- De verdad que lo siento Hobi oppa –le comentaba la pequeña Hana, modelo de la compañía donde trabajaba Jung Hoseok, apenada por cancelarle la cena.
- ¿Qué? –giró el muchacho de 28 años fingiendo enojo, era la quinta vez que alguien le cancelaba una salida un jueves a la noche. Y toda culpa recaía en un solo nombre Kim Taehyung.
El nuevo estilista, un chico misterioso de sonrisa inexistente, le había jodido literalmente cinco citas, y de no ser porque eran citas amistosas, estaría más que cabreado por joderle algún ligue.
- Es que debo tener la noche libre… lo siento –le frunció los labios en un lindo puchero.
- ¿Y qué haré ahora con todos los ricos ingredientes que compré para la cena? – le comentaba mientras guardaba los utensilios de maquillaje. Notando que aquella joven modelo tenía su rostro más ruborizado del maquillaje que le había colocado y no creía que él se hubiera pasado “de mano” con el rubor.- ¿por qué de repente estás…?
- Haa!! Taehyung oppa! –sin dejar que él terminara de hablar. Hana se encontraba frente al inanimado joven estilista.
- Chs… ¿Por “eso” me canceló la cena? –murmuraba por lo bajo Hoseok.
- Haa –suspiró a un costado de él uno de los muchachos encargado de los peinados.- ¿Cómo decirlo para que no te dañe? Ella nunca pensó que Taehyung aceptara salir con ella en una cita. Pero míralo con tus propios ojos, él lo hizo y por esa razón su estado es de felicidad total.
- ¡¿Qué con eso?! ¡¡Ella iba a salir conmigo primero!!
- No puedes compararte con él Hobi ssi –se burló su compañero- Ultimamente todas las modelos están peleándose entre ellas para que Taehyung-ssi les haga su outfits y peinados.
- ¡Ah! ¿Qué tiene de genial ese niñato?
- ¡Hobi! ¿Realmente no lo pillas? Chicos con el semblante frio como él, sacan de las mujeres un instinto. Sabes que les encanta que el hombre sea sexy y malote jajaja –guardó silencio cuando el maquillador Jung le miró con esa mirada de pocos amigos- Aunque claro… tu también no estás tan mal, luego de todo eres muy agradable y siempre estás dispuesto a escuchar a quien lo necesite jeje
- Gracias… –murmuró casi sin ánimo. Eso quería decir que él era la segunda opción y que a las mujeres hoy en día le gustaban los tipos que son difíciles de descifrar. Pero no podía negar que aquel joven era apuesto.
Otro nuevo día comenzaba, luego de su cena fallida. Volvió a casa solo para dormir y así volver al otro día a aquel lugar en el cual le encantaba trabajar.
- Buenos días ¡Ah!-ni bien hacia paso hacia su espacio de trabajo, chocó violentamente, más bien lo chocaron de ese modo. Estaba por protestar cuando notó que era la pequeña Hana, llorando- ¿Hana? ¿Qué sucedió? –le miró preocupado.
- Bu-buenos días Hobi oppa. N-no es nada. Es que no he dormido demasiado y…-agachó su cabeza, limpiándose así las lágrimas que querían volver a salir de sus ojos- Será difícil hoy…cuando tengas que aplicarme maquillaje. Perdona, me iré a lavar el rostro.
No pudo frenarle, igual entendía que quizás necesitaba su tiempo a solas. Se percató que había salido de aquella habitación donde extrañamente las modelos accedían, eso quería decir que estaba adentro con alguien más. Su ceño se frunció al imaginarse quien se encontraría dentro. Dio una buena bocanada de aire, y decidió entrar.
- Buenos días- comentó con su típica sonrisa, sea quien sea la persona.
- Buenos días.- escuchó la monótona voz del menor, quien cerraba un catálogo de revista.
- Ah –tocó su nuca de lo incomodo que se sentía al estar con aquel muchacho de grandes ojos perfectos para hacer facetas, pero el cual fallaba en eso último.- ¿Qué pasó? ¿Han dis…cutido? – aquella mirada que el chico de pelos castaños le arrojaba, era tétrica.
- No ha pasado nada.
- ¿Cómo que no pasó nada? –no pudo contener su enfado repentino. La cara del menor le molestaba de por si, que estuviera tan descolgado de la realidad era lo que más le colmaba la paciencia y para completarla su respuesta era un cortante “nada”.- Ella salió llorando de aquí. ¿Si no pasó nada por qué ella salió de ese modo de la habitación?
- He dicho que no pasó nada. –dejó la revista que leía sobre el escritorio, que adornaba el lugar. Y se viró hacia el pelinegro que le cuestionaba.- Fue porque ella no se quería ir, así que tuve que decirle…
- ¿Decirle qué?! –presentía que lo que le diría le enfadaría demasiado.
- “Sólo porque tuvimos sexo una sola vez, no quiere decir que seas mi novia”.
- T-tu eres---! –aquello ya le había hecho perder la poca cordura que poseía.
- Horrible- completó Taehyung mirando perdidamente el piso- ¿En serio? Ella igual me lo dijo…
- Tu…-le miró ofendido. Se acercó hacia el mismo escritorio donde aquel joven se encontraba sentado.- realmente tienes agallas para tratar a tu novia así, no pensé que fueses tan frío. –le regañó.
- Hmm… ¿Fue realmente tan cruel? –comentó sin cuidado alguno.
