Artista Enamorado
Y ahí se encontraba él. Tirado a un costado de la cama de un hotel con su cuerpo lleno de sudor por la increíble noche de pasión y sexo que un riquillo le había dado. Joder no se acordaba de nada, ni de su maldito nombre. Lo único que tenía en su mente en esos momentos los recuerdos de una pasada de copa y que era traído a su departamento de soltero por un hombre mucho más alto que él y además él más atractivo con el que tuvo sexo. Se levanto con un dolor de trasero tan grande que llego a pensar que se había desgarrado algo dentro, el maldito hijo de puta lo había penetrado tan fuerte que cuando terminaron callo profundamente dormido.
Como pudo se sentó en la orilla de la cama dispuesto a levantarse para tomar unos analgésicos y pegarse una buena ducha ya que su propio semen y el sudor de una noche llena de sexo todavía quedaba impregnado en su cuerpo. Lentamente camino hasta la cocina en busca de una aspirina, sin muchas ganas la tomo junto a su vaso de agua mientras que se dirigía al baño. Era el mejor lugar y el más especifico en donde podría pensar y recobrar lo vivido hace unas horas atrás con ese azabache.
Al entrar bajo el poder de la tina con agua caliente y espuma se relajo por completo pidiendo olvidarse de esas malditas obras que tenía que presentar para su aburrido pero atractivo profesor de arte… Yahiko-sempai que en muchas ocasiones congeniaron perfectos a la hora del sexo y aun que aquel hombre ya estuviera enamorado de alguien mas no le quitaba lo excitante que era sentir su pene dentro de él.
—Maldita sea… —y ahí estaba de nuevo… con una hermosa erección creándose con fuerza dentro de la tina. —
Deidara no se consideraba gay completamente y menos en esos momentos en los cuales tranquilamente tenia sexo con cada chica que se lo proponía. Era más Bisexual pero no iba a negar que un hombre lo apretaba mucho más fuerte que una mujer, y eso lo comprobó un día en el que fue el activo en la relación. Su cuerpo tembló levemente al recordar sus conquistas y sonrió con orgullo al darse cuenta que la de anoche fue la mejor de todas, si tuviera una lista con los nombres de las personas que tuvo sexo y le encantó, el famoso y multimillonario Uchiha Itachi estaría en primer lugar, claro después le seguiría el Uchiha menor y por ultimo Yahiko.
Mientras se terminaba por enjabonar se dio cuenta que los recuerdos de las noches anteriores estaban comenzando a volver a él.
—Dame otra —fueron las simples palabras del rubio mayor hacia el barman. Su mirada ya estaba un poco perdida y el tequila comenzaba hacerle efecto. Dakin le sirvió otra de las bebidas que tanto le gustaban al rubio y se le quedo mirando como idiota. Hacía semanas que tenía ganas de repetir esa ronda de sexo que Deidara y él tuvieron en el baño de aquel bar. — ¿en qué piensas?
—…en nada —le respondió sutilmente al chico—
—como sea… el próximo viernes por la noche estoy libre ¿quieres ir a mi casa para jugar? —tan fácil como siempre se lo dijo, sin rodeos ni palabras inútiles de conquista. —
— ¿y por qué no hoy? Tengo ganas de que te metas aquí abajo —le señalo el cubículo que tenía en donde guardaba algunas de sus cosas personales y un poco de dinero— y te pongas en cuatro para mi
—hoy no puedo… tengo a otro pretendiente esperándome, quedamos en que nos veríamos a las una aquí
—son las once, no creo que le importe que Dei-chan se abra de piernas antes que a él
Deidara bufo molesto, no era la primera vez que le decían eso, casi nunca le importaba solo era sexo y ya pero el maldito del azabache le especifico que lo quería limpio por una semana asi que tuvo que cumplirle sus caprichitos como buen sumiso. Dejo su copa ya vacía sobre la mesa y se levanto de la silla con la intención de ir hasta Dakin.
