Todo transcurría con normalidad en el hogar de los gemelos Gleeful los cuales se divertían prediciendo un futuro desastroso para las personas del pueblo.
-Mabel que crees que ahora suceda con este pueblo, ese Gideon divulga demasiado en nuestros asuntos- Dipper jugaba con su flequillo poniéndolo hacia atrás mientras miraba su marca de la constelación de la Osa mayor en un espejo.
-No lo sé Dipper sabes que necesitas tiempo para ver su futuro nada es tan sencillo con él, conoce los secretos de ese tonto diario
-Debemos quitárselo nosotros solo tenemos el diario 2 y eso es molesto
-Tsk, sabes que odio esperar por algo que debería ser mío- se quejó Mabel enredando sus dedos en su lacio cabello marrón.
-No te preocupes pronto el su diario será nuestro además tenemos a Will Cipher de nuestro lado
-Pero lo único que hace es llorar y asustarse de las cosas que hacemos
-A mí me gusta que sea así
-¿Te gusta? En serio dime eres mi amado hermano Dipper Gleeful- pregunto la menor dudosa del comportamiento de su hermano ella lo conocía y sabía que nada le gustaba y menos Will ya que lo desesperaba por su constante llanto.
-Sí, comenzó a gustarme que llore cuando predigo su futuro o cuando jugamos a que carta tengo aquí- sonrió ladinamente con sus ojos entrecerrados de una manera fría pero divertida.
-A mí nunca me gustaría Will- dijo en modo de desagrado arrugando la nariz y revolviendo ligeramente su cabello -¿acasos te volviste blando con él?
-Yo ¿blando? Que tonterías dices tonta hermanita- respondió sonriendo mientras dejaba el espejo y se acercaba su hermana para darle un beso en los labios que intento intensificar.
-Mmm...chicos ¿qué hacen?- pregunto inocentemente un tímido peliazul interrumpiendo la escena nada correcta de los gemelos.
-Nada importante Will solo jugamos un sano juego de hermanos ~Quien aguanta más la respiración~ es muy divertido- le dijo al demonio dejando a Mabel y acorralando a Will contra el muro de su sala -deberías jugar necesitamos más participantes.
Will estaba sonrojado y comenzaba a sollozar por el acercamiento de su contratista Dipper, tenerlo tan cerca le ponía los pelos de punta ¿acaso debía participar en el juego? Se dijo a si mismo dudoso, cosa que no pasó desapercibida por Mabel que sonrió mientras leía el periódico.
-Pino...- mencionó en un susurro con su voz temblorosa y sus mejillas rojas.
-Sabes que odio que me llames así- respondió el mayor con una voz suave pero severa y autoritaria tomándolo del mentón para que lo viera directo a esos brillantes ojos celestes que contrastaban perfectamente con su bien arreglado cabello marrón.
Dipper lamio el cuello de Will haciéndolo estremecer, para seguido de eso acercar sus labios a los del contrario, sintiendo sus respiraciones chocar, y dando lugar a un beso que era correspondido por el demonio que temblaba bajo el. Will soltó un débil suspiro entreabriendo su boca dándole todo el permiso a Dipper de entrar y juguetear con su lengua.
El demonio jadeaba entre ese beso tan rudo. Ya estaba acostumbrado a que Dipper fuera así con él. Siempre dándole besos disfrazados como simples juegos.
Sus lenguas se tocaban y se revolvían en la boca de Will que se estremeció al sentir como Dipper tocaba su paladar y recorría su lengua con maestría y descaro. El mayor al considerar que ya había sido suficiente juego dejo la boca del Peliazul aun estando únicos por un fino hilo de saliva traslúcida pero no sin antes lamer por última vez los labios rosados del demonio.
-Bien Will el juego terminó, fue muy divertido pero ahora te necesito para hacer algo con ese tal Gideón sabes que hacer, ahora juguemos a ~atorméntalo hasta que venga suplicando ante ti~- mostrando una sonrisa burlona
-Y no olvides a su tonta amiga Pacifica- menciono Mabel intentando resolver el crucigrama del periódico que había estado leyendo.
-No sé si pueda las pesadillas no son lo mío
-Yo te daré incentivos, vamos Will déjame decirte tu futuro
*****
Will con su forma triangular miraba al par de estorbos en los planes de los Gleeful. Gideon Pines y Pacífica Southwest que caminaban por el bosque, Gideon sosteniendo su diario y pacifica dando saltos alegre al lado de su amigo.
-Pacifica estoy seguro de que el demonio que veo por momentos en mi mente está relacionado con los gemelos Gleeful
-Hablas de esos charlatanes que dicen leer la mente y predecir el futuro- menciono Pacífica sacando la lengua y haciendo gestos graciosos.
-Si esos mismos, no sé por qué pero desde que los vi siento que están en algo malo
-No debe ser nada, olvídalo solo piensas cosas raras
-Eso crees
-Sí, tanto leer ese diario te hizo obsesionarte un poco- rio Pacífica alegre de estar con Gideon
*Tal vez tenga razón*- pensó el albino ojeando su diario y viendo el bosque tan profundo y misterioso.
Mientras caminaban vieron un ciervo correr hacia ellos, el cual se detuvo apenas unos centímetros frente a ellos asustado yéndose corriendo hacia lo profundo del bosque después de escasos segundos interactuando con los chicos.