- Acaso ¿nadie te lo dijo? –frunció su entrecejo nuevamente al ver que no respondía- Bueno no importa eso, pero te has pasado un poco del limite.
- ¿Cómo iba a saber que eso estaba mal?
- ¿Hee? –aquello literalmente fue una cachetada a su cara.-¿Me cuestionas eso a mi? Jhm…Eso tus amigos deberían explicártelo… -contestó naturalmente Hoseok.
- Hoo… -por primera vez en la mañana, Taehyung cambió su rostro inexpresivo por uno levemente asociado al pensar.- Ya veo… es eso…
- ¿Eso qué? –cuestionó el mayor.
- Yo…no tengo amigos.
- Oh vamos! –se comenzó a reír mientras le palmeaba la espalda al joven.- Eso no puede ser cierto, por más que seas horrible como persona deberías tener algún amigo, mínimo dos.
El silencio reinó por varios segundos, Hoseok no sabía como reaccionar ante aquella verdad, era imposible para él no tener amigos, ¿Cómo había hecho ese niño para no tener ni siquiera uno?
- ¿Así que esa modelo estaba enamorado de mi? ¿Verdad? –por primera vez Hoseok vio suspirar con pesadez al menor.
- Sí, y si tu no lo estabas ¿Por qué no rechazaste su propuesta de acostarse juntos? –el mayor le miró aún enfadado por aquella situación.
- Sólo lo hice porque ella quería –le miró altaneramente.- No fue porque me gustara o esas cosas.
- ¡Argh! –estaba a punto de darle un palmazo. Pero entonces entró una de sus compañeras.
- Buen día chicos, si no les es molestia. ¿Nos dejarían el lugar?
- Claro. –comentó Taehyung y sin esperar al mayor, salió huyendo del lugar.
Hoseok se percató de que el menor sólo quería huir de su compañía, pero él se propuso no dejarlo hasta hacerle entender su gran equivocación. Se despidió rápidamente de las colegas que ya se encontraban dentro de la sala y comenzó a buscarlo. De repente el estruendo fuerte de alguien o algo cayendo, lo alertó e hizo que se dirigiera hacia el lugar de los hechos.
En la escena, una modelo famosa se encontraba en el piso, haciéndole un escándalo a una de sus amigas estilistas respecto al vestido que le estaban haciendo usar y por el cual había caído.
Y en ese mismo lugar se encontraba el menor con su rostro inexpresivo, pero por lo que Hoseok comprendía, ese muchacho algo diría.
- Nosotros deberíamos estar enfadados contigo. Si prestaras atención al caminar no te habrías caído. No tendrías que echarle la culpa a alguien más cuando tu misma eres la torpe. –Jung Hoseok casi lo felicitó, casi. Hasta el momento había dicho la pura verdad, esa modelo siempre les hacía el mismo escándalo a todos, pero su límite fue excedido nuevamente al insultarla.
- Ha, ha ha –interrumpió aquello antes de que todo empeorara- Señorita Lee perdone esa falla con el vestido, ahora mismo le traeremos otro con mi colega –sonrió abrazando del cuello al menor, dirigiéndole una mirada de asesino.- Vamos -le ordenó, llevándoselo agarrado de su mano hacia una sala del estudio de moda.- ¡Oh por los dioses! –gritó luego de cerrar la puerta detrás de ellos. Se encontraba apoyando sus antebrazos y codos sobre la pared, respirando agitadamente por la situación que el menor había provocado gracias a la falta de sutilidad.
- Hoseok ssi… no deberíamos estar aquí, tendríamos que estar en la sala de vestuarios para ver si encontramos un vest---
En ese preciso instante, Hoseok le había dado un golpe ni tan suave ni tan fuerte, pero lo suficiente para que se tomara Taehyung la cabeza.
- Ahh Kim…Kim!! –se acercó a apoyar su frente en el hombro del otro muchacho.
- ¿Hice algo yo…? ¿Por qué me pegaste? –le cuestionó.
- ¿No consideras que actuaste mal? A pesar de que todo lo que le dijiste era verdad… ¿No encontraste una manera más sutil de decírselo? –se incorporó y miró a los ojos.- Debes estar consciente que aquí trabajas en conjunto a otros colegas. No puedes seguir manteniendo esa actitud frívola.
- Haa… -se limitó a decir Kim.
- ¡¿Entiendes realmente lo que te quiero decir?! Por más lindo que seas, si eres un asco de persona… nadie te va a querer! –lo empujó contra la pared por el impulso que tenía encima.
- Hum…-sonrió afligido- ¿Debería importarme eso? Está bien como está.
Escucharle decir aquello, Hoseok no se lo creía. Era la persona menos expresiva que se había cruzado en años de su vida. Ya se estaba desesperando.
- ¡Ya sé! –comentó luego de estar varios minutos en silencio, pensando una solución posible a lo que le sucedía.
- ¿Qué sab…!? –nuevamente el jovencito estilista se sorprendió al sentir la mano del mayor sobre su hombro derecho y que este mismo comenzaba a acercarse a él.
- Seré tu primer amigo. Te enseñaré a ser una buena persona desde el principio. No importa cuanto me lleve, pero lo lograremos juntos –rió feliz por su esperanzadora idea.
- No gracias, no lo necesit…-la mano del castaño estaba siendo sacudida compulsivamente por la mano del enérgico pelinegro.
- Se supone que deberías decir “Cuida de mí,amigo” –continuó riendo. Viendo la cara de pocos amigos que cargaba Taehyung.