—no creo que Itachi se enoje… pero no quiero hacerlo ahí adentro. ¿Por qué no vamos al despacho de tu jefe para que se nos una?
Dakin sonrió de medio lado, esa noche sería mucho más divertida de lo que pensó. Tan solo espero unos cinco minutos hasta que el suplente que mando a llamar llagará. En cuanto estuvo libre se aseguro de que nadie los siguiera, él sabía que su joven jefe aceptaría, después de todo ese mismo tipo pidió seriamente una sola noche con el rubio. En cuanto se pararon delante de la puerta entraron como si nada. Dakin fue el primero y luego le siguió Deidara con una sonrisa en sus labios. Joder que hacía tiempo que no veía a su viejo compañero de secundaria.
Sasori Akasuna…
—hola… —fue Deidara el primero en hablar, con una sonrisa de medio lado comenzó a desvestirse mientras que el Dakin cerraba la puerta con llave. Las miradas de los dos chicos fueron de lujuria al ver el cuerpo del rubio sin su camiseta—
—al fin te dignas a venir… deja que yo te desvista, es mucho más sensual. —le hizo una Seña a su empleado y con una simple mirada de ojos Dakin ya supo que hacer. —
El cuerpo de Deidara se vio estampado contra el escritorio, Dakin lo había puesto en una pose tan comprometedora que hasta el mismo Sasori e había excitado. Prácticamente se encontraba en cuatro, su rostro sonrojado lo hacía lucir mucho más tentador. El pelirrojo comenzó a quitarse sus pantalones al igual que Dakin, realmente esa sería la noche más interesante de Deidara, estaba obteniendo dos pájaros de un tiro y mas el tercer pájaro que llegaría las una. Su cuerpo se tensó cuando la mano de un individuo golpeaba su trasero con fuerza.
Sasori fue el primero en avanzar, estaba empezando a restregar su pene contra la entrada del rubio mientras que Dakin se preparaba para sentir la boca del chico sobre su miembro.
Los minutos pasaban cada vez más rápido, los gemidos y jadeos del lugar se quedaban guardados dentro. Hacia como veinte minutos que las penetraciones de Sasori lo hacían enloquecer cada vez más al igual que las de Dakin. Una hora después ya se estaba cumpliendo la tercera ronda. El cuerpo de Deidara estaba que explotaba, los dos chicos se habían venido dentro de él aunque sabía que eso lo excitaba cada vez que lo recordaba. No muchas veces se podía hacer un trió con dos personas tan calientes. Después del término de la tercera ronda, se levanto algo casado por todo lo vivido en esa noche, solamente quería ir a casa y descansar unas buenas horas pero por culpa de Itachi eso no podía ser. Casi se cae al piso por querer levantarse pero gracias al cuerpo de Sasori que de nuevo lo volvía a colocar en cuatro contra la mesa eso no sucedió.
