***

¿Comó definirlo? no creía poder encontrar palabras para hacerlo, apenas la puerta se abrió la rafaga de aire que vino con ella llegó hasta el fondo de sus fosas nasales,  sintió una explosión en su cerebro que invadió su cuerpo con algo muy similar a la adrenalina, similar a como se sentía al matar. Y todo fue por él, su olor. Tenía un sentido del olfato muy desarrollado y podía diferenciar ciertas olores que otras personas no detectaban, en más de una ocasión pudo diagnosticar una enfermedad solo por el olor característico de la persona,  pero ¿era este el caso? ¿estaba enfermo el Sr. William Graham? o ¿era este su olor característico?

 

Lo vio entrar y sentarse en una de las sillas disponibles frente al escritorio de Jack, vestía una camisa gris, jeans y botas, tuvo la idea de que el cabello castaño oscuro lucía igual desde el momento en que se había despertado y la idea lo hizo sonreìr, cosa que controlo debido a que se encontraba frente a las fotografías de las mujeres desaparecidas. Jack le daba pormenores del caso y de la información que se había infiltrado a la prensa, apenas le prestó atención el asesino que buscaban no le llamaba en anda la atención, a diferencia del Sr. Graham. Se sentó a su lado, tomó la taza de café tenía un olor suave y se detuvo a mirarlo. -No es aficionado al contacto visual ¿no?

 

-Los ojos son un distractor. Ves demasiado, no ves suficiente.- William dejó la taza en la mesa y se giró, observando por primera vez desde que entró a la oficina al Dr. Hannibal.-Y es difícil concentrarse cuando piensas “su parte blanca es realmente blanca” o “debe tener hepatitis” o ¿es una vena reventada?- Los ojos del Dr. eran de un castaño claro con vetas cerca de la pupila a las cuales no pudo definirles color, se le formaban líneas de expresión que al sonreír le daban una apariencia apacible que inspiraba confianza -Así que trato de evitar los ojos, siempre que sea posible.- dijo volviendo la mirada rápidamente. Llamó la atención de Jack para regresar a revisar el caso, se sentía demasiado observado y quería regresar a su casa lo más pronto posible.

-Imagino que lo que ves y aprendes influye en todo lo demás de tu mente. Tus principios y decencia estan presentes aún, escandalizados por tus asociaciones absortos por tus sueños. No hay defensas para lo que amas en ese campo de batalla que es tu craneo.

-¿En que perfil estas trabajando?- miró a Jack ya enojado y se dirijo a él- ¿EN QUE PERFIL ESTÁ TRABAJANDO?

 

Y allí su olor se hacia mas intenso, estaba asustado o tal vez enojado, se le marcaba una vena en el cuello e inconscientemente aferraba con fuerza la carpeta que sostenía, estaba a la defensiva.

 

-Lo siento, Sr. Graham. Lo que hacemos es observar. No puedo suavizarlo más de lo que tú puedes hacerlo.

 

-Por favor no me psicoanalices.-continuó dirigiéndose a Jack- No te agradara lo que encuentres.

 

-Sr. Graham...

 

-Ahora, si me disculpan.

 

Hannibal vio como tomo el abrigo y salió sin siquiera molestarse en despedirse o mirarlos.

-Creo que debería ser menos directo Dr. Lecter.

 

-Lo que tiene es empatía pura. Puede asumir su punto de vista, o el mio. Ademas de otros que lo asusten. Es un don incomodo Jack.- se quedó mirando fijamente la fotografía de las jóvenes desaparecidas- Ese caníbal que estas buscando, creo que puedo ayudar al Sr. Graham para que vea su rostro.

