Los días continuaron pasando, viviéndose en monotonía. Ese día el pelinegro de verdad necesitaba hablar con el pelimorado, ya era necesario que se enterara de la noticia. Algo dentro de él le decía que todo iba a mejorar, que Murasakibara iba a reaccionar bien y se iba a alegrar mucho por la noticia.
-Aka-chin voy a bañarme, puedes utilizar lo que quieras-hablo el titán morado mientras tomaba una toalla de su armario.
Akashi estaba sentado en medio de la cama de piernas cruzadas mientras miraba fijamente los movimientos del más alto.
-Atsushi, ya terminaste con ese muchacho-
Murasakibara apretó la toalla en sus manos-¿Con Muro-chin?-dijo sin voltear a verlo-No, no lo he hecho... Eh, voy a darme una ducha Aka-chin -dijo mientras entraba al baño de su habitación.
El pelirrojo se quedó dónde estaba, la verdad era que estaba aburrido y tener a alguien detrás de ti siempre es conveniente. El celular del pelimorado comenzó a vibrar justo a su lado y lo tomo. La verdad es que no era un idiota como para saber de quien se trataría Muro-chin se leía en la pantalla de un nuevo mensaje de la red social.
"Atsushi, ¿podemos vernos?"
"Tengo noticias importantes"
"Atsushi está conmigo ahora, deberías dejar de suplicar por migajas de su atención. El me pertenece"
"¿Akashi? Eso es algo que a ti no te importa,
No te metas"
"Pobre escoria, conoce tu lugar. No eres nada para Atsushi. Solo un mal sustituto para cuando yo no estoy"
"¡Vete a la mierda! Tú no sabes nada!"
"Yo soy absoluto, nunca me equivoco. Vas a terminar mal"
"Déjalo... déjalo. Tú no lo quieres.
Himuro estaba de nuevo recargado en la pared de su cuarto de baño, hacía unos segundos acababa de vomitar de nuevo. La verdad es que su estado lo tenía ya todo el tiempo muy cansado y no había ido a consultar a su médico desde la vez que se enteró por casualidad.
Pensó en ese momento que lo mejor era hablarlo con el pelimorado, debía saberlo porque después de todo, fue cosa de ambos. Un descuido que el paso por alto. Decidió llamarlo antes de aparecer por su apartamento y toparse con una sorpresa como la de antes.
*Flash Back*
El moreno caminaba con calma hacia el apartamento de su pareja, había estado buena parte del día con Kuroko ayudándole a comprar cosas para él bebe ahora que ya sabía el sexo exacto, iba a ser una muy linda bebita.
Luego de eso decidió pasar al departamento del pelimorado ya que quedaba cerca, y la verdad es que hacía ya algún tiempo que no se veían como debía ser. Tal vez fuera por los estudios, pero ni siquiera en la universidad solían toparse ya. ¿Cómo es que habían llegado a tal punto? ¿Luego de vivir juntos y pasar la mayoría del tiempo de la misma manera?
Al llegar al lugar noto que la puerta estaba entreabierta, no dudo mucho en abrirla para poder pasar y la escena con la que se topó no le gusto para nada. Akashi estaba sentado en las piernas del más alto con los brazos enredados a su cuello.
-Aka-chin, ¿qué quieres que...-el alto dejo las palabras al aire al notar la presencia del pelinegro-Muro-chin-dijo apartando poco a poco a Akashi hasta dejarlo en el sillón y levantarse-Te dije que no estaría libre hoy-
-Es muy maleducado de parte de una persona entrar a un lugar sin antes tocar la puerta-hablo esta vez Akashi mientras cruzaba las piernas.
-No cuando es el hogar de tu pareja-le respondió Himuro con el tono de voz un poco elevado-Atsushi pensaba que...
-Lo siento Muro-chin pero Aka-chin me pidió primero que le ayudara en algo-dijo guiándolo hasta la puerta, ¿era enserio?.