-Pacifica viste su hocico- dijo Gideon algo consternado
-No tenía dientes- apoyo a la repuesta que Gideon iba a decir asustada tanto como él.
Escucharon una risa algo sádica retumbando y haciendo eco entre todo el bosque, miraron en todas direcciones buscando de dónde provenía esa risa y de la nada apareció un triángulo azul con un solo ojo que parecía estar a punto de llorar, con un corbatín y un sombrero de copa mirándolos seguramente divertido.
-Vaya, vaya los amigos misterio que estarán haciendo en este bosque- rio dejando caer los dientes del ciervo asustando a Pacifica y Gideon que retrocedieron alarmados.
-¿Quién eres tú?- interrogo el albino
-Oh disculpen, Will Cipher a su servicio, demonio de la mente un placer conocerlos- se inclinó y se quitó su sombrero de copa que flotaba sobre el -Espero que podamos ser amigos
****Mientras tanto en la casa Gleeful****
-Mabel cuánto tardará Dipper- preguntaba un nervioso Will.
-Ya cálmate él está bien no creó que le haga nada malo a tu cuerpo- se quejó Mabel.
Will estaba en el cuerpo de Dipper sollozando sentado al lado de Mabel que acariciaba su cabello marrón. Ambos ocasionalmente cambiaban de cuerpo cada vez que Dipper quería encargarse de esos dos chiquillos curiosos.
-Pero Mabel no puedo estar lejos de Pino- Will comenzó a llorar tallándose los ojos con sus manos en su intento de no derramar más lágrimas.
El demonio seguía llorando como un niño pequeño que extrañaba a su madre. De los dos gemelos Dipper era al que más quería. Mabel le daba miedo le trataba peor que Dipper, el cual igualmente lo trataba mal pero siendo este levemente más tierno. Mabel no. Incluso una vez la menor Gleeful le hizo tomar cloro solo por simple capricho.
-Mabel...Mabel
-Ya basta Will no llores
*Sniff* -pero...- seguía llorando intentando no molestar más a la menor.
-Will ya cállate estoy harta solo ¡CÁLLATE! - le grito a Will haciendo que llorara más.
Mabel iba a gritarle de nuevo pero Dipper la interrumpió entrando por la puerta principal aun en el cuerpo de Will. El demonio sin pensarlo se abalanzó a los brazo de Dipper aun llorando.
-Dipper, Mabel me grito
-Estaba llorando que querías que hiciera- Mabel levanto los hombros como diciendo que ella era la inocente.
-Will no debes llorar te vez más patético de lo que ya eres- sonrió en el cuerpo del peliazul
-Dipper...- aun lloraba pero sus lágrimas cesaron al tener los labios del contrario contra los suyos, se relajó y continuo con el beso.
Al separarse ambos ya estaban en sus cuerpos y Will había dejado de llorar, estaba sonrojado con la mirada en el suelo.
-y bien Dipper como te fue con esos dos- pregunto Mabel.
-Se asustaron al verme pero no me dijeron nada interesante necesito doblegar al albino así me dará el diario y solo habla que esperar
-Bien dicho hermano pronto con la ayuda de Will lo tendremos todo
Dipper sonrió y hablo - La realidad...- siendo acompañado en seguida de su hermana -es una ilusión, el universo un holograma, compra oro, ¡adiós!- se inclinaron frente a Will para pellizcar cada uno las mejillas del demonio.
Will se sonrojo y solo siguió a los gemelos a la carpa de la telepatía a pocos metros fuera de su casa ahí era donde realizaban sus predicciones.
-Y ahora que piensan hacer- pregunto tímido Will
-Necesitamos más espectadores- dijo Dipper jugando con las piezas de una maqueta de Gravity Falls.
Dipper hace algunos meses había hecho una maqueta del pueblo para entretenerse y para también saber exactamente de quien leer el futuro. Las únicas piezas que no fueron hechas por el mayor Gleeful eran los que los representaban a él y a su hermana. Ambas piezas de ajedrez, un caballo y un alfil ambos de color negro.
-Mabel, dime en que piensa Will
-Nada en particular, solo lo escucho llorando seguramente en su forma triangular
-No es mi culpa llorar tanto, ustedes me hicieron así- intento defenderse Will abrazándose a sí mismo.
-Eso te pasa por ser tan amable- respondió Dipper aun jugando con las piezas.
Will solo se quedaba quieto sentado observando a los gemelos buscar a quien pudiera tener indicios de ser un posible estorbo para sus planes. De hecho comenzaba a cansarle demasiado el hecho de él ser la fuente del poder los gemelos pero ya era demasiado el hecho de que Dipper se aprovechará de él.
Usaba su cuerpo cuando se le daba la gana, lo besaba de esa manera tan inapropiada casi de la misma manera en que compartía besos con su gemela Mabel solo que los que compartía con el siempre terminaba tan abruptamente dejándolo totalmente sonrojado y con un sentimiento de deseo.
Will solía ponerse indeciso sobre que sentir sobre los gemelos, ambos son crueles con él, lo tratan mal y lo hacen llorar, pero aun así el demonio seguía fiel al lado de sus contratistas Mabel y Dipper.