 

***

Hannibal estaba cocinando, amaba cocinar lo consideraba una forma exquisita del arte y le llenaba de placer crear platos complicados de sabores contrastantes y sobretodo, le encantaba cazar su comida. Aunque decir cazar sería injusto, difícilmente alguna de sus presas podria escapar de él, mucho menos esperar el ataque lo cual lo hacía más intenso, los sensaciones, el poder que recorría su cuerpo, poder desatar su verdadero yo era lo que lo hacía sentirse en paz...sonrió ¿que pensaría el Sr. Graham de su obsequio? ¿le gustaría? ¿sabría que era de una diferente persona? ¿sabría que lo había hecho solo para él? despues de todo, quería prepararle un desayuno de disculpas por lo rudo que había sido y por supuesto, para su nuevo amigo necesitaba ingrediente frescos.

 

Will había pasado una noche terrible en la habitación de motel donde se estaba alojando, las pesadillas se habían multiplicado desde el último cuerpo encontrado y se despertaba aterrorizado bañado en sudor en medio de la noche, apenas podía controlar el terror que sentía y se le hacía difícil dormir nuevamente luego de los episodios; ahora lo que lo molestaba particularmente era la insistencia de la persona que llamaba a la puerta, pensó por un instante que podría tratarse de otro cuerpo así que se levantó apresuradamente sin siquiera colocarse las gafas.

 

-Buenos días Sr. Graham. ¿Puedo pasar?-eran cerca de las ocho de la mañana, Hannibal vestía menos formal que de costumbre con su saco, pantalones de vestir y una camisa blanca dejando un par de botones sin abrochar, el Sr. Graham, era otra historia, llevaba una franela blanca de cuello redondo, con boxers azul cielo el cabello lleno de ondas un tanto rebelde que enmarcan un par de ojos azul intenso que lo miraban con desconfianza.

 

-¿Donde esta Jack?

 

-Hoy la aventura solo será de nosotros dos. -lo vio dudar, mirando sobre su hombro tal vez esperando a alguien más o tal vez buscando una excusa para pedirle que se marchara - ¿Puedo pasar?- no recibió respuesta, pero siguió a Will dentro de la habitación mientras encendía la lámpara de la mesa de noche. -Soy muy cuidadoso con lo que introduzco en mi cuerpo, lo que significa que terminó preparándome la mayoría de mis comidas, un poco de proteínas para empezar la mañana...

 

William probó la comida, no comía nada desde la tarde anterior y olor le desperto inmediatamente el apetito. -Esta delicioso.

 

-Es un placer escuchar eso… quería disculparme por mi emboscada analitica, pero sé que me disculpare de nuevo y te cansaras de eso eventualmente así que debo considerar disculparme con moderación.

 

-Solo mantengámoslo en un plano profesional.

 

-O podriamos relacionarnos como adultos. Dios nos permita hacernos amigos.

 

-No lo encuentro interesante.

 

-Lo harás… el agente Crawford me dice que tiene un don con los monstruos.

 

-No creo que haya matado a esa chica en el campo.

 

Las preguntas que Hannibal en realidad quería hacerle era ¿te gusto? ¿pudiste verla como yo lo hice? pero se limitó a decir-  Faltaban los detalles, ¿que fue lo que no hizo tu imitador? ¿que lo delato?

 

-Todo. Es como si hubiera necesitará ver lo negativo para poder apreciar lo positivo del verdadero asesino, esa escena era prácticamente un regalo.

-¿Estás reconstruyendo sus fantasías? ¿Que tipo de problemas tiene?

 

-Unos cuantos.

 

Hannibal apretó con fuerza el cubierto, un tanto molesto por el comentario ¿que sería aquello que veía Will? se comenzó a preguntar porque se estaba tomando tantas molestias con este hombre, estaban en la intimidad de una habitacion de hotel, nadie lo habia visto llegar y nadie sabria quien visitó a William, seria solo de un movimiento rápido de manos y cortaría sin problemas la garganta de Graham, pero no cargaba su traje, ni guantes y a diferencia de los demás lo haría con enojo y no sería buena una equivocación, no por ahora. -¿Alguna vez tienes problemas, Will? ¿Puedo llamarte así? No quiero incomodarte.

 

Will se rió tocándose el pecho.-No- calló, pensando en sus pesadillas, las fiebres nocturnas y la vivencia de su imaginación y volvió a negar y tomó de la taza de café. -Claro que no.