-Está bien, te veo mañana en la universidad-hablo Himuro para ponerse de puntas y alcanzar los labios del mayor, sonrió cuando el de ojos violetas le correspondió.
Quizá solo era su cabeza que le hacía formularse extrañas situaciones, después de todo Murasakibara no era este tipo de persona ¿verdad?
*End Flash Back*
Y luego de que el maldito enano pelirrojo le contestara y le dijera que estaba con el no pudo más que abrazarse un poco a sí mismo.
-Descuida bebe-dijo mientras acariciaba su vientre-Yo sé que papá va a quererte mucho, mucho-se dijo en un susurro.
Bueno si tenía que ser así, iba a serlo. Se levantó con determinación mientras se limpiaba de nuevo la boca y luego de eso se dedicó a darse una corta ducha. Iba a decírselo de alguna manera, ya tenía que saberlo. Mientras terminaba de ponerse su calzado su celular comenzó a sonar indicando la llegada de un nuevo mensaje.
"Muro-chin, se acabó. Te dije que Aka-chin es más importante, no te atrevas a decirle de nuevo
Que me deje"
¿Qué era enserio? ¿Qué tenía Akashi que hizo que todo de pronto se tornara oscuro a su alrededor?
"Atsushi...no, tengo que decirte algo importante tenemos que hablar"-Por favor, por favor di que es solo una broma.
"No me importa... no debiste hacer enojar a Aka-chin... Ya no puedo seguir contigo"
"Atsushi! Espera! Estoy esperando un hijo tuyo! Soy doncel!... no lo sabía pero me sentí mal
Hace unos días, Atsushi seremos padres"
"...."
"¿Atsushi?"
"No puedo Muro-chin, lo siento..."
"¡Espera! Te amo Atsushi"
"Adiós Muro-chin"
En el momento exacto en que terminó de leer esas palabras su corazón hizo un "crack" dolía demasiado y ¿es que acaso era eso posible?
Dejo caer su celular caer al piso sin importarle nada más, mientras el también se desplomaba de rodillas a un lado de su cama. No era cierto, ¿Todo lo que pasaron terminaba por él?
-Hey Atsushi! ¿No te parece que esa chica es linda?-decía un compañero al más alto.
-No, yo creo que Muro-chin lo es más-dijo volteando a ver al pelinegro quien solo le sonrío.
¿No valió la pena darle una oportunidad?
-Muro-chin, yo... etto...
-¿Qué sucede Atsushi, terminaste tus dulces?-
-No es eso, yo me preguntaba si ¿Muro-chin quería salir conmigo?
-¿Salir contigo?-
-Si, como pareja y eso-
¿Acaso no fue suficiente irse enamorando?
-Ahora ya podemos hacer esas cosas Muro-chin lo sabes-
-¿Esas cosas?-
-Si, como besarse, abrazarse, comer pockys juntos, tener sexo....
-Y-ya, ya entendí-dijo más rojo que un tomate Tatsuya.
¿Y ese para siempre?
-Nee Muro-chin, ¿tú vas a amarme siempre?-
-¿Siempre? Tal vez por lo que resta de mi vida si-le respondió sonriendo.
-Yo amaré a Muro-chin incluso después de morir-
-No digas esas cosas-
-¿Eh, por qué no?-
Vivir juntos...
-¿Qué te parece si vivimos juntos Muro-chin?-
-¿Estás hablando enserio Atsushi?-
-Si Muro-chin. Ahora sostente bien-dijo el pelimorado mientras lo tomaba en forma de caballito* (*La verdad, la verdad no sé si se diga así en todos los países de habla hispana, pero es cuando te subes a la espalda de alguien y esta persona te sostiene de las piernas...algo así)
-Sí, vivamos juntos-
Y luego llego el...