—no… esta noche serás nuestra puta Dei asi que llámale a ese tío diciéndole que no podrás estar con él porque yo no te dejare salir de este lugar hasta haberte partido el culo en dos. —su sonrisa se agrando mucho mas. Deidara estaba que se moría pero era verdad. Cuando Sasori decía algo como eso sabía exactamente que por dos o tres semanas estaría jadeando por el dolor—
—hmng Sasori, por lo menos dame mi celular… oh a-ahí —dejo caer su celular al momento de Dakin se lo paso, sin darle mucha importancia empezó a moverse sensualmente siendo penetrado con fuerza por el mismo Sasori que ya estaba cambiando de posición de nuevo.—
—aprietas tan fuerte… ah sí —gracias al cambio de posiciones ahora podía ver a su amigo a los ojos mientras lo penetraba. Su pene se movía de acá para allá tratando de entrar lo que más podía dentro de él mientras que sentía como las manos de Dakin tocaba su pecho y luego quedaba en el pene del menor masturbándolo. —
Dakin comenzó a masturbarse rápidamente, si seguía asi sería la segunda vez que se vendría. Las ganas de penetrar al cuerpo níveo del menor lo volvían loco, dejo tranquilo su miembro para empezar a colocarle vaselina. Con una simple mirada a su jefe le dio a entender lo que quería en esos momentos. Sasori bufo molesto pero no desaprovecharía aquella ocasión, es mas la haría más excitante. Salió por completo de esa entrada y miro el rostro de Deidara por unos cortos segundos. Le dejo el paso a su empleado para comenzar a hacer un trió de verdad…
XxElArteDelAmorxX
Su cuerpo se sentía pesado, la noche anterior lo había dejado exhausto. El jodido de Sasori lo había prácticamente violado, aunque con su consentimiento. Sin duda fue el mejor trió que una vez pudo hacer aunque estaba claro que hora ni loco iba de nuevo a ese bar para beber un poco. Tendría que buscarse alguno nuevo y pronto porque Itachi jamás le perdonaría haberlo hecho esperar, aseguraba que el azabache le espero más de media hora porque cando termino su sesión de sexo ya eran las una y media de la madrugada y ni rastros de Itachi. Lentamente se levanto para tomar su maldita aspirina.
Ya había sido bañado y había comido lo suficiente como para que su pansa dejara de rugir por hambre. Iba a levantarse solamente a buscar un analgésico pero el dolor de trasero era impresionante. Tres malditas rondas ya lo habían dejado exhausto, peor fue ser penetrado por dos penes al mismo tiempo, se sentía agradable y lujurioso pero al otro día él se tenía que adherir a las consecuencias. Largo un suspiro por el dolor, con toda la magia del mundo se levanto con una fuerza sobre humana y agarro la pastilla para el dolor mientras que escuchaba como su celular empezaba a sonar. No le dio mucha importancia pero bebió la pastilla primero antes que contestar aquella llamada.
— ¿bueno? —contesto sin saber quién era la persona que lo estaba llamando—
—… ¿anoche te divertiste?
— ¿perdón? ¿Quién habla?
—El que dejaste plantado durante una hora —la respuesta tomo desprevenido a Deidara. ¡Era Itachi! Un Uchiha lo estaba llamando sin pedir nada a cambio, aunque fuera solamente darle una insultada eso ya era nuevo para él. —
—oye, oye lo siento pero tuve un pequeño accidente en la carretera y no pude llegar
— ¿estás seguro? Porque los gemidos que largabas no parecían estar en un accidente
— ¿d-de que hablas?
—sabes que, vete a la mierda, Sasuke me dijo que intentar salir contigo era un caso perdido y ahora me doy cuenta la clase de persona que eres putita… ni siquiera te importo que te llamaran asi ¿o me equivoco?
—yo... Déjame explicarte
— ¡no! Era una puta noche, tan solo te pedí una semana sin que te acostaras con alguien y tu ya andas de necesitado y lo peor es que hiciste un maldito trió.
— ¡joder Itachi no cuelgues, lo lamento!
—Adiós —Deidara iba a contestarle pero el sonido de la llamada terminada lo interrumpió. Estaba jodido, muy jodido. Maldijo a los cuatro vientos por no poder aguantar una maldita hora más, en esos momentos tendría al azabache solo para él si sus malditos impulsos no le ganaran. —
Sinceramente nunca espero sentirse tan culpable como ese día. Muchas veces dejo plantado a chicos solamente para tener sexo con algún otro y casi siempre les devolvía la hora perdida con una buena sesión de sexo y una mamada, ellos no lo rechazaban pero el Uchiha mayor si lo hizo, es como si le molestara que tuviera sexo con alguien más. Aunque tenía razón, si él estuviera en esa posición se hubiera ido insultando al que le hizo eso. Tenía muchas cosas en que pensar, necesitaba presumir haber estado una noche con Uchiha Itachi, solo necesitaba una noche y todo volvería de nuevo a ser lo mismo, es verdad que todo eso de salir en noches a tener un revolcón lo estaba cansando, agradecía que ese día no tenía que ir al trabajo o si no estaría quejándose. Lamentablemente era su vida y había muchas pruebas de eso.
