Me encontraba sentado en los columpios del parque que había cerca de casa. Mis padres estaban detrás de mí dándome leves empujoncitos para que para que el columpio pudiera elevarse mientras yo reía. Era feliz, realmente lo era, y como no si tenía los mejores padres del mundo, ellos me cuidaban y mimaban demasiado ya que yo era su único hijo. De un momento a otro el columpio se detuvo, miro hacia atrás por encima de mi hombro con un puchero en mis labios, mi madre sonríe de manera amorosa y acaricia suavemente mi mejilla.
– no hagas pucheros mi amor, es hora de ir a casa –. Dice tiernamente mamá –
– pero yo quería estar un rato más –. Digo un poco triste –
– Debemos irnos tesoro, mami y papi tienen una importante reunión.- dice mi padre acariciando mi cabello –.
– Esta bien, pero de camino me compras un helado –. Les dedico la más tierna de las sonrisas tratando de convencerlos -
– Sera un helado de chocolate –. Sonríe papá – El más grande.
– Siiiiiiiiiiii ¡Helado! –. Grito lanzándome a los brazos de papá abrazandolo fuertemente.
Ya de camino a casa iba de la mano de papá comiendo un gran helado de chocolate y dando saltitos. Cuando estuvimos en casa había una gente extraña esperando por mis papas vi como papa miraba a mamá con preocupación pintada en su rostro.
– Los estábamos esperando –.dijo uno de los extraños.
– Sohee!! – Llamo mamá-
– ¿me llamaba señora? – dijo Sohee acercándose.
– lleva a Sungmin al su cuarto, y no lo dejes solo.
– Sí señora –. Dijo Sohee agarrando mi mano delicadamente.- Vamos pequeño, ¿qué tal si vemos un poco la televisión? - decía Sohee mientras nos dirigíamos a mi cuarto.
Estaba muy entretenido jugando con Sohee cuando se escuchó un grito bastante desgarrador. Sohee miro la puerta y luego me miro a mí.
– Quédate aquí pequeño, no vayas a salir.- dicho esto ella salió corriendo de la habitación.
Yo realmente intente quedarme en mi cuarto, pero la curiosidad me gano. Salgo y camino despacio hasta el estudio de papá. Al llegar me encuentro con la escena más aterradora que mis ojos han podido presenciar. El estudio de papá esta hecho un caos y hay sangre por todos lados. Sohee está en el suelo llorando silenciosamente. Todo está en silencio, los empleados de la casa están en shock nadie se ha dado cuenta de mi presencia yo entro en el mismo estado de shock al comprender lo que está pasando. Tengo los ojos fijos en los cuerpos sin vida de mis padres y el silencio se rompe en el momento que empiezo a sollozar, todos voltean a mirarme y Sohee se acerca, me coge en brazos llevándome a mi habitación de nuevo, escuchó como la puerta principal se abre. Las lágrimas me nublan la vista y mis ojos se van cerrando lentamente y después de ahí no volví a saber nada.