-¿Querías mucho a Akashi cuando fueron pareja?-
-Sí, lo amaba mucho, mucho pero él fue a estudiar a otro lado-
-Te digo que pasas mucho tiempo afuera Atsushi, ya ni siquiera comes aquí!-
-Estas molestándome mucho Muro-chin y no quiero aplastarte-
-¿Qué tienes que hacer todo el tiempo con él?-
-Aka-chin es muy importante para mí y le debo mucho-
-¡Ni siquiera pasas el tiempo aquí!-
-Entonces me iré a vivir de nuevo a mi antiguo departamento, no importa puedes quedarte con este-
Y allí estaba en la actualidad de rodillas en el piso mientras las lágrimas caían de sus ojos.
-Atsushi no puedes dejarme... n-no ahora, no puedes dejarnos-dijo mientras acariciaba su vientre de exactos 4 meses. ¿Cómo es que en dos meses no había podido decírselo.
Entonces, un agudo dolor se hizo presente, haciéndolo doblarse del dolor. Se asustó más cuando pudo notar que había sangre en el piso y su espalda estaba matándolo.
-No... No e-esto ahora no!-
Kagami estaba besando la panza del peliceleste mientras este reía un poco por las cosquillas.
-¿Quién va a ser la bebe más amada de este mundo?-hablaba como si pudiera oírlo.
-Kagami-kun serás un buen padre-
-Y tu una buena madre-dijo riéndose un poco el pelirrojo.
-Kagami-kun-dijo frunciendo el ceño-Sigo siendo un hombre-
Su celular comenzó a vibrar mientras sonaba pero el decidió dejarlo pasar, hasta que ya era como la cuarta vez que sonaba, insistiendo. Contesto.
-Kagami al habla-dijo un poco molesto por ser interrumpido.
-Ta-Taiga-se oyó la voz del pelinegro un poco apagada.
-Tatsuya ¿sucedió algo? tu voz no se oye bien-dijo parándose preocupado.
-Taiga... ne-necesito que arg! que vengas es m-mi bebe. Algo le está pasando a mi bebe, p-por favor-
-¿Qué? Claro voy para allá, pero Murasakibara vive más cerca deberías llamarle-
-N-no por favor solo... solo ven..-dijo antes de que se oyera un ruido.
-¿Tatsuya? ¿Tatsuya? ¡Tatsuya respóndeme maldita sea!-hablo poniéndose sus tenis lo mas rápido posible-Kuroko... Tatsuya está mal debo ir-
-Ve con cuidado Kagami-kun y espero no esté mal-dijo Kuroko con verdaderos ánimos-…l es fuerte, pero rápido Kagami-kun ve ya!-grito el peliceleste al ver a su novio en shock.
-Tatsuya por favor aguanta-
-...Si ese día yo le dije que sí, él me llevo muchos dulces y me dijo que eran sus tesoros y que eran todos para mí. ¿Sabes? …ramos muy felices, cuando lo conocí lo admire primero que nada. Es gracioso porque yo en ese entonces creía que me gustaban solo las chicas y llego el a cambiar todo mi mundo y lo que creía-
-¿Y cómo es?-
-¿El? …l es muy alto, es infantil, su cabello es morado, así como el tuyo. Tiene una sonrisa muy hermosa pero da miedo cuando alguien se mete con sus dulces, amaba que me sentara en sus piernas y los fines de semana por que podía pasarlos conmigo-
-Me hubiera gustado poder vivir con ambos, mami-
-A nosotros nos hubiera gustado más mi bebe-dijo acariciando el cabello morado del pequeño-Te hubiéramos cuidado mucho, te hubiéramos comprado muchos dulces como a papi, te hubiera cambiado tu pañal tantas veces como fuera necesario, te vería dar tus primeros pasos y decir tu primera palabra, correr y crecer, te hubiera apoyado de la forma en que fueras, te hubiera dado un abrazo con mucho amor cuando fueras a irte a la universidad y cuando fueras a casarte lloraría mucho porque siempre serías mi bebe... al que más amo con la misma intensidad que amo a tu papá-
-Al menos ya sé que tú me querías, ¿pero él me quiere?-
-Yo sé que te quiere y que en cuanto te viera te amaría aún más, él es una buena persona-
-Lo siento mami, lo siento por no poder estar allí. Pero recuerda que aun sin haber nacido ya te amaba mucha mami, los amaba a los dos. Ya tengo que irme, te amo-dijo dando un beso en la frente de Himuro.
