Aquella mañana los automóviles cruzaban por la calle, el sonido de los juegos pasaba por mi mente, la brisa se combinaba con todo lo demás, entre mis dedos se deslizaba la temperatura del café, Suga revisaba sus notas antes de irse, le era de suma importancia pasar este examen escrito, de no hacerlo nunca pasaría a lo practico…”lo más esperado”.
Pronto Suga se levantó, balanceo su mano de izquierda a derecha, se dio la vuelta y corrió a clases, no me sentí solo pues pronto vería a Tae salir por aquella puerta que yo miraba de espaldas.
Dio la hora de salida y me levante de la banca, espere ver a Tae, para mi suerte V salió junto con J-Hope, ellos iban sonriendo, algunas veces empujándose o simplemente caminando.
Los dos se detuvieron enfrente mío, J-Hope saludo:
JH: ¡buenos días señor fotógrafo Jungkook!
JK: buenas…
V: ¿ya vamos a empezar?
JK: ¡oh!, ¡claro!
Tome mi camara y enfoque el lente con la luz blanca, le pedí a V colocarse enfrente, justamente entre los árboles como si buscara algo, Tae me hizo caso, mientras tomaba las fotos me pareció haber sonreído, pues ver a V de esta forma me hizo recordar la obra de Lewis Carroll: “Alicia en el país de las maravillas”.
Realmente no sé cómo describir esta sensación, pero estar junto con V, era como si el ambiente se aligerara, la pesadez que corre por mi espalda se desvaneciera… como si todo acabara y él fuera mi todo. Iba en el 4to lote de fotos cuando Suga regreso de la escuela, llevaba una sonrisa de oreja a oreja (debió pasar el examen)
Se hacía de noche y J-Hope me dijo que se retiraba tomo a V y le dio un medio abrazo para así irse, mire el reloj y eran las 6:00 pm.
JK: Tae… ¿aun puedes quedarte un poco más?
V: mmm… puedo… una hora más
JK: ok, juro que no tardare más de eso.
Disfrutaba tomarle fotos a mi Tae, era tan fotogénico, hermoso, la forma en que su rostro se dibujaba solo, su cabello ondeante en el viento (queriendo bailar en el mismo), me perdí en Tae cuando recobre la conciencia de lo noche que era.
Suga seguía ahí por lo que cuando comencé a recoger mis cosas dijo:
SG: ¿ya nos vamos?
JK: (haciendo señas con la cabeza para que él se fuese) ¡aja!
SG: (susurrando) ¿¡ah!? ¿quieres que me vaya?
JK: (susurrando) ¡sí! (juntando las manos) por favor mi amigo Sugita
SG: ok… BUENO YO YA ME VOY YENDO
JK: vale… ¡adiós!
V: yo también me retiro, ¡hasta luego Jeon Jung Kook!
JK: ¡¡espera!!, ¿te acompaño a casa?
V: NO, gracias
JK: pero… es muy tarde, mejor te acompaño
V: mmmm… ok, vamos
Iba caminando a un lado de Tae, era tan pequeño y hermoso, tan sólo tengo 3 sesiones más para enamorar a V y este es un gran paso. Íbamos en total silencio por lo que decidí hablar primero:
JK: y… ¿Qué edad tienes? (eso claramente lo sabía por J-Hope)
V: 16…
JK: ¡ya veo!
V: ¿y usted?
JK: (¿Por qué me habla de usted?) tengo 24 años
V: ¡Oh!, Hopie y yo creíamos que tenía unos 28
JK: ¡¿28?!, ¿no crees que esa edad es mucho para mí?
V: (riendo) sólo son 4 años más.
JK: para mí eso ya es mucho (dijo con un puchero en los labios)
V parecía disfrutar verme sufrir por pequeñeces, sin embargo, eso para mí era lo más doloroso, tener 9 años de diferencia, deseaba que Tae creciera lo más pronto y poder estar a su lado por siempre.
Pronto llegamos a la esquina de la una angosta calle, ahí V se detuvo y me dijo:
V: a partir de aquí me puedo ir solo
JK: ¡¡¡¿¿QUÉ?!!!
V: no necesito que me dejes justo enfrente de mi casa
JK: ¿Por qué? ¿es acaso que tu madre se enoja si te ve llegar conmigo...?
V: ¡no lo hará!, pero… no quiero que me acompañes (dijo algo alterado)
JK: pero...
V: ¡NOS VEMOS MAÑANA!
Logre percibir el desagrado de V, tan bien que hablamos hace un momento, tanto que disfrute verlo reír, todo se esfumo en menos de 4 minutos, tal parece que Tae detesta estar conmigo, no obstante, por un momento sentí que en su interior algo ocurría, algo que yo no puedo remediar.
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