Unos meses atrás él y tres personas más decidieron grabar un porno gay para una página famosa y por donde quiera que pusiera el titulo de aquel video su cara llena de semen siempre aparecía en la pantalla. Esa fue la última vez que se dejo persuadir para hacer un porno.
Los días pasaban como si fueran horas, exactamente tenía dos días y una noche sin salir a tener un buen polvo por ahí, las palabras de Itachi lo dejaron hecho agua, estaba desplomado con su celular en mano sin saber qué hacer. Hace días atrás estuvo pensando en si llamarlo o no, todavía no se decidía, era demasiado estresante para él ser la persona que llame a otra, siempre lo buscaban el no buscaba. Su orgullo era casi igual que los Uchiha, todavía s preguntaba él como Itachi le reclamo algo cuando sabía perfectamente que no eran pareja.
Otro suspiro salió de su boca, estaba demasiado aburrido. Miró la hora de su celular nuevamente y por fin decidió hacer algo con su miserable vida. Llamaría al azabache solamente para arreglar una simple cita y nada más. Marcó por fin el contacto que tenía como “Itachi” y selecciono el icono de llamada, estuvo alrededor de unos cinco segundos esperando a que le respondieran cuando una voz bastante familiar se escucho del otro lado de la pantalla.
— ¿hola?
—… hola ¿Itachi?
—jajá no, no soy Naruto ¿Quién eres?
—Naruto… —y ahí estaba la prueba de quien era, las voces del celular casi siempre desfiguraban la real. Hacía mucho que no hablaba con el tonto de Naruto que hasta ya lo extrañaba— hola primo idiota
— ¿ah?... ¡Dei! Hola ¿quieres que te pase con Itachi? Está en el baño… el teme idiota no sale más de la cocina con mi ramen… —de pronto el sonido de un golpe bastante duro retumbo por los oídos de Deidara. Ya se imaginaba lo que había pasado y todo eso tenía que ver con el idiota del novio de su primo— ¡teme! Me sale sangre ¡pendejo idiota! Ay mi hermosa cabeza ¡Dei me muero desangrado!... ¡TEME DEJA DE REIRE Y VEN AQUÍ!
—… ¿Naru? Oye dile a… —el rubio mayor no pudo terminar de hablar porque los gritos de Sasuke y de su inútil primo le daban dolor de cabeza. Sin duda eran tal para cual, eso le daba algo de celos, ¿Por qué Naruto tenía que estar en un romance con el menor de los Uchihas y él solitario sin amor?... eso era un crimen para la humanidad—
Cortó la llamada antes de quedarse sordo y esta vez decidió hacer las cosas a su manera, se levanto del sillón y agarro la chaqueta que tenía a su costado en el sofá. Con su mirada decidida salió de su casa rumbo a la de Itachi en donde supuestamente estaba su primo y Sasuke. Con el ceño levemente fruncido se metió a su auto y salió casi volando por la velocidad a la que iba. Iba arreglar las cuentas con Itachi si o si.
Tan solo en seis minutos ya estaba estacionado al frente de la casa. Por la ventana pudo ver como Sasuke ¿corría?.. Si estaba corriendo y con Naruto arriba de él tratando de pegarle con alguna cosa que no logro visualizar por la distancia. Se maldijo al mismo tiempo que apagaba su auto, esos dos le daban migraña por sus locuras tan idiotas. Salió del carro y con paso lento camino hasta la puerta de la casa, no se digno a tocar por unos segundos, pero cuando escucho de nuevo los locos gritos de esos niños la toco tres veces haber si con eso se callaban e iban abrirle.