-No! ¡No te vayas mi bebe! Te voy a amar mucho-
-Adiós mami-dijo antes de casi desaparecer-Se fuerte-
El sonido de la ambulancia, el dolor, las luces de colores en la oscuridad y a lo lejos una voz llamándolo por su nombre.
-Ta-Taiga-llamo apenas en un susurro-No dejes que muera... por favor-y cerro sus ojos de nuevo....
El pelimorado había estado todo el día pensando, no había visitado al pelirrojo y en todo el día no había salido de su casa, hacía solo unas horas un agudo dolor en su pecho lo había hecho alterarse. Ahora estaba platicando con el emperador.
"Y dijo que está esperando un bebe mío y que me ama"
"Vaya, se ha rebajado a tanto. Le gustaba tomar las sobras de lo que me das a mi"
"No... Aka-chin, estoy confundido. Voy a ser un papá"
"Eres igual que él. Ya no sirve de nada que quieras ser padre. Ese tipo ha quedado destrozado"
"¿De qué hablas?"
"Esa zorra va a matarse, no pudo contra mi absoluta presencia en tu vida"
"¡No! Muro-chin no haría eso!"
"No me digas. También lo amas ¿cierto? Lo sabía, son tal para cual"
"No, Aka-chin es..."
"Ya no puedes decirlo ¿cierto? No puedes repetir que soy el único para ti. Son tan tontos. El por suplicarte, y tú por no notar que para mí no eres nada más que un juguete"
"...tienes razón Aka-chin, he sido un tonto. Amo a Muro-chin y a mi hijo"
"De todos modos comenzabas a aburrirme, te libero. Pero te repito que ya es tarde"
"Adiós Aka-chin"
Dos días, dos días llevaba buscando a Himuro, a su Muro-chin y a su hijo y no lo encontraba, había buscado en su apartamento, en casa de Kagami quien ni siquiera le había abierto la puerta, en la universidad nadie sabía nada.
"Muro-chin ¿dónde estás?"
"Tengo que decirte algo, Muro-chin... quiero verte"
"Mi dulce, dulce Muro-chin"
"Sé que estás enojado, por favor"
"¿Me perdonas? Te comprare muchos dulces para nuestro bebe"
"¿Dónde estás? Te busque en casa... no están tus cosas"
"No me dejes solo"
"Sé que te falle Muro-chin... perdóname"
"Te amo. ¿Sabes? Creo que no quería aceptarlo"-luego de que Akashi apareció de nuevo en su vida.
"Muro-chin"
Ese día llego, ese maldito y el peor de todos los días en su vida. Kuroko se había dado en la necesidad de avisarle aun y cuando conocía toda la historia. Todos los ex-integrantes de Yosen parecían también estar al tanto, pero él no quería creerlo, no podía creerlo. Solo una persona podía confirmárselo realmente y esperaba que le contestara.
"Dime que es mentir”
"¡Vete a la mierda! ¡Todo es tu maldita culpa!"
"No... Muro-chin no haría eso”
"¡No te atrevas a decir lo que el haría o no! ¡Tú no lo conocías!"
"Mientes... él se está escondiendo porque está enojado”
"Puedes ir tú mismo al funeral. Aunque si te veo ahí juro que yo mismo te parto la cara"
"Deja de mentir, te aplastaré"
"…l se mató por tu desprecio constante. ¿Sabes qué Murasakibara? …l estaba feliz con la noticia de ser padre… habría sido el mejor padre del mundo"
"¡No, basta!"