Mi hermana siempre fue muy seria respecto a sus relaciones, no es la clase de chica que se toma el amor a la ligera, pero él estaba a otro nivel. Me di cuenta de ello por la forma en que hablaba de Christian, la forma en que lo describía y... esa mirada... cada vez que lo recordaba aparecía un brillo tan especial en ella... en mis 17 años de existencia nunca la había visto así, por lo que, aunque llevaban solo un mes saliendo, cuando la vi así enseguida pensé "este será mi cuñado". Christian es un compañero de universidad de mi hermana, ambos tienen 20 años, nunca lo había visto, pero Fernanda siempre lo describía como el típico chico perfecto por lo que pensaba que así era.
Como son vacaciones de verano (¡por fin!) decidí trabajar, pues quiero ganar un poco de dinero y además me aburro mucho en mi casa, como todos mis amigos se fueron de vacaciones... y el calor es insoportable... ays. Conseguí uno de esos típicos trabajos para estudiantes que solo son durante las vacaciones, en este caso trabajo en una heladería dentro de un centro comercial, llevo un mes y un tres semanas trabajando ahí (contando los días en que no tengo turno), en realidad me divierte mucho, más que por el hecho del helado gratis durante los descansos, es porque me encanta analizar a la gente, me entretiene observar la forma en que se visten, se peinan, cómo son sus zapatos, su comportamiento (así puedo tratar de imaginar qué clase de vida tienen) y... ¡a veces veo unos "especímenes" tan raros!, pero lo que más me dice qué clase de personas son es su forma de mirar, he escuchado y realmente creo que los ojos son la puerta del alma. Respecto a eso, nunca nadie me había llamado especialmente la atención, por supuesto que algunos se comportaban o se vestían de una manera que llamaba la atención (para bien o para mal) pero lo máximo que me causaban era hacerme gracia o mirarlos inevitablemente por un rato, sin embargo ninguno me había hecho REALMENTE pensar en su persona, de hecho a algunos ni los recuerdo, pero él fue diferente, creo que desde la primera semana que comencé a trabajar en la heladería lo comencé a ver, siempre pedía helado de frutilla y llegaba entre las 6 a las 6:30 de la tarde, no había turno en que no lo viera, físicamente no era nada especial, bueno, era MUY atractivo y todo, pero era normal ver gente como de su tipo. Por la forma en la que se vestía, se movía y los horarios en que venía se notaba que era un universitario, igual que muchos otros que venían, pero lo que lo hacía diferenciarse del resto, fuera de su recurrencia en la heladería o su monotonía al pedir el mismo sabor de helado siempre (¿acaso nunca se cansaba del mismo sabor todos los días?) era su forma de mirarme, una mirada tan fija, tan profunda, tan... penetrante. No sé cómo lo hacía, pero la mayoría de las veces me tocaba a mí atenderlo, y cada vez que le pasaba el helado, me miraba fijamente y me rozaba los dedos mientras que me daba una pequeña sonrisa y me decía "gracias", eso siempre me hacía estremecer ¡qué hombre! incluso llegué a pensar de que yo le gustaba o algo (basto error) y me gustaba pensar que si así era, podría salir con él o no sé... (pues es mi tipo y todo... además no puedo negar el hecho de que yo comencé a sentir "cositas" por él, pocas, pero "cositas" al fin y al cabo) ays, ahora, por la situación en la que estoy, me da un poco de risa recordar eso.
Mi hermana me comentó un día que su querido "Chris-Chris", luego de que esta le contara dónde trabajo, le dijo que me había visto, y que nos parecíamos mucho. Me sorprendió un poco, pero nunca conecté al novio de mi hermana con el chico del helado de frutilla, pues lo creía un "poco muy" imposible, pues nunca me había hablado y, sobre todo, por su forma tan homosexual de tratarme... ¡Estaba seguro de que me estaba seduciendo!
Por las cosas que les contaba mi hermana, mis padres le dijeron que invitara a cenar a Christian, todos deseábamos conocer a aquel "maravilloso" hombre. Fernanda eligió un día sábado, pues ese día no me toca ir a trabajar, ella estaba ansiosa de que lo conociera, que le diera mis opiniones y le dijera si lo aprobaba o no (sí, además de su queridísimo hermano menor, siento que me ve como su mejor amigo gay, ays).
Cuando el novio de mi hermana llegó hace una... ¿Media hora atrás? Casi muero (y pensar que estaba emocionado por conocerlo) me quedé en shock, no podía moverme, mis padres lo saludaron cálidamente, y yo en el momento en el cual con suerte pude mirarlo a los ojos, el "fantástico Chris-Chris" me sonrió como nunca lo había hecho y me saludó de una manera muy normal, como si de verdad fuera la primera vez que nos veíamos (¿qué más esperaba?).
En todo este rato en que hemos estado en la mesa cenando, mis padres le han hablado y hablado a Christian, mi hermana observa feliz la situación y yo, por mi parte, he estado en silencio, casi ni he dirigido mi mirada hacia su dirección, fuera de que llegué en un momento a incluso sentirme culpable por malinterpretar las cosas, es porque me siento incómodo, es tan paradójica esta situación, no lo puedo creer... Ays... Necesito la jodida sal, pero está justo al lado de él ¿cómo pedírsela? Tendré que comer comida desabrida... oh... ahora que lo pienso... ¿qué pasará cuando Fernanda me pregunte sobre mis opiniones? ¿cómo la miraré a los ojos? ¿qué decirle? Ays... soy el peor hermano...