 

-Claro que no, tu y yo somos iguales. No tenemos problemas… sabe Will, creo que las demás personas te ven como una persona que hay que tratar con delicadeza. Como una frágil taza de té.

 

Will rió con ganas y se detuvo mirando los impecables modales del Dr. Lecter mientras comía, las uñas debidamente arregladas, masticando suavemente la comida y al momento de saborear hacia un movimiento inconsciente con los labios como si pidiera un beso. Era, curioso. -¿Como me ves tú?

 

-Como la mangosta que quiero tener en casa cuando pasan las serpientes. [Leer nota al final del capítulo]

 

Will quedó en silencio tratando de entender el porqué el Dr. lo veía de esa forma justo iba a preguntarle cuando este lo interrumpió.

 

-Termina tu desayuno.

 

***

CASA DEL ALCAUDÓN DE MINNESOTA. GARRET JACOB HOBBS.

 

Hannibal estaba aburrido. Cuando vio el reconocimiento en la mirada de Will al ver la carpeta del trabajador de la mina, decidió que habría que darle algo de emoción a esta historia ademas de ver las reacciones tan llenas de emociones de Will le hacian ansiar verlas todas en su rostro oculto tras un par de gafas anticuadas, ver temblar los labios y desvariar la mirada por la confusión, quería ver más, ver todo sobre William.

 

Apenas estacionaron de la puerta de la casa salió un hombre que lanzó una mujer herida al suelo, pudo ver que tenía la garganta cortada y sangraba mientras William le sostenía inútilmente, obviamente moriría y Hannibal no tenía ánimos de ensuciar su ropa. William sin embargo ya tenía las manos, la camisa y los pantalones manchado de sangre, temblaba mientras sacaba su arma y se levantaba para entrar a la casa, dejando el cuerpo de la que supuso era la Sra. Hobbs en la entrada. Destrozó la puerta de una patada, Hannibal lo seguía en silencio preguntándose dónde había quedado el hombre que no podría mantener fija la mirada en otra persona, la casa era de un terrible mal gusto adornada de cornamentas de ciervos, y cojines de piel de ciervo y ni hablar de las alfombras… llegó a la cocina después del quinto disparo, el hombre se encontraba en una esquina de la cocina mientras Will, una vez más intentaba contener la sangre que emanaba del cuello de la joven, los nervios le hacía soltar su agarre haciendo que la sangre volviera a fluir con fuerza.


Hannibal vio el contraste entre ellos, como William estaba desesperado por mantener con vida a la mujer cuando en su caso probablemente estaría seleccionando que corte de carne cocinaria para cenar. Y entonces Jacobs Hobbs le habló a Will y corto toda la escena, Hannibal deseo entrar y terminarlo de matar de una vez para regresar al punto anterior, pero ya se había ido la magia del momento. William se veía realmente ¿hermoso? con las emociones a flor de piel y quiso ver más de eso; tomó una decision caminó hasta detenerse detrás de la joven, apartó las manos de William tomando con la mano derecha la parte superior del cuello de la chica y con la izquierda la parte baja cumpliendo la función de un collarín. En el instante que tomó el control William quedó suspendido en su mente, hacia movimientos mecánicos, forzados y repetitivos con la cabeza, sus lentes manchados de sangre difícilmente lo dejaban ver y el nerviosismo habia hecho que se empapara la camisa y el cabello de sudor, su olor, el olor que despertaba algo en Hannibal fluyó más intensamente y la mirada llena de locura encendió algo más que la curiosidad… sintió su cuerpo vivo, excitado.

Notas finales:

Al referirse de la historia de la Marmota y la serpiente, Hannibal quiere decir que confía a él que a pesar de ser un animal salvaje es totalmente leal. En esta Historia la marmota mascota de la familia salva al niño de la casa de una serpiente, la madre desconfiada al ver a la marmota llena de sangre lo ataca creyendo que es el niño el herido para luego darse cuenta de que la marmota salvao a la criatura.


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