…
…
…
Estuvo alrededor de tres minutos esperando que alguien se dignara abrirle, golpeo nuevamente la puerta con el ceño fruncido, eso ya era el colmo. Había tres malditas personas en esa porquería de casa y nadie se atrevía a abrirle. Ya comenzaría a afilar su cuchillo para degollar a su primo. No supo en qué momento pero cuando la puerta se abrió volvió a cerrarse con fuerza. Se había quedado helado… NO ya lo habían cansado, estuvo parado sin hacer una mierda como completo idiota esperando que alguien le abriera la puerta y cuando se dignaron hacerlo se la cerraron en la cara.
Con una furia contenida en sus adentros apretó la manija y empujo la puerta como si fuera el dueño de la casa. Iba a gritarle a Sasuke o su tonto primo pero el pecho se le cerró con fuerza al ver a figura de Itachi parado frente a él con cara de pocos amigos. En esos momentos, quería salir a toda costa de esa casa.
— ¿Qué quieres? ¿Es que ahora vienes por un cuarteto?
—…
—oh… ya se, vienes para ver si me acuesto contigo ¿tus amiguitos te dejaron caliente?
— ¡no! Solo viene hablar, no sabía que tu hermano y mi primo estaban pero ya me iba no te preocupes
—tranquilo, entiendo que quieras no contar lo hermoso que te pasaste con esos tipos y que Naruto le vaya con el cuento a tu madre
—idiota ¡no te metas con mi madre!
—…como sea, ya conoces la salida, puedes salir cuando quieras
Deidara largo un suspiro, su mirada había permanecido todo el tiempo al cuerpo del Uchiha mayor. Mientras este estaba pos subir a su habitación el rubio lo tomo de la mano antes de que llegara a pisar el segundo escalón para llegar a la segunda planta.
—No sabía lo que hacía, lamento todo lo que te hice, de verdad… lo siento Ita
—suéltame
—solo escúchame ¿sí?
Sasuke y Naruto que estaban viendo todo desde la cocina sonrieron pervertida mente al ver como Itachi y Deidara se quedaban parados esperando que hablaran. Ninguno de los dos decía nada pero era normal, Sasuke sabía lo que le habían hecho a su hermano pero de todas formas no se metió mucho en el asunto porque al mayor le correspondía arreglar sus asuntos. Naruto camino hasta estar frente la heladera y saco del refrigerador el helado que el hermano de Sasuke había comprado hace algunas horas a tras, ese era el mejor momento para comer un delicioso helado con el teme, viendo como arreglaban sus asuntos los mayores.
— ¿quieres? —le extendió una cucharita mientras que dejaba el pote de helado sobre la pequeña mesita en la que estaban sentados, desde ahí tenían una hermosa vista de todo lo que pasaría en aquel sofá y lo que se escucharía muy pronto—
—si…—fue la simple respuesta que el dio cuando comenzó a comer lentamente el helado con una sonrisa sobre su rostro—
—me acuerdo que nosotros pasamos por lo mismo que ellos
—¿y ahora que doberias estas diciendo?
—tu vivías de cama en cama idiota
—ah… de eso
—teme
—dobe
—bastardo
—uzuratonkachi
—te odio
—te amo
Mientras que la pareja de jóvenes seguía con su hermosa conversación Deidara comenzaba hartarse, le suplico, le rogo, se arrodillo… pero nada, ni un maldito “perdonado” le dijo Itachi. Ahora lo odiaba, juraba por su padre ya fallecido que odiaría al maldito de Itachi por toda su hermosa vida.
Los minutos pasaron y ya le estaba costando demasiado, eran casi diez minutos comenzaron a hablar y ahora el muy pendejo del Uchiha lo ignoraba, quien lo entendía. Su rostro estaba cansado de tanto hablar pidiéndole disculpas por dejarle parado en un bar que no conocía y también por haberse acostado con Sasori y Dakin.
—Itachi… por favor. Sabes que no soy de humillarme, te juro que si me das una última oportunidad te lo recompensare bien. Lo prometo
—tks… solo con una condición
—¡ah! Si, si ,si ¿Cuál?
—…píntame desnudo
—oh…
FIN